Partida Rol por web

"Lo que yo decía, tener que currárnoslo nosotros..." Piensa Eli ante las palabras del profesor sobre la teoría.

Pero todo cambia cuando el Huffelpuff es atacado con una de las maldiciones imperdonables.

[...]El rostro de la joven Ravenclaw dibuja una mueca de dolor, un dolor que recorre todo su cuerpo y cae al suelo de rodillas. Los rubios pelos se ponen de punta y una lágrima resbala por la mejilla derecha. Aunque intenta no emitir sonido alguno, no puede reprimir un pequeño gemido angustiado.

Cuando, tras un rato interminable, el profesor detiene el hechizo, esta se reincorpora lentamente, sin levantar la vista del suelo. -En... entendido profesor.

Antes de marcharse de ahí, la chica mira fijamente al profesor en los ojos*. La expresión del hombre es muy sádica, como si disfrutara en ello. "Maldito seas, Carrow!"[...]

ME levanto con decision al nombrarme... Me parece bien que se ponga algo de dureza en este sitio, pero me parece increible que se nos trate igual que los sangre sucia...

Intento resistir lo mejor posible la tortura, ya que en el fondo comprendo que es un mal necesario...

Al ver lo que hace el profesor Carrow, se ve a Eleanor visiblemente afectada. Su cara muestra una mezcla entre enfado supremo y terror supino; sus ojos brillan llorosos, no se distingue si de rabia o de miedo. Según va viendo a sus compañeros pasar por la quilla se la ve más afectada, más compungida. Cuando suena su nombre, su cara cambia radicalmente. Viendo sus gestos, cualquiera habría pensado que se mostraría temblorosa y aterrada, pero se levanta despacio, segura de sí misma y visiblemente desafiante. Mira directamente a los ojos del profesor Carrow, esperando a que pronuncie las horribles palabras. Aguanta más o menos estóicamente el dolor. Resiste lo mejor que puede, sin apenas moverse y sin dejar de mirar a los ojos a Carrow. Cuando todo ha pasado, un hilillo de sangre sale de su boca... se ha mordido demasiado fuerte el labio. Se quita la sangre con la mano, sin discrección, y se muestra bastante seria el resto de la clase.

No, no, quería decir alelada, no sé.... xD Lo de pasmada es sólo cosa mía xD. La partida, por ahora, me está encantando ;) (o las ganas que yo tengo, también xDD)

 Tom no puede creer lo que está viendo...uno a uno los alumnos van sufriendo el dolor. Cuando le toca el turno a Eleanor, apreta los puños hasta que se ponen los nudillos blancos... la tortura de Eleanor le enfurece enormemente. Ni él mismo se esperaba que le afectase de esa manera

Aún nose cómo, pero juro que haré que te arrepientas de esto...

Cuando Carrow pronuncia su nombre se levanta hecho un basilisco, y anda con paso firme y rápido hasta la tarima. Sus ojos, habitualmente bromistas y agradables, destilan furia. Ninguno de los presentes le había visto así antes

Cuando Tom sube a la tarima, Eleanor se muerde el labio hasta que se da cuenta de que sangra demasiado. Se escurre muy discretamente una lágrima y abre un libro ruidosamente, pretendiendo entretenerse con algún párrafo interesante para no ver lo que pasa... aunque, obviamente, no se concentra en nada.

Cuando sale Teruki, Eleanor sigue enfrascada en no leer nada en su libro. Con él parece cebarse más que con cualquier otro. En un ataque de rabia, Eleanor cierra su libro de un golpe y se levanta en puesto, apretando con fuerza la mesa con las manos y mirando furiosa al profesor. La gente murmulla, a parte del aspecto de demente que le da la sangre en la cara y en las manos, nadie se esperaría jamás una reacción como esa en la tímida chica Docks. Se mantiene de pie, desafiante, unos segundos, probablemente bloqueada ante el terror una vez se da cuenta de lo que acaba de hacer. No se atreve a sentarse, ni a quedarse de pie, ni a mover un milímetro cualquier parte de su cuerpo. Cuando parece entrar en razón, sus ojos se dirigen a Teruki. Al segundo se deja caer de nuevo sobre su asiento.

Buenos días profesor Carrow saludo con educación. Después busco un pupitre en el que me pueda sentar con Niamh o Nikola mientras saco mis libros y material de escritura.

