Partida Rol por web

Mientras sobrevoláis el gran océano, a medida que os acercáis a vuestro destino el comunicador de la nave parpadea varias veces, cómo si tuviera interferencias, hasta que finalmente la figura de una hermosa joven aparece en él.

-... as defensas no resistirán! Por favor, soy la princesa Joanna de Narshe, si alguien nos recibe enviad ayuda...

  Nicoletta, a los mandos de la nave, se apresura a pulsar un botón del comunicador.- Aquí la flota Seed. Estamos en camino.

La chica se alegra visiblemente- ¡Gracias al cielo! no resistiremos mucho más ¡Daos prisa! 

  -¡Dita sea! ¿Y porqué habéis tardado tanto en pedir ayuda?

-¡Llevamos horas pidiendo auxilio! hemos intentado comunicarnos con las otras colonias, incluso hemos intentado comunicarnos con Galbadia pero nadie nos ha respondido. Solo conseguimos comunicarnos el Jardín y durante un corto espacio de tiempo. Es cómo si estuvieran manipulando nuestras comunicaciones...

-¿Son los Seeds? ¡Aparta! Una figura masculina sustituye a la chica en la pantalla. ¡A buenas horas! panda de inútiles, si queréis ganaros el sueldo más os vale traer vuestros culos hasta aquí  ¡Ya! 

Oki doki- Responde Nicoletta con cara de "el cliente siempre tiene la razón". Tratar con capullos a veces es parte del trabajo. La morena pulsa otro botón y la imagen del capullo desaparece. -Aquí líder Shiva a toda la formación. A toda potencia. Descargamos los "paquetes"-dice en alusión a vosotros- y establecemos un perímetro defensivo en torno a los supervivientes.- Como respuesta por el comunicador se escuchan varios "roger" "recibido" y algún "yeeeeehaaa" que arranca una sonrisa de confianza a la Seed. Agarraos.-Os advierte antes de empujar a fondo una palanca del panel de mando.

La aceleración os pega a los asientos. Las seis aeronaves rugen al unísono rompiendo la barrera del sonido y dejando seis estelas blancas sobre el cielo azul. En apenas media hora la masa de tierra que forma el continente de Centra aparece en el horizonte, minutos más tarde ya distinguís la ciudad costera de Narshe, un oásis verde, rodeado de prados y campos de cultivo que contrasta con homogéneo marrón y blanco del páramo frío y desértico que es centra. 

Ya desde la distancia podéis comprobar lo precaria de la situación de la ciudad, varias columnas de humo se elevan hacia un cielo lleno de monstruos que hostigan a los defensores de la ciudad cómo si de buitres acechando un cadáver se tratara. Desde los edificios más altos varias baterías disparan a los monstruos voladores trazando líneas de proyectiles por el cielo. En tierra la situación no es mucho mejor, las murallas de la ciudad tienen varias brechas por las que entran hordas de monstruos, la milicia de la ciudad intenta contenerlos combatiendo en las calles y tejados.

A medida que os acercáis la Seed observa preocupada el campo de batalla que sobrevoláis, la situación es mucho más grave de lo que podríais haber imaginado.

Fíate tú de los informes de inteligencia... -Comenta disgustada, hablando consigo mísma- Esto es mil veces peor. Tsk. ningún grupo de monstruos ha podido organizar todo este follón por sí solos...  

A pesar de sus recelos, como buena Seed, intenta cumplir con la misión y va haciendo arriesgadas maniobras esquivando a los monstruos voladores mientras se dirige hacia la zona de aterrizaje que tenéis asignada, pero súbitamente un gueila se cruza en vuestro camino, un violento impacto sacude la nave y el parabrís queda manchado de verde. 

Los pitidos de alerta del sistema de navegación os advierten de lo obvio, la nave se dirige hacia el suelo -¡¡Joder!!!- Gruñe con los dientes apretados, mientras tira con fuerza de los controles intentando estabilizar la nave.

