Partida Rol por web

[HLdCN] La puerta de Fäe

Susurros discretos

Cargando editor
10/02/2015, 01:14
Eirien

Raisss… – Eirien entrecierra su iluminada mirada – Deseaba encontrarte, fiel amigo… – una tan placida como lúgubre sonrisa se forma en los labios de Eirien, mientras su corroída figura recogía en brazos y con sumo aprecio a su cómplice, secuaz y servidor en la Linde… Rais. Para Eirien, para la Bruma… – Si lo pretendías, me has dejado buenos mensajes para encontrarte, Rais, y si no… también – lo alaga acariciando su rostro suavemente mientras se aleja caminando… - sssshh… Raisgesto de silencioCelebia no debe saber quien soy, no hasta que sepamos de que lado está– expone directa.

- Estoy bien Rais, intacta... al menos. Y desconozco nuestra posición en la expulsión, querido amigo, tampoco entiendo que pasa en este, nuestro difícil presente... - hasta el momento, estaba claro que la Bruma no tenia que ver, la masacre de la ultima noche hablaba por si sola - No lo se, querido amigo ...mas volveremos para quedarnos si nuestras causas están unidas… - aun a posiciones iguales, la prepotencia de Eirien era palpable, como también su innegable aprecio por aquel ser. Camina lenta y friamente ante la iluminación de aquellos fuegos fatuos, Rodeando a Rais, mientras entona muy lentamente – Preguntártelo no serviría de nada, pues mentirías, estimado Rais. Con lo cual… tan solo deseo que estemos en el mismo lado – su tono enjaula segura frialdad, pero también cierto respeto.

Tampoco tarda en responder – No se nada de Tarma, no figura en mis dañadas memorias. ¿Crees que es importante…? - No había tiempo que perder.

Cargando editor
10/02/2015, 18:02
Rais

Es importante... para mí. - respondió Rais acerca de Tarma - Y tranquila, no revelaré nada, y menos viendo la vendetta que se han tomado con Míriel. No me gustaría que te pasara nada, y mucho menos por mi culpa...

Meditó de que podían hablar, y dado el tema candente en este momento, parecía lo más lógico.

¿Que opinas de Vayna? ¿Crees que es un peligro como dicen Míriel y Aina?

Cargando editor
11/02/2015, 00:04
Narrador

Y conforme el cuerpo de Chris convulsionaba luchando por vivir, mientras descargaba sus últimas gotas de vida, la figura de Rais aquí se fue disipando lentamente en el aire hasta dejar detrás solamente un gran vacío.

Notas de juego

Destinatarios actuales:

Eirien

Cargando editor
11/02/2015, 02:30
Narrador

Al mismo tiempo que en la otra realidad que habitabas, en el reloj aquí presente surgieron de la nada unas llamas gemelas a las que allí podíais ver, acompañando con su danza continua y perpetua a las otras.

Cargando editor
12/02/2015, 13:12
Narrador

Y uniéndose a las demás, una nueva llama oscura apareció sobre el número IIII.

Cargando editor
13/02/2015, 00:42
Narrador
 

Susurros discretos

Fue tras terminar aquel combate a tantas bandas. El olor a sangre, a muerte, reinaba en el ambiente cuando tu consciencia se vio despegada, llevada suavemente a otro lugar. Podías sentirte flotar despacio, consciente de alguna manera de que si te dejases llevar no te harías daño.

Cuando lentamente tus ojos se abrieron y miraste alrededor pudiste observar una estancia en penumbra, iluminada sólo por pequeños fuegos fatuos de color azulado repartidos aquí y allá. Las paredes gastadas revelaban que el lugar había visto días mejores. Sobre tu cabeza, a una distancia que casi podrías tocar de estirar el brazo, el techo era la enorme esfera de un reloj como el que había allí fuera.

Frente a ti había una figura conocida que parecía observarte con expectación. Eirien te acompañaba. Eirien, quien había sido expulsada de Palacio y había encontrado en la Linde su nuevo hogar. Eirien, quien era la única capaz de hacer sombra a Atanamir a la hora de leer la Bruma. Y Eirien observó cómo aparecías tú, Lúva, natural de la Linde. La habías abandonado hacía años, sí, pero el aroma de la Bruma aún estaba presente en cada parte de tu cuerpo. El cambio era evidente en ti.

Notas de juego

Destinatarios actuales:

Eirien Lúva

Cargando editor
13/02/2015, 04:21
Lúva

Lúva se sentía extraña. Hace mucho tiempo no pisaba la tierra con sus pies, hace mucho no sentía que su esencia fuera la suya o que sus ojos eran los que miraban la realidad. Siempre había tenido una armadura mortal que le impedía ser libre.

