Partida Rol por web

Horus - II

Encrucijada (Cap. IV)

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19/03/2016, 18:40
Estel Highwater

Estel dejó que la gente saliera corriendo, sin compartir la premura y la histeria que comenzaban a hacerse colectivas en el grupo. Por un instante, mientras comandaba la cámara para apagar el visor y les observaba marcharse, se sintió profundamente hija de su madre. Ella también debió ver una escena como esta, pensó, mientras sus sentimientos revolvían su sangre en una dirección muy diferente que la que parecía mover a los otros. Ella tampoco quiso entrar, en un principio… Había visto algo que los demás no querían mirar. Aun cuando papá estaba dentro. Aun cuando luego terminó entrando.

Echó una mirada a Omar a su lado, vagamente inquisitiva. Sabía que él estaría más cerca de compartir su percepción de las cosas que la percepción de los otros, incluso la de Charlotte. Más aún, luego de la guerra.

- Ahora sí parece que lo estamos repitiendo, ¿verdad? – dijo Estel, en voz baja, sólo para Omar – Casi paso por paso, Omar. Nos juntan como ovejas al redil, como lo hicieron con ellos. Nos meten en uno de los mismos sitios, con excusas más o menos verosímiles, como lo hicieron con ellos. Una “ella” nos espera… – agregó, sus ojos volviéndose afilados –… como también los esperaba a ellos. Y todos aquí salvo Samantha tenemos alguna conexión explícita con el Egipto de treinta años atrás, como también ellos con sus piezas – Estel hizo una pausa, y luego extendió una sonrisa sarcástica – Esto sí que parece una chirigota.

Colgó la cámara a uno de sus lados, como siempre disponible para ser rápidamente agarrada.

- Esto me gusta menos que antes. Pero creo que no tenemos otra opción seguir adelante e investigar, como acordamos en Londres. Y por Lottie y Sean que, joder sus almas, pero no se detendrán – miró a Omar a los ojos, le hizo un gesto para que echaran a andar antes de quedarse demasiado atrás – Una vez que entremos, intentaré investigar a nuestros alrededores y su vacío. Te dejo a ti la investigación de la gente, que eres mejor para ello. ¿Qué dices?

Notas de juego

Se supone que esto es justo cuando termina la otra escena y antes de entrar. Lo he dejado aquí por si quieres que Estel y Omar se pongan de acuerdo en algo más, Equis. Sino, Estel simplemente entra con Omar y seguimos en el ajo.

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19/03/2016, 18:46
Estel Highwater

Estel se había quedado algo atrás, pero no lo suficiente como para no ser una presencia más, a un lado de la propia presencia de Omar, en aquel sitio en el cual Fadil de pronto se había detenido y había identificado como una oficina ajena. Su rostro expresaba un caleidoscopio de emociones tal que todas parecían anularse, dejando una única emoción palpable a la vista: una seriedad abstraída, genuinamente analítica, que paseaba por los alrededores del mismo modo que parecía pasear por sus propios recuerdos. Su mirada se había concentrado finalmente en la herida de Sean, hasta que la apartó para mirar a Nathan.

Mi madre sabría qué decirte, pensó vagamente. Cualquiera de mis padres sabría qué hacer. Y, Dios, ambos van a morirse cuando sepan lo que está sucediendo aquí.

Echó una mirada a Omar, con un significado privado entre ambos, y se acercó al canadiense.

- Yo sí siempre he creído aquella historia – le dijo, en voz baja, mientras Lottie comenzaba a atender a Sean – No sólo porque mis padres pueden ser muchas cosas, pero no mentirosos ni mitómanos. He sentido de primera mano lo que aquello ha hecho en ellos. Lo he visto en los ojos de mi madre, que es escéptica y agnóstica, y en los de mi padre, más inclinado a creer que ella pero quizás incluso más riguroso. He crecido en aquellas consecuencias. Aquello fue real – concluyó, levantando una mano y apoyándola en el brazo de Nathan, un peso cálido pero firme – Nuestra ventaja aquí es que nosotros lo sabemos, y sabemos también qué pasó antes. Ellos, en ese momento, iban a ciegas.