Mientras sobrevoláis el gran océano, a medida que os acercáis a vuestro destino el comunicador de la nave parpadea varias veces, cómo si tuviera interferencias, hasta que finalmente la figura de una hermosa joven aparece en él.

-... as defensas no resistirán! Por favor, soy la princesa Joanna de Narshe, si alguien nos recibe enviad ayuda...

  Nicoletta, a los mandos de la nave, se apresura a pulsar un botón del comunicador.- Aquí la flota Seed. Estamos en camino.

La chica se alegra visiblemente- ¡Gracias al cielo! no resistiremos mucho más ¡Daos prisa! 

  -¡Dita sea! ¿Porqué habéis tardado tanto en pedir ayuda?

-¡Llevamos horas pidiendo auxilio! hemos intentado comunicarnos con todas las colonias de Centra, incluso hemos intentado comunicarnos con Galbadia pero nadie nos ha respondido. Solo conseguimos comunicarnos el Jardín y durante un corto espacio de tiempo. Es cómo si estuvieran manipulando nuestras comunicaciones...

-¿Son los Seeds? ¡Aparta! Una figura masculina sustituye a la chica en la pantalla. ¡A buenas horas! panda de inútiles, si queréis ganaros el sueldo más os vale traer vuestros culos hasta aquí  ¡Ya! 

-Oki doki- Responde calmadamente Nicoletta con cara de "el cliente siempre tiene la razón". Tratar con capullos a veces es parte del trabajo. La morena pulsa otro botón y la imagen del capullo desaparece. -Aquí líder Shiva a toda la formación. A toda potencia. Descargamos los "paquetes"-dice en alusión a vosotros- y establecemos un perímetro defensivo en torno a los supervivientes.- Como respuesta por el comunicador se escuchan varios "roger" "recibido" y algún "yeeeeehaaa" que arranca una sonrisa de confianza a la Seed. Agarraos.-Os advierte antes de empujar a fondo una palanca del panel de mando.

La aceleración os pega a los asientos. Las seis aeronaves rugen al unísono rompiendo la barrera del sonido y dejando seis estelas blancas sobre el cielo azul. En apenas media hora la masa de tierra que forma el continente de Centra aparece en el horizonte, minutos más tarde ya distinguís la ciudad costera de Narshe, un oásis verde, rodeado de prados y campos de cultivo que contrasta con homogéneo marrón y blanco del páramo frío y desértico que es centra. 

Ya desde la distancia podéis comprobar lo precaria de la situación de la ciudad, varias columnas de humo se elevan hacia un cielo lleno de monstruos que hostigan a los defensores de la ciudad cómo si de buitres acechando un cadáver se tratara. Desde los edificios más altos varias baterías disparan a los monstruos voladores trazando líneas de proyectiles por el cielo. En tierra la situación no es mucho mejor, las murallas de la ciudad tienen varias brechas por las que entran hordas de monstruos, la milicia de la ciudad intenta contenerlos combatiendo en las calles y tejados.

Venga, venga, venga... ¡Esto será coser y cantar!

Digo, tratando de quitarle hierro al asunto. 

¡¡Yuuuhuuuuu!!!

Grito desde atrás cuando la gente afirma, uniéndome a la emoción del momento. No puedo contener los nervios, así que los saco como puedo: Siendo totalmente enérgico.

Eh chicos, vamos a ayudar a esa gente, que está en problemas. ¡Equipo A al rescate!

La nave acelera y me hundo en el asiento por unos segundos

¡¡Woooooooohhhhhh!!! ¡Vieja, frena un poco! Esta nave tiene una potencia de flipar. ¡Me encantaaaa!!

Si hubiese una ventanita estaría sacando la cabeza como un perrillo para que me diese el aire en la cara. Creo que me he vuelto adicto a esta sensación.

Y entonces, aparece la imagen desoladora de una ciudad siendo sitiada. Escucho con cautela a Nicoletta.

No pudo ser provocado por las criaturas solas... ¿No?

