Partida Rol por web

En esa parte de la ciudad las casas eran viejas, de ladrillo vista, con los balcones oxidados, y entradas con escaleras. Todo sucumbía a la oscuridad de la noche cerrada y entre las sombras, sobre los tejados, una sombra más oscura aún, pasaba furtiva saltando de una azotea a otra, parandose de vez en cuando y luego continuando su marcha y tras aquella negrura, unos ojos indagadores buscaban algo. Al fin la sombra se detuvo en lo alto de un viejo edificio que parecia estar abandonado desde hacía mucho tiempo. La sombra se abalanzó sobre el vacío, desplegó unas grandes alas oscuras, y planeando silenciosamente sobre el horizonte tomó la forma repentina de un gran murcielago negro. 

El Doctor Nolan North era la clave y quizás la respuesta de lo que había sucedido. No habia sido sencillo seguir su rastro despues del accidente. El enigmatico Doctor habia sabido ocultarse bien, quizás demasiado bien para ser un simple científico. Nolan North era, sin duda, una tapadera, el disfraz de un nombre falso que ocultaba algo más, algo que, en su día, había pasado desapercibido a Batman. Pero nada escapa a los ojos del murcielago, nada pasa en aquella ciudad de lo que él no pueda enterarse. 

Describe como entras en el edificio.

El vuelo llevó a la figura oscura a la azotea del edificio abandonado. Ya había localizado desde el aire la mejor manera de entar, por lo que apenas tocó suelo se movió rápidamente hacia la puerta abierta. La que daba acceso a los pisos inferiores.

El caballero oscuro se tomó un instante para asegurarse de que no había nada ni nadie que le impidiera la entrada y se fundió en las sombras del interior.
No era imposible detectar a Batman cuando él no quería, pero pocas personas eran capaces de hacerlo.

A pesar suyo se encontró pensando en Dick de nuevo. Quizás tendría que contarle todo lo que había pasado. Pero no podía, no ahora. Dick lo comprendería. Tenía que hacer esto él solo. Sin poner en riesgo a nadie más.
Su mente analítica tomó el control y se preparó para los posibles escenarios que se encontraría. ¿Estaría North solo? ¿podría razonar con él? ¿Encontraría las respuestas que necesita?
 

Vacía. La planta de abajo estaba completamente vacía. Los tabiques habian sido tirados años atrás y todo el mobiliario retirado, vendido o robado. Parecia que en un tiempo atrás fue alguna clase de almacen, ahora abandonado a su suerte. El lugar estaba alejado de las calles principales y de miradas indiscretas. Un lugar perfecto para esconderse. Batman descubrió sin demasiado esfuerzo el claro rastro de pisadas que, desde la misma puerta por la que había entrado, ascendían por unas viejas escaleras. Desde luego era evidente que alguien habia pasado por allí. El murcielago subió despacio, atento a cualquier ruido que delatara la presencia de alguien y llegó asi hasta una planta superior y que, en otro tiempo, fueron las oficinas del almacen. No tardó en descubrir en una de ellas sintomas claros de habitalidad. El estrecho lugar habia sido preparado como un pequeño apartamento. Habia una cama, sillas y una mesa tipo estudio y alguna lampara. Todo muy antiguo y algo destartalado pero sin duda allí vivía alguien. ¿Era aquella la guarida del doctor?

El murcielago se acercó sin hacer ruido a la mesa. Como era habitual sus sospechas habían resultado ciertas. Allí vivía alguien. Esperaba que fuese el doctor, pues tenía mucho que explicar.

Pese a todo no bajó la guardia. pues si allí vivía alguien, el dueño de todo eso podría andar cerca. Aunque no era facil esconderse a su aguda percepción, tampoco sería la primera vez.

Pero esta vez había demasiado en juego. Necesitaba encontar a Nolan. Él tendría los conocimientos que necesitaba para librarse de lo que le atormentaba. No podía perder el control.

La mesa está cubierta de papeles, cuadernos manuscritos, libros cientificos de diversas materias, algun mapa de la zona y cosas por el estilo. Todo está muy desordenado y no parece más que un monton de papeles acumulados sin más durante unos meses. Los libros de ciencia son de un nivel de conocimiento bastante alto, dificiles de conseguir y no al alcance de todo el mundo. Al mover los documentos un pequeño frasco de pastillas cae al suelo. Al recogerlo, observas que se trata de Diazepam, un medicamento con varios usos, pero sobre todo para calmar estados de ansiedad y espasmos musculares. Hay más medicamentos pero están sin etiqueta identificativa por lo que es dificil saber su origen y proposito.

El estado desordenado no cuadraba con el caracter de Nolan, hasta que encontró las pastillas. Al parecer estaba también bastante nervioso y necesitaba tranquilizarse.
Quien sabe, lo mismo también había sido impregnado del gas que afectó al murcielago.