Miró a los ojos al canadiense, y apretó un momento su brazo antes de soltarlo con gentileza. Su mirada recorrió toda la habitación de nuevo, captando como si fuera el lente de una cámara todos los detalles, buscando. Incluso lo hizo con el dispositivo que Mike tenía en su mano, que mostraba el lugar de donde el GPS de Melyssa continuaba sin moverse. Luego, volvió a su sitio cercano a la puerta y activó la cámara de fotos nuevamente, para echar una o dos fotos a la habitación, antes de moverse hacia la puerta para salir y echarlas unas el pasillo.

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19/03/2016, 18:46
Estel Highwater
Sólo para el director

Notas de juego

Estel tiene tres objetivos:

1) Echar un vistazo del GPS de Mike para ver si hay un mapa claro del cual percatarse, y ver bien dónde estaría el punto que señala a Melyssa;

2) Echar un par de fotos a la habitación donde están ahora, para revisarlas y ver si encuentra algo raro (ya sea ahora o luego; los monitores apagados le sugieren una continuidad de lo que pensaba del pocket universe); y

3) Ver si puede salir de la habitación (con la excusa de salir al pasillo para echar unas fotos a los alrededores), con una doble intención: primero, ver si el guardián intenta retenerla dentro o trata de tenerla bajo su alcance; y segundo, si puede, escabullirse para investigar en soledad los alrededores. 

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19/03/2016, 19:59
Fadil Jannan

-No, no le ha gustado. Pero Sean tiene que curarse esto.

Afirmó serio, respondiendo a Charlotte mientras agarraba el bote de desinfectante y lo abría. La miró a los ojos tendiéndole la botellita. Y luego le susurró su respuesta.

-Lo de Estel... es una locura, ¿no crees? Pocket universe... Realidad virtual... No, no sé qué está pasando con eso, no, no sabía que pasaría. Pero... hay algo, sí.

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19/03/2016, 20:12
Udjat

Estel tomó la muñeca de Mike para echar un vistazo al localizador gps que señalaba la posición de Mel.

Vio como el punto que la posicionaba seguía en el mismo sitio, más o menos, algún lugar que, si se atendía a las coordenadas tridimensionales que Mike había ampliado, debía estar más allá del despacho de Fadil y... más profundo.

Sin embargo, mientras rondaba por el despacho haciendo fotografías un poco al azar, e iba a salir a tomar otras por el pasillo,  algo llamó su atención. Algo en el localizador de Mike, precisamente.

Volvió a su lado, y le tomó la muñeca de nuevo.

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19/03/2016, 20:22
Udjat

Estel está tomando fotos, y en una de ellas, al ampliarla, se da cuenta de que al localizador le ocurre algo raro.

Cuando se acerca a Mike y lo comprueba, ambos pueden ver que la luz de posición de Mel oscila en intensidad, parpadea. Y, de pronto, desaparece.

Pasan un larguísimo, eterno, segundo antes de que el gps vuelva a funcionar.

Y entonces veis que se reposiciona. El mapa se achica, la escala cambia, la tierra se aleja. Y luego se acerca de nuevo, se amplía de nuevo. Sólo que en otro lugar.

Según el gps Mel está... en Méjico. En el Yucatán. En... Chichén Itzá.

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19/03/2016, 23:57
Sean Dunne

Sean se sentó obedientemente. Después de todo, Lottie seguía siendo su hermana mayor, y la respetaba: para ser una simple despiojadora de lémures, se lo montaba muy bien. Si fuese Sean quién estuviese viviendo en Madagascar, con lo desastre que es para llevar las cuentas, estaría pidiendo dinero a casa cada dos por tres.

Miró de soslayo la pared llena de pantallas. Había sido una vieja aspiración de Sean: poder jugar algún día a un videojuego en un panel multipantalla. Es más fácil que consiga su sueño ligándose a la secretaria de Fadil para que le cuele aquí con una PS6 bajo el brazo, que ahorrando y comprando los monitores uno a uno a lo largo del tiempo.

Por detrás, a ralentí, como proceso cerebral secundario, se iba mascando una idea...

Puessss... bonita choza. Sí, señor. En esta sala echo de menos una decoración egipcia temática. Papel de pared con jeroglíficos... un sarcófago que cuando lo abres es un perchero... un busto de Nefertiti sobre la mesa... ¿Sabes qué? Compré un busto de Nefertiti en el aeropueto, que además es despertador. Te iba a gustar, Fadil. Te pasaré la dirección de la tienda por email... la dirección... del aeropuerto...