Miro de reojo a Fiorette... Temo que lo que dijo ella se haga realidad.  Sonríó hacia el frente mientras cierro una de mis manos en un puño.

¡Nada va a poder contra esta generación de SeeD! ¡Equipo A-Tómico a la cargaaa!!!

Y entonces algo ocurre a la nave. Uno de esos bichos choca contra la nave.

Woh. Eso no ha sonado bien. No ha sonado nada bien. Espera, espera. ¡Nicoletta, dejame ayudarte!

Me desabrocho el cinturón a toda prisa y me acerco esquivando las cosas que puedan haber en el interior del transporte.

Un montón de botones y palancas. Por fortuna algo he estudiado de esto... Cómo se nota que me gustan los cachibaches voladores.

A ver... ¡Así!

Tiro de una palanca y me ocupo de unos botones laterales.

¡Tu mantienes el mando, yo trato de estabilizarnos para que no nos reventemos contra algo ¿Te parece bien?!

El viaje resulta tan accidentado como esperaba y la comunicación con el cliente no ayuda.

A ver si ahora va a ser nuestra culpa que no llamen a la caballería hasta que tienen al enemigo encima.

Sin embargo, tenemos que actuar con la educación de la que ellos carecen y seguimos con la misión como si lo hubieran pedido por favor. Nos lanzamos en dirección a la ciudad a una mayor velocidad de la que jamás hubiera pensado, demasiada para mi gusto, aunque entiendo por qué es así.

Si caemos no serviremos de demasiado ahí abajo.

Según veo la situación se ha vuelto más desesperada y tendremos que establecer un perímetro mucho más cerrado.

Será más ayuda en caso de necesidad, pero reduce nuestra movilidad, no me gusta. Tendremos que tener mucho más cuidado y vigilar nuestros movimientos. Una emboscada sería demasiado fácil. Hubiera estado bien que nos hubieran dado los códigos de los demás grupos para poder coordinarnos, pero supongo que eso también sería demasiado fácil.

Reviso mentalmente todo lo que ha dicho el cliente. Parece un asedio.

Estamos jugando con vidas y “nos lo ponen difícil”.

Entiendo el espíritu de esa medida, pero no la comparto. Ellos no tienen la culpa de que esto sea un examen. De pronto el vehículo sufre un impacto y se desestabiliza

Lo que nos faltaba.

Saco las armas y me preparo para desembarcar.

Todo el que no pueda ayudar a poner este trasto en tierra que se prepare para el primer contacto- ordeno a mi equipo-. Esto es una batalla y si no tenemos cuidado volveremos en horizontal. Todos juntos y apoyándose.

Me concentro un instante en Valefor.

¿Listo?

Fiorette subió con un despampanante vestido negro, con un escote al frente que no dejaba nada a la imaginación, y otro escote igual de revelador en la espalda, pero este surcado por varias cadenas plateadas que se entrelazaban formando X, tacones altos negros, medias de seda oscura, y con la pierna cruzada seductoramente, aplicando un discreto rubor carmín en sus blancas mejillas, aplicando rimel en sus pestañas, y labial en su boca, dándo la apariencia de que más que ir a una misión de SeeDs, Fiorette se estaba arreglando para ir al elegante baile de palacio del hombre más rico de todo el universo mundial.

Observó de reojo a Gared mientras el chico hablaba y emitía sonidos que Fiorette no tuvo problema en reconocer como muestras para sacarse el nerviosismo, ella misma sentía que los ovarios se le habían subido a la garganta, y para intentar relajarse, estaba dándose una manita de gato. Negó con la cabeza en actitud de censura ante los comentarios de Gared.

Se vió una última vez en el espejo, y le guiñó un ojo a su imagen, mientras daba un beso con mucha voluptuosidad en la palma de su mano, y luego lo arrojaba sobre la imagen en su espejo, volteó a ver a sus compañeros de equipo, y jugueteando su cabello con la coquetería y elegancia usual en ella les preguntó "tímidamente" -Quedé bien chicos?.- susurró la muchacha, como una gatita ronroneando insinuantemente, pero su pregunta no pudo obtener respuesta alguna, pues en ese momento, algo golpeó la nave, los sistemas de alarma saltaron, y Nicoletta la lider perdió el control de la nave.

