Partida Rol por web

Historias Secretas: Lobisome

En el Camino Real

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10/04/2016, 17:59
Director

Pontevedra, Año de Nuestro Señor de 1351.

Contar cómo fuiste a parar a esta ciudad de Galicia es una historia que no viene al caso..., y quizá contaremos en otra ocasión. Tus planes eran pasar el invierno tranquilamente en esta ciudad, pero por motivos imprevistos te obligan a desplazarte a la aldea de Bueu, en la pequeña península de Morrazo. El viaje no encierra excesivos peligros: el Camino Real va siguiento la costa, y está en buenas condiciones, yua que es ruta obligada de carreteros y comerciantes, pues es la única vía de enlace entre las poblaciones costeras de la Península. Tu idea es llegar Breu... bueno: parecía un pueblecito más, sin duda.

Notas de juego

Esta partida es una aventura de libro juego. No obstante, la vamos a interpretar. También, eso sí, te pediré que elijas entre ciertas cosas o te pediré las tiradas que puedan venir en dicha aventura.

De momento tira por Empatía (PER) cuando escribas tu primer post.

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10/04/2016, 20:02
Abrahem Ali "El Cambista"

Un negocio con un viejo cliente le había llevado tan lejos de su casa. No se habría arriesgado a dejar su negocio desatendido durante tanto tiempo sino confiara en su aprendiz.

El camino había sido tranquilo, aunque había tomado precauciones, alguno de sus clientes le  aconsejaron que comparar una armadura para evitar sustos con los salteadores o con los lobos salvajes, que abundaban en esa tierras del norte. 

Su viejo asno caminaba con paso seguro cargada con todos los impedimentos de su trabajo, encaminándose hacia la aldea.

- Tiradas (1)
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10/04/2016, 20:31
Director

Efectivamente, delegar en otros el negocio propio cuando uno no podía no era sino repetir la misma historia, la historia de tu vida. Estabas, finalmente, bien pertrechado al parecer (cualquier sabe cual mala puñada viniérale a uno en mal paso). El paso dedicado del asno no hacia sino amenizarte hasta la entrada de fila de casas, pues no tenías otra compañia (et que realmente no la necesitabas). Allí, viste una posada en lo que parecía una pequeña plaza empedrada, junto a una iglesia. Quizá aquello fuera buen refugio para los fríos nocturnos de las tierras gallegas (et bien helado era, sin duda).

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11/04/2016, 08:40
Abrahem Ali "El Cambista"

Cansado por el viaje y con la noche cerca, Ali decidió que esa sería la posada donde pasaría la noche. Ato el asno a una de las arandelas de metal fijadas en la pared del edificio y luego se cargó las alforjas con su pertrecho de trabajo al hombro. Con paso vacilante debido al gran peso de los pertrechos se acercó a la puerta y llamo varias veces. ¡Cama para un viajero cansado!

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11/04/2016, 09:05
Posadero

Entraste en la taberna de Pontevedra*. El asno quedó fuera, y nada más acceder al interior viste un comedor con algunos hombres sentados en asientos y sillas alrededor de una lumbre. El posadero atendía un mostrador que también hacía de barra de servicio improvisada. Al fondo, junto a la chimenea, había unas escaleras.

¿Qué va a ser? ¿Posada para una noche, dos...? -el tipo te había oído pedir asilo ya desde fuera-.

Notas de juego

*: mira el Off por si no lo has visto.

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11/04/2016, 12:03
Abrahem Ali "El Cambista"

Cama para una noche y cena, soy viajero de paso y si los caminos lo permiten continuare el viaje mañana ¿Hay cuadras para dejar mi montura?  Pidió al posadero mientras se sacudía el polvo del camino, aunque mas que polvo los caminos de Galicia estaban llenos de agua y humedad. La intención del cambista no era detenerse demasiado en esa aldea y continuar su camino para finalizar su negocio. Pero a la mañana siguiente se acercara a la plaza del pueblo o al mercado para ofrecer sus servicios, puede que eso le retrasara algo mas. ¿Mañana hay mercado?

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12/04/2016, 00:18
Posadero

Claro que hay cuadras, señor -dijo el Posadero, contando ya los buenos dineros que podría llevarse-. Cuadra para monturas et alcoba seca y comida caliente. Ejem, bueno, luego se la enseñaré: ahora mandaré a mi esposa a limpiarla y prepararla.  ¿Mañana? Lo siento, señor, el mercado fue hoy. Hasta la semana que viene, nada de nada. ¿Puede uno preguntar a dónde va? -decía secando un trapo con la manga, con ese aire de saber y conocer por curiosidad las cosas-.