Tenía esa sensación de estar yéndose por las ramas, y que la gente empezaba a ignorarle. Ya sabéis, esa sensación... como cuando eres el único de una comida familiar que se ha olvidado el móvil. Reordenó sus ideas.

Fadil... por un casual... ¿no tendrás acceso desde el ordenador de tu secretaria a una base de datos con las fichas de tu personal, verdad? Creemos que Mel puede estar con una de tus camareras. A ver si en este tiempo muerto que me paso en boxes-dijo, mezclando deportes-, vemos las fotos del personal y la reconocemos por la foto de la ficha.

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20/03/2016, 11:49
Udjat

La puerta se cerró tras ella con un ruido extraño, como de compartimento estanco al que se le aplica vacío mediante un mecanismo hidráulico. Un silbido seguido de un "flop", y luego la molesta sensación de presión en los oídos que uno tiene a veces en un avión.

Melyssa se encontró sola en una estancia redonda, completamente metálica. La roca, si estaba, estaba tras una estructura de paneles, tubos, cañerías, válvulas... todo en un metal dorado cobrizo, en tonos más o menos oscuros, más o menos brillantes. Daba la sensación de estar metida en un escenario de steampunk, si Mel hubiese sabido lo que era eso. Que no lo sabía.

Sin embargo, dispuestas entre los paneles e indicadores de aspecto anacrónico, había pantallas actuales, pantallas de ordenador, o parecidas, situadas a lo largo de todo el perímetro, y a la altura de los ojos, o quizá algo más. Habían sido superpuestas allí, colocadas por encima y por delante de la maquinaria original.

Algunas de las pantallas estaban encendidas, y mostraban distintas escenas: el laberinto de roca por el que había llegado, la cava de los vinos donde se encontraba la entrada al subterráneo, incluso la terraza junto al oasis, completamente vacía.

En una de ella podía verse un despacho, justo antes del de Dirección, que vagamente recordó que había atravesado para llegar hasta allí. Y en esa estancia estaban en ese momento su hermano, Sam, y el resto de sus amigos, Fadil incluido. Vio también a un enorme egipcio que se mostraba impaciente, con los brazos cruzados sobre el pecho, mientras al parecer Charlotte le aplicaba desinfectante a un corte en el codo a Sean.

Por lo demás, no había ni un alma más a la vista.

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20/03/2016, 16:40
Charlotte Dunne
Sólo para el director

-No me gusta ese término, yo tengo otra visión menos...técnica. Pero no es una locura, Fadil. Pasó. Y está pasando de nuevo-le susurró aún más bajo.

Los ojos de Fadil le devolvieron la mirada y ella se los quedó mirando largo rato, intentando averiguar si mentían o no. La gasa estaba a aquellas alturas completamente empapada de desinfectante, así que Charlotte dejó la botellita sobre la mesa justo cuando vio por el rabillo del ojo que su hermano, misteriosamente y sin protestar, se sentaba y dejaba que fuera ella la que lo curase. No podía creérselo aunque lo tuviera delante de las narices. Cerró la botellita y volvió a mirar a Fadil.

-¿Quién es ella? -lo dijo tan bajo que casi ni ella se escuchó.... Sí, tenía su suposición y pondría la mano en el fuego por ella, pero Fadil sabía perfectamente quien les estaba esperando. Y saberlo le ayudaría a ir preparada.

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20/03/2016, 19:16
Mike Yaddow

Que Mike estuviera preocupado por Mel era una cosa, pero que el resto comenzara a emparanoiarse por todas aquellas historias viejas ya era distinto, Nathan parecía muy afectado por lo que fuera que creía que estaba pasando.

-¡Ey Nathan! Mi padre solo nos habló una vez de todo aquello y fue la noche de nuestra graduación y ahora no sabría decirte si Mel y yo estábamos más bebidos que él aquella noche. Se que pasaron cosas raras, inexplicables, pero creo que simplemente se intoxicaron con algo y tuvieron una alucinación colectiva. Se que algunos de vosotros pensáis que hubo algo más, algo místico o mágico, pero a decir verdad me cuesta mucho creerlo. Pero este hotel es real, la fiesta de ayer y tu coreografía también... No hace falta que cunda el pánico. A decir verdad a Mel ya la hemos perdido unas cuantas veces, no aquí en Egipto, pero por eso le puse un gps en el colgante, la encontramos y volvemos a salir a la terraza, no te preocupes, seguro que la muchacha esa quiso coger un atajo y se metieron en una zona vieja del hotel por error, pero Fadil nos llevará.

