Partida Rol por web

El dojo estaba limpio, iluminado y en silencio. Para todos aquellos estudiantes de Kendo y otras artes marciales que asistían a Flowerfield, el dojo era un lugar sagrado. Por las ventanas que daban a un hermoso jardín zen ingresaba la luz y el sonido del agua corriendo en la fuente. Cuando no estaba lleno de estudiantes demostrando su poder, solo había calma...

Koji lo primero que hizo fue cambiarse de indumentaria en los vestuarios, colocándose el Kendogi [ chaqueta de algodón gruesa ], el hakama [ pantalones de anchos plieges ] y el tenugui [ pañuelo amplio hecho material suave ]

Una ves puesto la indumentaria , hace algunos ejercicios de estiramientos, sentadillas, extiramientos, durante unos 10 minutos, luego empieza a dar vueltas al dojo , controlando la respiración, las gotas de sudor empiezan a escurrirla en la cara tras media hora corriendo, luego empieza a hacer los ejercicios básicos de golpeo.

Se puede ver cada vez que coge el Shinai y golpea al aire, soltando el aire, se pueden ver como si sus gotas de sudor, dotaran a la imagen , una especie de rocio. Los movimientos son fuertes y secos, tanto que cualquiera que estuviera cerca, podía notar el airecillo de la potencia que pone en cada golpe en el aire. Asi se tira como 15 minutos mas.

La puerta del Dojo se abrió un poco, suavemente y casi sin hacer ruido. Del otro lado una de las nuevas alumnas estaba observando a Koji.

La gotas de sudor de Koji, caían como redondas perlas al suelo.

Sus movimientos eran fluidos en las katas, con algún golpe al aire con el que terminaba con soltar el aire de su respiración...

Parecía danzar de manera extraña con aquellos pasos calculados, cambiando de pose, ejecutando distintos golpes, unos que descendías, otros que ascendían, laterales...

Terminado con lo que seria un golpe seco en la cabeza de un adversario imaginario...

Si vas a entrenar, entra y no te quedes mirando... - dice en un tono frío y serio, mientras seguía practicando.

Al parecer si se percato de la presencia de la chica, pero se lo callaba

Alana entró en silencio y se sentó en el piso a ver al profesor practicar.

Koji practico sin descanso durante media hora mas...

Al final se sentó en una parte del dojo donde había dejado la toalla, la verdad que las gotas de sudor, le dotaban de un aire extraño, como si el rocío de una primavera, hubiese cubierto su cuerpo, además de que en la zona que se sentó, entraba una tenue luz, que aun hacían mas mágica la estampa...

Mira de reojo a Alana..., su cara era seria e inexpresiva...

Si no vas a entrenar , ¿ qué haces aquí ? - su voz sonaba severa pero no enfadada

La pequeña guardo silencio durante todo el entrenamiento. Finalmente, cuando el profesor se dirigió a ella, la pequeña le dirigió una sonrisa.

Yo...quiero ser su novia, Hattori Kubawara sempai. Por favor, acépteme como su novia.- Dijo haciendo una reverencia formal, con las manos en el suelo delante de ella y la cabeza apoyada en ellas.

La mira serio, su cara era inexpresiva.

Sigue secándose , la verdad que la oferta le parecía extraña .Se quita el tenugui, para secarse la cabeza...

Le lanza el Tenugui delante de ella...

Si quieres hacer algo de utilidad, limpia el tenugui... - dice después de lanzar el pañuelo delante de la chica, para proseguir secándose los brazos con la toalla.

Acto seguido se levanta para ir al vestuario, sin prestar mas atención a la chica, para una vez en los vestuarios, quitarse la indumentaria de Kendo y darse una ducha.

Una  vez se desviste , entra en la ducha...

Aceptar como novia a una niña...,a donde llegaremos..., pero...,  la verdad que me recuerda a alguien... - dice pensando para si mismo, mientras abre el agua de la ducha para enjuagarse un poco, para apagarla y ponerse el gel, enjabonándose bien... - ¿ a quien me recuerda....? - vuelve abrir el grifo para

Mientras el agua le cae, abre los ojos como platos...

No puede ser, no puede parecerse tanto a ella - se dice mentalmente mientras el agua le cae por encima

Escuchas los pasos, que es obvio son de la pequeña, ingresar al vestuario y abrir el agua de las canillas, siguiendo tu orden de que limpie el Tenugui... Una vez lo termina de lavar, se queda ahí, esperando a que salgas....