Le sorprendió que Gared supiera pilotear una de estas cosas, pero, en realidad no se le hizo tan...raro, ya que si algo tenia Gared era habilidad en manejar su monopatín, o como se llamara la cosa con la que siempre andaba revoloteando por todo el Jardín.

-Ojos de Alexander!- exclamó la chica preocupada, mientras se agarraba con uñas y dientes, a su asiento para no salir volando y cerrando los ojos, recordando la voz de la princesa de Narshe " Parece como si solo hubieramos podido comunicaros con ustedes".

Cuando escucho la voz de Raven, Fiorette volteó a verlo boquiabierta "PERO QUIEN TE CREES PARA DARLE ORDENES A UNA GULBAHAR....AH...cierto, cierto es el lider de la misión jejeje" pensó un tanto apenada, pues habia olvidado que en efecto, ella no habia sido designada como lider para hacerse cargo del escuadrón.

Habia agradecido profundamente las palabras de Raven y de Gared dias antes, sobre que no la dejarian sola, pero que ella tampoco se cerrara " Finalmente...la familia no se escoje" asintió en silencio a la orden dada por Raven, extendió una mano al frente de ella, cerrando sus ojos, y materializando una guadaña casi tan alta como la misma Fiorette. La aferró con una mano segura y firme, y aguardó a que la nave se estabilizara y ellos pudieran aterrizar.

-Cuando gusten...equipo A-Tómico- exclamó Fiorette ruborizándose un poco, pues sin pensarlo, habia caido en el mismo mote que Gared le habia dado a su grupo.

Aquella nave era bastante avanzada y le pareció curioso el espacio. Tal vez estaba diseñado para incursiones pequeñas y para que la nave pasara desapercibida con mayor facilidad.

La SeeD de antes los llevaba allá, así que Xia simplemente se sentó sin decir nada. Estaba algo preocupada por la labor que se le había asignado, así que trataba de diseñar la mejor manera de acomodar a su equipo. Estaba elaborando su estrategia y creía tener una formación adecuada.

Puso la pistola de bengalas en alguna parte que le permitiera alcanzarla fácilmente y el radio en un lugar donde no fuera a perderse. Con eso listo, miró a sus compañeros, tras ver cómo se acercaban a Centra, y más específicamente, a Narshe. El panorama que les esperaba estaba muy fuera de su alcance. Todos eran muy buenos, pero seguían siendo novatos. Xia trató de analizar la situación, pero el choque con la gueila hizo que la maga se pusiera de pie y corriera hacia la piloto para tratar de ayudarla. Iban en picada y era muy posible que se estrellaran si no hacían algo.

Se paró con rapidez y al llegar al panel de control, buscó algún dispositivo que le permitiera estabilizar la nave, algún dispositivo de emergencia, o ver si podía ayudar a Nicoletta a tirar del timón. Si no hacían algo, esto terminaría mal.

Siempre- Escuchas la respuesta del ente en tu mente.

La misión había empezado y lo que era aún peor, el examen también, por lo que podía notarse cierta tensión. El viaje pronto se vio interrumpido por una comunicación de una mujer que pedía ayuda, la que a su vez pronto fue interrumpida por un hombre, cuando la comunicación termina Sally se queda mirando hacia delante mientras comenta:

Monstruos coordinados… no han podido comunicarse con nadie salvo con el jardín y solo un corto espacio de tiempo… me parece que está bastante claro que vamos a una trampa ¿no?