Con esos pensamientos, el caballero oscuro se dirigió a las demás oficinas. En silencio, alerta a lo que pudiera pasar.

Al salir de nuevo al pasillo, Batman, tropezó con una sombra furtiva que se alargaba sobre las paredes sucias y luego el sonido de unos pasos que se detenían en seco. Al otro extremo del pasillo, una silueta recortada, solo una forma vaga a los ojos de Batman. Fuera quien fuese se quedó muy quieto y tras una breve y tensa pausa habló

- Sabía que tarde o temprano aparecerías Batman.- la voz era ronca y agrietada. 

La persona que se acercaba a la habitación de la que salía Batman le habría podido pillar por sorpresa si el caballero oscuro no hubiese estado atento.
No obstante no reconoció la voz. Podía ser la de Nolan, o la de cualquier otro. Estaba demasiado ronca y quebrada para poder identificarla. Aunque parecia que la sombra sí que le reconoció a él.

Bien. Ya me tienes. Ahora hablemos de lo que sucede aquí. He visto que tienes problemas, si me dejas puedo ayudarte.

-¿Problemas? - la sombra dio un paso adelante y la luz que entraba por un tragaluz superior iluminó un rostro desfigurado por terribles quemaduras y cicatrices. La piel habia desaparecido por completo para dejar al descubierto una grotesca amalgama de musculos que se movían y palpitaban a cada gesto, a cada palabra. 

-¿Ayudarme? No me hagas reir. Si ni siquiera puedes ayudarte a ti mismo ¿Como vas a ayudarme a mi? ¿Es que aun no entiendes lo que pasó aquella noche? ¿Acaso no ves sombras que te hablan en mitad de la noche? Yo las veo. Cada dia. A todas horas. ¿Que me dice que no eres una de esas sombras que me acechan? Y lo peor de todo Batman ¿Que te hace pensar que yo no soy mas que una sombra que está en tu mente?.-

A pesar del rostro desfigurado, Batman no se impresionó. Hacia falta mucho más que eso para intimidar al señor de la noche. Las palabras de Nolan, pues ahora estaba seguro de que era él, trataron de minar la confianza del caballero oscuro. Pero su voluntad era inquebrantable, su ferreo determinamiento no iba dejar que alguién así sembrara dudas en él.

Dr. North, hable conmigo. ¿Qué fue lo que pasó aquella noche? ¿En qué estaba trabajando? Venga conmigo y aclaremos todo esto. Conozco gente que puede ayudarle.

- Si te contara algo de lo que se, sería hombre muerto Batman. Mírame ¿Crees que podria ir a algun sitio sin que la gente se diera la vuelta para mirarme? ¿Crees que vivo aquí encerrado por voluntad propia? - Nolan parecía realmente afectado y preocupado. Habia algo que pesaba sobre su cabeza. Una amenaza mayor incluso de la que podria suponer el propio murcielago. Pero ¿Que era?  Kane habia muerto y Dent estaba en tratamiento ¿Quien más sabia de éste asunto? ¿Quién tendría interés en mantener en secreto sus experimentos?

Batman parecia relajado, pero en realidad estaba en tensión. Notaba que Nolan se ponía cada vez más nervioso, podría atacarle en cualquier momento. Pero si había alguna oportunidad de hallar una solución pacífica y que fuera con él por propia voluntad sería todo mucho más llevadero y facil.

¿De quién tien miedo dr. North? Digamelo. Puedo protegerle. Puedo llevarle a un lugar seguro donde pueda trabajar en una cura sin que le molesten.
Es usted un hombre de ciencia y raciocinio, piense en ello.
Dejeme ayudarle.

- No lo permitirían. Hay mucho en juego. Demasiado.- Nolan agachó la cabeza. Parecia realmente apesadumbrado por aquella situación y sobre todo, Batman pudo ver el miedo reflejado en el brillo de sus ojos. Un miedo verídico y real. Un miedo que reconocía perfectamente. 

Entonces un silbido cortó el aire.

Cristales rotos. 

El sonido de una bala incrustándose en la carne.

Nolan cayó al suelo llevandose las manos al pecho, la espalda apoyada en la pared y la sangre brotando de una herida cerca del corazón. El murcielago detectó enseguida que era una herida mortal. A Nolan solo el quedaban unos minutos de vida. El disparo procedía de un edifcio contiguo. Casi 200 metros. La bala habia atravesado varias cristaleras. Era el disparo de un experto sin duda. A través de las ventanas fracturadas,  Batman localizó una sombra moviendose en el edificio del que salió la bala. El tirador huía del lugar. ¿Que hacer? Si perseguía aquella sombra Nolan moriría y perdería la oportunidad de preguntarle.