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Héroes y Profecías

El Caos Cambiante del Limbo - Camus "Puño de Cuthbert".

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22/12/2010, 01:14
Director

...Tras muchas aventuras, Kandalian, Amnyin, Tancred de Berfôska y Tomas de Rouvelont parecen a punto de encontrar a Camus "Puño de Cuthbert", el poderoso clérigo de los Héroes Antiguos, y ganarlo para la causa sacándolo de su exilio forzoso en el Limbo...

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09/01/2011, 19:44
Director

La guía y experiencia de Roerkas permitió hacer la parte más peligrosa del viaje a salvo. Por numerosos planos la pista de los Héroes Antiguos fue rastreada, pero finalmente llegó el momento de que el grupo se separase para encontrar más rápido a las leyendas que podían cambiar el curso de esta particular guerra. Eran una veintena los caballeros de Berfôska inmersos en este viaje, pero algunos cayeron ante terribles criaturas que defendían los planos o ante los numerosos peligros que se interponían en el camino. Al final, los once supervivientes se separaron en grupos de tres o cuatro hombres para encontrar cada grupo a uno de los Héroes. El Mago Rojo Roerkas, mientras tanto, ocupó posiciones en algún lugar del Plano Astral; las características de su ubicación y su propio poder le permitirían traer ante sí a los compañeros una vez completado el rescate. Cuando lo necesitaran, un portal mágico se abriría ante los caballeros, para permitirles regresar a salvo.

La búsqueda del gnomo y sus compañeros les había llevado hasta El Limbo, la más caótico y cambiante de las realidades del mutiverso. Un lugar peligroso en el que es, por definición, imposible orientarse, pues ningún lugar o accidente geográfico permanece en su sitio por mucho tiempo. Habría sido imposible encontrar nada en un lugar así, de no ser por un inesperado aliado, nativo del plano.

Gith era lo más parecido a un nombre que tenía el ser, aunque el apelativo provenía de githyanki, que no era más que su raza. Humanoides de piel gris, ojos crueles y de movimientos elásticos que luchaban por sobrevivir en su plano-hogar. El principal enemigo de los gith de esta zona eran los Slaad, enormes monstruos con aspecto de sapos bípedos. Como quiera que los Slaad parecían ser el principal obstáculo para cualquier visitante, los caballeros eran para Gith "enemigos de sus enemigos", si bien no amigos. En esta alianza de conveniencia había tenido mucho que ver la personalidad abierta de Kandalian, y sus talentos místicos, pues el pequeño monje era el único capaz de comunicarse con el githyanki por medio de lo que él llamaba la Lengua del Sol y la Luna.

Delante de Kandalian, Amnyin y los dos caballeros que les acompañan hay una enorme aguja de cristal. Una especie de torreón sin puertas ni ventanas, pero con una pequeña superficie plana en su punta, a modo de tejado, que apenas se llega a ver desde la distancia. Un lugar tan destacado entre el paisaje gris y nuboso de este plano parece un buen sitio donde buscar al clérigo Camus, pero Gith da la alarma.

- Tiradas (6)
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09/01/2011, 20:06
Gith

¡Emboscada Slaad!

Gith desenvaina su espada y señala con ella a cuatro figuras enormes de cabezas planas y brazos que les llegan al suelo acabados en garras.

- Tiradas (1)
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09/01/2011, 20:24
Director

Notas de juego

Rasgos de esta parte del Limbo.

-Gravedad alta: las pruebas de Equilibrio, Nadar, Piruetas, Saltar y Trepar sufren un -2, igual que todas las tiradas de ataque. El peso de los objetos se duplica.
-Altamente mórfico: el plano entero cambia constantemente.
-Magia salvaje: todos los conjuros tienen efectos aleatorios salvo con una tirada de nivel de lanzador contra CD 20+nivel conjuro.
-Predominio fuego menor: aleatoriamente cada asalto hay probabilidad de que todos sufran 3d10 (Reflejos CD 19 mitad) daño por fuego.
-Alineamiento fuertemente caótico: -2 a pruebas de carisma, inteligencia o sabiduria para los no caóticos.

