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Harry Potter: Secuelas

5.- El destino del mundo mágico

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27/06/2014, 21:28
Narradora

Uno de febrero. Solo han pasado siete horas desde lo sucedido en el bosque prohibido y los ánimos están bajo mínimos. Todo el alumnado se encuentra en el Gran Comedor y la directora, intentando no romper a llorar, les contó a todos los presentes lo sucedido en la noche pasada. Contó que Leonard O'Connor había perdido la vida en el bosque prohibido. Poca información les contó pues lo más trascendental estaba dicho. En pocas horas tendría lugar el funeral y tal y como quiso la familia O'Hare, sería en el colegio.

Así pues, en medio de una atmósfera de tristeza y miedo, el Gran Comedor quedó en silencio. Nadie desayunaba y muchos, que les conocían lloraban - unos de manera más silenciosa que otros- y en ese momento, Kaitlin O'Hare, a quien no habían visto aún tras lo sucedido hacía su entrada en el Gran Comedor, acompañada por sus hermanas mayores que habían ido a apoyarla en cuanto se supo.

Laura, con los ojos vidriosos, miró a Kyle, como queriendo que le dijera que aquello no era cierto. Duncan abrazaba a Eve para darle su apoyo y le preguntaba si estaba bien.

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27/06/2014, 21:40
Narradora

Los Slytherin implicados disimularon bastante bien; no obstante, no pudieron hacer más que mirarse con disimulo y evitar mostrar orgullo por su exitoso plan. Zac sujetó la mano de Carrie, que bien podía ser un gesto de apoyo, cuando realmente era uno de felicitación.

Deirdre continuaba con su expresión seria, impasible.

Zac:- Tenemos que hablar luego. A solas y después todos.

 

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27/06/2014, 22:37
Kaitlin O´Hare

Siete horas. Ya habian pasado siete horas desde aquel momento en el que abracé el cadáver inerte de Leo entre mis brazos. Siete horas desde aquel ultimo beso. Siete horas desde que mi corazon y mi alma se quebraran, desde que mi mundo se viniera abajo y mi vida se sumiera en la más profunda oscuridad.

No podia creermelo. Aun no podia creermelo. Ni cuando lo trasladamos al colegio, ni mientras lo velé, contemplandolo alli, con los ojos cerrados, como si estuviera durmiendo, como tantas veces lo habia hecho a mi lado antes de aquella maldita noche.

Solo siete horas, y ya se me habia hecho eterno, insoportable, imposible. No, no podia concebir mi vida sin el. Ya lo sabia antes de que aquello ocurriera, y su muerte no fue más que la confirmacion de que aquello que sentia era fuerte y verdadero.

Apenas habia tenido tiempo de darme una ducha, practicamente obligada por mis hermanas, y de dejar que Albert le echara un vistazo a mis dedos, que habian quedado destrozados en aquellas rocas que tan desesperadamente habia intentado escalar. El resto del tiempo lo habia pasado junto a el, dedicándole aquellos ultimos momentos a su lado, hasta que no me quedó mas remedio que apartarme de su lado, y de hacer frente a lo que estaba por venir.

Me vesti de negro, de un riguroso y lapidario negro. En el cuello, reluciendo sobre aquel vestido, llevaba la cadena de plata que Leo me habia regalado a principio de curso. Sin embargo, los dos anillos que solian colgar de ella ya no estaban alli. Uno lucia ahora en mi mano derecha, y el otro, en la de Leo, donde lo habia puesto yo misma antes de marcharme de la habitacion. Algo que quizas para el resto careciera de sentido, pero que para mi sellaba un compromiso. Uno de por vida con el.
Aparte de eso, llevaba las gafas de Leo, aquellas gafas sin las que nunca iba a ninguna parte en la mano, apretadas contra mi pecho y su varita en el antebrazo, por dentro del vestido, como a el siempre le gustaba llevarla.