Al hablar con Nathan intentaba calmarse él mismo también y a cualquiera de los otros, tan solo habían sido un cúmulo de circunstancias que les habían alterado, junto a la resaca que la mayoría arrastraba aquella mañana. Lo de ponerse a ver las cintas del día anterior le pareció mala idea, personalmente no tenía ningún interés en recordar lo que había hecho y no recordaba y parafraseando aquella famosa frase:

Lo que pasa en la fiesta del Sand Castle, se queda en la fiesta del Sand Castle.

A su lado Sam se defendía como podía para aguantar el ritmo con su calzado, por fortuna su amiga no había elegido unos taconazos aquella mañana o ya la habría tenido que salvar de algún que otro tropiezo, la miró cuando se dirigió a él y le extrañó que dejara la frase sin empezar, rara vez Sam hacía eso, por lo general las palabras salían atropellándose de su boca hasta que se daba cuenta que quizás había hablado de más e intentaba arreglarlo. Pero aquel intento de frase infructuoso le indicaba que debía estar preocupada. Apretó un poco la muñeca por la que la tenía agarrada intentando darle un poco de tranquilidad.

-No pasa nada, enseguida encontraremos a Mel y nunca podréis decir que no fue buena idea poneros un gps.

Al menos esta vez no le podrían echar la bronca por una de sus "geniales ideas" porque estaba siendo muy útil.
Cuando Charlotte aclaró donde debía estar Mel, Mike le sonrió como disculpándose y negó con la cabeza.

-No Charlotte, si quizás no te presté toda la atención que merecías no fue por Lissa, estaba preocupado por Mel, estaba un poco rara. ¿Así que aún conservan parte del original...? Pues ahí tenemos que ir a buscar. Venga Fadil, vamos.

Fadil no los llevó allí si no que la primera parada la hicieron en lo que debía ser su oficina, si el letrero no le engañaba. Había ido en busca del botiquín. Mike se resignó, encargarse de la herida de Sean era prioritario, al fin y al cabo Mel tan solo estaba perdida. Pero no fue Mike el que protestó, el mastodonte egipcio que les seguía no parecía muy contento, así se lo hizo saber su traductor. Mike se volvió a medio camino entre él y Fadil.

-No se quien es ella y porque hablas en plural, pero yo no quedé con nadie y te aseguro que no voy a ir a ningún lado hasta que encuentre a mi hermana. Y se lo puedes decir a tu amigo Fadil, si es que no me entiende.
-Se volvió a Charlotte que también parecía intrigada por las palabras del negro.- Le dijo que estaba perdiendo el tiempo y que una mujer nos esperaba. ¿Vosotros quedasteis con alguien?

La llegada de Estel a su lado le sorprendió un poco, mucho más cuando le cogió la muñeca del comunicador y comenzó a observarlo. Quizás la fotógrafa en su búsqueda de alguna instantánea había recorrido la parte antigua del hotel y sabía donde podía estar Mel. Mientras tanto Sean negociaba con Fadil la entrada al ordenador de la secretaria para buscar a aquella empleada, a Mike no le interesaba la chica, solo encontrar a su hermana.
Miró la pantalla del comunicador y miró a Estel que seguía sosteniendo su muñeca. El punto que representaba la posición de su hermana parpadeó unos segundos y de repente desapareció. Mike miró extrañado a Estel como queriendo comprobar que ella también lo había visto y por su cara así era. Iba a dar un par de golpes a su comunicador cuando volvió la señal pero el gps comenzó a reposicionarse. Mike vio como la imagen se alejaba del planeta, este giraba y de repente volvía a bajar hacia...

¿Méjico? ¿Yucatán? ¿Chichén Itzá? Eso me pasa por comprar lo más barato...

