Partida Rol por web

Apenas al llegar el lugar se encontraba a reventar de gente, el aparcadero lleno de motos y diferentes insignias se habían dado cita en aquel lugar, varios ojos voltearon hacia Aurora mirándola con desconfianza mientras daban sendos tragos a sus cervezas que corrían a borbotones entre tarros y botellas por entre aquellos rudos mortales, la mayoría se encontraban armados, otros más eran reconocidos cazarecompensas que habían sido invitados deliberadamente por el mismo Azrael Trent y su equipo de logística.

Al fondo del lugar en una mesa un poco apartada varias carcajadas y choque de tarros se escuchaban alegremente por encima de la estridente música metalera que embargaba aquel lugar resguardada por varios moteros y una fila enorme de gente esperando pasar.

Azrael Trent firma un par de autográfos en el pecho de una voluptuosa mujer la cuál se le insinúa descaradamente mientras que otras personas esperan emocionadas para poder tener acceso hasta con el famoso cazador, dos corpulentos hombres con chalecos de moteros comienzan a despejar la mesa cerrando el paso a la gente que quiere acercarse. 

Le guiño un ojo a la chica a la cuál le obsequio mi autógrafo mientras la retiran amablemente para llevarla a la barra, tal vez si me da tiempo tenga alguna cita con ella más tarde, vuelvo al trabajo, le doy un buen trago a la cerveza y en ese momento que Aurora ha llegado puntual a la cita, con la mano les indico a mis seguidores que la dejen pasar mientras termino de disfrutar la cerveza. 

Con el mentón y una amplia sonrisa le doy la bienvenida, mientras me dirijo al jefe de seguridad. -Nada de autográfos, necesito privacidad, tal vez más tarde, revisen el perímetro con el aurus y si encuentran a sus compañeros invítenlos a pasar, no quiero escándalos, que ya tenemos bastante con la maldita guerra que se está desarrollando afuera...- Hablo fuerte al oído del guardia aunque sé que los chupópteros tienen sus sentidos agudizados y escuchan muy bien aún cuando la potente música invada el lugar. Me dirijo a Aurora con una socarrona sonrisa y extendiendo los brazos hacia los costados del sillón, mientras los guardias moteros siguen tratando de contener a las seguidoras que quieren al menos un  autógrafo de mi parte.

-¡Ah!, la fama... para muchos es una terrible maldición, aunque si la sabes manipular tiene grandes ventajas.- Me acomodo al frente colocando los codos sobre la mesa y sosteniendo lo que queda de cerveza en la botella con una mano. -Con ustedes hay que tener mucho cuidado Aurora, sé perfectamente lo vengativos y traicioneros que pueden ser los de tu clase, tienen la eternidad para analizar una y otra y otra vez sus fallas y perfeccionar sus movimientos, saca lo que tengas de armas o explosivos y colócalos sobre la mesa, en cuanto acabemos ordenaré que te lo regresen, solo quiero asegurarme que haz venido en son de paz y a conversar tranquilamente el futuro de cientos de miles de almas en este territorio...- Me llevo un dedo al oído para señalarle un pequeño transmisor encendido. -Technomagia...- con el mentón señalo a la mesa contigua sin dejar de mirar a Aurora. -Algunos hechizos te fríen el cerebro en un tris... aún cuando sea un cerebro muerto...- trueno los dedos la frente haciendo énfasis a mi comentario mientras espero que mi invitada acate la petición que acabo de hacer.

Un hombre pelirrojo sonríe guiñando un ojo mientras levanta una mano haciendo la señal de paz con dos dedos hacia el saludo de Trent, una mujer con aspecto de hada oscura se arremolina melosa abrazando al mago desde la mesa contigua a donde se encuentra Azrael y Aurora en medio de aquel mar de gente.

Tiene un puto mago con él espero que tengan apagados sus puñeteros móviles. - le digo a mis compañeros mientras busco un lugar en el cual ubicarme con mi rifle de franco o en su defecto donde mezclar los químicos por si las cosas se descontrolaban.

El lugar está abarrotado, eso es bueno, demorarán más en salir, lo que quiere decir que pasarán aún más tiempo expuestos a mi perfume. - agrego con una sonrisa cargada de malicia.

