Partida Rol por web

Gladiatrix

Cap 1. Tu nueva casa

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22/05/2016, 09:59
Amaia

Todavía sentía la extraña quemazón que la cera había dejado en su piel cuando Amaia fue lanzada al siguiente escenario de aquel día lleno de novedades y caos, después de tantos días de viaje monótono. Se vistió con unas telas que apenas cubrían sus formas y se calzó los pies protegiéndolos de la arena abrasadora y avanzo con el resto, dejándose guiar, absorta en el grupo numeroso de luchadoras que allí estaban reunidas.

Lucían armas de todas las clases e incluso ellas presentaban aspectos de lo más variados: sus cabellos, los rasgos y los diversos tonos de la piel demostraban que allí se mezclaban mujeres de todos los rincones del mundo. Luchadoras.

Escuchó las palabras del guardián y después del que entendió - más por su aspecto y sus ademanes que por sus palabras - que era el señor de aquel lugar. Hubiera querido hacer mil preguntas, o hubiera dejado escapar a toda la rabia contenida que bullía en su interior, pero no hubiese sabido explicarse correctamente, todavía no. Ni hubiera sobrevivido a un ataque de furia. Y sería digno morir con orgullo, pero Amaia supo que habría mejores momentos para ello.

Viendo a Balbo acercarse a Mirza y tocarla de aquel modo supo también que los momentos duros no faltarían. Apretó los dientes y la pregunta de la recién llegada, en un latín tan pobre que incluso Amaia la comprendió, le hizo pensar. Los romanos eran taimados y tramposos: no se aferraría a una esperanza vana. Su destino, si aún tenía alguno, se lo labraría ella misma. Negó con la cabeza, interesada al fin en las palabras de otra de las mujeres. No pudo entenderla esta vez, fue un discurso largo y vehemente. Y sin embargo creyó percibir una fuerza y una determinación que servían muy bien a lo que ella misma sentía, y miró a la mujer de gesto altivo con un atisbo de gratitud.
 

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22/05/2016, 14:53
Elektra Papadopulus

Después de haber visto y escuchado al resto de las gladiadoras reaccionar al acto de intimidación y provocación a nosotras de Vara por medio de la pobre Mirza y con el discurso de Balbo las respuestas de la nueva Bárbara y de Titania antes de decir: " Los dioses influenciaran nuestros destinos en la arena, como fuera de ella pero nosotras deberemos estar bien preparadas para dar un buen espectáculo señores, por lo que les pedimos nos entrenen bien y nos permitan estar física y mental mente en condiciones óptimas para los combates descansando, comiendo, practicando y aprendiendo lo que sea necesario para dar un buen espectáculo en la arena y no sólo para sobrevivir lo suficiente como para comprar nuestra esclavitud "

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22/05/2016, 23:19
Balbo

Balbo oye la pregunta de Morrigan. El piensa en cuantas veces ha tenido que pasar por esto y si realmente merece la pena. Las esclavas no necesitan muchas explicaciones, pero la promesa de una libertad infunde en ellas algo mas que valor en sus pelear. También dan espectáculo.

Balbo abre de nuevo los brazos mientras se dirige a Morrigan con la sonrisa de alguien que ha visto como una rana salia del estanque para volver a entrar.

He inmediatamente, justo antes de poder contestar, las otras dos muchachas también hablan.

-Señor Vara, me parece que se esta usted ablandando... Normalmente las esclavas no hablan después de que usted las ponga en sobre aviso. Pero...dejémoslo pasar por esta vez. - Ríe abiertamente moviendo su barriga Balbo.

Lentamente se dirige a Morrigan y le responde despacio y claro para que entienda en latín, independientemente que Varia este traduciendo sus propias palabras.

- Gana y seras libre algún día. Pero tendrás que ganar muchas, me costástes muy cara, según tengo entendido.- Ríe entre dientes. Una habla de comprar libertad, otra de venganza y otra de dioses.

