Partida Rol por web

Llegais a la iglesia pero antes de entras os dais cuenta de que hay mucha gente mirando a la puerta en las inmediaciones y algunos con camaras, obviamente alguien quiere ver quien entra y sale de la iglesia y teneis claro que tiene que ser algun master.

Al ver el escándalo de la puerta le digo a Rider-"Shion no nos conviene ir por ese lado, por lo visto un master quiere saber quienes entran o salen. Es de esperar que esto ocurriría ya que es necesario inscribirse por lo tanto es el lugar mas concurrido por los masters, buena jugada la de las camaras así no necesita mostrar la cara y puede ver todo. Lo mejor será buscar una entrada trasera y que te hagas invisible pero no te vayas de mi lado ¿Si?"-.

Suspire fuertemente y sonrei a Rin un poco. -Rin, no es necesario inscribirse, asique ... dejemoslo, si caemos ahora en una trampa podriamos quedar fuera en cero coma na.- dije mientras miraba las camaras.

-"En verdad deseaba entrar allí siento que hay algo que deberíamos saber, pero tienes razón tal vez sea mejor irnos. Buscaremos un lugar en donde podamos entrenar y hacernos mas fuertes antes de volver aquí. Quiero estar bien preparada antes de que nos enfrentemos a otro servant"-Diciendo estas últimas palabras me doy la vuelta para volver al edificio abandonado en el que nos habíamos refugiado.

-Como quieras Rin.- digo serio mientras la sigo y la cojo de la mano como si una parejita fuesemos.

-Por disimular lo hago no pienses mal eee.-

Le saco la mano enfurecida pero luego cambio de expresión y suspirando le digo-"Por esta vez lo dejo pasar pero no te mala acostumbres eh"-le saco la lengua y me rio.

Comienza el dia 2.

Despertais casi con la salida del sol, el dia parece tramquilo y no sentis ninguna clase de energia asique se a dado un pequeño descanso, en los periodicos hacen mencion de todo lo sucedido pero sin dar detalles de ningun pelea entre servant ni de dragones, solo hablan de un parque calcinazo, gente muerta quemada, y un monton de agentes de la ley muertos en una casa sin explicación alguna.

Puede que sea el mejor momento de entrar en la iglesia.

-"Por lo visto ya han empezado a almacenar poder mágico, cuantas muertes-digo disgustada al leer el periódico que había robado al vecino esa mañana- Creo que ahora sería el momento oportuno para volver a la iglesia-digo cerrado el periódico y dejándolo en un costado- pero antes voy a pedirte silencio o si quieres te doy un tiempo libre para que entrenes, así puedo concentrarme en almacenar mas hechizos. Debemos ir preparados, uno nunca sabe con que pueda llegar a encontrarse"-. 

-Mmmmm, por mi parte ya estoy listo, tu si quieres prepararte algo ... hazlo, cuantos mas hechizos almacenes mejor para todos.- digo mientras me levanto de una silla.

Cuando Rin termina sus hechizos vais hacia la iglesia donde por suerte ya no hay espias en la puerta o al menos estos son mas inteligentes que los del dia anterior.

La iglesia parece un lugar pacifico no hay mucha gente en ella pero sus puetas estan abiertas a cualquiera que desee entrar, en la puerta nada mas llegar ves a 2 personas estrañas, van vestidas con ropa normal pero miran mucho a su alrededor en busca de algo, esta claro que son participantes de la guerra pero que tambien han ido a pedir información, no parecen peligrosos en absoluto, pero dejar entrar a tu master sola seria una estupidez.

Tras merodear por los alrededores me doy cuenta de que no existe tal terreno sagrado lo que me parece un gran fallo ya que podría haber combates en su interior sin provocación. 

Me decido a entrar siguiendo los pasos de mi master.

Me desvanezco y comienzo a deambular por los pasillos hasta encontrar a Iria. Murmuro a cada paso una imprecación contra Dios, o alguna maldición contra un ángel o un santo, pues nada me llena más de ira y me pone de peor humor que pisar el suelo de un edificio que construyeron unos hipócritas en honor a una deidad tan poco coherente.

Realmente no me preocupa lo que el árbitro pueda decirle sobre mí o sobre esta guerra a la joven Iria pero es harina de otro costal lo que puedan decirle otros masters. Me he dejado llevar por los recuerdos de la última vez que participé, cuyo master era un mago bastante versado... 

No tardo en encontrarla, avanza con lentitud mirando a todas partes, dudando si seguir adelante o no, o quien sabe qué le pasa por su cabecita.