Decía mas soltando el comentario que para que alguien más lo escuche, la aspirante hace crujir sus dedos mientras dice:

Bueno… así será todo mucho más divertido

Pero parecía que pronto iban a empezar a moverse, el panorama era de una guerra a muerte, los monstruos parecían más de los esperados y apenas estaban aguantando las defensas, Sally observa mientras se va colocando los guantes y dice:

Parece que va a ser más complicado de lo…

En ese momento un fuerte zarandeo se produce, no había sido otra cosa que un choque de la nave contra uno de esos monstruos voladores, Sally se aferra al sillón mientras observa como Xia se disponía a ayudar a la instructora y Vinz parecía prepararse para hacer algo, ella por su parte se trata de agarrar a algo.

No esperaba menos de ti.

Me coloco en uno de los laterales de la rampa de salida y señalo el otro a Fiorette.

Sal tú junto a Ional y yo os cubro- le indico-. Después yo y que Ional me cubra. Aprovechemos que han duplicado los guardianes para poder turnarnos y que siempre tengamos al frente alguien para reducir posibles daños. Gared, cuando acabes ahí, conmigo. Seamos sistemáticos.

Ciudad-Estado de Narshe. 10:12 am.

Descendéis a velocidad suficiente como para mataros en el proceso, por suerte la intervención de Gared ayuda a estabilizar la nave. A menos de veinte metros del suelo la nave recupera la horizontalidad y tras hacer una pasada rasante sobre algunos tejados, arrancando algunas antenas y veletas en el proceso, la nave recupera algo de altura.

Nicoletta suelta el aire de sus pulmones aliviada – Buen trabajo - Le agradece a Gared – Parece que contamos con un futuro piloto entre los aspirantes.  

La nave sigue con su vuelo a baja altura sin más contratiempos hasta llegar al lugar de desembarco que teníais previsto. Desde esa altura podéis ver bien la ciudad que pasa bajo vosotros.

Narshe está situada sobre una escarpada colina pegada al mar, sus casas son mayoritariamente de planta baja y forman callejuelas estrechas y empinadas que zigzaguean sin ningún sentido aparente. En lo más alto de la colina, un gran palacio señorial domina la ciudad. En otras circunstancias sería un lugar bonito, un lugar agradable donde venir de vacaciones, aunque no es el caso. El humo, los gritos y la gente corriendo en todas direcciones deslucen el lugar.

La nave os deja en el lugar de desembarco previsto, un cruce de tres calles con el espacio justo para que la nave descienda y podáis bajar. La nave vuelve a elevarse y se aleja en dirección a lo más cruento de la batalla.

Hacia el sur se encuentra el puerto y las afueras de la ciudad, de las que tenéis una vista privilegiada gracias a vuestra mayor altura. A derecha e izquierda de vuestra posición se abren sendas calles que dirigen hacia la zona alta.  

Por la calle que desciende hacia el sur varios milicianos tratan de contener sin éxito a los monstruos que se abren paso a través de las endebles barricadas defensivas que han montado. No muy lejos en esa misma dirección hay una casa en llamas de la que surgen los gritos de auxilio de varias personas atrapadas en el fuego que están propagando varios boms.

Por la calle de la izquierda veis huir a dos niños agarrados de la mano perseguidos de cerca por varios canes infernales. Un anciano sujetando una lanza oxidada intenta detenerlos pero uno de los canes se basta para derribar al viejo y forcejear con él mientras el resto prosiguen la persecución de los niños que desaparecen de vuestra vista al girar la esquina.

Por la calle de la derecha tres arpías acosan desde el cielo a un matrimonio que, espalda contra espalda intentan defenderse con piedras de los monstruos, lo que solo provoca la risa y burlas de las arpías, que revoloteando a su alrededor los van hiriendo con ataques rápidos de sus garras.

Podéis ver una de las naves del Jardín descendiendo en picado hasta explotar al estrellarse contra el suelo.

Todo a vuestro alrededor es caos y sufrimiento.

Descendéis a velocidad suficiente como para mataros, la intervención de Xia no sirve para controlar la nave pero al menos entre ella y Nicoletta consiguen estabilizarla un poco. Vinz trata de invocar a Lilith, pero el reducido espacio en la cabina de la nave hace fracasar su intento, el GF necesita un espacio mínimo de dos o tres metros cuadrados para poder materializarse y dentro de la nave no dispone de ese espacio. 

