Partida Rol por web

Grendalin explicó lo que sabía y percibía de la emanación mágica que había dentro del rio. Y para su sorpesa Abot empezó a apartar el agua y dejar claro qué era lo que lo causaba todo.

Interesante.

Pero cuando vio la botella escrita en carácteres elficos no pudo evitar lamentarlo. Que alguien de su raza fuera capaz de crear algo así dañino le dolía.

Esperad. Voy a tratar de anularlo antes de que lo cojáis. Así no será peligroso.

El escriba empezó a conjurar y cuando terminó de su mano surgió un chorro de luz que impactó en la botella envolviendolo. La intensidad era muy potente, como la voluntad de Grendalin, pero no sabía si iba a ser suficiente contra un objeto como aquel.

La magia de Grendalin hace que la botella deje de verter gotas negras. A pesar de estar abierta nada sale de su interior.

Grendalin tenía extendido el barzo derecho con la mano brillante en dirección a la botella, mientras se sujetaba esa mano con el otro trantado de darse fuerza. Gotas de sudor le resbalaban por la frente.

No lo podré contener mucho tiempo. Daos prisa.

La tensión se le notaba en la voz.

Flogdegnurt se limitó a contemplar desde lejos lo que estaban haciendo los magos. Temía acercarse y ser afectado de alguna forma por esa poderosa magia cuya naturaleza estaba más allá de su comprensión. 

-Elfoz...-llegó a decir cuando vio las runas-.

El goblin había tenido contacto anteriormente con los elfos y siempre había sido bueno. De hecho, el arco que llevaba, de manufactura élfica, o bien era robado, o era una buena prueba de su buena sintonía con esta raza. 

-Runaz élficaz. Eztraño que elfoz envenenan agua. Aún para matar humanoz, envenenando naturaleza. Grave tiene que zer ofendimiento ¿Pueblo antez era territorio de elfoz?

Panda de Mar'i Kash. - gruñó Bastia, usando el término brinchie para referirse a aquellos que se quedaban congelados por el miedo en la batalla.

Moviéndose rápidamente, se dispuso a seguir las indicaciones de Abot y tapar la botella de cristal para sacarla a tierra firme cuanto antes.

El escriba conocía la magia maligna de la botella y pudo contrarrestarla una vez que Abbot abrió las aguas. Norm vació su mochila y se acercó hacia Bastia. 

—Agarra la botella, tápala y métela aquí. 

Bastia no tiene ningún problema en coger la botella y taparla.

Rápidamente la mancha negra viaja rio abajo, desapareciendo de la vista del grupo.

- Bueno ya que esa mierda no esta aqui, podriamos investigar los alrededores por si hay alguna posta o señales que pudeiran ayudarnos a descubrir que pasa aqui .... - digo mientras que me levanto y comienzo a revisar y investigar por la zona

En cuanto taparon la botella y la mancha desapareció, Grendalin dejó de concentrarse en el conjuro.

Desde luego era un objeto muy poderoso. Y por lo que parece es manufactura elfica. Lo que no sé si alguien vendrá a revisarlo de vez en cuando, o si incluso notará que ya no está activo. A lo mejor se podría quedar alguien a vigilar quién viene a investigar.

Sus palabras dejaban entender que él no se estaba presentando voluntario para ello.

—Uno sólo sería una presa fácil para el que puso la botella. Como sugiere Ragnar podemos buscar rastros por los alrededores para ver si algo nos da alguna pista del dueño. 

Una botella élfica. Sinceramente, se habia imaginado alguna maquinacion de la Llama, pero los Eldakar? Que si, que podian ser unos cabrones pero esto de envenenar el rio no parecia mucho su estilo.

Una vez hubieron asegurado y cerrado la botella, Varag asintio a las palabras de Norm y Ragnar. Se habian dado la caminata hasta alli. Si volvian ahora, que impedia a los elfos estos, o quien fuese, poner otra? Mejor era intentar encontrar a quien habia puesto la botella alli y pedirle explicaciones. Explicaciones que, seguramente, terminasen en violencia. P

Pero en fin, si no querias violencia, mejor no intentar envenenar un pueblo, digo yo - se dijo el orco mientras empezaba a explorar los alrededores en busca de pistas.

Bastia se lavó las manos tras dejar la botella en la mochila, aprovechando el agua limpia del río.

¿Sabemos si hay algún asentamiento elfo cercano? - preguntó. - Quizá han hecho esto para asegurarse que el poblado se marchaba pero sin llegar a matar a nadie...

Si hubiesen podido observar al koridio tras su máscara, habrían constatado su cara de sorpresa. Los había subestimado un poco, y ahora estaba super emocionado con sus compañeros de aventura, así como ansioso de poder echarles una mano.

No dijo nada, de reservado como era, pero sí que los veía con otros ojos. ¡Si aquello lo hacían resolviendo un mal que afectaba a una población entera, no podía esperar verlos en combate! De seguro que los prefería tener de amigos que de enemigos.

Era hora de regresar al pueblo y dar noticias. No sin antes aplaudir a los magos, y a Bastia.

- Que has bebido Norm ... humanos ... por dios mira, es una huella de animal ..., veo una pezuña claramente mira la forma ..., creo que estas perdiendo la vista, acaso estais bebiendo destilado de arbol?? dicen que hace perder la vista  .... - digo mientras veo claramente la huellas, el diseño, la pezuña alagada, no sabia si era de jabali, cabra o ciervo, pero era como confundir la huella de un gigante y la de un enano ...