No entraba ni un alfiler en ese local de moteros y me tengo que abrir paso entre esas bolsa de cerveza y sudor, lo que me recordó por que dejé de ir a sitios como ese.

Veo a Trent, es fácil, está como pez en el agua y por lo visto es famoso mas allá de por sus acciones contra nosotros, Supero el cordón de seguridad y me siento sin dejar de mirarle. Cuando hace referencia a la technomagia me cuesta mantener la serenidad. -Ya he tenido problemas en el pasado con magos, con un tecnócrata de la iteración X exiliado para ser exactos. Tiene gracia, bueno, en verdad no la tiene pero quiero decir que cada vez que hay una mago me veo en una situación parecida a esta. -Le devuelvo el guiño al mago.

Luego me concentro en Trent de nuevo y niego con la cabeza. -El loco de los explosivos es Chad. Que por cierto, cuando lo sueltes quiero que se le devuelvan a él también sus cosas, inclúyelo en el trato.- Sacó lentamente la Heckler & Koch P30L y la Ithaca con inscripciones en la culata y muescas en el cañón y las pongo sobre la mesa. También un cuchillo de combate. También y en gesto de buena fe dejo mi bandolera sobre la mesa, si alguien la revisa dentro encuentra que hay una ovillo blanco, un zippo y bien enrollado alambre de espino envuelto en cuero.

Hecho eso me vuelvo a atar la gabardina. -Limpia. -Sonrío falsamente -Bueno, vayamos directos al grano ¿En que cosiste esa tregua?

Mientras un elemento de mi equipo resguarda las linduras de Aurora en un saco de piel tratado le doy un último trago a la cerveza dejando la botella vacía a un costado, luego entrelazo mis manos al frente y me pongo serio.

-Por el Malky no te preocupes te aseguro que ha sido tratado bien desde que aceptaste la reunión, te lo regresaré con todo lo que traía encima.-Miro directamente a los ojos de aquella vampira. -¿Siempre eres tan desesperada?, ¡relájate!, saca el palo de tu trasero por un rato y escúchame, fui contratado por la familia del Alcalde Rubio, me ofrecieron una cantidad de dinero que no pude despreciar, al principio pensé que sería un trabajo en solitario y pagado por el gobierno, que sería para levantarle el culo al Alcalde disminuyendo la taza de violencia en esta mierda de ciudad, ya sabemos como se las gastan los políticos y ustedes, no era así, la madre del Alcalde fue terriblemente asesinada hace bastante tiempo, presuntamente por chupones, así que llamaron al exterminador, al mejor y mas caro por cierto. En cuanto llegué a México todo se torció, de inicio me di cuenta de que tendría que trabajar en conjunto con La Sociedad de Leopoldo, a ellos los trajeron los federales, esos bastardos,  nunca me han gustado sus métodos, interfieren con mis contactos y aliados.- Señalo con el mentón al mago. -Mi primer encuentro con su estirpe fue en El Dorado, un maldito Kiasyd, se me escapó por culpa de la estúpida metodología de la inquisición, perdimos al objetivo y les perdimos la pista por un buen rato, hasta que hace unos días nuestro representante santo fue aniquilado.- Me paso un dedo por el cuello en señal de decapitación. -Se adelanto en solitario a la misión y la Torre de Marfil lo despacho... imbécil.- Con un par de dedos le indico a una camarera de diminutos pantaloncillos que se acerque. -Whisky doble.- me dirijo a Aurora. -¿Deseas beber algo?, ay lo siento, recordé que hace mucho ya no necesitas de este tipo de bebidas espirituosas.- Sigo con la mirada las caderas de la chica y después continúo hablando. -Por azares del destino o porque a Dios le gusta divertirse torciendo todo, el Kiasyd cayó en la guarida del mago y por lo que supe ambos se entendieron muy bien y se hicieron buenos amigos, entre ambos descubrieron el meollo de todo esta farsa según lo que he conversado con el inmaculado.- Agradezco a la chica el vaso con whisky con una amplia sonrisa la cuál desaparece al regresar a la conversación. -Creo que la Camarilla está jugando con nosotros y hasta con los lupinos, según el mago y el kiasyd, a ustedes los están usando como carne de cañón para concretar una especie de antiguo rito y ofrenda azteca algo llamado "Guerra Florida" y a mí como distracción, usan mi fama en contra del Sabbat, una cortina de humo para los mortales, la Torre de Marfil tuvo que sacar del juego a la Sociedad de Leopoldo para continuar con sus planes sabiendo que a los exaltados no los puedes comprar como a mí.- Me encojo de hombros. -Que se le va a hacer.- Doy un sorbo al whisky y observo el vaso por unos segundos mientras lo giro con dos dedos.