La clase de Herbología no había estado mal, un tanto aburrida, pero eso no era de extrañarse.Estaba realmente entusiasmada con la primera clase de Defensa contra las artes oscuras. Solo esperaba ser del agrado del profesor Crow, aunque estaba casi convencida que así sucedería.

Al entrar al aula, lo veo detrás de su escritorio. La verdad intimidaba un poco, pero para Nikola Blacksmith, esa palabra no existía. –Buenos días profesor Carrow- le dediqué una sonrisa angelical y me encamine hacia la primera fila de asientos. -¿Qué tal se siente en el colegio?- mi tono de voz era un poco empalagoso, tenia que ganármelo.

De reojo vi entrar a William. Volteo un poco la cabeza cubriendome la mitad de ella con mi pelo y le dedico una sonrisilla traviesa. Aún no habia llegado Rodney, el chico guapo de Ravenclaw. Estaba entusiasmada por verlo.

 Por fin una clase que merece la pena de verdad, Defensa para las artes oscuras, mi verdadero terrono. Entro en el aula con un aire de superioridad propio de mí, y saludo con atención al profesor.

Buenos días Profesor Carrow. 

Veo que William ya nos ha reservado un sitio para Nikola y para mí, y me apresuro a sentarme con ellos.

Que pena que tengamos que compartir está clase con semejante escoria- Le comento a mis compañeros, a pesar de que sé que William no está del todo de acuerdo con mis declaraciones.

Niamh, por favor -le digo un poco nervioso- Es nuestro primer día, no lo empecemos así, ¿de acuerdo?

Observo como Nikola busca con la mirada a Rodney y no puedo evitar sentirme un poco celoso...

Después de haber estado un rato recogiendo sus papeles en medio del pasillo (el gato de Niamh le había hecho otra de las suyas de camino a clase), Rodney entra en la clase de Defensa contra las Artes Oscuras. Al entrar en el aula, observa que ninguno de sus amigos está dentro. Capta las miradas de varios Slytherins que hay allí, la mayoría no muy amigables. Un cierto brillo reluce en los ojos de Nikola cuando los dos se miran.

Menuda clase me espera... Preferiría dar de comer a los escregutos con Hagrid.-Piensa para sus adentros mientras camina hacia su pupitre y se sienta.

Buenos días, profesor.-Exclama dirigiéndose al profesor Carrow.

Seguidamente, se entretiene hasta que empiece la clase dibujando monigotes en una de las hojas del libro, apoyando su cabeza en su mano izquierda.

-William tiene toda la razón Niahm, dejemos a un lado esos comentarios- le dije en un tono serio y audible, para que el profesor escuchara mi voz de mando como Prefecta. Me acerque a Niahm y le susurré  –tienes toda la razón. Pronto comenzara el hedor en el aula, aunque a Rodney todo se le perdona –  solté una risita.
Luego me acerque a William, a su oído –Gracias por ayudarme a mantener todo en orden… eres un sol –le susurré.

Escuche pasos y giré mi cabeza. Allí estaba Rodney,guapo como siempre. Mis ojos se encontraron con los suyos. Le dediqué una timida sonrisa y giré mi cabeza nuevamente bajando la mirada hacia mis libros.

El profesor se levanta, y con un giro de su varita, cierra la puerta.

-Soy el nuevo profesor de defensa contra las artes oscuras y subdirector de Hogwarts, Amicus Carrow. Este año dudo que necesitéis libros en mis clases, la teoría la estudiareis por vuestra cuenta yo os enseñaré la parte práctica de la asignatura.

¿Algún voluntario para comenzar? ¿No? Está bien...Tú, me da igual tu nombre, ponte delante.- señala a un miembro de la casa Ravenclaw, Jessie Hannigan.

Una vez este se encuentra frente a la clase el profesor Carrow deja de pasear por la misma y se dirige hacia su mesa.

-Esto será lo que les ocurra a cualquiera que rompa las reglas, suspenda exámenes, desobedezca alguna orden o sea pillado en un lugar en el que no debe estar. Aprended como se hace pues puede que se os pida castigar a vuestros compañeros.-

-Señorita Blacksmith, como Prefecta acuda usted también. Muestre a la clase como realizar este ejercicio- le susurra audiblemente -Maldición cruciatus-