Partida Rol por web

Desde los albores de los tiempos existe la maldición de los hombre lobo

Basta saber que el lobo se tiene que comer a un aldeano cada noche, que si son dos o más lobos tienen que ponerse de acuerdo para decidir a quién se comen. Sed prudentes y no desvelar vuestra identidad pues el pueblo quiere vuestras cabezas.

En esta versión nuestra de Castronegro el lobo obtiene, mediante una tirada de dados, un “nivel de alerta” con el que podrá descubrir (o no) a la sinvergüenza y descarada niña espía.

Deberías elegir cada noche un lobo guardían para que vigile la llegada de la niña... y ese lobo... debera hacer una tirada 1d20... Si la niña no se ha escondido y sacais de 1 a 10 descubrireis su escondrijo... si sacais de 11 a 20 no os dareis cuenta de nada esa noche.

Según vuestro rol.. vuestro calendario es:

CALENDARIO

- LUNES: Hombres Lobo
- MARTES: Acusaciones

- MIÉRCOLES: Acusaciones
- JUEVES: Acusaciones

- VIERNES: Linchamiento
- SABADO:

- DOMINGO: Hombres Lobo

Entre la espesura del lugar,entre la oscuridad de lo evidente un brujo aparece apoyado en su bastón con una sonrisa codiciosa en sus labios. Bienvenidos hermanos,veo que tenéis el carácter y la voluntad de buscar lo mismo que yo.

Alza una ceja -espero que seáis como poco la mitad de astutos que yo- sonrie cruzándose de brazos

Espero que te guste tu pasado, añores el presente y desees ver lo que acontecé en el futuro...

Espero que te guste tu pasado, añores el presente y desees ver lo que acontecé en el futuro...

Espero que te guste tu pasado, añores el presente y desees ver lo que acontecé en el futuro...

miro a los dos lupinos..la noche es larga, la luna llena y el hambre aprieta....espero sean sensatos como yo

Bueno... parece que el odio, la traición y la venganza ya estan servidas...XD

Espero el nombre de vuestra primera victima...

Os deseo suerte y sed de sangre para acabar con todos...XD

No hay nada mas delicioso que la inocencia Vaechio sonrió perversamente mientras se apoya en el bastón. Esta noche iremos por Kuvia

Se apoyo en la pared con los brazos cruzados

-Estoy de acuerdo- asintió

Sonrei jugoso y facilon

Cerro los ojos y sonrió -Si no os importa.... yo vigilare cada noche, se me da bien-

Ankara si quieres vigilar, tienes que tirar el dado... XD

Por cierto, no saltes a la primera de cambio que se te va a notar...XD

Confimando... Kuvia, será vuestra primera victima...XD

Shhhhh tu calla ¿no te acuerdas la que lió Cavatina la última vez? XD que casi convenzo a todos XD ya me las apañaré, además cuanto más se fijen en mi, menos se fijaran en mis compis.

Aunque vuestra primera intención era arrancar la vida de la pequeña Kuvia, pronto descubristeis su fuerza y fiereza... No podías desperdiciar una oportunidad así...

Así que conservasteis su vida, y la únisteis a vuestro grupo de traidores, aumentando vuestras filas... aumentando vuestras fuerzas...

-¡Maldita sea! ¡Por qué? ¿Por q​ué me habéis atacado?

Las lágrimas aún discurren por mis mejillas mientras me siento... Viva, ardiente y furiosa a partes iguales, mi piel arde y eso provoca que mi cerebro trabaje a toda velocidad.

-Ahora estamos todos en peligro... ¡Por qué? Yo... Yo sólo quería...

Pero no termino mi frase y mis ojos llorosos enfocan a los presentes, rápidamente alzo la voz.

-Tú -señalo a Arnau-, súmate a las suspicacias de la rubia -Shioban-, así deberías de desacreditar a quien acusa a Ankara... Él es peligroso si ha sido capaz de descubrirla con tan pocaspalabras. Ankara, ven y abrázame, así aquellos que estén del lado de Naivé creerán en tí. Y tú... El que parece mandar -miro a Vaechio- a una orden tuya de desconfianza atacarán a quien pidas. Ten cuidado, es mucho poder... Y mucha responsabilidad.

Mi reacción deja más que clara la sangre de mi linaje, incluso en la desesperación, en la locura, busca alzarse, reaccionar, sobrevivir. Sólo entonces me encamino hacia Ankara y me pongo enfrente de ella, las lágrimas aún discurren por mis mejillas.

-¿Por qué...? Yo... Yo confiaba en tí. Y tú... Tú me has atacado... Ahora... ahora nada podrá detener mi sangre... Yo... Yo no quería... Yo no... No quiero... ¡Maldita sea!

De nuevo la desesperación me hace abrazarme a mí misma, mi corazón late y las lágrimas se agolpan en mi garganta.