-Jake está demente y el Kiasyd también por eso se entendieron, mi equipo de inteligencia corroboró los hechos que aportaron estos dos y concuerdan con esa teoría de que la camarilla está siguiendo un plan para hacerse de la ciudad utilizando a su favor a todas las piezas disponibles en el tablero y esos HDPTA tras bambalinas y sin ensuciarse piensan hacerse de este territorio en México despertando a un antiquísimo vampiro, el cuál fue venerado como deidad principalmente por sacerdotes y guerreros aztecas, un tal Mictlantecuchtli- ¡pffff!- una maldita locura como lo es todo esto a lo que nos dedicamos ¿No crees?.- De un solo trago termino el whisky doble y extiendo el vaso al frente levantando un dedo enfatizando la siguiente duda. -Sin embargo algo no cuadra en toda esta mierda, según mis informantes y el brief que nos dieron para esta cacería, el círculo interior de la torre envió desde Francia a un par de arcontes -hago una expresión como si me asustara- así es, la policía chupona de los camarratas, ¿Si ya tenían todo resuelto y las piezas en juego?... ¿Porqué demonios enviar a un par de arcontes a husmear a los suyos en un territorio prácticamente ganado con el alzamiento de un antiguo a favor de la Camarilla?, Dos, antes de pisar México estudié a toda la crema y nata de la corte vampírica de esta ciudad y vaya que son toda una telenovela, el anterior príncipe fue decapitado por los lupinos de esta zona en venganza a estos "Habsburgos" de pacotilla que a su vez habían decapitado al alpha de su tribu, luego de la caída del príncipe se alzó una nueva príncipe que por cierto ella y toda su primogenitura está desaparecida... o se ocultan muy bien a ya han sido enviados al infierno...- Me recargo en el sillón y niego con una sonrisa a la camarera cuando me sugiere otra copa de whisky tapando el vaso con una mano. -Tres, después del bombardeo en nuestro último encuentro confirmo mis sospechas, hay un traidor dentro de la camarilla que esta revolviendo el río para que nos destruyamos entre nosotros y dejarle el campo libre para quedarse con el "JackPot" llamado Regina.- Esta vez vuelvo a cruzar las manos al frente y mi rostro refleja la seriedad con la que estoy tomando este asunto. -Mi propuesta es la siguiente: yo no me cruzaré en su camino y ustedes tampoco interferirán en mi trabajo, no me gusta que me usen como peón en su estúpido juego de egos, por mí pueden quedarse con esta mierda de ciudad, sin embargo podemos de alguna manera "ayudarnos"...- doblo mis dedos índice y corazón de ambos manos en señal de guiño guiño. -...mutuamente en nuestros objetivos intercambiando información valiosa, mis investigaciones han arrojado que tu manada nada tuvo que ver con el asesinato de la madre del Alcalde y mientras no les pongan precio a su cabeza yo no tendría porque perseguirlos, este último ataque fue una trampa puesta por los federales para enfrentarnos al filtrarme datos de su posición, y para mostrar mi buena fe les advierto, su posición está comprometida, ya saben quiénes son y donde encontrarlos, lo que no sé es quién o que quiere quitarnos de en medio.- Hago una señal con el mentón al motero que tiene las armas de Aurora resguardadas en el bolso de cuero para que las vacíe nuevamente al frente de la mesa. -Perdí mucho en esta última escaramuza para nada y sinceramente te digo, Aurora, ustedes se encuentran en peor posición que yo en estos momentos, siempre lo he dicho, no hay peor enemigo de un vampiro que otro vampiro.-

Mientras escucho todo desde el techo, decido que lo mejor es suspender el plan del veneno, pues el cazador sabe demasiado y puede serme muy útil a futuro, así que vuelvo a colocarle la tapa a las 16 galoneras que aún no había mezclado y me preparo para dejar el lugar en cuanto liberasen al malkavian.