- Nononono...mis queridas muchachas. Creo que no habéis entendido bien- Se gira mirando a las traductoras y las fulmina con la mirada, como si fuera culpa de ellas el que no entiendan bien. Se gira y se encara a Titania, auqnue la discurso va en general -. No me importa lo que erais antes, ahora ya no lo sois. Bajo la ley romana, sois de mi propiedad. Sois mis esclavas. He comprado y vendido sacerdotisas, princesas e incluso reinas. Todas tienen los mismos derechos a los ojos de la lex romana; es decir, no tienen derecho alguno. No me importa de donde vengáis, las aspiraciones que teníais en vuestra vida, las venganzas personales y los deseos de los dioses a los que rezáis. De una forma u otra, la arena es vuestro destino.- Se da la vuelta para mirar también a Elektra.

- Mirarlo de otra manera. Muchas erais antes esclavas criminales o bien guerrilleras contra la paz romana en provincias externas. Esto también es delito en Roma. Si los pretores os acusan de eso, os matarán sin que tengáis oportunidad de defenderos.- Luego se dirige a Amaia y la manosea los pechos con las manos regordetas, apretando de vez en cuando y cerrando los ojos al imaginarse los duros pezones entre sus dedos.. - ¿Veis? Sois mías, por derecho, por ley... y si yo quiero... ¡por deseo también! Si yo quisiera que esta cerda me chupara la verga...no tendría mas remedio que hacerlo.- Se acerca lo suficiente a Amaia para, sin dejar de tocar sus pechos, lamerla la cara desde la barbilla hasta la sien.

Luego, con un gesto de asco, la rechaza y la tira a un lado como si no "supiera" bien.

-Bien espero que haya quedado lo suficientemente claro. Mirad, soy un hombre muy ocupado. Siempre estoy pendiente de que no os falte de nada y ademas os consigo los mejores sitios para que luchéis. Intercedo por vosotras para que vuestra fama os preceda y logréis tener lo que yo no pueda daros. ¿ No lo entendéis? Solo quiero que me seáis rentable luchando lo mejor posible. Y si por algún casual alguna de vosotras es la gladiadora definitiva.... bueno. La colmaré de lo mejor y... si podrá ganarse su libertad.-  Se gira en dirección al exterior pero en un instante se le ocurre algo que cree no haber dicho.

-Por cierto... si alguna esta pensando en escapar...- Señala a las almenas con puestos de arqueros en la esquinas.- Y que ninguna me diga que su pueblo pagara un rescate por ella... aquí... las cosas no funcionan así. ¿Alguna, pregunta mas?- rie de nuevo ante su propia pregunta.

- Tiradas (1)

Motivo: Manoseo

Tirada: 1d10

Resultado: 1

Notas de juego

1 Amaia, 2 Ashera, 3 Ejra , 4 Elektra, 5Fanah, 6 Haribrig, 7 Mirza, 8 Morrigan, 9 Nerva, 10 Titania

Te tocó Amaia, lo siento ^^

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23/05/2016, 11:19
Nerva

Me eché la mano a la cara y volví a negar con la cabeza al escuchar a las mujeres hablar, sobre todo con el largo discurso de la última mujer. No entendía aún como la permitieron hablar tanto. Y sus palabras... Quise responderla, decirla la verdad, que somos menos que nada, que no tenemos derechos ni podemos exigir. Que quien debe entrenar, aprender y practicar, somos nosotras si queremos sobrevivir a esto. Que antes de poder reclamar nada, debemos ganarnos un puesto o una fama aquí. Que somos esclavas, y como tales no podemos dirigirnos al amo o a los ciudadanos romanos como nuestros iguales, pues para ellos somos cosas en propiedad....

Pero guardé silencio, sabía lo que ocurriría si hablaba más de la cuenta. Más fue Baldo quien lo dijo todo por mi. Gracias a Odín, Baldo tiene ganas de hablar hoy. Me alegraba de que no recurriese al castigo físico, al menos por ahora. Nos vuelve a dejar claro que somos de su posesión siendo él mismo esta vez quien manosea a una de las chicas. Aprieto los puños con fuerza, tensando con ello mis brazos y repudiando su gesto con la mirada.

