Partida Rol por web

En medio de Freedom City hay una amplia franja de vegetación verde, un testimonio de la belleza de la vida y la naturaleza. Liberty Park fue parte central de los planes para la ciudad desde principios del Siglo XIX: una zona a la que la gente pudiera ir para entrar en contacto con la naturaleza y disfrutar de un momento lejos del ajetreo de la vida urbana.

Liberty Park posee varios atractivos, incluyendo zonas de césped y los campos de atletismo, el Jardín Botánico, el Embalse Municipal y sus caminos y zonas de picnic circundantes, el pequeño Zoo Infantil y el Auditorio para las actuaciones y conciertos al aire libre.

Liberty Park está infundida y rodeada del aire y la cultura. En el interior del parque hay muchas estatuas y fuentes, mientras que justo al otro lado de sus muros se encuentra el Museo Kirby de Bellas Artes, la Catedral de St. George e incluso la imponente mansión de la Sociedad Medianoche en la avenida 52.

Este es el lugar perfecto para pasar una tarde tranquila, aunque a altas horas de la noche puede suponer un lugar peligroso. También es el lugar perfecto para los metahumanos amantes de la naturaleza, pues dispone de gran cantidad de espacio abierto lejos de los edificios.

Jaime respiró el aire puro de esa zona de la ciudad. Sin lugar a duda, Liberty Park era el pulmón de Freedom City. Le hubiese gustado caminar por allí por otros motivos, relajándose y buscando tranquilidad. Pero, como siempre, eso escapaba de sus posibilidades.

Caminemos hasta encontrar un lugar con un cielo más abierto y menos rodeado de árboles. Un lugar donde la brisa corra por todos lados. Esperemos que allí esté Sílfide.

Jaime encabezó la marcha, poniendo todos sus sentidos a su alrededor. Confiaba que el grupo de mafiosos que acompañaban al padre de Fran no hubiesen adelantado ese movimiento. Al fin y al cabo, si eran los buenos, no irían a asociarse con alguien que les había atacado y que había conseguido escapar... Al menos, eso esperaba.

Llegó a uno de los claros que había descrito a sus compañeros, pero no vio a la joven metahumana. Pero podía estar en su forma gaseosa, así que no se limitó a mirar.

¡Sílfide! ¿Estás aquí? ¡Queremos hablar contigo!

A pesar del bonito espectaculo que suponia aquel exhuberante parque, Fran no se permitio ni un segundo para disfrutarlo, concentrada mas en detectar a la mujer de aire o algun posible enemigo. Lo cual era una pena porque la joven adoraba aquel lugar tan vivo y relajante, y era uno de sus sitios favoritos para meditar o hacer tai-chi.

- Si no se quiere dejar ver, va a ser dificil localizar a Silfide.- Comento casualmente mientras buscaba cualquier brisa antinatural, un posible indicio de que la criminal andara cerca.- Este sitio es enorme. 

Aunque en primera instancia a Fran la accion de Jaime de llamarla a gritos le parecio un poco absurda, pensandolo friamente no era tan mala idea, seria mucho mas facil que ella viniese hacia ellos. Para ayudarle, envio un mensaje telepatico para que todo el que estuviera en su radio de accion lo oyera- "Silfide, venimos en son de paz. Muestrate por favor"

"Vamos a esperar un poco, pero como no aparezca, daré un grito que hará temblar a todos los árboles de este tranquilo parque". Sonic caminaba junto al resto. Su mente evocaba el recuerdo de Rayo. Era su responsabilidad cuidar de él, a pesar de lo pesado que era a veces, y no lo había conseguido.

Miró a Nereida.

- Lo encontraremos sano y salvo. Ya lo verás.

Le dijo a ella, pero se hablaba a sí mismo en realidad.

- Luego nos lo llevaremos de juerga y lo emborracharemos. Sólo espero que no sea inmune al alcohol. Creo que Johny Rocket lo era... 

No tenía muy claro de dónde había sacado esa información. Por alguna razón le había venido a la memoria.

- También te emborraré a tí. Qué diablos, nos emborracharemos todos. Lo celebraremos todos a lo grande cuando ese bastardo esté entre rejas.

Nada más llegar al parque hasta Nereida llegó el inconfundible aroma de vegetación y humedad, su mente se distrajo recordando horas pasadas en el embalse y se recriminó el silencio que había imperado -Debería haber sido menos terca y haber hablado- Sus pensamientos se vieron cortados con el grito de Jaime y, mirando hacia todos lados por si veía a la mujer, se acercó a la fuente cercana y metió la mano jugueteando con el agua y sintiendo su frescor.

Asintió a las palabras de Sonic y esbozó una leve sonrisa.

-Sí, una muy grande.

Mientras buscaban a Sílfide por el parque, pudieron observar que algo extraño estaba sucediendo. Parecía que la flora de Liberty Park estuviera animada, o que se moviera a cada paso que daban. De hecho, parecían apartarse para llevarlos hasta uno de los claros más espaciosos de todo el parque. De estar Sílfide en algún lugar cómo ese, debería ser allí.