Mientras que espero la señal, me apresto a disponer de la mezcla en tanto reflexiono sobre que tan sensato sería buscar un encuentro privado con el cazador.

A pesar de la invitación a relajarme, no lo hago y es fácil para un no muerto poner cara de poker que es la que gasto mientras Trent cuenta todo lo que quiere contar, salvo cuando incurre en el el chiste fácil de la bebida y mi propio chiste. 

-¿Sabes que seguimos pudiendo coger, comer, beber y colocarnos? Aunque las dos primeras resultan muy desagradables cuando trasciendes y las otras dos, pues son distracciones y vestigios de humanidad. Es decir... yo estoy un peldaño o dos en la escala evolutiva. No me alimento de lo mismo que tu, de la misma manera que no comerías alpiste para aves o te cogerías a un perro... Lo miro acusatoriamente y luego finjo asco -O quizá si... -Dije para romper el hielo si quería que fingiese que estoy cómoda con la situación. 

-Menuda historia... Por donde empiezo...  

Me ofreces un pacto de no agresión y compartir información... -Tamborileo sobre la mesa con dos dedos mientras lo pienso brevemente. -Puedo aceptarlo, no hay nada en nuestro código de secta ni en el mio personal que impida sacar provecho de los mortales y la palabra mutuo ni se menciona.  Además el Sabbat existe en buena parte para salvar al mundo de los antediluvianos y ambos formamos parte de ese mundo. 

Suelta a mi chico con sus cosas y cerramos trato. -Saco de un bolsillo un pequeño vial de color rojo sangre para ponerlo sobre la mesa y ofrezco mi mano, mas fría que la cerveza o que se tomó para estrecharla.  -Yo me quedo hasta que terminemos de hablar y aunque no tengo una respuesta exacta a tus preguntas si puedo darte cierto enfoque o piezas del puzzle y con eso consumamos nuestra tregua.

Una sonora carcajada hace que mas de uno de los moteros y mujeres presentes se giren hacia mí para también sonreír aunque no sepan que me ha causado tanta gracia.

-Lo único que evoluciona en los de tu especie es el grado de autoconfianza y desprecio por la humanidad que los vio nacer y de la cuál fueron extirpados de manera voluntaria o no como un grotesco tumor maligno, ustedes se creen seres superiores cuando no son más que cadáveres animados con habilidades compradas, ¿pero a que precio?.

Aunque no lo digo pienso que Aurora y toda su subespecie son poco mas que maniquíes autómatas que se la pasan jodiendo a la humanidad divirtiéndose de paso con su comida,  en vez de evolucionar se han degradado uno o dos peldaños en la escala evolutiva, de ser humanos pasan a convertirse en objetos renegando de su verdadero creador, la vida.

-Se asemejan más a una silla, un objeto que con la intención adecuada se puede convertir en arma, la silla puede ser más resistente que un ser vivo, claro que la silla tiene una función específica, además la silla resiste la luz solar, dos puntos para la silla, ellos solo son enormes sanguijuelas enfundadas en trajes humanos robados que todo lo que tocan lo corrompen.-

Me encojo de hombros -No estamos aquí para debatir el porque mientras ustedes nos ven como alimento, unos cuantos que conocemos de su existencia los percibimos como parásitos.- No me pasa desapercibido el vial con el extraño líquido parecido a una muestra de sangre que ha sacado Aurora de entre sus pertenencias, me quito un guante y le extiendo mi mano para estrechar la de Aurora permitiéndole ver uno de mis tatuajes bendecidos del ojo de Dios plasmado en el dorso de mi mano. 