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09/01/2011, 20:41
Director

Las criaturas se lanzan al ataque con una velocidad cegadora. Aunque todas comparten cierto parecido con un sapo gigante, sus colores son distintos, y parece haber cierta jerarquía entre ellas. En la retaguardia está el Slaad negro, menos corpulento que los demás, pero con poderes mágicos, que parece estar al mando. El ser hace unos gestos con su mano, acumulando una extraña energía arcana, y en seguida dice una única palabra mágica que tiene un efecto inmediato: el caballero Tomas de Rouvelont grita y suelta su espada, desorientaado; ha quedado ciego.

Las tres moles musculosas, por su parte, se lanzan al cuerpo a cuerpo. Las garras del más grande no tienen ninguna oportunidad de dar con Kandalian, que esquiva a una velocidad increible. Los intentos fallidos frustran y enfurecen al monstruo. Los otros combatientes tienen menos suerte, porque Tancred recibe una herida de las garras de otro de los monstruos, mientras que Amnyin queda paralizado. Algún poder mágico de esas criaturas le ha dejado inmóvil, indefenso.

Gith ha desenvainado y corre hacia el combate. Cuanto antes se acabe con este encuentro, antes podrán seguir buscando, pero para el githyanki la cacería de Slaads es todo el sentido de este viaje.

- Tiradas (5)

Notas de juego

Puedes actuar. Si atacaras cuerpo a cuerpo podrías hacer todos los ataques (incluso los 6 ó 7 con ráfaga) pero restando 2 a cada uno.

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09/01/2011, 22:28
Kandalian

Kandalian se sitúa estratégicamente entre el Slaad que ha intentado atacarle y otro cercano, para repartir estopa a diestra y siniestra. Tres de sus puños van dirigidos al primero y los otros tres al segundo.

WAR!

- Tiradas (5)

Notas de juego

En función de los que de, tira el daño.

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06/02/2011, 20:03
Director

Los puños de Kandalian no tienen misericordia. El más grande de los monstruos recibe un golpe tras otro, y con el tercero la bestia casi cae al suelo. Se sigue revolviendo, enfurecida, pero los impactos en la cara y el torso le han debilitado tanto que parece estar pidiendo que le rematen. Sus puños enormes con garras afiladas no son capaces de alcanzar al pequeño contendiendte. El Slaad rojo que hay al lado recibe un par de golpes también por haberse arriesgado demasiado acercándose al peligroso gnomo, pero sus heridas son menos graves. Este vuelca su atención en Gith, y consigue hacerle un pequeño corte, pero el githyanki de dos espadazos acaba con la vida de la bestia, que ya había sido alcanzada por Kandalian.

El monstruo de piel negra y el de piel verde, por su parte, conjuran algo, aunque la magia no tiene resultado contra los guerreros de Berfôska. El final del viaje parece demasiado cercano como para caer ahora.

- Tiradas (12)

Notas de juego

Tu turno de nuevo. Mismas reglas que el asalto pasado.

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07/02/2011, 16:14
Kandalian

Kandalian se mueve rápido como una sombra, combinando la esquiva con el ataque violento de sus puños. No le hacen falta espadas, ni lanzas, ni arcos. Sus puños y San Culthbert son los portadores de la justicia, también en este plano.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Idem, en función de los que den, aplica el daño.

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10/02/2011, 16:18
Director

El tamaño del Slaad más grande es seis veces el del pequeño gnomo, y sin embargo los puños del monje resultan letales para el gigante reptiliano. El ser sucumbe ante la nueva oleada de golpes, y el resto de criaturas planarias rugen, empezando a ver el combate desequilibrado en su contra.