Cerre los ojos unos instantes, cogiendo aire, antes de entrar en el Gran Comedor. No estaba preparada para aquello, ni de lejos, ni siquiera notando el abrazo de mis hermanas, que me escoltaban , sin separarse de mi, como temiendo que fuera a derrumbarme de un momento a otro.

Y quizas no iban tan descaminadas. En cuanto crucé aquella puerta, comencé a encontrarme mal. Tenia el estomago revuelto y estaba mareada. Era como si hubiera perdido la nocion de la realidad, de lo que sucedia a mi alrededor. Oia las voces de mis hermanas distorsionadas, animandome y dandome consuelo. Y, mientras caminaba, mi vista se clavo en su sitio, en ese lugar que ahora estaba vacio y que no volveria a ocupar jamas. 

Me detuve alli, unos segundos, en los que luché contra mi misma para no volver a romper a llorar, algo que no habia dejado de hacer desde hacia siete horas. Y lo consegui, a duras penas, a pesar del inmeso nudo que habia en mi garganta y de mis ojos rasados. Y, en lugar de detenerme alli, segui andando hasta el final de la sala, hacia un lugar en concreto: el lugar en el que estaba la directora McGonagall.

No me importo estar donde estaba. No me importaron sus intentos por permanecer entera en aquella situacion. No me importo que el comedor estuviera a rebosar.

La abracé. Cerre los ojos y me abracé a ella, echandome a llorar nada mas hacerlo. Era la tia de Leo. La unica persona de su familia sobre la faz de la tierra y sabia como se sentia en aquel momento, al igual que ella sabia como me sentia yo.

Y alli, en aquel momento, para mi, eso era lo unico que importaba.

 

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28/06/2014, 11:06
Minerva McGonagall

La directora aceptó el abrazo de Kaitlin con manos temblorosas, sujetando a la chica con fuerza entre sus brazos mientras sus ojos, por primera vez en público y frente a todos sus estudiantes, derramaban lágrimas de profunda tristeza y culpabilidad.

¿Por qué tuvo que ofrecerle aquellas misiones tan peligrosas? En aquellos momentos y tras tantos años y momentos vividos, Minerva se preguntó si realmente la lucha contra el mal tenía sentido. ¿Acaso no era mejor vivir subyugado pero vivo al fin y al cabo? Si hubiera decidido aquel camino, ¿cómo se habría sentido? Leonard estaría vivo ahora mismo, ofreciendo su eterna sonrisa a todo el comedor. Pero él tampoco habría querido aquello. Jamás se habría conformado con vivir prisionero.

Minerva abrió los ojos y creyó ver frente a ella a su sobrino, de pie, sonriendo y asintiendo.

- No podemos rendirnos. O sino la muerte de Leonard habrá sido en vano. Debemos ser fuertes, Kaitlin. Se lo debemos.

Y en aquel instante, un par de personas comenzaron a aplaudir siendo seguidas por el resto. El Gran Comedor se llenó de un aplauso silencioso en memoria de Leonard y en señal de respeto por Kaitlin.

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28/06/2014, 15:06
Oliver Carrow

Nunca había visto el Gran Comedor de esa manera. Los alumnos sentados firmes y serios frente a platos impolutos. Ni siquiera los constantes murmullos eran capaces de llenar el vacío que se había instalado entre esas cuatro paredes. Oliver también lo sentía. Pero él lo sentía de verdad, no como esos estúpidos hipócritas con sus tristes caras a punto de echarse a llorar. Le ponían enfermo.

Hacía apenas unas horas que se había enterado de lo sucedido y, a pesar de no querer reconocerlo, todavía no había conseguido asimilarlo. Leonard estaba muerto. Todavía podía recordar su último encuentro, cuando les había dado largas par no ir zanjar esa apuesta de chupitos de juego que de nuevo habían pactado.