Pero la sorpresa de todos fue cuando no se encontraron con ella, si no que se encontraron con un extraño híbrido entre un hombre y una planta.

¿Estais buscando a Sílfide, me equivoco? Dijo el Hombre Verde mirando directamente a Jaime. Me temo que antes de hablar con ella tendréis que hablar conmigo. Dijo muy serio.

El hombre planta parecía estar meditando en lo alto de un cerro, se encontraba con las piernas/ramas en posición de flor de loto, mientras que sus dedos/ramas trataban de imitar la posición. Estaba concentrado y aparentemente no parecía peligroso, pero algo habíais leído en los archivos de Gardener, de que ese hombre, planta, o lo que fuera, podría ser potencialmente peligroso. De hecho estaba entre los archivos de "Enemigos de Freedom City"

Buscaban por el parque, alterando su paz con sus voceríos, hasta que apareció una cosa planta capaz de hablar y según recordaba, era un ser peligroso. Dada su pose meditativa y la calma con la que les hablaba, quizá era peligroso por intentar traer la paz mundial a su manera, o algo por el estilo. Sonic miró a aquél ser y esperó que fuera sencillo dialogar con él.

- Saludos, ser planta. Sílfide nos conoce y venimos porque queremos pedirle ayuda, pues estamos siendo perseguidos.

No le dijo que ellos eran los Next-Gen, pues no sabía si eso le pondría en su contra. Después de decir eso tomó una buena bocanada de aire.

- El aire aquí es diferente.

Comentó a todos en general, con expresión de estar disfrutando, intentando en realidad empatizar con aquél hombre.

Tras varios meses habitando en la siempre imprevisible ciudad de Freedom City, Francesca no encontro tan sorprendente como curioso la aparente inteligencia de la flora del parque. Cuando se encontraron cara a cara con un hombre hecho de vegetacion, a la joven le parecio hasta razonablemente logico. Recordaba haber visto su cara en algun informe sobre villanos de la Liga, pero en aquellos instantes no parecia hostil, lo cual se agradecia.

- Disculpe que perturbemos su meditacion.- Comenzo la joven asiatica con tono suave, intentando no parecer agresiva u hostil... por el momento.- Pero necesitamos urgentemente encontrar a la mujer llamada Silfide. No queremos hacerle mal, de hecho probablemente necesitemos su ayuda. Hay muchas vidas en peligro.

De repente una especie de árbol con aspiraciones zen comenzó a hablar y Nereida se lo quedó mirando fijamente, recordaba haber leído algo sobre él. A los ojos de la chica, la palabra enemigo peligroso resaltaba como un cartel de neón encima del ser -Pues cuanto más peligroso mejor para nosotros y peor para Xin- pensó mirando alrededor mientras dejaba al resto hablar -Sílfide debe andar cerca-.

Jaime se quedó mirando al hombre verde, parpadeando las veces que el ser parpadeaba, y sólo apartando la mirada cuando él lo hiciera. No, sabía que no era un animal. Pero era un enemigo poderoso, y Jaime quería enseñar que no estaban asustados ni iban a luchar. Querían hablar.

Recalco las palabras de mis compañeros. Queremos hablar con ella, pues un gran mal se está haciendo con el poder de la ciudad. Creemos que controla a su antojo a todos los que están dispuestos a escucharle, aunque no sabemos si los domina con algún tipo de poder. Necesitamos saber si Sílfide conoce algo de ese mal, si ha oído a hablar de él... Y si estaría dispuesta a ayudarnos a combatirle.

Este lugar se parece de donde yo vengo. Todo lo que hay alrededor es simple, natural y bello. No debería haber nada malo en tumbarse, relajarse y respirar.

Tras esos momentos de recuerdos, Ikari volvió en sí.

Una mole vino hacia ellos, aunque fue a Jaime a quien se dirigió. Ella estaba tan feliz en ese lugar, que hasta se estaba planteando la posibilidad de quedarse allí durante un tiempo, el suficiente como para poner en orden sus pensamientos y evadirse de todo lo que les estaba pasando a sus compañeros. Sería un modo alternativo de recargar las pilas con energía positiva, cosa que echaba en falta últimamente.

Queremos ayudar, queremos justicia, queremos paz - le dijo en pocas palabras.

El Hombre Verde deshizo su postura y se estiró. El crujido de sus piernas y brazos sonaba exactamente igual que sonaba un día de viento en el bosque. Con cada bocanada de aire que tomaba, parecía que todo el parque se moviese. Era como si toda aquella flora estuviera controlada por él y se moviera a su antojo. De ser así, efectivamente estarían ante un adversario formidable, así que sería importante tenerle de su lado y no del lado de Xin.

Habladme algo de ese mal, y de quién se trata. He oído rumores sobre que algo está pasando, y es posible que incluso yo mismo os pueda ayudar. Pero Sílfide lleva mucho tiempo retirada, no quiere saber nada de la gente de esta ciudad, y pasa más tiempo mezclada entre el vieno y el aire que en su forma material. ¿Quién ese ese enemigo tan formidable del que hablais y al que parecéis temer tanto?