En ese momento el suelo se mueve, poniendo a prueba el equilibrio de todos. Uno de los cambios tan frecuentes e impredecibles en ese plano se avecina. De repente el ambiente se caldea, el suelo comienza a humear y burbujas de aire se transforman en fuego. Llamaradas aleatorias golpean a todos los contendientes por igual; en un instante este lugar se ha convertido en un mar de fuego. El suelo cruje y se segmenta. El plano parece estar dividiéndose en dos, y una enorme grieta que lleva a la nada se interpone entre los compañeros. Amnyin y Gith quedan en el mismo lado de la aguja de cristal, junto con el Slaad de color negro que parece el jefe. Kandalian, Tancred, Tomas y el otro Slaad superviviente han quedado en el extremo opuesto. El enemigo aprovecha la situación para tratar de huir, aún cuando los cambios en el paisaje hacen difícil correr.

Con un crujido y el rugido del fuego, el paisaje continúa separándose, como si fuera a convertirse en dos mundos separados.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Cambiar de lado requeriría una tirada de Saltar. Cambio de opinión: con un +60 solo tienes que narrarlo, si quieres hacerlo =P

Lo que sí tienes que hacer es una tirada de Reflejos CD 19 para evitar por completo el daño de fuego, y aún con un fracaso recibirías solo la mitad.

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12/02/2011, 10:43
Kandalian

El gnomo queda sorprendido por el repentino cambio en el ambiente. Lo positivo es que la batalla parece haberse acabado. Lo negativo es que el grupo puede quedar dividido. Mira hacia su compañero Amnyin y valora el salto...

San Culthbert, en tus manos me pongo.

Mira a Tancred y Thomas, da dos pasos hacia atrás y salta. Más que saltar, el gnomo parece volar. Pero los gnomos no vuela, ¿no?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Un +60 en saltar... Debería estar prohibido.

¿Que pasa con Tancred y Thomas?

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12/02/2011, 19:57
Director

El gnomo da un salto increible para su tamaño. Son unos 40 pies de distancia* los que le separan de Amnyin, y se hacen más a cada momento, pero el monje cubre la distancia con holgura y facilidad, como transportado por la mano del dios al que reza, y aterriza a la espalda de su compañero tiflin. El camino hacia la extraña torre-aguja de cristal ahora está despejado; al menos para parte del grupo.

La grieta, una vez finalizado el cambio, ha quedado enorme. Tan larga que se pierde en ambos horizontes; tan amplia que las figuras al otro lado se ven pequeñas, y tan profunda que la negrura en la que termina parece el núcleo del mismísimo plano. Tancred y Tomas, a salvo en el lado opuesto, agitan la mano y el más veterano habla a gritos para hacerse oir.

Notas de juego

*unos 12 metros.

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12/02/2011, 20:05
Tancred de Berfôska

Seguid sin nosotros.

Dice el orgulloso Tancred.

Estaremos aquí y, con suerte, el paisaje se habrá vuelto a unir para cuando hayáis terminado.

Mira a su alrededor. Al menos la tormenta de fuego parece haber pasado, aunque les ha dejado unas feas heridas de recuerdo.

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22/02/2011, 18:38
Director

Kandalian, Amnyin y Gith siguen su camino hacia la extraña aguja-torre de cristal, y pronto llegan a ella. En realidad las distancias parecen comportarse erráticamente, y aunque la silueta de la construcción parecía dibujarse en el horizonte durante la batalla, tardaron muy poco en estar bajo la sombra del torreón.

Ahora pueden ver que la base está hecha en piedra, y solo a partir de los cien pies de altura las paredes son de cristal. No hay puertas ni ningún tipo de ventana, aunque hacia mitad de la aguja hay unas grietas que no se pueden ver bien por la distancia y una energía vibrante brilla desde el interior. Quizá alcanzando la cima podría verse mejor qué es lo que hay dentro...

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23/02/2011, 20:08
Kandalian

El desafío estimula al gnomo. Y es que la solución es sencilla: escalar. Pero Kandalian decide aunar fuerzas con Amnyin.

Querido amigo, ¿podrías lanzar sobre mí algún conjuro de invisibilidad? Así mi ascenso sería un poco más seguro...

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04/03/2011, 19:50
Amnyin

Amnyin sonríe.

Sabes que lo mio son las sombras, pero mi oscuridad te perjudicaría al escalar...

Afortunadamente tengo otros talentos, y varios pergaminos cortesía de los Caballeros.