Sentía como si algo en su interior se hubiese roto, pero nada de eso se reflejaba hacia el exterior. Su rostro permanecía sereno y sus ojos barrían con lentitud y esmero todo su campo de visión. No había visto a Kaitlin desde lo ocurrido. Como si hubiese leído sus pensamientos, la Gryffindor hizo entrada junto a dos de sus hermanas. No se necesitaba más que mirar su rostro para entender el estado en el que se encontraba. Por un momento sintió el impulso de levantarse y acudir a su encuentro, pero se frenó en el momento oportuno. Su relación en los últimos meses no había sido especialmente buena, y nadie en el colegio había acabado de entender la amistad que les unía. Además, ahora que ya no estaba con Deidre sus funciones de cuñado habían quedado en un más que segundo plano.

Devolvió su mirada su plato y el de sus compañeros. Había más de uno empezado.

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28/06/2014, 15:34
Oliver Carrow

Leonard había muerto.

Un suceso inconveniente y útil a partes iguales. Bien era cierto que Leonard había sido siempre una buenísima fuente de información, recurso que había perdido casi todo su atractivo con los últimos acontecimientos. No iba a echar de menos su presencia, pero aun así había algo en su interior que le hacía manterse alerta: la reducida información de lo que había sucedido.

Envió una significativa mirada tanto a Jack como a Victoria y Nicholas. Nada pasaba en el colegio sin que él estuviese al tanto. Era el momento de ponerse en marcha.

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28/06/2014, 15:45
Carrie Lewis

Aquella había sido una noche muy larga para todos y aunque Carrie había logrado dormir un par de horas se la notaba cansada y ojerosa, aunque ni de lejos tenía un aspecto tan desastrado como el que pudieran presentar Kyle, Eve o, sobre todo, Kaitlin.

Carrie estaba ante su plato sin tocar, con la cabeza apoyada en el hombre de Zac, permitiendo que el chico le sujetara la mano a modo de consuelo. Pero se equivocaba. Ella no estaba triste. Tal vez abrumada y exhausta era la mejor versión. Incrédula quizás, de que aquella noche hubiera tenido aquel desenlace.

Había permitido que las palabras de McGonagall llegaran hasta ella como un bálsamo somnífero, cerrando los ojos sin dormirse y meditando cómo, aquella mujer que, al margen de cómo le cayera, había demostrado ser una persona competente, había animado a unos críos de diecisiete años a hacerse cargo de una misión que era tan peligrosa.

Sabía, con la certeza que da una ciega confianza en uno mismo, que ella no hubiera perecido. La venganza la animaba y la ausencia de escrúpulos por su parte le hubieran permitido hacer frente mucho mejor a la amenaza. Sin embargo había llegado la hora de calibrar a sus enemigos conforme a sus habilidades reales.

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28/06/2014, 16:05
Carrie Lewis

Carrie se limitó a asentir sobre el hombro de Zac, demasiado somnolienta como para pensar en nada más que no fuera acostarse. Las horas anteriores habían sido extrañas para ella, acompañada de un sentimiento de irrealidad. Había visto a Kaitlin hundirse en la desesperación a sabiendas de que ella había sido la causante y a los demás tratando de consolarla a pesar de saber que no había nada que hacer.

Había acompañado el cadáver de Leonard sabiendo que ella lo había matado. Su euforia se había ido apagando poco a poco y ella se había encerrado cada vez más en un impropio ostracismo. No se arrepentía, no necesitaba excusas. Pero acompañar a las personas próximas a la víctima siendo ella la asesina era complicado. Además, se sentía diferente y aquello la preocupaba, aunque no sabía si era una mera cuestión de excesiva autocontemplación o algo real. ¿Sería cierto que al matar el alma se fragmentaba?

Nunca había estado segura de querer matar y en aquel momento lo había hecho sin ser avocada a ello y sin sentir remordimientos. Y eso, sin duda, la había turbado un tanto.