Por supuesto su hermana no estaba en Méjico, Yucatán, Chichén Itzá, estaba a unas pocas decenas de metros de ellos en alguna parte del entramado subterráneo que había debajo del hotel y que había hecho volverse loco al gps.

-¡Lo que faltaba! -Mike enseñó su muñeca al resto.- Ahora Mel se acaba de teletransportar a Méjico. -Mike sonrió, para él tan solo era un fallo en el gps que en cualquier momento devolvería la señal, si es que no se había estropeado.- Bueno Fadil, ahora tendremos que buscarla a ciegas, espero que conozcas bien los túneles donde se han metido mi hermana y tu amiga. ¿No tendrás una cámara de teletransportación ahí abajo verdad?

Esa sería una buena historia para complementar la que su padre les había intentado colar una vez sin demasiado éxito.

¡Que narices! En cuanto volvamos a Miami le voy a decir que Mel se teletransportó a Méjico, a ver que cara pone.

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22/03/2016, 00:16
Samantha Johnson

Al llegar al despacho de la secretaria de Fadil pasó de impaciente al no comprender por qué paraban a ligeramente avergonzada ante la nobleza del egipcio. Puede que no estuviera contenta por el alto en la búsqueda, pero tal vez, sólo tal vez, necesitaban aquel parón tanto para curar decentemente a Sean como para calmarse. Sobretodo calmarse. Y menos mal que Charlotte parecía tener algo de conocimiento a la hora de curar porque si dependiera de ella le ponía una tirita, un besito de rana y seguir que estaban tardando. 

- Mi tía Amber se trajo de Las Vegas un despertador con la forma del Luxor. Ya sabéis, la pirámide negra -Intervino para amenizar el mal rato que debía estar pasando el pelirojo- Pues ya os imagináis la primera vez que sonó el despertador. Cada vez que nos reunimos por Navidades rememora la fatídica semana que estuvo con la mano vendada. Creo que llegó a demandar a la fábrica, pero cualquiera la cree. Está un poco majara, de las que discute con los gatos. En fin... Tenía que haber comprado algo en el aeropuerto, pero me decepcionó un poco, la verdad. Sé que sería demasiado típico, pero decepciona la falta de detalles egipcios, ¿no? Vuelas miles de kilómetros y el JFK me parece más interesante. 

Dejando la banal conversación echó otra ojeada al enorme egipcio. Si en su forma 'normal' parecía que desayunaba uno o dos recién nacidos por las mañanas ahora, con semblante impaciente, tenía aspecto de comenzar con los adultos. Se arrimó un poco más a Mike no fuera que le diera un bocado. Seguro que para él una rubia sería un plato exótico, tema que cortó de inmediato  porque ya estaba lamentando haber dejado los pastelillos atrás. Siempre le pasaba lo mismo en situaciones estresantes: hablaba por los codos y le entraba hambre.

Cuando Sean propuso entrar en el archivo de personal para reconocer a la mujer se ofreció a agilizar el trámite, pero también aclaró que llevaría algo de tiempo y tal vez no era el momento adecuado.

- Déjame ver -pidió a Mike en cuanto comentó lo que pasaba al gps -. Te dijimos que no compraras en esa tienda online de Bangkok. Tienes suerte de que no haya explotado alguno de esos chismes, así están -Señaló la pantalla que indicaba la errónea ubicación-. Apuesta por un producto de calidad frente a un ahorro sumamente sospechoso. Aquí tienes el por qué.

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22/03/2016, 03:14
Omar Echenique

-Cariño, estamos condenados a reproducir los pecados de nuestro padres. Y eso es algo que odio por la inevitabilidad de lo mismo. No quiero convertirme en mi padre. Dudo que quieras ser tu madre. Somos Estel y Omar, pero treinta años después, el escenario es el mismo, las condiciones son las mismas, hemos sido llamados y hemos acudido. No podemos culpar a nadie. Somos responsables de nuestros actos. Sabemos que lo que ocurrió fue real, como bien dices. No una fantasía ni un jugueteo con el LSD. Estel... -una pausa se produjo como si Omar buscara las palabras aunque algo en su mirada desdecía el drama anunciado-, tal y como hicieron nuestros progenitores... -negó con la cabeza, como contrariado aunque la sonrisa, anticlimática en aquel contexto, en aquel corredor laberíntico donde las palabras de Lottie se escuchaban altas y claras, anunciaba algo posiblemente inesperado aunque no traumático- seremos Thelma y Louise.