Tendréis que saltar- Os dice Nicoletta al ver que cada vez os estáis alejando más y más de la zona en la que deberíais haber sido desplegados. La plataforma corredera de la nave se abre y el viento os azota la cara. ¡¡Saltad!! -Os ordena por segunda vez, esta vez con más desesperación en la voz. 

El suelo está cada vez más cerca, vuestra nave va dejando una estela de humo negro a su paso mientras sobrevoláis la ciudad a demasiada velocidad. El suelo está a más de treinta metros de altura, quizás no tengáis otra oportunidad.

Hoy... No... Vamos... A morir... ¡Joder!

Digo mientras sigo pulsando botones. Finalmente conseguimos estabilizar la nave

¡Si! ¡Lo logramos! ¡Jaja!

Le doy la mano animadamente a Nicolette, alegre. Que ella me diga que podría ser un futuro piloto me hace brillar los ojos.

Me encantaría, si... ¡Me chiflan todos estos aparatos!

Nos acercamos al punto de salida, lo se porque la nave empieza a descender.

Hablaremos de eso más adelante. Ahora...

Crujo los dedos de ambas manos al juntarlas.

Vamos a machacar a un par de seres de estos. ¡Jefe, te sigo!

Salgo tal y como ha planeado Raven, aunque nos hemos encontrado sin oposición y parece que tenemos una decisión que tomar. La nave que se estrella me preocupa

Esa nave... ¿Es la de uno de nuestros compañeros?

No puedo estar pensando en esto. Vamos poco a poco, Gared. Ahora tienes que ayudar.

Soy el más rápido, Raven. Déjame ir a por el niño.

Si no contesta en segundos, voy a ir de todos modos. Mas que permiso, es confirmación lo que busco. Brisa está entre mis manos, la activo y me subo y queda frente a mi, preparada para la acción.

Esto es un infierno... ¡Tenemos que salvarlos a todos, moveos!

El aterrizaje es forzoso, pero al menos llegamos vivos, no como otros.

Informaré de esto a la instructora, a ver si también tiene algo que decir esta vez sobre Gared.

La situación a ras de suelo es de absoluta batalla, muy superior a lo que esperábamos. La gente está muriendo a nuestro alrededor y apenas acabamos de llegar.

Y nuestros jefes se ponen a jugar con el equipo para ponerlo difícil. Una idea brillante de cojones.

Ional- comienzo a repartir órdenes una vez el terreno me muestra lo que tiene que ofrecer-, toma esa posición y ve disparando a los monstruos que lleguen a la barricada. Intenta darnos tiempo. Fiorette, tú y Gared acabad con esos booms, que ahora vengo a ayudaros. Nada de heroicidades estúpidas- mirando especialmente a Gared-. Fiorette, te dejo al mando de Gared e Ional, si lo véis complicado retroceded hasta mi posición y bajamos todos juntos a recuperar la casa. Yo ayudaré a ese anciano.

Repartidas las órdenes voy a por el perrito.

Dale duro...

Caos a donde quiera que Fiorette miraba, eso era lo único que se encontraba, la chica miraba a uno y otro lado guadaña en mano.

"Mucho peor que lo que vimos en Winhill no te parece" pensó la muchacha hablándole a su guardian force. Estaba de pie al lado de Raven, Gared e Ional, cuando Raven da la orden, la chica asintió enérgicamente, sacudió su cabello con un movimiento elegante, y le dijo a Gared. -No estas emocionado, está será nuestra primera vez.- la muchacha le dedicó un pícaro guiño con el ojo, dándole a demostrar que se lo habia dicho con un doble sentido completo. Se ajustó el escote de su vestido, no fuera que mientras corriera, algún accidente ocurriese, y algo...saltáse a la vista de todos.