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28/06/2014, 16:40
Kyle O'Brien

Estoy sentado con la mirada fija en mis manos y la mente puesta en el bosque. Sigo sin poder creerme que esto haya pasado, pero la pena no es el único sentimiento que me invade en este momento. En mi interior se fusionan una mezcla de miedo, odio y sed de venganza. Lo que más me frustra es que sigo sin saber quien lo ha hecho. En el bosque, Carrie parecía convencida de que el herido era Oliver, pero lo cierto es que nunca tuvimos ocasión de comprobarlo. ¿Cómo podía ser que al encontrar a Leo no hubiese nadie más en la cueva. Tenia que tratarse de alguien capaz de desaparecer se. Y si lo hacían sin licencia, sin duda el ministerio de magia podía averiguar de quien se trataba.

Levanto la vista, posando mis ojos ojerosos en Oliver, pero su expresión es impasoble. El muy capullo ni siquiera parece sentir pena. Hirviendo de odio hacia él, hacia lo que quería hacer y hacia lo que puede que haya hecho, estoy a punto de levantarme para decirle cuatro cosas bien dichas, pero justo en ese momento entra Kait acompañada de sus hermanas y decido que no voy a montar un numerito en mitad de un funeral. Y menos el de un buen amigo. Sin embargo, no puedo apartar la vista del Slytherin...¿habría sido capaz?

Notas de juego

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28/06/2014, 17:03
Eve Colleman

No podía creer lo ocurrido. Era imposible. Hacía unas horas estábamos todos juntos a punto de desvelar el misterio... Y ahora Leo no estaba.

Hacía rato que ya no lloraba. Llega un momento en el que, simplemente, el grifo se cierra. No por ello mi tristeza era menor. Abrazaba a Duncan igual que el me abrazaba a mí, y aunque agradecía sus palabras de conforte y cariño, no las escuchaba realmente. Era cómo un zumbido que pasaba cerca de mí pero no llegaba a penetrar. Del mismo modo, mis ojos no veían lo que ocurría. Era consciente de la entrada de Kaitlin, de su familia, del abrazo a la directora... Pero no lo veía.

Lo único que era capaz de ver en esos momentos no estaba frente a mí, sino en mi mente, pero era más vívido que cualquier cosa que me rodease. El resplandor. Ese resplandor que me había encogido el corazón. La vista de todos desde la altura. El cuerpo de Leo tendido, inerte, con la vista perdida en algún lugar del firmamento. Esa mirada...vacía. Sin vida. Muerta.

Estaba muerto y yo tenía parte de la culpa. Yo era la voz de la razón en el grupo pero no me había opuesto a seguir con aquella misión cuándo veía que se volvía más y más negra. No había convencido a los chicos que deberíamos dejárselo a la directora. No sólo eso. Me había dejado llevar y había caído en un juego peligroso, arrastrando a todos conmigo, intentando convencerme de que era lo mejor y que podíamos hacerlo. Y ahora, Leo estaba muerto.

De repente un sonido penetró en mi estado de trance. Eran...aplausos. Al levantar la vista pude ver a todo el comedor levantándose y aplaudiendo, rindiéndole homenaje a Leo. Su muerte... no sería en vano. Entre el ruido de los aplausos susurré unas palabras sólo audibles para Duncan, y tan sólo porque me abrazaba con fuerza.

Te voy a encontrar. Y vas a pagarlo.

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28/06/2014, 17:07
Narradora

https://www.youtube.com/watch?v=DZxMO1sDCTc

McGonagall se apartó un poco de Kaitlin, para mirarla a los ojos, secándole las lágrimas de las mejillas con dedos temblorosos. Era un adiós de lo más emotivo. Todo el colegio demostraba sus respetos al joven Gryffindor que había dado su vida por el bien de todos. Cada uno de los pertenecientes a Hogwarts le tendría en su memoria.