Eran todos iguales. Gordos babosos, de manos largas y rechonchas. Volví a recordar entonces el último instante en el que vi con vida a Rufus, cuando estaba subida sobre él y la daga que había ocultado bajo las sábanas se alzaba en mi mano para hundirse sobre su viejo y odioso cuerpo una y otra vez. Una mirada de satisfacción y media sonrisa se dibujaron en mi rostro y al fin relajé mis manos. Con disimulo, agaché nuevamente la cabeza esperando que nadie se hubiese percatado de aquellos gestos.

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24/05/2016, 12:13
Elektra Papadopulus


" Por favor disculpe nuestra ... Confusión debido a la traducción nuestro señor, permitame agradecerle todas las atenciones que se toma por nosotras como es debido más adelante, ya sea en la arena .... o fuera de ella, yo sólo le pedía humildemente un poco más de toda la generosidad que nuestra reducida inteligencia no había valorado para poder dar un mejor espectáculo en la arena, pero me queda claro que todo mi orgullo y rabia se limitará a la arena "

Dijo la esclava griega tratándose su orgullo en un trabajoso latín vulgar mientras que bajaba ligeramente la cabeza y se inca a en el suelo para mostrar respeto y ocultar cualquier molestia que sentía por decir lo anterior

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24/05/2016, 13:06
Asherah

   En todo momento Asherah, limpia y rasurada como le gustan a los romanos, se mantuvo firme y oscura como una sombra. Tenía la mirada fijada en el infinito, sin mostrar demasiado orgullo y mucho menos sumisión. Pero al menos se mantenía en silencio. Sus brazos caían laxos a ambos lados de su cuerpo y ella luchaba con fuerza para no abrirlos y cerrarlos nerviosamente, para que sus nervios no la delataran. Debía pasar desapercibida para el señor Balbo y los demás hasta que su reputación fuera lo suficientemente alta como para tener ciertos privilegios. 

   Tragó saliva cuando Balbo se acercó donde ella estaba. Leía la lascivia en sus ojos. Y mentalmente rezó una plegaria a sus dioses para agradecerle el que Balbo hubiera escogido a la muchachita que estaba a su lado, Amaia. No pudo aguantar su furia y cerró sus puños, sintiendo los deseos de saltar sobre Balbo y clavar sus dientes en la grasienta garganta del amo. Seguramente Vara y los demás la mataría, pero con suerte Balbo moriría bien desangrado o por una infección. Pero, de nuevo, se obligó a sosegarse. Recordó las lecciones que su padre le había enseñado y preguntado innumerables veces, recordó una larga lista de reyes fenicios de la antigua, diciendolos mentalmente para abstraer su mente de la repulsa que le provocaba aquel romano. Solo la voz de la esclava griega la sacó de su ensimismamiento. 

  "Como siga hablando... conseguirá que le corten la lengua o le desoyen la espalda a varazos". Pensó Asherah mirando a Vara y recordando la vara que antes había mostrado. Vara, aquella fiera romana que les entrenaría, ya había sido reprendido por su amo después de que las esclavas hablaran por primera vez, y ahora una de ellas lo vuelve a hacer. Asherah no querría estar en su lugar, por lo que decidió adoptar una postura más sumisa con el fin de seguir pasando desapercibida.

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24/05/2016, 13:39
Haribrig

¿En serio se podía ser más estúpida? ¿Realmente pensaban que por tener tetas y coño las iban a tratar diferente?. Eran esclavas, y tendrían que obedecer sin rechistar, ser folladas sin rechistar y ahora morir en la arena sin rechistar. Que la nueva y la otra hablasen, solo era perjuicio para las demás, aunque más para ellas. No iba a ser Haribrig la que abriese la boca para recibir golpes de vara.