Las duchas, eran departamentos individuales equipados  con la pera encima, una bandeja en la pared, donde se podía poner el gel y el champú . Las puerta solo cubrían desde la parte de los tobillos hasta un poco mas de por encima del pecho, para evitar miradas curiosas.

Habían al fondo, cinco en la sección derecha y cinco en la sección izquierda, con tamaños apropiados a los alumnos del centro, en la zona central , esta la de los profesores o monitores, mas alta y ancha que las otras.

Hizo caso omiso de los pasos de la chica, para colocarse el champú en la cabeza...

Es imposible que se parezca tanto a ella, es como si su versión en niña estuviera reencarnada en esa chica.. - se decía pensativo mientras frotaba su cabeza , para expandir bien el champú.

Hay un secador para ropa al lado derecho, nada mas entrar al vestuario, si sabes leer hay una buena hoja informativa, que te dice los pasos para introducir la ropa, los tiempos y demás... - dice aun serio mientras se frotaba la cabeza.

Aun pensaba en el parecido tan tremendo de aquella muchacha , con su fallecida mujer, cuando era joven y tenia mas o menos la misma edad que la niña.

Opción 2 - ropa delicada - 3 minutos ... - dice a la chica con una voz autoritaria y seria desde la ducha, con tan mala suerte que le entra algo de champú en el ojo, al voltear un poco la cabeza, atrás, para que la escuchara bien -

Maldita sea, todo por darle la explicación a esa niña - dice enojado por el pequeño accidente del champú..

Acto seguido vuelve a poner el agua en marcha para quitarse el champú  del pelo además de limpiarse el ojo, el agua la había dejado mas tirando a tibia, no quería achicharrarse el ojo.

Escuchas los pasos de la chica en el lugar y la ves de reojo (al menos hasta el incidente del shampoo) el sonido de la secadora prenderse. Luego de unos segundos y de quejarte del shampoo en tus ojos, escuchas los pasos de la chica acercándose al particular donde estas.

Le ayudo,Hattori Kuwabara sensei?- Pregunto mientras estaba cada vez más cerca de tu ducha.

Se queda mirándola de manera seria, después de lavarse la cabeza y quitarse tanto el champú de la cabeza como del ojo.

No hará falta... , si quieres hacer algo de utilidad, acércame esa toalla al lado de aquella taquilla, la de aquí esta mojada - indica a la chica de manera seria, indicando con el dedo que taquilla

Espera a que la chica le acerque la toalla, mientras va a por ella , cierra el agua.

¿ Tu nombre ? - dice frío , con un tono distante, mientras estira el brazo para coger la toalla, y asi taparse las partes nobles, al enredarse la toalla alrededor de la cintura y ya salir de la ducha.

Mistsutan. Mistsutan Alana, sensei. - Dijo sonrojada. La chica tenía la miraba hacia abajo, pero cada tanto elevaba la vista para recorrer el cuerpo del profesor, mientras se sonrojaba cada vez más. -Yo quiero ser su novia, Hattori Kubawara sensei. Acépteme como su novia. - Dijo firme, parada en frente tuyo.

Koji sale de la ducha y mira a la chica.

¿ no crees que eres muy joven para ser mi novia ? - dice en un tono serio,mientras rodeaba a la chica para sortearla, para acercarse a la taquilla donde había dejado su ropa limpia.

Quedando a espaldas de la chica...

va sacando su ropa para cambiarse, se quita la toalla pero esta a espaldas de la chica..., sentado en uno de los bancos mientras ya se ha puesto la ropa interior...

Mas vale que te centraras en los estudios, o el entrenamiento si estas en esta clase... - dice serio mientras se va poniendo los calcetines, de momento esta sentado en el banco, de torso para arriba desnudo, solo con ropa interior y poniéndose los calcetines.

¿ Ya se secó el tenugui... ? - dice a la chica , con un tono frío y serio.

Se quedó callado al ponerse  los calcetines, pensativo..., recordando algo del pasado en silencio, mientras se miraba algunas cicatrices de su mano derecha....