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12/04/2016, 08:36
Abrahem Ali "El Cambista"

Quería llega a Breu, tengo negocios que atender. Contesto rápidamente y mecánicamente el cambista.

El hecho de que el mercado ya hubiera sido propiciaba su pronta partida, no estaba dispuesto a esperar toda una semana para ganar unos cuantos maravedíes que, a bien seguro, acabaría gastando en la posada.

Si no le importa, voy a acomodar a mi buen borrico en los establos. 

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12/04/2016, 10:22
Director

Cuando hablaste de que te dirigías a Breu, la gente de la posada allí presente (los otros clientes al calor de la hoguera) te miraron un poco extrañado. Bastante extrañados. El caso es que con el beneplácito del posadero, salieste afuera a acomodar a tu mula en el establo. Tras volver, tales miradas seguían. El posadero comenzó a servir la cena. Y en éstas que te esperaste antes de subir a dormir (pues la mujer del posadero ya había preparado tu habitación) para degustar el menú nocturno.

Notas de juego

24

-Puedes sonsacarle con una tirada de Elocuencia (COM) lo que ocurre.
-Puedes dejarlo estar.

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12/04/2016, 12:05
Abrahem Ali "El Cambista"

Para Ali, un hombre acostumbrado a tratar con la gente, no fue difícil darse cuenta de que había algo raro. No era de buen comerciante encaminarse hacia el siguiente tramo del camino sin saber que se podría encontrar. Unas cuantas preguntas a tiempo podían salvarle a uno de más de un susto. Por ello, el cambista no dudo en preguntar al posadero que le servía la comida. Podría contestarme una pregunta. Dijo con tono disimulado para evitar que otros parroquianos escucharan su pregunta. ¿Qué acaece en  Breu? Parece que mentar ese nombre es como mentar al lobo en casa del pastor.

- Tiradas (1)
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12/04/2016, 23:47
Posadero

Pues verá, buen hombre -dijo el tabernero mientras pasaba enérgicamente un trapo viejo por la mesa de madera-; la gente de por aquí... ¡Já! Es muy supersticiosa -dijo con afirmación, pero no muy alto-: llaman a esa región, donde está ese pueblo, "la península de las brujas". En especial rehúyen el pueblo de Cangas de Morrazo, ya que está dominado por ellas... ¡valientes cuentos! -decía entre risas-. Pero bueno, no se asuste vos por tantas charlatanería, Cangas está bastante alejado de Breu. Eso sí... -el tabernero se puso entonces más serio-: no salga vos bajo ningún concepto del Camino Real... ¡Ah! -como recordando algo-,  mañana tiene huevos y panceta de la última matanza para desayunar. Se va a chupar vos los dedos.

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13/04/2016, 09:57
Abrahem Ali "El Cambista"

Torció un poco el gesto al oír hablar de tanta superchería, pero quien era el para  desoír rumores de los pueblos. A veces en esos rumores había algo de cierto.  Le hare caso y no me saldré del Camino Real, nunca se sabe cuándo esos rumores pueden ser ciertos.  Puede que en vede brujas sean bandidos…

Otro de los problemas que le había planteado el posadero era la cuestión del desayuno, su religión le prohibía comer cerdo, pero no podía rechazar tan suculento manjar, despertaría sospechas entre los pueblerinos. Sera un placer comer esas esplendida viandas.

Terminado la cena decidió ir a dormir, poca información iba a obtener en esa posada y mañana sería otro día. 

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13/04/2016, 20:49
Director

Fuiste entonces a dormir. Tu mula quedó en la cuadra, la cual se cerró y quedó protegida durante la noche. En esa noche tu sueño cayó en lo profundo del descanso y tu cuerpo agradeció el reparador despertar que tuviste en la jornada siguiente. Tras desayunar huevos con panceta y algo de carnes varias con leche, agradeciste al tabernero su hospitalidad y le pagaste como era debido (diez maravedíes por el establo a puerta cerrada y doce por la noche y el desayuno). Et en quedando en paz en esa taberna de Pontevedra, saliste bbien temprano por la mañana.

El cielo estaba un poco encapotado y hacía bastante frío. Sin embargo, mirando el cielo a simple vista no parecía que fuera a nevar. Ibas a buen paso, por el Camino Real. A media jornada de marcha, y tras haber dejado atrás los pueblos de Marín y Mogor, te encontraste con un mendigo, sentado en una roca al lado del camino. Parecía alto y fuerte, y tenía el rostro cubierto con una capuña. Empuñaba un grueso palo, y parecía dormitar.

