Partida Rol por web

Insomnem Nox

IV. Res Communes

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08/12/2013, 15:11
Director

Tras despertar, levantaros, bajásteis a tomar el almuerzo. Por las escaleras hacia abajo ya olía el olor a panceta asada, y bien cierto que se os despertó más aún, si cabe, el apetito. Nadie había allí, y tomásteis una de las mesas por derecho. Enseguida llegó el Tuerto con un buen cuenco de panceta, costillas asadas, pan y un poco de queso, poniendoos unos platos para comer.

Esa mañana no había ningua disposición específica por parte de Fernando. Tampoco os dijo que os pasárais por el cuartel. A lo sumo, rezábais para que el día no fueran tan caldeado como el día de ayer (entre los sucesos de la mañana y los de la noche), que en vez de llamarse Lunes Santo, debería tener otra denominación...

El Tuerto se retiró a la cocina una vez os sirvió.

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08/12/2013, 15:35
Tristán Peñaranda

-Creo que debiéramos pasar por el cuartel antes que nada, a ver qué tal le fue a Fernando la pasada noche tras separarnos, et a ver si nos tiene alguna comanda en este martes santo -dije, con la boca llena, a mis compañeros de la guardia. Al final el tuerto iba a tener razón, y la comida que servía estaba realmente deliciosa.

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08/12/2013, 17:50
Roldán "el aragonés"

Titánicas legañas mantenían mis aletargados ojos todavía entrecerrados, y con tambaleantes pasos bajaba las escaleras mientras en la misma dirección de donde venía aquel rico aroma. Bien me vino para el despertar aquel olor a a panceta, ¡madre mía!. Divino y merecido almuerzo sería aquel, pues no poca energía gastamos ayer entre tanta intriga y pendencia.

- Cierto buen Tristán, et además credo que debiéremos andar con ojo bien abierto cuando hagamos ronda por la judería. Non debiéremos separarnos, pues temo de emboscada et nuevas pendencias si alguno de quienes no acabaron con los pies por delante pudierannos reconocer. - Y ya veríamos también si nos dejábamos caer por la tienda del tal Leví...

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08/12/2013, 20:04
Severo del Monte

Severo arremetió con la comida igual que en cualquier asedio. Sin piedad y con saña, dando cuenta de patatas y decapitando la panceta como si fueran moros. Aún así mostrábase alicaído, pues las nuevas que le habían traído el día anterior sobre su padre todavía pesaban sobre él. Asintió ante las palabras de sus compañeros.- Coincido. Demos presencia ante el cuartel, mas me gustaría al menos antes pasar por la Parroquia de San Andrés para honrar la memoria de mi buen padre Julián, que en paz descanse, y librar el pesar que tengo en el alma.- Un poco azorado por tal petición, y a modo de disculpa, les dijo.-No estaré más allá unos pocos minutos, y sed libres de venir o marchar, aunque agradecería vuestra compañía, pues no tengo otros amigos en esta capital.- Recuperando el ánimo, continuó.-Luego, al cuartel.-

Notas de juego

Pues eso. Más que nada para ser coherente con el personaje, al menos un padrenuestro por su padre en la parroquia (que se le "suicidado", y es lo mínimo, vamos). Y luego al cuartel. No hace falta ni hacer escena si no quieres máster. Basta que lo tengas en cuenta en el post y pasamos directamente al cuartel a ver a Fernando.

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09/12/2013, 01:36
Tristán Peñaranda

-Contad con la mía compaña, Severo. Non soy omne yo de mucho rezar, mas vos lo merecéis, et estoy seguro de que el vuestro padre, que en paz descanse, también -dije, apoyando a mi compañero. 

Tras asentir como signo de respeto hacia Severo, contesté al aragonés.

-Quizá debiéremos fablar también con Fernando sobre aquese tema precisamente, pues, y corríjanme si me equivoco, creo que atacar a la guardia de la ciudad es un delito penado. Debiéramos buscar a aquesos bastardos o poner precio a sus judías cabezas.

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09/12/2013, 11:35
Director

Una vez desayunados y bien dispuestos a hacer el bien (o eso decían) en las calles toledanas, os despedísteis del Tuerto y salísteis a la calle. La concurrencia era normal, y ya se veía a la gente agolpada en la plaza de la catedral de Santa María, pese a los peligros del andamiaje aún allí puesto (y aún algunos restos caídos). Girásteis hacia la esquina del cuartel, pero allí no había nadie, Fernando no estaba. Y esque fuísteis primero al cuartel porque os caía más cerca que la parroquia de San Andrés, a la que inmediatamente después visitásteis, la cual se encontraba en la punta contraria de la ciudad en el oeste (la judería estaba al este), junto a la plaza del Zocodover, donde se hacía mercado, el cual hoy se celebraba con permiso de feria en la ciudad.