Bueno, ya les entrarían las cosas en la cabeza a base de palos. O pollas, a saber.

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24/05/2016, 22:57
Morrigan

Me costo un poco seguir el discurso del gordo dueño de todo. Pero entendí lo básico. Si mataba mucho y no moría con suerte podría ser libre. Con eso me bastaba.

¿Te coste cara? Mira que pena...

Pero cuando se dirige a la morena y empieza a manosearla los pechos tengo que reprimir una arcada de asco.

Si a mi me tocaba así vomitaría o intentaría matarlo. Era mas seguro lo que pasara lo segundo.

Mire las defensas del lugar.

Por desgracia una fuga solitaria estaba descartada. Había demasiada vigilancia.

Demasiados guardias y arqueros.

Entonces otra mujer empezó a hablar como si no existiera el mañana.

Gran error. Antes comento algo de que hablábamos mucho... Y esta estaba hablando mucho por segunda vez.

 

 

 

 

 

 

 

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25/05/2016, 00:54
Titania

Escuchó la respuesta de Balbo. Bien. Ni se había molestado en responder, sino en decir su discursillo. Ya se hacía una idea de qué mente tenía ese hombre. Era muy diferente al bruto de Vara, pero... No mucho más fuerte de mente. Aún así, parecía saber suficiente de subterfugio y amenazas. Con él no servirían las suyas propias... Sólo sangre. Y eso le venía perfecto. Necesitaba saciar toda su sed de sangre y entender cómo desangrar a otros. La lección le venía genial para su futuro encuentro con el maldito centurión...

La griega parecía mostrarse sumisa, aunque no renunciaba a sus discursos. Un intento honorable de ganar alguna facilidad... Aunque inútil. Así no ayudaba a nadie, sólo ponía de mal humor al dueño y a sus hombres... Y por algunas caras, a las compañeras tambien.
A Titania no podía importarle menos qué decía ni qué quería Elektra, ni cómo lo pedía. Ni ella ni, en realidad, ninguna. Por otro lado, no pudo evitar sentir pena por la jovenzuela a la que el amo tocó. Aquello había sido morboso en el peor sentido posible... Pero su expresión se mantuvo casi hierática, inexpresiva. Así fue durante el discurso del jefe, del de la griega y así era durante todo ese tiempo. No podía permitirse debilidades sentimentales...
Sólo quería liarse a espadazos de madera con la primera que pillara, y luego con la siguiente, y la siguiente, hasta que viera sangre. Hasta que supiera que el haber matado a esos équites seguía siendo algo de ella y no alguna intervención divina. Hasta que supiera que podía con sus manos vengarse de los que mataron a sus seres queridos.

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25/05/2016, 03:46
Nerva

Nuevamente aquella mujer volvió a hablar. No estaba segura si es que tenía afán de protagonismo, si quería comprobar la paciencia de Vara o Baldo, si recibió un golpe en la cabeza al nacer.... Daba igual. Me daba igual, sólo sabía que acabaría enojando a alguien a quien no debería.
Y si al menos fuesen justos, ella pagaría por sus propias palabras. Pero dudaba de que Baldo o Vara supiesen lo que significaba esa palabra y además esta sería una buena ocasión para hacer pagar a justos por pecadores y minar el poco aprecio o confianza de unas con otras, azotando a cualquiera de nosotras por la insistencia de aquella mujer.
Además, tanto hablar ¿para qué? Un simple perdón y agachar la cabeza hubiese sobrado...
Mi señor Odín, protege a tus siervas en esta tierra hostil y de la ira y furia de los hombres que nos acompañan. No permitas que la injusticia caiga sobre nosotras tan a la ligera y que cada una pague por lo que debe. Rogué en silencio, esperando que todo esto acabase pronto.

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25/05/2016, 05:21
Ejra Sterki

Quede asqueada luego de comprender lo que decia Gyda al traducir. Era nuestro destino segun decia.

El destino no lo fijaba el, y mucho menos una estupida ley romana.

