Partida Rol por web

Este es el Reino de los Muertos y el de quienes aún deben reencarnarse.

- "Vaya, vaya, vaya. ¿Qué tenemos por aquí? Un muerto atrapado entre dos mundos. Sígueme y te llevaré al plano de tu divinidad para tu disolución final. ¿O acaso estabas esperando para Reencarnarte?" -

- "Reencarnarse no es siempre el mejor negocio. Se pierden todos los recuerdos de tu vida anterior, sólo una parte de la esencia del alma permanece en el nuevo ser. ¿Qué te parecería volver a vivir dentro de este hombre?" -

La imagen cambia y se ve un soldado maduro luchando por su vida, o tal vez presa de un ataque de furia. Las imágenes son confusas.

- "¿Pero qué es esto? ¿Más muertos? ¿Es que las almas heroicas de Detritus no tienen nada mejor que hacer qué morirse? ¿Qué está pasando en esa maldita ciudad?" -

El alma fantasmal de Flacucho ve como dos figuras que le son familiares entran en ese mundo de sombras y tinieblas en el que se halla atrapado.

Mirando a sus nuevos compañeros, el semielfo que poco había hablado antes pregunta, "¿Es que sólo mueren los de nuestra escuela? Muy contentos no deben estar nuestros captores", acabó con una sonrisa más parecida a una burla que a otra cosa.

Eldorin observa serenamente a su alrededor y no le gusta en exceso lo que ve, menos lo que oye... ¿Disolución? No creo que sea el momento, no si puedo volver y hacer más bien...

De pronto sus compañeros van apareciendo...

-Vaya... parece que estamos falleciendo todos del mismo lado... Ese podrido lugar, alguien debería arrasarlo y purificar esas tierras de odio y muerte.

Eldorin siente rechazo hacia el legionario, no puede permitirse reencarnarse en una raza inferior, en una raza que no goza de los dones de la naturaleza, a la que ha vuelto la espalda hace demasiado tiempo.

-Mi decisión es volver, pero... ¿no hay posibilidad de recordar, y de volver donde los asuntos quedaron pendientes? Y cuando esa vida acabe... ¿Recordaré esta vida que acabo de abandonar?

De entre las nieblas del Más Allá surge la figura de Caraculo, parece confuso y perdido.

- "¿Qué? ¿Otro más? ¡No, si me vais a dar el día! Demasiado trabajo para esta pobre Muerte." -

Todo está oscuro, una sensación de libertad está inundando todo mi ser, abro los ojos, niebla.... que pasa aquí, donde me encuentro, no estoy muerto? Diría que si... Pero, y esta niebla de donde a salido?

- Un paisaje cubierto de espesas nieblas grises es todo lo que se ve en todas direcciones. Incluso el cielo no es más que una niebla infinita. El suelo es lo único diferente, vuestros pasos apartan la niebla que flota a ras del suelo lo bastante como para ver que está hecho de cenizas compactadas.

- Incluso vuestras figuras parecen fantasmales, traslúcidas e irreales. Sólo la figura de la Muerte parece real.

- "Quisiera no tener que repetir lo mismo demasiadas veces. Sí, estáis todos muertos. Muertos y bien muertos. Lo normal sería que hubieseis seguido avanzando hasta el plano de vuestra divinidad, para vuestra disolución final con ese mundo. Sin embargo, por alguna razón vuestras almas heroicas os mantienen atrapados en este Inframundo.

Yo puedo guiar vuestras almas perdidas hacia la disolución final. O también puedo ayudar a aquellos de vosotros que deseen Reencarnarse.

Sin embargo, no idealicéis la Reencarnación. No es como dicen vuestros filósofos. Apenas una fracción muy pequeña de vosotros regresaría de vuelta al mundo de los vivos. No conservaríais ningún recuerdo, pues el camino de regreso pasa por Lethe, el Río del Olvido.

Tampoco poseéis demasiado margen de maniobra para alterar vuestros Destinos. Al primero de vosotros en llegar le he ofrecido volver a vivir en la forma de un veterano Legionario que pronto será condenado a la Arena de Detritus.

Acaba de rechazar esa forma por considerarla demasiado humilde, así que puedo ofrecer esa nueva vida al segundo de vosotros en hablar: el semielfo." -

Maldita sea... murmuró descorazonado el tieflin Pensaba que al fin había escapado, que de nuevo era libre. Está claro que los ancestros han deciddo que mi misión no ha acabado...entonces,que así sea...acataré la decisión que se me haya reservado.

Cierto tiempo después, el alma de su asesino surgió de entre las brumas, y Dientes, o lo que quedaba de él, no pudo por menos que saludarle.

La verdad, me alegro de verte muerto

Todo era surrealista, y ente toda aquella nebulosa y mi cuerpo fantasmal se dibujan cerca de mí más figuras fantasmales, eran los que habían caído en la arena, y entre ellos a alguno que había matado con mis propias manos...

Escucho las palabras del ser que parece el único que posee un cuerpo real, y me quedo atónito pensando en las consecuencias que conlleva todo y el echo de encontrarme en esa situación, al rato Dientes el ser derrotado por mi me dirige la palabra...

Intento serenarme y pensar con objetividad, si es que eso se pude dadas las circunstancias...

 - Todos llegamos a morir, tarde o temprano, lo que no entiendo es... Por que te has de alegrar si no sacas beneficio??

Poco me queda ya que no sean pensamientos y sentimientos. Si tan sólo puedo disfrutar se eso, bienvenido sea el rencor hacia toda la raza humana, y en especial hacia tí... replicó el tieflin sonriendo irónicamente.

- "La mala noticia es que sólo puedo enviar de vuelta al mundo de los vivos a uno de vosotros cada semana.

Además, en vuestro estado actual sois poco menos que fantasmas. Tendréis que armaros de paciencia, y no darle demasiado la vara a esta pobre Muerte." -

Miro a la muerte con una sonrisa irónica...

 - Y por que no me enviáis a mi, así estas criaturas no tendrán que ver mi horroroso rostro...

- "Porque en todo hay un orden, incluso en la muerte y el renacimiento. Tú has sido el tercero en hablar, así que serás el tercero en escoger." -

Acallo mis pensamiento ante la situación, tendría la oportunidad de volver a la vida, pero quería realmente volver con el destino prefijado, había vivido de mala manera superando las adversidades y la vida no había sido fácil, verdaderamente deseaba volver a ese mundo cruel e injusto...

Quizá tuviera oportunidad de vivir una vida llena y placentera, pero debía pasar por la prueba de volver y sobrevivir a la arena, además olvidaría todo sobre mi... “Lo olvidaría todo ". Eso es una gran oportunidad de dejar atrás las pesadillas de mi vida pasada y violenta, creo que la decisión está casi tomada, solo debía esperar a mi turno...

Eldorin comenzaba a adaptarse día a día a su nueva no existencia, y notaba que empezaba a tomar conciencia de lo que le rodeaba, no todo era lo que parecía.

- El silencio reina por un tiempo en el lugar, roto finalmente por la Muerte.