Una breve mirada en derredor que volvió a centrarse en Estel. Una sonrisa desvanecida.

-El gigante tiene prisa. Se impacienta. No le gusta la reberldía de Fadil. De acuerdo, Estel. Reparto de funciones.

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22/03/2016, 03:24
Omar Echenique

-Nathan no miente al igual que tampoco lo hicieron nuestros padres al narrar lo que les aconteció hace años. Este es el laberinto. Ella es ella y bastará que acudamos a su presencia para confirmarlo. No es fruto de una noche psicotrópica ni de nada similar. Quizá vuestros padres no quisieron hablar de ello en exceso, quizá porque no se vieron tan involucrados como otros o porque prefirieron olvidar una experiencia poco agradable. Realmente, no es importante o siendo borde, no me importa a mí. Estel, Charlotte, Sean y yo hemos vivido con esa historia desde nuestra infancia. Quizás con diferentes interpretaciones, con diferentes sensibilidades. No todos tuvieron o representaron un papel de igual peso. De los ocho presentes, cuatro hemos crecido con la consciencia de un pasado narrado desde nuestra infancia como una realidad que, aunque fantástica y mágica, fue tangible y veraz. Acepto tu escepticismo, Mike. Diría que es algo congénito a un estadounidense. Y no te lo tomes a mal -señaló alzando las manos en señal de paz-. Simplemente es constatar algo. Sea como sea, el tiempo se encargará de demostrar qué es cierto y qué no. Y me temo que antes de lo que deseáramos. 

Mel se ha teletransportado a Méjico.

Fue como un puñetazo en el estómago. Su rostro palideció levemente mientras Samantha se concentraba en dar una respuesta lógica y racional a aquel absurdo. Omar miró a Estel. Luego al resto.

-Deberíamos movernos. Cuanto antes. No nos esperarán eternamente. Es hora de que asumamos que hemos entrado en un juego del que no podemos escapar. Es hora de que conozcamos las reglas de juego. Si es que quieres que encontremos a tu hermana, Mike.

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22/03/2016, 03:37
Omar Echenique

Aunque durante su discurso se había alejado de Estel, ahora volvía a buscarla, como el barco que necesita de un faro para llegar a buen puerto o como el mar que busca la orilla para descansar con un último suspiro.

-Estel, Méjico. ¿Qué tienen en común Méjico y Egipto? Dime que no soy un paranoico, un obseso, un retrasado. Yo no tengo dudas. Estamos dentro de aquello en lo que estuvieron nuestros padres. Pero ambos sabemos que aquello, teóricamente, concluyó. Por eso debería ser imposible. Pero ahora su aparato indica que Mel está en Méjico, ese delicioso país de playas paradisíacas, tequilas, margaritas y... pirámides. Dime que me equivoco, que lo que pienso y no digo es mentira.

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22/03/2016, 11:07
Charlotte Dunne

Lottie pareció decirle algo más a Fadil, en un tono demasiado bajo ya para el que resto pudiera escucharla, pero no se demoró mucho más y se dirigió hacia su hermano con la gasa llena de desinfectante en la mano.

-Vamos con esto, es solo un segundo, ¿vale? No dolerá. Los lémures nunca se me han quejado... –bromeó con él, sabiendo lo aprensivo que podía llegar a ser Sean. Se acuclilló a su lado y le limpió cuidadosamente la herida mientras escuchaba como los demás hablaban en la habitación sobre lo que estaba pasando.

No te esfuerces, Omar. Ya se lo expliqué a Mike y a su hermana, pero su padre no ha sido como los nuestros y no les ha explicado nada, para ellos esa experiencia fue solo una fantasía creada por drogas, alcohol o vete a saber qué. Solo lo entenderán cuando la vean y se topen con esto cara a cara, para lo que no queda mucho, me temo[/] No pudo evitar levantar la mirada de la herida para mirar a su hermano [i]Si hubiera una sola forma, solo una, de sacarlo a él de aquí... Pero ella no lo permitirá. Sea lo que sea para lo que nos ha traído aquí, si ha esperado tanto, es por una buena razón. Y la venganza no es una opción a descartar...