Pero hice silencio y trate de pasar desapercibida. Luego llegaria mi momento.

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26/05/2016, 18:45
Amaia

Las palabras son ligeras y las mece el viento, haciéndolas volar lejos. Muy rápido se desvanecen y solo queda un rumor, que cada cual fija a su modo en la memoria o simplmente olvida con rapidez. Sin embargo los hechos son tenaces y duraderos. Pueden acariciar el alma con un toque de alegría que permanezca vivo durante el resto de la vida, o pueden golpear con la más odiosa furia consiguiendo que el espíritu se haga añicos en un instante y nunca, jamás vuelva a recomponerse como antes.

Y así, las palabras que se pronunciaron en la arena pronto cesaron su eco en los oídos de Amaia. El guardián y su tono amenazante, tan violento que solo podía provenir de un temor inmenso. Un hombre débil. Y el dueño miserable de aquel lugar cruel. Un hombre iluso que gastaba sus monedas en comprar cuerpos sin pensar que solo el espíritu que habitaba cada uno de ellos lo convertía en algo valioso y perdurable.

Todas esas palabras se desvanecieron. Quedaron los actos, los gestos y las miradas, y la huella viscosa y caliente en el rostro de Amaia, el dolor sordo y degenerado en sus pechos y el tacto de la arena caliente en sus manos. Se tomó su tiempo para levantarse y al fin lo hizo sin esfuerzo aparente. Las acciones de aquellos hombres la habían golpeado, la marcaban para siempre en un instante. Pero no la habían derribado, su esencia seguía intacta y tras la prueba, fortalecida.

Se sacudió la arena y limpió su mejilla con la palma de la mano mientras sus compañeras de cautiverio se expresaban en silencio, sin palabras. Apenas sin acciones. Solo una de ellas, débil e indigna, se postró ante los romanos decadentes. Amaia hubiera preferido morir a insultar de aquel modo a sus ancestros. pero ella provenía de un pueblo orgulloso y noble, y aquella mujer solo era una hiena ruin. Supo que pronto recibiría lo que le correspondía, ella y todos los demás.

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26/05/2016, 23:37
Mirza

Aquellas chicas tenian mucho que aprender. Nadie esperaba su opinion, solo asentir y responder cuando se las preguntara. Hablar de otra manera era peligroso, pero no parecian entender aquello.
Cuando el amo se acerco a Amaia, Mirza hizo un esfuerzo por nisiquiera mirar. Tuvo suerte de que se contentara con pasar sus manos por ella, un lamento y un empujon. Era humillante, si... pero podia haber sido mucho peor.
Miro a la chica de reojo esperando que no hiciera ninguna tonteria como querer defenderse.

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31/05/2016, 20:49
Vara

Balbo se aleja de vosotras y se dirije al fondo del todo, donde esta situada su pequeña mansión privada. Y os deja a solas con los celadores y el resto de las esclavas.

Vara se queda mirando fijamente a Elektra y la sonríe como cuando uno sabe que ya ha ganado. Elektra para el es como un corderillo al que hay que guiar por el sendero. Su sendero.

-Asi me gusta, griega... Si eres tan buena con los puños y la espada como con tu lengua....- Hace una mueca de satisfacción. - pero aun estas verde... esas piernas hay que domarlas, igual que al resto de tus compañeras.

Luego se dirige a Amaia que se esta recuperando aun de la intrusión de Balbo con su cuerpo.

—¿Mareada?

Vara se inclinó hacia delante y agarró el mentón de Amaia para girarle la cara de un lado a otro, como haría un veterinario con un animal enfermo.

—A mí me parece que está bastante espabilada —dijo Gladius con una media sonrisa mientras miraba al Sol del medio día que empieza a calentar, haciendo que vuestras pieles empiecen a arder ligeramente.- Quizá necesiten correr un poco para ponerse en forma.

