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Indiana Jones y la Legión de la Muerte

Aventura Brandon Larsen VI

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15/10/2014, 17:52
Narrador

Preludio.

El millonario Waldo Shyster-Naven ha pedido a Indiana Jones que dirija una expedición a las junglas de Sudamérica para localizar su desaparecida colección de valiosos objetos incas. Tres expediciones de búsqueda han desaparecido ya y los nativos culpan de ello a la odiosa Legión de la Muerte. El arqueólogo Sir Reginald Brooksbank, viejo amigo de Indy, se cuenta entre los desaparecidos, por lo que Indy acepta ocuparse de esta misión desesperada... en la que tú le acompañas buscando aventuras.

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15/10/2014, 17:53
Indiana Jones

Andes Peruanos, 1936.

—¡Ya no falta mucho, chico!—dice Indiana Jones mientras lucha por mantener el control de la avioneta—. Si puedo hacer frente a esta rara tormenta estaremos en Cuzco a la hora de comer.

¡La ciudad de Cuzco! Aunque sois sacudidos por la repentina tormenta, tú atisbas las cimas cubiertas de nieve que se extienden abajo, ansioso por vislumbrar la capital inca. Hace cientos de años, el primer inca Manco Cápac fundó en Cuzco un imperio más vasto que la antigua Roma, el Tahuantinsuyu. Tú estás deseando verlo. Otra violenta sacudida estremece la frágil avioneta, obligando a Indy a aferrarse con más fuerza a los mandos.

—No lo comprendo —dice—. Hace un tiempo perfecto. ¿A qué viene esta turbulencia? Si la situación empeora y perdemos altitud en estas montañas, estamos listos.

¡Guums! ¡Bamp!

—¡Indy, seguro que fue esto lo que hizo que el avión de carga se estrellase! —comentas.
—Pues ahora, reza para que nuestro aparato no se estropee —contesta Indy.

Un momento después, Indy vuelve a tener el control del avión.

Notas de juego

Si no te pongo que elijas algo es porque te doy "cancha" para que intervengas. Si no quieres decir nada, coméntalo en un post y seguimos con la narración.

2

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16/10/2014, 19:30
Brandon Larsen VI

Los motores de la avioneta, situados en las alas, no habían parado de sonar desde que salisteis del aeropuerto privado de Nueva York. Tal es el estruendo que causan, que no has podido dormir durante todo el trayecto nocturno. Y ahora, acompañados con el ruido de los zarandeos provocados por las turbulencias. Son más irritantes que nunca.

¿Está seguro de que sabe pilotar este cacharro, profesor? Comentas intentando aparentar ningún signo de nerviosismo en tu voz. ¿Debería ir buscando los paracaídas? El miedo poco a poco va interfiriendo en tus pensamientos conforme se va sacudiendo una y otra vez la avioneta. Dudas sobre si fue buena idea aceptar la expedición con aquel conferenciante al que no conocías de nada.

Notas de juego

La narrativa en segunda persona no?

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17/10/2014, 20:08
Indiana Jones

¡No! Tranquilo, chaval, creo que es una corriente de aire ¿de acuerdo? -te miró Indy algo dubitativo e incrédulo por tu actitud, pero seguro de sí mismo-. ¡Te veo muy inseguro, muchacho! En fin... ¡esperemos que sea eso!

Indiana comenzó a guiarte en los controles, marcando el ritmo de pilotaje.

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17/10/2014, 20:09
Narrador

¡Menuda historia, para publicarla en el periódico de la universidad! La búsqueda de un avión de transporte desaparecido, cargado de objetos incas... ¡La búsqueda en compañía del arqueólogo mundialmente famoso Indiana Jones! Una vez más agradeces a tu buena suerte por haberte cruzado en el camino del mismo y haber permitido acompañar a Indiana.
—Preferiría no tener que quedarme en Cuzco —dices—. ¿Puedo ir contigo en la expedición, Indy?
—¡No!—replica Indy—. La expedición será demasiado peligrosa. —Luego tu amigo sonríe—. Pero no te preocupes, chico. Conseguirás tu relato.
—¡Ojalá! —dices—. Me pregunto si puedo entrevistar también a Waldo Shyster-Haven.

Shyster—Haven es el huidizo millonario, propietario del avión desaparecido.
—Lo dudo —contesta Indy—. Casi no recibe a nadie. Incluso a mí me ha contratado por carta... ¡Yo no lo he visto nunca! Y en su carta tampoco me ha dicho gran cosa. Tan sólo que deseaba que yo dirigiese la expedición desde Cuzco hasta la jungla y que uno de los objetos que iban en el perdido avión es el Colgante de los Incas.
—¿Qué es eso? —preguntas.

—Un legendario collar de oro —contesta Indy—. Según la leyenda, en otro tiempo perteneció a Manco Cápac, el primer inca. Se dice que ese collar confería a los reyes incas poder sobre la vida y la muerte. Y podría constituir una pista para el origen de otra leyenda. ¡La leyenda de la Legión de la Muerte!
—¡Qué tétrico!
—Los indios de esta región todavía temen aún a algunos ejércitos misteriosos, a los que ellos llaman la Legión de la Muerte
—explica Indy, haciendo que la avioneta sobrevuele la deslumbradora extensión azul del lago Titicaca—. Son tres las expediciones que han salido en busca del avión, desde que se estrelló hace dos meses. Ninguna ha vuelto. ¡Los indios piensan que los mató la Legión de la Muerte!
Indy te explica, luego, que su viejo amigo, el arqueólogo Sir Reginald Brooksbank, dirigía la expedición del avión siniestrado.
—Y puede que, en algún lugar de la jungla, Sir Reggie esté siendo víctima de esa Legión de la Muerte, o lo que sea... Mientras exista una posibilidad de que esté aún con vida, yo iré a rescatarlo.