Empuñó la guadaña, y salió corriendo junto con Gared en dónde estaban los bombs incendiando la casa. -Creo que es un mal momento para decirte que no tengo ninguna magia de agua...pero...tengo una amiga que estará más que encantada de ayudarnos.- le dijo Fiorette a Gared, quedando de pie ante la casa en llamas asediada por los bombs.

No sabe muy bien cómo, pero Xia logró ayudar a Nicoletta para que la caída fuera menos mortal. Logran estabilizarla para darles el tiempo suficiente de saltar.

Mira a sus compañeros de equipo y gritando por la fuerte brisa que entraba a la nave, les dijo - ¡Nos reagruparemos en tierra! ¡Vinz conmigo! ¡Alec con Sally! ¡Salten ahora! - se concentró por un momento en su magia para ejecutar una coraza. No era la más hábil para las proesas físicas, pero eso no podía detenerla. Estaba a cargo y debía demostrar que lo merecía. Tras hacer el hechizo, saltó preparada para contrarrestar cualquier ataque que pudiera surgir antes que sus compañeros llegaran a tierra.

Esto no es lo que debería ser. Deberíamos salvarlos a todos. Esos niños son tan importantes como el hombre o la pareja. 

Parece que la pareja se debilita, pero está en una distancia mas próxima de nosotros que esos niños que se alejan. Entiendo la defensa de la barricada y la urgencia de sacar a las personas de la casa en llamas.

¿Qué hago? ¿Qué hago? Vivo por una premisa. Nadie se queda atrás. Nadie se queda atrás, nunca más. No dejaré que nadie muera bajo mi guardia. Esta orden es la más táctica, la mejor estrategia para la defensa, el mejor uso de los recursos que tenemos a nuestra disposición y probablemente lo que tengamos que hacer, teniendo en cuenta la misión.

¿Y si los SEED no atrapan a los niños antes de que acaben devorados por el can del infierno? Raven no es tan rápido, podrá salvar al anciano pero no llegará a tiempo para proteger a los chiquillos. Quizás alcance a proteger a la pareja, pero de resto...

Cierro el puño.

¿Qué hacer? ¿Seguir las órdenes y tener una buena nota en el examen SeeD, o....?

Joder, la respuesta siempre ha estado claro.

Ixión, te dije que te demostraría que no dejaría a nadie atrás. No voy a empezar ahora.

Fiorette empieza a actuar de la única forma que sabe cuando trata de ocultar su nerviosismo, pero yo no estoy para juegos ahora. Ahora no. 

Toma - Le digo a Fiorette. Le hago entrega de una pequeña perla azul, un par de frascos y una pluma, mientras la toco en el hombro concentrándome por unos segundos. La magia fluye de mi hacia ella (*), tras lo cual la miro a los ojos.

Con la piedra podrás acabar con los boms facilmente, espero. Las magias te servirán para combatirlos fácilmente, y tienes un G.F que te puede ayudar, como has dicho. Utiliza las pociones en compañeros y en tí misma cuando los necesites. Confío en vosotros, se que podréis mantener esta situación bajo control. Escúchame, salvaré a esos niños y volveré enseguida ¿Vale?

Sonrío mientras me doy la vuelta, mientras giro mi cabeza hacia ella en un último gesto. 

Supongo que es inevitable que cometa estupideces y heroicidades.

Probablemente es de las pocas veces en las que ella puede ver con claridad determinación en mis ojos. La turbina de Brisa se escucha en la escena. En un momento dado me acerco a la posición de Raven

¡Ten, cógelo!

Le suelto algo en plena carrera (**), esperando que entienda que no se trata de que me niegue a hacer lo que quiere.

Lo siento... Le prometí a alguien que los salvaría a todos. ¡No tardaré!

Dos metros, cuatro, estoy casi en la esquina. Piso el impulsor derecho, el turbopatín gira obedeciendo a la perfección mis instrucciones. Agacho mi cuerpo, concentrado. 

Los voy a salvar a todos. Te lo prometo. Me ayudarás ¿Verdad?