— ¡Cinco vueltas al ludus y después ..- hace un pausa mientras señala a Nastasen y Gladius.- Seréis todas suyas- Añade de una manera algo irónica.- Vamos vamos vamos!!!! .- Grita Vara a todas las esclavas dando varazos a diestro y siniestro para que os pongáis en marcha.

 

Por su parte, Greta y sus chicas se alejan para hacer la colada.

Notas de juego

Perdón por el retraso... un fin de semana largo y fuera de casa.^^

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31/05/2016, 23:25
Nerva

Me mantengo firme, aguantando el sol sobre mi cabeza, el cual empezaba a ser sofocante. Veo como Vara disfruta tratando de amedentrar a Elektra. De hecho creo que su intención era asustarnos a todas. Me sorpendió que se molestase en preguntar a la otra mujer por su estado, más aún viendo el trato y las miradas que nos habían regalado tanto él como Baldo.

Una voz que conocía irrumpió en el ludus. Era uno de los hombres que nos trajo hasta aquí en aquel asqueroso viaje. Creí que velaba por nosotras cuando nos traían hacia aquí... e incluso que no le volveríamos a ver, pero me equivocaba... en todo. Su forma de decir que nos vendría bien correr con ese sol que amenzaba con ser infernal, esa media sonrisa que dibujó en el rostro... y esa forma de decirnos que seríamos suyas, por  parte de Vara... No me gustaban.

No me dió tiempo a pensar mucho más, las chicas comenzaban a correr mientras el celador agitaba su vara contra nosotras. Por un instante me sentí como el ganado siendo dirigido hacia algún sitio. Comencé a correr con ellas. ¿Cinco vueltas? Espero poder correr una o dos antes de desear morirme.

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01/06/2016, 00:51
Elektra Papadopulus


" Gracias señor por sus halagos e indicaciones, gracias a eso aprenderé pronto "

Dijo Elektra sin ironía, soberbia ni humildad evidentes para no provocar a nadie mientras que se ponía de pie para comenzar a trotar junto a las demás esclavas para no agotarse de inmediato; ignorante de todo aquello que las otras esclavas o los celadores pensaran de la mujer griega, que de todas maneras en ese momento le era poco importante, después llegaría un mejor momento para platicar

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02/06/2016, 02:00
Morrigan

Nuestro gordo amo se marchaba. Lo que parecía que indicaría el comienzo de nuestro trabajo.

Era increíble como podía cambiarte la vida en poco mas de un año. De vivir tu vida difícil pero libre. Ah tener que vivir en unos muros bajo los caprichos de un jodido Romano.

Me costo un poco entender al Carcelero. Pero parecía que felicitaba a la griega por su habilidad con la lengua. Igual comía caracol en la oscuridad de la noche. Ah mi eso me daba igual. Lo importante era salir de aquí. Y para mi desgracia seria una tarea difícil de realizar.

Y de pronto comenzaron los golpes para animarnos a correr.

Genial... Nada mas ponerme a correr notaba como me dolían los músculos , el viaje en carro no había sido precisamente ir en una silla de manos. Pero por los dioses que aguantaria.

 

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03/06/2016, 03:45
Ejra Sterki

Sin animos de llamar la atencion se entendia que querian que marcharamos como animales. Asi lo hice sin pensarlo mucho y me mantuve lo mas alejada de los guardias y del hombre con la vara dentro de lo posible. Aunque el calor era sofocante y la arena se levantaba a nuestro paso, no escucharian de mi un gemido aunque tuviese que morder mis labios.

Mientras corria tuve que recogermen el cabello, ya que me daba mas calor, y aun estaba entumecida por el viaje pero eso quedaba en el pasado.

Un dia a la vez.

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03/06/2016, 13:58
Nerva

"Gracias señor por sus halagos e indicaciones". Repetí en mi cabeza mientras corría. Un golpe en la cabeza al nacer. Seguro.