Jaime asintió lentamente. Quizá no habían venido buscando a esa criatura, pero su ayuda no sería desperdiciada. Iba a hablar, pero realmente no era el apropiado. Miró a Fan

Creo que es tu turno, cuéntale todo lo que sabes le sugirió, esperando que la muchacha no se cortara mucho por el hecho de que esa criatura fuese un villano peligroso.

Algo en el interior de Nereida se removió cuando el 'ser-árbol' se puso en movimiento, en un acto reflejo se puso delante de sus compañeros como si los quisiese proteger pero, como no había nada de lo que hacerlo, al verse delante respondió.

-Se trata de alguien que ya no debería existir, Xin Yu jefe mafioso de China, ha vuelto de entre los muertos para vengarse de su hija y apoderarse de la ciudad. Tiene cerebro y recursos para lograr ambas cosas. Muchos recursos en forma de billetes ya han comprado a varios metahumanos. Si no hacemos algo pronto, Freedom se convertirá en otra cárcel para quienes solo quieren vivir en paz con sus dones. -La joven calló un instante para añadir con pesar -Y Sílfide... tienes que convencerla de que si sigue así acabará perdiéndose en el aire, el mundo perdería a una gran mujer si eso llegase a pasar.

Las últimas palabras las dijo desde el corazón, lo poco que había interactuado con ella le dijo que era una buena persona a quien le había faltado apoyo.

Fran asintio cuando Jaime le indico que explicara la situacion, y dio un paso adelante para acercarse mas a el hombre arbol. Lo hizo con gesto decidido, para demostrar que a peaar de que aquel ser era alguien peligroso, no le tenia ningun miedo.

Apenas habia comenzado a abrir la boca cuando Nereida comenzo a hablar como un torrente. Fran no pudo evitar sonreir mientras le ponia una mano en el hombro a la metahumana acuatica.- En resumen, lo que ha dicho ella.

Nunca cambies, Nereida. El mundo seria mucho menos divertido sin ti.- añadio mentalmente. 

Recuperando el semblante serio, Fran continuo.- Ese hombre es una persona cruel y despiadada, que no dudara en matar y destruir cuanto haga falta para salirse con la suya. No me gusta implicar a otros en mis problemas, pero esto nos afectara a todos, queramos o no.

¿Cómo era posible que ese ser pudiese hacer algo tan espeluznante?. Le dejó anonadada. Algo tenía, que le embelesaba, algo innato en él.

Mientras tanto, ella seguía a la espera, no quiso ni debía añadir nada más. El respeto a las palabras de Francesca era lo importante para Ikari.

Sonic no perdió detalle de los gestos del hombre planta, decidido a evaluarlo por ellos, ya que no tenía aspecto de ser un gran manipulador.

"Debe ser un extremista de la naturaleza o algo así, pero Xin no está atentando contra la naturaleza", pensó, indeciso sobre si el extraño ser iba a ayudarles. Aunque podrían tratar de añadir algo que le motivara.

- Uno de sus aliados es Gamma, un tipo radiactivo muy peligroso, que ya ha vencido a los Atom. Y por lo visto está contratando a muchos más y va a convertir a la ciudad en un infierno como no hagamos algo.

Le dijo, esperando que la palabra "radiactivo" le provocara alguna reacción.

Tal y como esperaba Sonic, la palabra "radiactivo" hizo despertar algo en lo más profundo del Hombre Verde. Tras decir aquello todo el bosque se retorció, y las plantas que habitaban allí parecieron trasladarse de lugar en un instante. El Hombre Verde torció el extraño rostro de corteza y puso una mueca nada agradable. El haber escuchado que Gamma estaba de su lado había sido una terrible noticia.

Pensaba que ése desgraciado ya estaba entre rejas. Dijo refiriéndose a Gamma. No pensaba que encima fuera capaz de trabajar para nadie, le hacía más yendo a su propio aire. Pero ahora que me dices que encima ha vencido a los Atom... el extraño ser-planta se puso en pie mientras hacía crujir todas sus ramas, quizá sea necesario que os ayude. Al menos me ocuparé de buscar a Sílfide, pero... dijo dándole vueltas a una cosa, aún no sé para qué la necesitais... bueno, no es que no lo sepa, si no que no lo comprendo.

Dadme unas horas. Les dijo al tiempo que alzaba las ramas que parecían representar los brazos, luego cerró los ojos y mirando al cielo les dijo: la encontraré.

Muchas gracias contestó Jaime mirando el rostro del Hombre Verde. Su mente trabajaba rápido, intentando cómo conseguir que los seres de ese parque les ayudasen. Tenían que definir una estrategia, unas palabras clave para que todos se unieran.

¿Qué le diremos a Sílfide? Quizá no le haga gracia combatir contra nadie, por mucha rivalidad que haya.