Se estiró un poco, casi como si no saliera hace mucho, y analizó el lugar donde se encontraba. El techo tal y como el reloj que se encontraba con todas las llamas blancas y negras y alguien allí. Por un momento se sobresaltó y estaba lista para atacar de ser necesario, pero se detuvo al ver la sombra que se alzaba, un rostro conocido después de tanto tiempo. Comenzaba a pensar que era la única fata de la linde allí.

Se acercó lento, ya que no sabía que tanto podía haber cambiado Eirien después de haber cruzado las arenas del tiempo en una cubierta humana. Esperaba su reacción para saber si era bienvenida o si había algo más que la traía allí.

- ¿Eirien? Soy Lúva. ¿Me has traído hasta aquí? - era obvio quién era pero quería ser cuidadosa. Con todo lo que estaba pasando, no quería dar un paso en falso.

Cargando editor
15/02/2015, 02:38
Eirien

Una bella criatura aparece ante los ojos de Eirien - No - seca, ofrece su respuesta como primer contacto, con ambas manos en la espalda mirando hacia el reloj que tenían encima - No te he traído yo - Camina lenta y suavemente, su corroída figura guarda distancias entre fuegos fatuos con aquella Fata, desgastada por el saber y comprender... desconfiada, se veía un tanto enfurecida por alguna razón... reciente.

La Fata podría ser moradora de la Linde, pues conoce su nombre, pero no la recuerda, extraño - Tu pregunta no es la pregunta, la pregunta es... ¿quien nos mantiene aquí? mero transito entre vida y muerte -

Busca su mirada - No estas en mi corrompida memoria, Luva... espero que batalles contra el mal de Fäe, o no me importara buscar tu exilio, y el de aquellos que te acompañen, seas quien seas... - pausa, sus labios forman una mueca de profunda decepción... y formula una pregunta en un tono severamente frío -dime ...¿debo recordarte? - entrecierra su iluminada mirada dejando caer sus parpados lentamente - ¿Hay algo que necesites de Eirien?- pregunta dejando caer sus muñecas hacia delante.

Cargando editor
15/02/2015, 06:33
Lúva

Lúva se sentía algo confundida pero Eirien no parecía tener intenciones de hacerle daño, así que relajó su postura y se acercó a ella - No me extraña que no me recuerdes. Solo soy una huérfana más, víctima de la Bruma. En cambio, yo tengo recuerdos vagos sobre ti y de cómo podías interpretar la Bruma también, al igual que Atanamir... - menciona ese nombre con algo de rudeza y un deje de desprecio.

- Te aseguro que mi bando es el bando de los que queremos la paz y regresar a Fae de manera pacífica. ¿Qué hay de ti? ¿Cómo sé que no me engañas? Siempre te has caracterizado por tu sabiduría y eso es algo que siempre he admirado de ti, pero todo esto cambia a la gente, Eirien. ¿Sabes de otros moradores de la Linde? Aunque personalmente, creo saber el escondite de Atanamir - le dijo tratando de no mostrar su descontento.

- ¿Hay algo que puedas compartir? -.

Cargando editor
15/02/2015, 16:14
Narrador

Al mismo tiempo que en la ciudad gemela que ambos habitabais, visteis cómo aquí, sobre el reloj, aparecían un par de llamas sobre el número XII, danzando al mismo tiempo que las que vuestras carcasas humanas observaban.

Cargando editor
15/02/2015, 17:47
Eirien

La criatura desprendía cierto empuje, su naturaleza queda clara al nombrar a Atanamir, aun con extrañeza, la observa con interés – Lúva entonces… moradora de la Linde, huérfana de la Bruma, Bruma sin culpa… querida… es el destino, no la Bruma sin más… algun dia lo entenderás– camina media luna suavemente – No estamos solas, hay mas moradores de la Linde, pero ya hemos perdido a alguno que creo inocente, al menos de momento... – Responde...

Se algunas cosas, preciosa… puedo comerciar con información, pero de momento mis palabras se convertirán en silencio sobre mis cenizas, no pondré en peligro a ningún Fata que pueda ayudarme a regresar mi lugar… al menos, no a cualquier precio… – se queda pensativa… – ¿Cual es tu identidad, Lúva? ¿buscas a alguien? ¿has estado ya tras la esfera? o... ¿hay algo que deba saber de Atanamir? – pregunta con frialdad - Quizá… podamos volver a vernos... – propone susurrando.

Entonces el reloj muestra un nuevo numero... Eirien pierde su mirada por un momento... XII

Cargando editor
15/02/2015, 21:41
Lúva

Lúva escucha a Eirien hablar de la bruma y no puede evitar torcer el gesto al escuchar hablar de la bruma. Eso lo había escuchado en numerosas ocasiones y no le gustaba del todo.