-Hecho, te enviaré la ubicación en donde dejaremos a tu personita especial una vez que finalicemos nuestra charla.- Muevo mi cabeza a un lado para dirigirme a Jake y a su acompañante y con una seña invitarlos a la mesa, luego me dirijo a Aurora nuevamente. -Puedes invitar a tu manada a la mesa, estarán más cómodos que escuchando a través del manos libres.- señalo con el mentón el bolsillo de la gabardina de kevlar desgastada de la ductus donde resguarda su móvil encendido. -Además creo que el mago tiene mucho que contarnos sobre la ciudad de Regina, Jake ha radicado y por ende estudiando por mucho tiempo este territorio, creo que es una pieza clave en toda esta mierda.-

Estamos de acuerdo en que no llegaremos a un entendimiento en ese tema ni tenemos tiempo para debates filosóficos. 

Sonrío para disimular la incomodidad que supone estrecharle la mano. El apretón es firme y con la misma fuerza que aprieta el. 

-El puño de Dios... no es fácil hacerse con eso, lo habia visto en libros pero la primera vez que lo veo en persona. Sinceramente creí que saldría ardiendo. -suelto el apretón para confirmar que no hay quemaduras pero conociendo a Chad, a él si que le habrá dolido. 

Niego con la cabeza ante la invitación. -No entraríamos todos y te faltaría almacén para las armas y explosivos. Seguiremos como hasta ahora que la conversación va fluida y parece que nos estamos entendiendo. 
Tengo que hacer hincanpié en que si estoy aquí es por Chad. Si no tengo garantías mas allá de tu palabra de que lo soltarás o no lo has matado ya esto no va funcionar y parece que los dos queremos que funcione. 

-Me recuesto en el asiento -Vamos, estoy sola, desarmada y rodeada. ¿Te preocupa que escape? Suéltalo, que me llame confirmando que está bien y podemos ponernos a trabajar. Quiero verte trabajar y ver si tu fama es merecida. -Sonrio.

El derrotero de la conversación me lleva a detenerme justo cuando me disponía a vaciar la primera galonera con la mortal mezcla, pues algo me decía que la conversación aún podía complicarse, así que decido esperar un poco más antes de tirar la mezcla y por si acaso preparo dos galoneras extra.

Zack escuchaba todo desde las cercanías del local, estaba lo suficientemente lejos como para no ser visto en los alrededores, pero lo suficientemente cerca como para almenos ver una de las ventanas del sitio por si necesitaba meter un sudario dentro.

Cuando escucho la referencia al manos libres activo de la Ductus, Zack pensó inmediatamente que la habían requisado y encontrado, pero al parecer el cazador no tenía problemas con eso, más bien quería a toda la manada adentro... Cómo si fuesen todos tan pendejos para entrar a la boca del lobo.

-¿Puedo acompañarlos?- Se acerca a la mesa Jake tomando de la breve cintura a su acompañante femenina de orejas puntiagudas mientras que ella le pasa la lengua por el cuello sin dejar de mirar al cazador.

El mago se dirige a Aurora gentilmente con un marcado tono ingles. -Le sugiero de la manera más atenta joven colega que desactive su aparato transmisor ya que su presencia activa pone en peligro a todos los que compartan las ondas electromagnéticas que este generando, todos serán un gran faro en medio de esta vasta oscuridad...-Jake hace un teatral movimiento con la mano que le queda libre. -Le hago de su conocimiento de que muy posiblemente no soy el único mago involucrado en esto... hay más Tremeres jalando los hilos y su acción está poniendo en peligro a sus respetables hermanos de manada afuera de este recinto.-

Asiento con el mentón al mago y le sonrío a su acompañante luego me dirijo a Aurora.

-Soy de los pocos mortales que aún conocen el significado del honor, no soy tan imbécil como para tenderles una trampa cuando algo más horrendo y gigante está por tragarnos a todos. Este lugar está protegido por un Aurus, cortesía de nuestro amigo mágico. -Señalo al mago con una mano -Tus hijitos se están exponiendo allá afuera y están delatando mi posición echando por tierra la ventaja de la sorpresa.- Mi rostro se torna serio y cierro un puño acercándome más a la mesa. -Ordénales que se larguen o que ingresen, me da igual, nos estamos jugando el todo por el todo, no cometas el mismo error que el agente Belmont.-

Vuelvo a relajarme y sonrío recargándome en el sillón nuevamente.