Mis pensamientos se detuvieron cuando vi de frente a los dos celadores que se harían cargo de nosotras. Aquel tipo tuerto, con su llamativo parche en el ojo, gordo y calvo, parecía más un amo que un celador por el peso y la edad. El otro mantenía un semblante serio, su mirada me aterraba más que su piel oscura. Dejé de mirarles cuando me acercaba a ellos, manteniendo mi mirada fija en el suelo, pero controlándoles por el rabillo del ojo.

Cinco vueltas... Jamás he corrido tanto seguido en mi vida... No llevamos ni una y siento como si me ahogara. No sabía bien que me pasaba. Mi cuerpo aguantaba, pero la respiración se me iba entrecortando. Aún así, continué corriendo, vuelta tras vuelta. Sentía como mi corazón bombeaba con fuerza y quería salir de mi pecho. Cada vez me faltaba más aire. La imagen de un pez sacado del agua, dando bocanadas se me vino a la cabeza de golpe.

En la tercera vuelta comencé a notar los efectos del viaje sobre mi cuerpo. La musculatura de mi cuerpo se había endurecido y ahora dolía a cada paso, a cada movimiento. Traté de centrarme en mis piernas. Dolían, pero tenían fuerzas para seguir. Al pasar junto al tuerto no pude evitar lanzarle una mirada de agadecimiento, recordando que no nos hizo pasar hambre y que por eso ahora mi cuerpo me sostenía. Inmediatamente retiré la mirada y continué mirando al frente.

Ya iba quedando menos, para que mi corazón saliese disparado por mi boca y acabase tirada en el suelo, como el pez fuera del agua que había imaginado, dando mis últimos coletazos y bocanadas, tratando de coger algo de aire. Aún así corrí, el cuerpo respondía, el aire no... Debía centrarme en respirar...

Notas de juego

 

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05/06/2016, 22:52
Roma Victrix

Todas corréis al son de los gritos de Vara mientras los demás celadores se reparten el trabajo con el resto de gladiadoras. Algunas son mas veteranas y veis como su entrenamiento no es solo correr.

Algunas hacen ejercicios en las barras fijas , otras levantas gruesos sacos para llevarlos hasta un lado para luego volver a por otro mas pesado. Incluso veis como Nastasen apremia a algunas a " ver cuanto consiguen aguantar la respiración en las tinajas de agua sucia"

Las mas veteranas están con Gladius repitiendo movimientos con espadas de madera o bien repitiendo movimientos de lucha, agarre, y presa.

Vara es el encargado de enseñar a otras las zonas vitales del cuerpo mientras explica la lección de la forma mas dura posible: golpeando dichas zonas vitales con la vara a las no tan nuevas. Algo que ya os llegara mas adelante

 

Tras las cinco vueltas, alguna estáis medio muertas y otras puede que incluso la carrera no haya sido tanto para vosotras. Pero para cuando termináis ya es demasiado tarde. Vara os reúne a todas y os lleva a las celdas. Es la hora de descansar, pensar y , porque no... hacer nuevas amistades lejos de los celadores.

Al fondo de la zona de entrenamiento, hay unos barracones de madera bastante toscos pero muy resistentes. Alli estan las celdas. En cada celda hay dos camastros, por lo que estáis juntas de dos en dos, pero los barrotes de madera os hacen que podáis comunicaros con el resto sin problemas.

Lo curioso es que, pese a ser una celda, posee comodidades de un barracón de guardia: Camas con mantas, almohadones y sabanas limpias. Mosquiteras cerca de las camas y unas mesillas individuales para cada pareja de esclavas. Pero como en toda prisión, los grilletes no desaparecen. Todas tenéis una pierna encadenada con la cadena larga, y esta a su vez a una argolla clavada en una piedra. Si bien os dan buenos lujos, no quieren, sin embargo, que escapéis.

El sol pronto se ocultara y la luna tomara su relevo. Ahora que estáis todas juntas, podréis confraternizar.. si no estáis demasiado cansadas para ello, puesto que sabéis que al día siguiente, el día sera mas duro que el de hoy.