Lúva arqueó una ceja cuando Eirien mencionó que la información tiene un precio. Al parecer, las conductas humanas seguían en ella.

- Si tú no estás dispuesta a compartir tus conocimientos, no veo por qué tendría que hacerlo yo. Soy joven pero no ingenua. Si no nos trajiste aquí, significa que alguien más lo hizo y eso no me dice nada sobre tu verdadero poder. Sobre Atanamir, son viejos asuntos pendientes, aunque dudo que al menos escuche lo que una joven fata como yo quiera decir - se cruzó de brazos y se volteó.

En ese momento, ese extraño reloj mostró el reflejo de lo que se encontraba también en aquella ciudad oscura y sus ojos brillaron, casi como si hubiera descubierto algo.

- ¿Y qué tal si aquellos que propusieron la expedición a la torre del reloj antes fue porque estaban aquí antes que nosotras? - se apoyó en el reloj con sus manos y agregó.

- Ellos murieron, tendría sentido que no se encontraran aquí. Ivanna habló de una posesión o algo así. ¿Qué cree la gran intérprete de la bruma? -. 

Cargando editor
16/02/2015, 01:02
Narrador

Con la llegada de la noche la figura de Lúva empezaría a desaparecer, deshaciéndose igual que antes se había compuesto...

Notas de juego

Destinatarios actuales:

Eirien

Cargando editor
16/02/2015, 01:06
Narrador
 

Susurros discretos

Fue tras despertar llena de golpes. La sensación de que te habías librado por muy poco era acuciante cuando tu consciencia se vio despegada, llevada suavemente a otro lugar. Podías sentirte flotar despacio, consciente de alguna manera de que si te dejases llevar no te harías daño.

Cuando lentamente tus ojos se abrieron y miraste alrededor pudiste observar una estancia en penumbra, iluminada sólo por pequeños fuegos fatuos de color azulado repartidos aquí y allá. Las paredes gastadas revelaban que el lugar había visto días mejores. Sobre tu cabeza, a una distancia que casi podrías tocar de estirar el brazo, el techo era la enorme esfera de un reloj como el que había allí fuera.

Frente a ti había una figura conocida que parecía observarte con expectación. Eirien te acompañaba. Eirien, quien había sido expulsada de Palacio y había encontrado en la Linde su nuevo hogar. Eirien, a quien Celebia había echado por saber demasiado. La única capaz de hacer sombra a Atanamir a la hora de leer la Bruma.

Notas de juego

Destinatarios actuales:

Eirien Lassa

Cargando editor
16/02/2015, 01:08
Narrador

Al ver aparecer a Lassa la reconociste de inmediato. Ella era la madre de aquellos niños a los que Míriel había matado. Ella había visto su frágil mente resquebrajada después de aquello, y no había tardado en abandonar el Palacio. Había caminado y caminado hasta llegar a la Linde, y allí a punto había estado de entregarse a la Bruma en busca del olvido que la conciencia no le podía dar. Sin embargo uno de sus habitantes la había detenido y desde entonces vivía allí, con vosotros, como una habitante más, por mucho que su cabeza nunca había vuelto a ser la misma.

Cargando editor
16/02/2015, 09:19
Lassa

Me aferré a la leve sensación de seguridad y dejé llevar por ella, siguiendo ese abrazo curiosa por ver dónde nacía.

Abrí los ojos de mi esencia para encontrarme frente al reloj, a una escasa distancia, aquel reloj siempre presente pero que, ahora, me parecía exageradamente controlador.

Tardé una revisión completa de la esfera del reloj a caer en la cuenta que miraba un techo y que había más por descubrir. A procesar que aquella luz tenue debía proceder de algún lugar, descendí mi cabeza y que mi esencia se impregnara por la danza tranquila de los fuegos fatuos.

- ¿Eirien? - tanteé aquella figura a la que creí reconocer - ¡Cuanto agradezco una cara amiga! - relajé mi consciencia sin esperar una confirmación a su nombre y un calor al que no supe ponerle nombre invadió mi esencia libre de esa carcasa maltrecha.

Notas de juego

Cargando editor
16/02/2015, 18:47
Eirien

Lassa… un mismo proceder, no así las formas, pero un mismo destino, Palacio y la Linde como ultimo paso antes de entregarse a la paz de la Bruma, sin encontrar el ocaso de la muerte, si no de una liberación que no muchos comprendían... pero Eirien, si.