-Creo que ya está, te voy a poner un apósito para que no te entre suciedad y .... ¿QUÉ HA IDO A DONDE?-levantó la voz al preguntarle a Mike, aunque había escuchado perfectamente, y la gasa se le cayó al suelo de la impresión-Merde!. Menos mal que había terminado de usarla.

Buscó la mirada de Omar, y la encontró sin problema, encontrando después la de Estel. No hicieron falta palabras. Eso era nuevo, y preocupante. Una cosa era estar todos juntos en Egipto pero... ¿Méjico? Recogió la gasa, se puso en pie y se dirigió rápidamente hacia la mesa donde estaba todo el material que había sacado Fadil, buscando lo que quería. Lo encontró. Un apósito con un poco de crema desinfectante y, si recordaba bien, esa marca pegaba como mil demonios, así que no se le soltaría a su hermano en un buen rato. Le lanzó una mirada interrogativa a Fadil mientras abría el sobrecito, pero no esperó su respuesta, se estaba poniendo más nerviosa de lo que quería aparentar, sino que se dirigió de nuevo junto a su hermano y le colocó el apósito con cuidado, dejando la herida completamente protegida del exterior.

-Listo-le dijo a Sean, levantando la cabeza para observar al resto, evaluando como se habían tomado aquello de Méjico. Y negó para ella, Mike y Sam seguían sin verlo. Nathan parecía que reaccionaba y Oli parecía que seguía dormido o lo estaba asimilando a su forma. Estaban claramente divididos, las reacciones iban a ser totalmente diferentes y no sabía si aquello iría en contra del grupo. Volvió junto a Fadil-Muchas gracias por pararte aquí para curar la herida de Sean-era sincera al hablar. Fadil podía haber seguido directamente hacia donde debía llevarlos, pero se había detenido allí por su hermano. Lottie valoraba aquel tipo de cosas-Será mejor que vayamos, cuanto antes lleguemos antes sabremos que es lo que ella quiere de nosotros. Luego ordenamos esto... si hay oportunidad, claro...

Se estaba poniendo nerviosa, sí. ¿Por qué Méjico? ¿Por qué allí precisamente? ¿Cómo iban a encontrarla? ¿Cómo ha llegado allí? Su mente buscaba razones para aquello, pero no conseguía pensar con claridad, eran demasiados interrogantes. La única idea clara es que necesitaba una explicación. Y ya. El miedo y la expectación se mezclaban en su interior. 

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22/03/2016, 11:32
Fadil Jannan

-Ella... ella es Ella. Es la Madre.

Su voz fue dura como el pedernal, cortante como el cristal. Y también su mirada, cuando la dirigió a Charlotte.

La parisina tuvo un escalofrío. Había odio en esa mirada, un odio rancio, concentrado, implacable. Pero lo que la estremeció es que no supo, no pudo saber, si el odio era hacia esa a la que llamó Madre, o hacia ella misma...

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22/03/2016, 11:35
Fadil Jannan

-Podemos mirar los datos del personal, claro. No hay problema, los tengo aquí al lado, en mi despacho. Pero, estoy de acuerdo con Omar y con Charlotte. Y con la urgencia de Mike. Cuanto antes encontremos a Melyssa, antes acabaremos con esto.

Su voz era átona. Desapasionada. Miró a Sean.

-¿Todo en orden ahora? Pues sigamos.

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22/03/2016, 13:49
Nathan Morrison

Nathan cabeceó ante las palabras de Omar. Estaba en la misma sintonía que él pero desde su perspectiva costaba tanto asumir la verdad en aquella historia que, a pesar del miedo o precisamente como respuesta lógica al propio miedo, le era imposible.

- Mi padre me contó cientos de veces aquella historia. Podría relatarla de corrido sin escatimar detalles y sensaciones. Lo hacía cada noche, antes de dormir... era como un ritual. ¿Cómo puedo creerla? Ya sé que no mentía pero una fantasía es una fantasía. Es como toparse la torre de Rapunzel en mitad de un bosque en la Columbia Británica. Pero lo piensas con frialdad... con la mente de un adulto y no la de un niño y aquello se parece más a una pesadilla que a una aventura. Pero sea lo que sea que fue aquello se vuelve a repetir. Todos lo sabemos y no vale de nada que nos hagamos los escépticos.