McGonagall decidió decir un par de frases más con el fin de finalizar el funeral del joven pues alargarlo solo produciría más dolor en los corazones de los presentes y del suyo propio. Sujetó de la mano a Kaitlin, colocándola a su lado de manera que estaban de frente, presidiendo la fúnebre ceremonia.

- No os voy a engañar, porque hacerlo sería deshonrar la memoria de Leonard. Él luchó por todos vosotros y fue asesinado a sangre fría. Tras el atentado de Halloween se unió a una peligrosa misión contra el lado de las sombras que intentan volver a cernirse no solo en el colegio, sino también en el mundo mágico. Así que intentad no olvidaros de él, porque no solo era un compañero leal, valiente, habilidoso y fiel que siempre tenía palabras de ánimo y nos hacía sonreír. También fue vuestro más leal protector. Él dio su vida para ofreceros paz y lo mínimo que podemos hacer es tenerle en el recuerdo y actuar en consonancia con su actitud. Sed fuertes, sed valientes y luchad por el bien. Siempre, por el bien.

Con aquellas palabras y tras una breve pausa, la despedida oficial a Leonard terminaba. Muchos de los alumnos se levantaron e hicieron un fila para presentar sus respetos a Kaitlin. Empezando por un desconsolado Peter, siguiendo por Laura, Aaron, Sean, Rose, Slughorn, Hagrid, Diggory, Liliana, Ian, Will, Bonnie, Cormac, Jackie, Katherine, Pomona Sprout... y un sinfín de personas.

Lo único que podía alentar los corazones de aquellas personas que tanto amaban a Leonard O'Connor era que siempre le querrían y una parte de él estaría a su lado instándoles a ser valientes y a luchar por lo que deseaban.

Hogwarts jamás se olvidaría de él.

Notas de juego

Si alguno de los pjs quiere acercarse a Kaitlin puede hacerlo y rolear que llega a ella ¿ok? No es obligatorio. Y tras ver vuestros posts ya veremos cuando paso adelante.

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28/06/2014, 17:31
Kaitlin O´Hare

Tras fundirme en aquel abrazo con McGonagall, escuche aquello que me susurraba, asintiendo. No contesté. Sencillamente, no podia hacerlo. Aquella sensacion de profunda desolacion, de desesperacion, se aferraba a mi garganta, y me sentia incapaz de pronunciar palabra.

Volvi a notar aquel vuelco en mi estomago, y todo comenzó a darme vueltas. Me aferré a McGonagall, camuflando aquel malestar en ese abrazo, mientras notaba como un sudor frio perlaba mi frente. Demasiado vivido, demasiada tension. Demasiada angustia me estaban pasando factura.

Sin embargo, a pesar de no contestar, la miré, en cuanto fui capaz de controlar todo aquello. Y mi mirada, ademas de una profunda tristeza, tambien transmitia algo mas. La pena me habia impedido pensar, en un primer momento, en quién habia hecho eso. Estaba demasiado destrozada como para buscar culpables. Sin embargo, siete horas habian sido suficiente para que aquello rondara tambien mi cabeza. Leo habia muerto por todos nosotros, por defendernos, por intentar proteger a todo el mundo de la amenaza que se cernia sobre nosotros. Y, sin embargo, pocos seriamos, en realidad, los que supieramos hasta donde habia llegado su entrega, y su sacrificio.

Acabe por separarme de McGonagall, aunque segui aferrando su mano, como si aquella mujer fuera lo unico capaz de mantenerme en pie y, por primera vez, mientras escuchaba aquel aplauso que hizo que la piel se me pusiera de gallina, me fijé en la sala. Vi a Eve, y a Kyle, junto a Duncan. Y a Peter, tan destrozado como ellos. Les dedique una mirada cargada de significado, mientras McGonagall hablaba de Leo, de lo que era, de por qué habia muerto. Tambien a Carrie, menos afectada, pero igualmente apoyando su cabeza en el hombro de Zac. La recordé, en aquel claro, y aquel resplandor verde, de repente, volvio a inundar mi mente, obligandome a cerrar los ojos unos instantes.