Notas de juego

Haz una tirada de Descubrir (PER) con tu próxima intervención.

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13/04/2016, 22:08
Abrahem Ali "El Cambista"

Caminaba a paso lento el día era bueno y no tenía nada que temer, según las indicaciones del posadero sino se salía del Camino Real no tendría problemas. Al ver al mendigo prepara medio maravedí en su mano a modo de limosna. Pero se acercó con cuidado con la mirada figa en el tipo y en el entorno, había oído en más de una ocasión que los bandoleros se servían de artimañas para hacer caer a los viajeros en sus trampas y hacerse pasar por mendigos era una de las mas usadas.

- Tiradas (1)
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14/04/2016, 11:56
Director

Tenías tu mano preparada, preparada para darle una limosna. Había quien decía que el Altísimo siempre proveía, y quizá también recompensaba a quien le ayudara en tal tarea. El caso es que, tras dudar si podría ser una treta bandolera, te diste cuenta de algo quizá peor, quizá. ¡Te diste cuenta de que era un leproso!

Notas de juego

Haz una tirada de Leyendas o Conoc. Mágico (ambas de CUL), lo que tengas más alto en %.

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15/04/2016, 08:57
Abrahem Ali "El Cambista"

Ali había oído hablar algo sobre los leprosos aunque no se acordaba donde, seguramente en alguna posado durante sus innumerables viajes ya que en sus tierras natales del Algarve nunca había visto a uno de esos desarrapados. Instintivamente se alejo un poco de él.

- Tiradas (1)

Notas de juego

No tengo Leyendas ni Conoc. Mágico, tiro CUL a la mitad.

 

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15/04/2016, 10:16
Director

No ha mucho que oíste hablar de los Agotes, la raza maldita del valle de Baztán. Eran seres humanos, altos y fuertes, castigados por las fuerzas divinas por sus pecados... Todos nacían leprosos y endemoniados y eran muy peligrosos, en especial para viajeros solitarios... ¡como tú! Sin embargo, tampoco estás seguro de que éste mendigo sea uno de ellos. Aún te quedaba aquella moneda en la mano, la cual miraste...

Notas de juego

59
-¿Salir del camino Real para no pasar junto al mendigo?
-¿Seguir hacia delante y cruzártelo?

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15/04/2016, 11:13
Abrahem Ali "El Cambista"

El dilema que se le planteaba a Ali era complejo, seguir por el camino y poder caer en las garras de un ser sobrehumano y de una enfermedad mortal, o arriesgarse a salir del camino probando suerte con las leyendas que le había contado el posadero. Miro dubitativo la moneda que aun sostenía. Dios reparte bondad entre los justos. Si soy justo con el mendigo y le doy limosna, no tengo nada que temer. Pensó el cambista, con esta idea continuo  avanzando por el Camino Real, al llegar a la altura del mendigo se apartó lo más posible de él y le lanzo la moneda. ¡Buen camino!  

Notas de juego

Seguir hacia delante y cruzarme con él

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15/04/2016, 11:37
Mendigo

Atravesaste el camino, aunque ello implicara pasar junto al mendigo. Nada más lanzarle la moneda, éste reacciónó, levantando su vista, y viste en su rostro y manos las pústulas de la lepra. Su voz era lastimera, pero enseguida te habló, ¡Gracias! ¡Se nota que le tienes amor a San Simón, que venció al lobo! No obstante, cuando el mendigo vió tu moneda, su rostro parecía no muy satisfecho... Pensaba que le ibas a dar algo más...

Notas de juego

48.

¿Le das algo más?:
-¿La mitad de tus provisiones por pena?
-¿Un pedazo de pan?
-¿Sólo otra moneda?
-¿Nada de nada?

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15/04/2016, 20:39
Abrahem Ali "El Cambista"

Si Ali en vede ser de la religión de Mahoma hubiera sido de la religión da Abran o de la Virgen del Puñocerrado, le habría tirado con la moneda a la cabeza para defenestrar al maldito desagradecido.  Pero Ali no era de ese tipo de personas, la vida había sido generosa con él y, a su vez, él trataba de ser generoso.  Tenga esto también para el viaje. Dijo entregándole la mitad de las provisiones.  Ali no se había dado cuenta hasta ese momento de que el dinero le iba a hacer poco bien al leproso, nadie le querría vender nada.

Ya se estaba alegando por el camino cuando se giró para preguntarle algo más al Leproso desde una distancia segura. Buen hombre, ¿sabe algo de lo que acontece en la aldea de Breu? Me dirijo ahora en esa dirección.

Notas de juego

Le doy la mitad de mis provisiones por pena.