Es como aquella vez cuando estudiábamos en el Instituto ella y yo, había perdido un combate , lance al suelo el Tenugui por la fustración, después de las clases estuve entrenando sin descanso hasta caer rendido, con la mano derecha sangrando, es como la conocí, ella daba gimnasia rítmica,escucho mi rabia y sollozos en el dojo, ella entro, al verme cansado en el suelo, cogió el pañuelo , lo limpio, tenia una mano callosa llena de heridas, de la fuerza en que sujetaba el shinai, me vendo la mano con ese pañuelo.. ¿ porqué ahora me resulta tan familiar todo ? - pensaba para si mismo, recordando ese bonito recuerdo.

Si, está seco.- Dice entregandotelo.- Y no estoy en esta clase, Sensei. Yo soy de la clase de Gimnacia Ritmica. Cambien hago Baile y canto.- Dijo con una sonrisa, sonrojada.- Yo quiero ser como Aiyazama Akemi-sempai. Ella era la mejor, sensei. Tu la apoyaste y ella se volvió la mejor. Así que dejeme ser su novia, sensei y apoyeme como a Aiyazama-san. Dice haciendo una reverencia.

Era una gran mujer... - se pone de pie y mira a la chica.

Se acerca a ella y le levanta la barbilla para mirarla ...

Te pareces mucho a ella... - dice mirándola , con los ojos serios, pero que en su interior se veía melancolía y nostalgia en esos profundos ojos.

Vuelve a la taquilla para terminar de vestirse..

Quédate el pañuelo, como presente mío..., para recordar que debes de esforzarte mucho para llegar a ser como era ella.. - dice poniéndose la ropa limpia, con una mirada perdida y seria, mirando a la taquilla - ..fue un regalo de ella cuando me hice profesor.

Mañana serán las clases de canto, mejor que descanses y te prepares para ello - dice sin mas Koji.

No se vaya, profesor. Hagame su novia!...- Dije y corre hacia vos, sujetandote a la altura de la cintura, pero por la espalda.- Hagame su novia! No aceptaré un no. Dice sujetándote con fuerza.

No me gustan las personas poco disciplinadas - dice muy serio mientras que Alana le sujeta por la cintura.

Se da la vuelta, tomándole de los hombros, separándola un poco de él, con cuidado, pero no de manera violenta , sino a manera de explicarle las cosas.., la mira muy serio....

Si quieres ser mi novia, demuéstrame que serás la mejor en todo, solo de esa manera podre aceptarte como tal..¿ has entendido ? - dice con una mirada fría y penetrante a la chica, en un tono autoritario y serio

Dentro de su mente , circulaban imágenes de su fallecida mujer ¿ hacía bien en decirle eso a la chica ? , ¿ su mujer fallecida se lo permitiría ?

-Ya soy la mejor. Eso será fácil, sensei. Me he esforzado mucho toda mi vida. Así que acépteme!- No te tomo mucho recordar que Alana era una de las estrellas de la academia. Recién ingresada con beca completa, su promedio era excelente y era una atleta increíble, razón por la que a pesar de venir de una familia de clase media-baja, estaba en esta escuela. En cuanto a la gimnasia rítmica, estaba entre los futuros medallistas olímpicos y ya desde la época en que tu esposa competía, Alana, que solo estaba en las categorías infantiles, destacaba mucho. Ahora recordabas que no era la primera vez que la veías. En competencias generales de gimnasia rítmica, había estado entre las mejores, y era una de las grandes admiradoras de Akemi.Una vez más, Alana se tiraba a tus brazos y te abrazaba con fuerza. -Acepteme, Kuwabara-sensei.-

Se deja abrazar...

Ahora recuerdo que siempre estabas atenta , cuando mi fallecida esposa participaba es las competiciones olímpicas, ahora he recordado esa energía e ilusión que desprendía tu mirada al verla, e intentabas imitarla.. - dice con una voz seria, que se volvía nostálgica.

El pañuelo que te he regalado me lo regalo ella al ganar su primera competición, siempre me decía que me daría suerte.. - algo melancólico estira los brazos adelante, con ciertas dudas o miedo al abrazarla.

Si nos ven aquí, a ti te podían llamar la atención y a mi despedirme y tener una denuncia... - dice con algo de duda de si abrazar a la chica.

Me recuerdas muchísimo a ella.. - dice ya abrazándola.

Pero, ni es el lugar ni el momento, aquí puede entrar cualquier alumno, almumna o profesor en cualquier momento ... - de normal cuando entrenaba Kendo era mas callado y reservado, disciplinado, pero el recuerdo de su fallecida esposa, estaba ganando terreno, la echa mucho de menos.