-Por otro lado, si hubiera despachado a lo más profundo del infierno a tu Chad ya hubieras experimentado tú o tus hermanos ese vacío que les produce sus corrompidas tradiciones Sabbat cada vez que un miembro de manada es enviado directo al abismo, como te dije no debes preocuparte, se encuentra bien, un poco abollado de la cara y seguramente bastante hambriento pero aún esta completo y quietecito, las cosas no son tan simples, Ductus, el Malkavian es mi único seguro de vida ante una posible sed de venganza por parte tuya o de tu secta, incluso de él mismo una vez liberado y hay cosas mas importantes que hacer, por cierto, así que digamos sola, sola, no estás, trajiste refuerzos, afuera hay más gente Sabbat, otra manada- Señalo hacia atrás con el pulgar indicando el aparcadero de motos- atenta a la espera de que muevas un dedo para atacar este lugar, no se los recomiendo, sin embargo creo que también conoces el significado del honor.-

Miro fijamente a los ojos de Aurora para después compadecerme de una chica la cuál se muere por un autógrafo, hago una pausa tomando el bolígrafo que me extiende para firmarle una foto impresa y después la despido con una sonrisa, me solicita otra foto con su móvil por lo que me pongo en pose para una selfie, sin voltear a ver a Aurora añado -¿A cuantos cazadores vivos haz conocido que hayan logrado la captura de un vampiro Sabbat y le hayan permitido seguir adelante con su no vida?- mientras recibo un dulce beso en la mejilla como agradecimiento mientras la chica es retirada por uno de los moteros asignados a la seguridad.
 

Al mismo número de cazadores que ofrecen treguas entre bombardeos, que son mas que los cazadores que se han enfrentado a un quinta o cuarta generación y han sobrevivido. -Respondo minimamente divertida. 

La mención de otros tremere hace que se me escape una mirada asesina al mago pero queda en una anécdota.

-Si, así es, hay mas manadas ahí afuera y de haber querido me habría traído a todo el sabbat de la ciudad solo con prometerles tu cabeza como botín y mi reconocimiento. Pero solo están para asegurarse de que te arrepientes de tomar una mala decisión, ninguno es tan rápido como para evitar mi muerte estando yo aquí dentro rodeada.

Se lo que es el honor. Como líder de grupo tengo una responsabilidad con mis hermanos, una cuestión de honor y principios, no matarán por mi si no estoy dispuesta a morir por ellos. Así que... te lo pido amablemente por última vez, suelta a Chad y que se reúna con sus hermanos, me quedo aquí con vosotros, doy la orden de que se vayan a tomar por culo, apago el teléfono y avanzamos en el tema.

Finjo un suspiro y le señalo con el dedo.

Te dije "Suelta a mi chico con sus cosas y cerramos trato" y tu me estrechaste la mano.  Predica el honor con el ejemplo cumpliendo tu palabra, yo cumpliré la mia y juntos de daremos por culo a ese matusalen y a los capullos que han intentados matarnos. 

La pelota está en tu tejado.

Al escuchar las palabras del mago apago el móvil y retiro el chip, quedaría desconectado de la manada pero me encontraba en una posición elevada lo que me daría cierto tiempo para reaccionar.

Espada en mano observo la basta noche sin percibir ninguna amenaza.

Desde lo alto de aquel edificio observas una especie de ágiles sombras que se deslizan por entre la gente sin que esta note su presencia dirigiéndose a diferentes posiciones, tal vez a donde se oculta Biff, Zack y Cutter afuera del bar.

De pronto sientes en tu espalda el agudo filo de una katana la cuál abre en una línea perfecta primero la ropa y luego tu piel, un pie te empuja al frente obligándote a caer apoyándote en una sola rodilla, al girarte observas una menuda figura femenina enfundada en una armadura ninja en color negro con protecciones en kevlar y con todo el rostro totalmente vendado en color negro también, en vez de cabello una larga estola oscura flota al viento.

Lentamente sujeta la katana con dos manos, la levanta brevemente en señal de saludo y enseguida adopta una posición de combate colocando su afilada arma en posición vertical apuntando a Carlos Torres.

Abajo las risas y motores de motos se enardecen continuando con la velada como si en las alturas de aquel lugar no pasara absolutamente nada.