¡Patt! ¡Patt! ¡Sputt! ¡Sputter!
¡El motor de la avioneta está fallando!

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20/10/2014, 20:28
Brandon Larsen VI

¿Inseguro? Más bien precavido diría yo.  Dices mientras tomas una bocanada de aire. No sé, cuando uno sobrevuela una zona donde varios aviones han desaparecido misteriosamente uno tiende a ponerse en alerta.

Conforme va pasando el tiempo, te acabas acostumbrando a los temblores. Pero unos ruidos totalmente ajenos a todo lo que reconocías te indican que el motor está teniendo problemas. Por lo que repentinamente empiezas a farfullar cosas sin sentido. Vale, aquí llego el momento. Por aquí deben haber unos paracaídas de emergencia ¿no? ¿Y si no las hay? A lo mejor hay una lancha inflable. Pero que tonterías digo, eso sería una locura. Dices sin parar de mover la cabeza buscando cualquier cosa que pueda servir.

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23/10/2014, 12:14
Indiana Jones

Tranquilo, chaval -decía Indy desde su propio nerviosismo-, no desvaríes, tomémonoslo con calma y con la cabeza fría, ¿de acuerdo? -el avión vibraba lentamente, hasta que una turbulencia lo zarandeó de arriba a abajo y volvió a establizarse un poco, sin dejar de vibrar-.

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23/10/2014, 12:16
Narrador

¡Estáis perdiendo altura rápidamente!
Indy intenta desesperadamente controlar los mandos, pero no lo consigue.
—¡Sujétate!—grita mientras el aparato cae en picado—, ¡Voy a intentar tomar tierra con esta carraca!
Lejos, al oeste, está el amplio y desolado altiplano, una meseta de laderas escarpadas, con la superficie cubierta de césped. Al este, el extenso lago Titicaca. ¿Qué dirección deberá tomar Indy con el aparato? La superficie lisa y verde del altiplano podría resultar una buena pista de aterrizaje, siempre que Indy no calcule erróneamente y lleve el aparato al borde escarpado de la meseta. ¡No podríais sobrevivir si cayerais a la jungla de abajo! Pero la superficie del lago Titicaca podría ser que ofreciera un cojín más mullido para el impacto.

Notas de juego

4

Si Indy toma la dirección del altiplano, pasa a la página 22.
Si se dirige al lago Titicaca, pasa a la página 6.

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23/10/2014, 21:33
Brandon Larsen VI

Notas de juego

Pagina 6.

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26/10/2014, 12:28
Narrador

Indy y tú saltáis en vuestros asientos, mientras que él se esfuerza por llevar el aparato a la relativa seguridad del lago Titicaca. Las reverberantes aguas suben veloces hacia vosotros. Chocáis con el agua rápida y violentamente. La avioneta se eleva sobre el agua y vuelve a caer. Casi al instante la cabina se llena de agua. ¡Os hundís rápidamente! Indy saca dos salvavidas de debajo de los asientos y fuerza la puerta hasta abrirla. Como ha hecho descender a la avioneta con gran habilidad junto a la orilla, no tenéis que nadar mucho trecho. Mientras braceas en dirección a una cala rocosa, te vuelves y miras por encima del hombro. ¡La avioneta ya se ha hundido en el fondo del lago! Minutos después, Indy y tú estáis recobrando el aliento y secándoos al cálido sol.
—Tenemos suerte de estar vivos —comenta Indy—. Este vuelo entre montañas es más peligroso de lo que pensé.
—Pero estamos extraviados
—dices tú con ansiedad.
—Es mejor que mires las cosas de este otro modo —te replica Indy poniéndose en pie—. Digamos que vamos a iniciar la expedición un poco antes de tiempo.
—Sospecho que el avión de carga se encontró con la misma turbulencia que nosotros —dice Indy mientras los dos marcháis hacia la playa—. Recorría la misma ruta aérea hace dos meses cuando sufrió el accidente.
Tú le sigues hasta un bosque de eucaliptos y matorral alto.
—Conociendo a mi amigo Sir Reggie —añade Indy—, apostaría a que también se encaminaba al lago. O incluso a la playa...
—¡Indy!
—gritas tú—. ¡Mira!

¡Allí, en medio de la alta y enmarañada maleza, cuidadosamente camuflado con ramas entrelazadas, está el desaparecido avión de carga! Sin demora Indy y tú apartáis las ramas y abrís la portezuela. El aparato está vacío. No hay cadáveres en la cabina, ni objetos en el departamento de carga, ni alimentos. Sólo un maletín de herramientas cerrado. Intentas imaginarte lo que sucedió aquí hace dos meses. ¿Por qué escondieron el avión? ¿Dónde estarán Sir Reginald y el piloto?

—Quizá fueron encontrados por algún nativo —musita Indy. ¡O puede que les atacaran algunos nativos, piensas tú muy nervioso! Y de repente sientes deseos de estar muy lejos de este país, de regreso sano y salvo en los Estados Unidos. ¡Un ruido inesperado te hace sentir un escalofrío que te recorre la espina dorsal!