Sin más, saca uno de los rollos de papel repletos de runa que Kandalian ha visto tantas veces en manos de Arkaeron y comienza a decir unas palabras mágicas.

El gnomo había oído hablar de gente suficientemente habilidosa como para aprender el idioma de la magia sin ser magos en sí mismos. Incluso se dice que hay truquistas tan hábiles como para "engañar" a los propios objetos mágicos, haciéndoles funcionar como si lo hicieran en manos de un hechicero. Sea esta la explicación, o simplemente otro de los talentos naturales de la infernal herencia del tiefling, lo cierto es que el pergamino pronto brilla y desaparece.

Justo en ese momento, Kandalian nota algo raro.

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04/03/2011, 20:00
Director

La silueta del monje está apagada, de un color indefinido. No es exactamente un conjuro de invisibilidad, y aunque vistoso, no es muy útil. Kandalian ya pensaba en la mentira con la que agradecer a su amigo - al menos - por el esfuerzo, pero en ese momento, ¡el gnomo cambia de color! Sus ropas y su propia piel se adaptan a la tonalidad que tenía en mente el monje, justo el tono que necesita. Al pensar divertido en la posibilidad de un gnomo rosa o violeta, su color vuelve a cambiar. Cualquiera que le viera pensaría que ha perdido la cabeza.

El conjuro le permite cambiar de color, como un camaleón, pero a voluntad. ¡Adaptándose al tono azul cristalino de la torre será casi invisible!

Notas de juego

Dos tiradas de escalar necesarias para llegar a la cima.

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05/03/2011, 14:02
Kandalian

La amplia sonrisa y el brillo en sus ojos sustituyen al más efusivo "Gracias" que Kandalian podría haber dado.

Sin más, palpa la torre. Levanta el pie derecho, da un saltito, y en unos segundos está ya por encima de la cabeza de su inseparable amigo Amnyin.

- Tiradas (1)
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08/03/2011, 20:49
Director

La escalada es larga, pero Kandalian se mueve como una ardilla en un árbol. Las grietas e imperfecciones del cristal son más de lo que necesita el hábil gnomo para apoyar sus pequeñas extremidades y sostener su escaso peso.

Tras minutos, horas - era definitivamente imposible medir el tiempo aquí - al fin el monje alcanza el nudo de grietas que vio desde el suelo. En ese lugar el cristal parece más deteriorado, y también más transparente. Ahora Kandalian puede ver el interior...

Hay un hombre congelado. ¿Congelado? ¿petrificado? Atrapado en todo caso. Parece muerto, y no sería extraño dado que el peso de una enorme torre le aplasta y no parece tener aire que respirar.

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08/03/2011, 22:35
Kandalian

El gnomo disfruta con la escalada. Disfruta haciendo casi cualquier cosa. Cuando alcanza su objetivo, mira en el interior de la torre intentando quedarse con el mayor número de detalles posibles: alguna señal de vida, o de peligro, o lo que sea... No se expone demasiado.

Tras eso, empieza el descenso para informar a los compañeros antes de tomar cualquier decisión. Es una alternativa que los de abajo no sabrán valorar en su justa medida. Y es que, de no haber mediado el mismísimo San Culthbert, Kandalian habría emprendido el descenso pero por el interior de la torre.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Te dejo dos tiradas y coge la que creas más oportuna.

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09/03/2011, 17:07
Amnyin

Después de que Kandalian les haya puesto al tanto de las novedades, Amnyin queda pensativo. Es difícil tomar decisiones en un mundo del que saben tan poco, pero el tiefling, como el gnomo, es una criatura de instintos.

Me recuerda al cristal en el que estaba encerrado ese enorme hombre de metal. Creo que lo que deberíamos hacer es lo mismo; liberarlo.

Se encoge de hombros, no hay manera de estar seguro, pero asiente. El pequeño monje ya suponía que Amnyin pensaría como él, y su respuesta ha reforzado la determinación del gnomo.

Rompámoslo.

Mira hacia lo alto. Decirlo es más fácil que hacerlo. Aún así, Kandalian es capaz de hacer milagros con mucha frecuencia, como el infernal sabe muy bien.