Y, al abrirlos, mi mirada se cruzo con él. Con Oliver, a quien llevaba sin ver desde hacia dias. Mis ojos se mantuvieron fijos en él, en una mirada desgarrada, llena de dolor. Habia sido su amigo. Habia sido mi amigo. Nuestro cuñado.

No sé cuanto duró aquel gesto. Ni siquiera sé qué fui capaz de transmitirle en aquel momento. Quizas intentaba saber qué sentia en aquel momento, quizas intentaba transmitirle qué sentia yo. No lo sé. Solo sé que era incapaz de apartar la vista de el.

Entonces, de repente, aquella improvisada fila de personas comenzó a acercarse a mi, profesores incluidos, con intencion de darme el pesame. Estaba exhausta, sencillamente exhausta, y la cabeza comenzó a darme vueltas de nuevo, haciendo que la realidad volviera a distorsionarse a mi alrededor.

No podia salir de alli. Era imposible. Y, sin embargo, la sensacion de ahogo, de que me faltaba el aire, era cada vez mayor.

Necesitaba respirar.

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28/06/2014, 17:57
Oliver Carrow

La ceremonia pasó más rápida de lo que en un principio esperaba. Cuando los alumnos se levantaron y empezaron a salir del Gran Comedor Oliver les imitó en un gesto inconsciente. No podía quitarse de la cabeza la mirada de Kaitlin y la amalgama de sentimientos que le había trasladado con ella. Tenía que acercarse a ella. Por eso, aguardó pacientemente su turno en la gigantesca cola que se había conformado delante de ella. Hasta que llegó su turno.

Se acercó a ella a paso lento y seguro. Podía sentir como la gente de su alrededor los observaba, incluso aquella que hasta ese momento había permanecido en sus propios asuntos. No le dio importancia. En esos momentos lo único en lo que podía pensar era Kaitlin. En que llegó a su altura dejó caer su mano en su hombro izquierdo en un gesto de compañerismo, apoyo y confianza.

- Encontraremos al responsable de esto. Aunque sea lo último que haga - el susurro, inaudible para el resto de asistentes, reflejaba la tensión e ira que en esos momentos se mantenían bajo control en el interior del Slytherin. Se tomó un par de segundos más antes de volver a incorporarse y romper el contacto con ella. Tras un último intercambio de miradas echó a andar hacia los terrenos de Hogwarts.

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28/06/2014, 19:51
Carrie Lewis

No había habido palabras por su parte la noche anterior y tampoco las había en aquel momento. Estaba bloqueada. Carrie era fría, cierto, pero en aquel instante era algo más que eso, simplemente no es que no tuviera nada que decir, era que no tenía palabras.

Abrió los ojos para mirar a Kaitlin, tan rodeada de gente y a la vez tan sola y triste, tan perdida, tan agobiada... Mirarla era abrumador en exceso. Volvió a cerrar los ojos, sintiendo como parte de aquel agobio era compartido por ella misma. Apretó levemente la mano de Zac, sintiendo el contacto tranquilizar contra la suya.

- Marchémonos...

No tardó en levantarse y prácticamente dejarse arrastrar por su compañero, aunque no escatimó una última mirada penetrante a Kaitlin antes de salir del Gran Comedor.

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28/06/2014, 20:08
Kaitlin O´Hare

Fui dando las gracias mecánicamente a todo aquel que pasaba ante, con alguna salvedad, como Peter, con quien compartir algun abrazo mas compungido. Ni siquiera era consciente de los rostros que pasaban ante mi. Me limitaba a cabecear, a extender mi mano para estrecharla con quien tenia enfrente, a corresponder los gestos de cariño con gestos de agradecimiento, sin saber realmente que estaba haciendo alli.

Hasta que llego el.