El bailarín caminaba con pasos cortos y rápidos. Estaba nervioso e impaciente y aquella parada estratégica hacía que se le llevasen los demonios. Vamos... ¿un corte en el codo por accionar la alarma? ¿Es el precio a pagar por no morir achicharrado? Vaya sistema de seguridad más "kármico".

- De Egipto a Méjico... - Nat se llevó las manos a la cara para acabar pasándoselas por el pelo con fuerza, bien pegadas al cráneo. Como si de esa manera pudiera eliminar malos pensamientos o ideas funestas. Como un mal dolor de cabeza que no se va ni con todo el Ibuprofeno del mundo. - Precisamente el otro sitio dónde hay pirámides. Pero, claro... seguro que es porque el GPS es de mala calidad.

El sarcasmo tampoco era habitual en el chico. Aquella situación le exasperaba y necesitaba encontrar respuestas o, como decía Omar, al menos saber las reglas de aquel juego oscuro y peligroso al que se veían todos abocados.

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22/03/2016, 18:54
Estel Highwater

Estel se había mantenido escuchando a Omar con una única expresión, aquella que su rostro vestía de tanto en tanto y de que, de tan seria y analítica, parecía totalmente inexpresiva. En un momento, incluso, sus ojos no pudieron apartarse de las figuras que se desvanecían a la distancia. Sin embargo, cuando Omar comenzó a extender aquella sonrisa anticlimática, Estel giró hacia él y extendió la misma sonrisa. La mantuvo incluso cuando volvió a hablar.

- No sé si no le gustará que su aliado tenga consciencia propia, o que no sepa que en realidad es un sólo un instrumento y se comporte como tal – dijo, antes de inclinarse y besar la mejilla de Omar – Sigamos, Thelma.

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22/03/2016, 18:55
Estel Highwater

Había algo extraño allí, sin duda, y si las acciones aparentemente erráticas de Estel no lo gritaban por sí mismas, sin duda la expresión de su rostro lo hacía. Y siguió haciéndolo cuando sus ojos fueron del comunicador hacia los de Mike, una vez que el punto que representaba a Melyssa se apagó de pronto como el latido de un corazón sorprendido, para luego volver a aparecer de modo imposible. Sus dedos, que curiosamente se mantenían aun aferrando la muñeca del estadounidense, le apretaron un momento como si quisiera trasmitirle algo. Quizás, lo he visto. Quizás, estoy contigo. Quizás, no cedas a la locura, todo estará bien. Quizás…

Sin embargo, Mike se soltó de su agarre de repente y llevó adelante una reacción tan sólo calificable como estadounidense que hizo parpadear a la británica en Estel. Por un instante, se sintió completamente descolocada en tiempo y espacio, y miró a su alrededor vagamente mientras escuchaba la voz de Samantha como ruido ambiente, proveyendo de una explicación que de tan racional era ridícula al interior de un sistema compuesto de variables irracionales. Vio además la reacción exagerada de Lottie, el extraño silencio de Sean, la repentina palidez de Omar.

Fijo entonces su atención en Omar, sus labios se volvieron una línea fina, y asintió. Cuando se le acercó, inclinó un momento la cabeza hacia él, aunque sus ojos apenas se apartaron del sector donde estaban Lottie, Sean y Fadil. Su expresión se cerró ante la repentina premura que acuciaba al manager del hotel, pero no le contestó. Sí habló cuando terminó de hacerlo Nathan.

- Algo que siempre le gustó a mi madre fue decirme: “¿Cuántas casualidades se necesitan para probar una causalidad?” – dijo, mirando al canadiense – La respuesta es “ninguna alcanza”. Es una falacia lógica… claro, en un mundo donde las leyes de la física que conocemos se cumplen – agregó, con una leve sonrisa sarcástica, sin humor. Aquella se apagó al mirar a Fadil – Sí, sigamos, para buscar a Melyssa y antes que descubramos a la fuerza y gracias a la impaciencia de este caballero – Estel señaló vagamente al guardián – hasta qué punto tú también estás dentro del juego… o no lo estás.

Dicho eso, miró al resto, miró a Omar y, tras mirar al guardia a los ojos de modo desapasionado, dio el primer paso para salir de una vez por todas de la habitación.