Como de costumbre, ni el semiorco ni el semitigre se enteraban de nada. La paz debía haber podrido sus cerebros. 

—Sabes perfectamente que sí, Ragnar. No, no son animales, son personas. Quizá humanos. Quizá los que pusieron la botella. 

Escuchó al orco 

—Claaaaro. ¿Cuatro centímetros la herida? ¿Y cojea? No, mira, los jabalíes no son tan descuidados y no viven tan al norte. 

Flogdegnurt se fiaba más de Norm de que Ragnar; en especial en lo que a seguir rastos se refiere, de modo que comenzó a seguirlos, convencido de que les conducirían hacia los autores de aquella felonía. 

-Elfoz no hace esto. Humanoz zí. Hay que encontrarloz y hacerloz hablar. 

El orco habia pasado muchos años en las Tierras Salvajes. Aunque no era de ninguna manera un experto, habia aprendido lo suficiente para sobrevivir. Y, en las Tierras Salvajes, lo suficiente para sobrevivir era mucho comparado con otros lugares mas civilizados. El guerrero se acordó con una sonrisa de Raylkan, el amigo de Oberwald y Explorador Gris que le habia enseñado. Habia muerto en la defensa de Kator, durante la Guerra de la Llama. Suspiró. Siempre se iban los mejores.

Varag estuvo un buen rato mirando los alrededores. Ramas partidas. Tierra removida, buscando comida. Un poco de sangre reseca en la corteza de un arbol, donde seguramente un animal se habría rascado. 4 cerdas marrones adheridas a la corteza. Y, por supuesto, las huellas. Las huellas no debajan dudas. Eran jabalies. 

 Estas 2 son mas grandes, una de ella bastante irregular. Aqui estas otras son mas pequeñas. Seguramente... - sus pensamientos se vieron interrumpidos por la discursion entre el humano y el brinchie, que estaban mirando las huellas mas cercanas al rio, mojadas y menos claras.

—Sabes perfectamente que sí, Ragnar. No, no son animales, son personas. Quizá humanos. Quizá los que pusieron la botella. 

Esas quizas sean mas confusas. - aclaró el guerrero tratando de ayudar - Pero aqui estan más claras. Es un grupo de jabalies. Dos hembras, de unos 60-65 kilos y tres crias. Una de las hembras parece cojear, seguramente una herida superficial en los cuartos traseros. no mas de 4-5 centimetros. Le duele pero no parece algo que les haya ralentizado. - casualmente, Raylkar era un apasionado de la carne de jabali y le habia dado una tabarra enorme sobre ellos. Despues de varios años, finalmente podia usar para algo aquellas peroratas ante la hoguera. - Pasaron ayer por la noche. Tiene pinta de que llovió ayer asi que no creo que encontr...

—Claaaaro. ¿Cuatro centímetros la herida? ¿Y cojea? No, mira, los jabalíes no son tan descuidados y no viven tan al norte. 

El orco se rascó el mentón, sorprendido. Norm parecia estar irascible, algo que no era caracteristico en el. Quizas estar tan cerca de la sustancia esa maligna le habia afectado. No habia dicho el alcalde que les daba dolor de cabeza? Lo normal con dolor de cabeza era ponerse de mal humor.

-Elfoz no hace esto. Humanoz zí. Hay que encontrarloz y hacerloz hablar. 

El orco le puso la mano en el hombro al goblin y le entrego las cerdas que habia encontrado haciendo un gesto que decia "huelelo, anda". Eso no era humano. Ni siquiera un humano del norte.

 Norm, creo que la botella te esta afectando. - le dijo, sinceramente -  Quizas deberiamos llevarla en turnos, para evitar que afecte demasiado a uno de nosotros. Tan concentrado, quien sabe lo que hace esa substancia. Me gustaria encontrar a quien ha hecho esto tanto como a cualquiera, pero aqui no hay ninguna pista, Flog - le dijo al goblin - Puede que el escriba encuentre algo sobre estas runas en el pueblo.  O quizas sepan si hay eldakars cerca.

Grendalin no sabía nada sobre el extraño arte ese de rastrear a las personas, o los animales, o las cosas. Normalmente no tenía necesidad. Así que se fiaba de lo que decían los demás, después de todo eran exploradores grises. Se suponía que sabían de esas cosas. Lo que no estaba preparado era para tanta variedad de opiniones. No era lógico. Así que la conjetura del orco sobre la botella le pareció de lo más acertada.

Sí. Es más que probable que la botella desprenda algún tipo de energía que pueda llegar a confundir. Después de todo es un objeto muy poderoso.
No obstante mi raza y mi entrenamiento me permiten resistir con algo más de capacidad dicha ofuscación. Puedo llevar yo la botella si queréis. Habrá que examinarla detenidamente, pero mejor en algún lugar más tranquilo.

¿Habéis acabado ya? - preguntó Bastia al grupo de rastreadores que discutían sobre si eran humanas o animales las huellas encontradas.

Pensaba ofrecerse a llevar la mochila con la botella, al fin y al cabo ella era la única que se había atrevido a cogerla, pero ahora que estaba fuera todos parecían dispuestos. A ogro pasado, macho seguro, como decía uno de los exploradores grises.

Pero no iba a ponerse a discutir y simplemente se encogió de hombros ante la propuesta del escriba.

Está claro que quien ha plantado esto, tratará de repetir el ataque sobre el pueblo pero no podemos andar moviéndonos con eso encima. - señaló la mochila. - Habrá que llevarla, dejárla a buen recaudo y regresar por si encontramos algo más.