Oliver se detuvo ante mi, y mi mirada volvio a posarse en el. El corazon me dio un vuelco y, durante unos segundos, mi mano libre, la que no sujetaba las gafas de Leo, se cerro en un puño, que aprete con fuerza.

Ante, al mirarlo, habia intentando adivinar qué sentia en aquel momento, cómo habia encajado la muerte de Leo. Habiamos sido cuñados y amigos, despues de todo. Y, durante mucho tiempo, Leo y Oliver se habian tenido en gran estima el uno al otro.

Sin embargo, ahora, al tenerlo alli, delante mio, no pude evitar que mi mente volara a otro lugar.

Estabamos alli por tu culpa. Por tu puta planta. Por tus putos papeles escritos por ti. Por tu puta falsedad. Por tu puta traicion.

Leo y yo habiamos estado meses fingiendo ante Oliver, desde que descubrieramos aquellos papeles, desde que supusieramos que iria al bosque prohibido aquella maldita noche. Habiamos mantenido la compostura, como todos, aun sabiendo que, tal y como Deirdre habia predicho, no era quien decia ser, sino que se trataba de una criatura ruin y mezquina, un mentiroso y un cobarde.

Y aun asi, Leo no dudo en ir a buscarlo al pensar que podia estar herido... al pensar que aquella sangre podia ser suya, que podria correr peligro...

Lo miré, apretando la mandibula, mientras notaba como mi respiracion se iba agitando poco a poco. Cualquiera habria intentado encontrar rastro alguno de aquellas heridas, si es qeu las habia pero, para mi, era sencillamente imposible. No podia olvidar qué pretendia Oliver. No podia olvidar cómo nos habia traicionado a Leo y a mi, mintiendonos deliberadamente a pesar de todos aquellos años, a pesar de todo aquel cariño.

Entonces escuché aquella frase y me tense hasta el ultimo musculo. Encontrar al responsable. Hijo de perra. Si hubieras dado la cara nada de esto habria sucedido.

-Lo encontraré, Oliver. Creeme que lo encontrare.

Senti entonces que mis nervios y mi paciencia saltaban, como un resorte y que, de repente, me sentia incapaz de seguir escondiendo aquello que llevaba meses guardando, me senti incapaz de refrenar aquellas ganas de abalanzarme sobre el y golpearlo, hasta decir basta, por su hipocresia y su estupidez. Por haber conducido a Leo hasta la muerte.

Pero no pude, sencillamente no pude. De repente, una arcada me subio desde la boca del estomago, que habia terminado por revolverse del todo y, tambaleante, eche a correr en direccion a la puerta del Gran Comedor, imparable, mientras intentaba focalizar mi atencion y mis fuerzas en aquella puerta, pasando por delante incluso de Zac y de Carrie.

Y, nada mas llegar al otro lado, vomité en medio del pasillo, apoyandome en una pared con la mano, mientras notaba como todo daba vueltas a mi alrededor, sin poder evitarlo. 

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28/06/2014, 20:58
Kyle O'Brien

Tengo que reprimir los amargos recuerdos que luchan por salir en forma de lágrimas al oír las palabras de la directora Mc Gonagall, en honor a Leo. Como un autómata me levanto y me uno a la fila de personas que esperan para darle el pésame a Kaitlin, colocándome poco más atrás de Oliver. A pesar de que sé que en estos momentos ella debe de sentirse desbordada de pena y el hecho de que haya tanta gente ofreciéndole unas palabras, necesito darle yo también ese abrazo, mostrarle mi más sincero y profundo apoyo. 

Cuando Oliver llega hasta ella, le susurra unas palabras y puedo reconocer la expresión de odio y de asco en la pelirroja, que sale corriendo a la calle con unas más que patentes arcadas. En dos pasos me planto ante Oliver y, sin pensar siquiera en lo que estoy haciendo, le agarro del cuello de la camisa en un arrebato de furia. Depués de lo que ha provocado todavía se atreve a dedicarle unas palabras.