Era bueno encontrarse con ella, ahora esperaba que fuera productivo. Eirien camina entre fuegos fatuos ladeando un extraño amago de sonrisa, su corrupto aspecto deja deslizar sus palabras sin perder un ápice de seriedad… - Me alegro de tenerte aquí conmigo, Lassa, tengo demasiadas lagunas, pero puedo recordarte – algo era algo, mas aun… tratándose de la dama de los secretos. Aparta su mirada de aquella Fata, posando el revés de sus muñecas en sus caderas, y sin despegar la vista del reloj... le dice - Creo que puedo confiar en ti como Anastasia. Tu capacidad de regenerar vidas es importante, ahora tan solo deseo saber quién te atacó esta noche… - frunce el ceño, y cruza sus brazos para volver su iluminada vista hacia ella - Dime preciosa… – suena fría – ¿Mataste tu a Miriel? – dura - ¿sabes cual es mi fachada? – dada – Si caminamos juntas por un bien común… Lassa, volveremos a nuestro lugar, La Linde – directa... Eirien se mostraba a disposición de esta conocida Fata por puros hechos… aunque nunca a cualquier precio, eso quedaba claro.

Cargando editor
16/02/2015, 23:00
Lassa

Mi sonrisa se acentúo así como mi guardia con cada paso de esa fata - Eirien. - sonreí al volver a pronunciar su nombre, esta vez con cierta intransigencia por sus formas - ¿Dónde estoy? - quise saberme a salvo antes de hablar - ¿Me has traído tu a este lugar? - pregunté como consecuencia de la primera observando a mi alrededor con ojos críticos.

Mis preguntas quedaron en cola como siempre que trataba con ella, y aquello me hizo reír, sintiéndome devuelta en una diminuta parte de mi ser a los días pasados, a Faë.

- Míriel merece cuanto le ocurra, incluso más. Merecía su muerte y merece la que ahora dice acecharle. - desaté mi lengua provocada por lo que creía una acusación y reproche en las palabras de Eirien.

Puedes confiar en mí. - protesté - Ya sabes más de lo que yo sé de ti. - le hablé mancada de toda la agresividad con la que me había referido a Míriel, pero recelosa por el simple hecho de encontrarme ante la dama de los secretos.

Y en cuanto se refirió a su fachada no pude evitar reír - Recuerdo un infinito cariño hacia ti. Pero apenas poseo más recuerdos. Quizás los vestigios de mi apreció hayan confundido a mi cascara, o quizás sea su absurdo interés por ese francés que nubla mi juicio y me obliga a querer verte en su interior.

Resoplé con fastidio por la edad de la fachada que me había tocado ocupar - Por favor, libérame de mi ignorancia.

Cargando editor
17/02/2015, 03:44
Eirien

Quitando alguna singularidad concreta, Eirien no era muy dada a los acercamientos tras su estancia en La Linde... pero progresa para rodear con sus pasos a Lassa, mas de cerca - No hay peligro en este lugar. Títeres que escapan a nuestros hilos por estímulos impropios, pero propios, Lassa - asienta una complacida mirada entre los fuegos fatuos que las rodeaban antes de continuar - … debía tantear tu escama, medir tus actos… no exponerme a impulsos humanos, es muy fácil confundirse en esta conmemoración de pellejos… te lo aseguro – sus últimas 3 palabras están llenas de una majestuosa temeridad sin explicación - ¿te has defendido sola? – pregunta - ¿Crees que pudo abordarte Adam…?... - frena su paso, busca aquellos ojos - ¿…Que sabes de Seth, morador de la Linde? ¿…o de Alana, nativa del bosque? – consulta-medio informa, sin tardar en aclarar otro punto… – Te he traído yo misma, y no seré quien te juzgue si has matado a Miriel para llegar a la esfera, o para vengar a tus criaturas. Pero si juzgaré tus intenciones para con Fäe, y esta... - desprecio y decepción... - la dura reyerta que nos incumbe a todos ...- se cruza de brazos, pues... - ¿Hay algo que necesites contarme? -

- Pronto tendremos una pequeña reunión, tu, yo, y alguien más… en este lugar, tras las campanadas – comenta de forma fria y lenta – No creo que sea bueno insinuarle tu identidad a aquel que está por llegar, conoce la mía, yo la suya… pero no te espera aquí – advierte – Claro que… si esta de nuestro lado, puede ser de gran ayuda.

- Carcasas, máscaras, cascaras, carísimas caras para cada estampa, cada una tiene un precio. Ahora sabes quien soy, llevo a tu lado desde el principio… - entorna su mirada hacia el numero XI, arqueando una ceja de sobremanera, pero un ultimo suceso en el "exterior", vuelca su atención con media sonrisa... - Chris... -

Cargando editor
17/02/2015, 04:08
Narrador

Tal y como había sucedido otras veces, al mismo tiempo que la llama en cuestión apareció sobre el número VII una llama gemela lo hizo también aquí, uniéndose a la que ya se encontraba en el mismo lugar.