-¿Qué coño le has dicho, hijo de la gran...?.¿No has hecho ya suficiente?- mi tono está cargado de odio y en esos momentos me da igual todo: que estemos en el gran comedor, que seamos alumnos de último curso, que me puedan expulsar. Sólo quiero la verdad. Que ese cabrón confiese. Que salga el culpable.

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28/06/2014, 21:21
Oliver Carrow

Intento marchar del Gran Comedor, pero no puedo. El estúpido pelirrojo-aguilucho se me planta delante en un intento envalentonado de intimidar a un superior. Resultaba tan patético como irrisorio.

- ¿... perra? - ver como intenta contenerse me resulta gracioso. Tanto, que me permito por unos momentos dejar a un lado las ganas que me han entrado de partirle la cara... o algo peor. - No te metas donde no te llaman, O'Brien. Si eres inteligente sabrás mantenerte en tu lugar. - Rompo durante un segundo el contacto visual con el ravenclaw para seguir a Kaitlin con la mirada. Entendía que estuviese mal por la muerte de Leonard, pero no la reacción que acababa de tener. Tampoco la del imbécil de O'Brien.

Sin dedicarle ni un segundo más continuó hacia la entrada, golpeando con fuerza en el hombro a Kyle y obligándole a apartarse de su camino. No tenía tiempo para más tonterías.

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28/06/2014, 21:28
Kyle O'Brien

¿Dónde no me llaman? Será gilipollas. Ese asunto me incumbía y mucho. Leo también era...bueno, había sido mi amigo y esta víbora creía que no me incumbía que por su culpa estuviese muerto. Tan pronto me empuja con el hombro, le agarró y mi puño va directo hasta su cara, donde le dejo plantado un regalito. Sin perder más tiempo con ese impresentable, voy hacia la salida en busca de Kaitlin. 

Notas de juego

Para darle un puñetazo tengo que hacer alguna tirada?^^

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29/06/2014, 10:17
Oliver Carrow

Si no fuera por la rapidez con la que Kyle salió del Gran Comedor, Oliver no hubiese dudado ni un instante en agarrarle del cuello hasta que desapareciera su último aliento. Se limitó a mirarlo salir del Gran Comedor en silencio mientras pasaba una mortífera mirada a quienes todavía permanecían a su alrededor. Si alguien se atrevía a acercarse a él en ese momento sería el foco de la amalgama de sentimientos (negativos) que en esos momentos se condensaban en su interior.

Tras unos segundos dedicados a encontrar la calma echó a andar de nuevo hacia la salida. Con suerte, la tercera sería la vencida.

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29/06/2014, 10:53
Narradora

Mel O'Hare:- ¡¡KAITLIN!!

Kyle no fue el único que salió al encuentro de Kaitlin que no había podido soportar las náuseas ni un momento más. Ambas hermanas, al verla mareada, la sujetaron por los hombros con claros signos de preocupación en la mirada.

Roislin:- Querida... debes descansar... Albert, deberíamos llevarla a la enfermería.

Un gran círculo de alumnos se había formado alrededor de los O'Hare, mientras Zac y Carrie continuaban su camino hacia las mazmorras sin pararse por más tiempo y Kyle llegaba hasta Kaitlin. Duncan tiró de Eve también para fuera. Le hubiera gustado sacarla cuanto antes de aquella atmósfera, pero su mejor amiga se encontraba mal y supuso que querría ayudarla.

Albert:- Vamos, Kaitlin. Te observaremos en la enfermería.

Y así, los tres hermanos O'Hare acompañados por Duncan, Eve y Kyle, fueron hasta la enfermería, llevando a una desfallecida Kaitlin con cuidado, apartándola del resto de gente.

Por su parte, Oliver se marchó aprovechando que ya no era el que llamaba la atención tras el encontronazo con O'brien que sin duda más tarde daría de qué hablar.