Mientras Severo rezaba en uno de los bancos por el alma de su padre, Fernando se acercó. Estaba allí.

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09/12/2013, 11:45
Fernando Jiménez

Hola. ¿Qué hacéis aquí? -dijo un poco extrañado a Roldán y Tristán mientrs veía a Severo solitario unos bancos hacia delante-. Yo he venido a ver al Padre Alberto... Hemos de planear nuestra... -y miró a un lado y a otro de la iglesia, pese a que estaba vacía-... boda.
 

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09/12/2013, 16:04
Severo del Monte

Siempre alerta, de reojo pudo ver como Fernando se acercaba a sus amigos, pidiendo explicaciones, por lo que Severo siguió con su letanía por el alma de su padre, sabiendo que sus compañeros de armas le explicarían los motivos.-...et perdona nostras ofensas así como nos perdonáremos a nuestros ofensores...-. Severo permaneció de rodillas, en uno los primeros bancos, orando por el alma de su buen padre Julián. A ciencia cierta sabía que no se había suicidado, pues conocía y amaba aquel santo varón que tanto le había enseñado, aún siendo él fruto de su pecado.

Una vez hubo orado, lentamente se levantó y se dirigió hacia el altar, posando su rodilla diestra al suelo a la par que desenvainaba su hacha, bajó la cabeza en señal de sumisión y respeto.- Padre Señor de todos los Cielos. Vos en vuestra omnipotente clemencia, cuidad del alma de Julián, mi buen padre, aquel que me engendró y me dio su amor incondicionalmente. Dadme fuerzas para desfacer este entuerto.- Levantose de nuevo, y secándose las lágrimas que recorrían su rostro, mantuvo durante breves segundos su rostro impasible hacia la cruz del Altísimo.- Adiós, Julián. Descansad en paz, padre mío.- Luego, sin más dilación, enfundó el hacha de nuevo y se dirigió hacia donde estaban Fernando, Tristán y Roldán.

Notas de juego

Listos. A por los malos. Y luego violam... ¿¿BODA??

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09/12/2013, 23:08
Tristán Peñaranda

-Venimos del cuartel, Fernando, pues estábamos buscándote, mas al non encontrarte allí vinimos a acompañar en sus rezos por su padre al buen Severo. Queríamos saber si se tomará alguna medida contra los judíos que ayer intentáronnos destripar, pues creo que es delito penado atacar a la guardia de Toledo. En caso contrario, nos gustaría saber si tienes alguna comanda en concreto para el día de hoy. Por cierto, enhorabuena por el casamiento... Esperemos que no sea tan problemático como el bautizo, mas si así fuera, háznoslo saber et allí estaremos, amigo.

Mis palabras resonaban en los altos techos de la iglesia por más que me esforzaba en no alzar demasiado la voz mientras Severo se nos acercaba.

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10/12/2013, 10:35
Roldán "el aragonés"

- Shhhh. - Chisté a Tristán, que aunque joven y de noble corazón pecaba de ingenuo e imprudente. - Non hagáis mención en voz alta de aquesta boda, pues, como debedes de saber, es algo a mantener lejos de tantas bocas et oídos como fuere posible. -

De enterarse la comunidad judía de tal celebración, a buen seguro no iban a tomárselo demasiado bien. Temía yo una pendencia aun mayor que la de anoche...

- Iremos agora a ganarnos el jornal buen Fernando, más si necesitáis cualquier cosa, non dudéis en decirlo. -

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10/12/2013, 11:25
Fernando Jiménez

Cuando llegó Severo, Fernando le dio una palmadita en la espalda. Se acordó de la noche anterior en el Escudo Verde cómo se echó a llorar y casi acaba con el que le dio la noticia... de lo de su padre.

Lo siento, amigo -le dijo-. Ahora estará en los Cielos, sin duda.

Fue prudente Roldán al recordar el secretismo de lo de la boda, que no sabía uno hasta si los oídos de cualesquiera, fueran judíos o moros, podían llegar dentro de los muros de Cristo. Le guiño un ojo a Tristán por sus felicitaciones y siguió hablando.

Medidas tomaré en pos de la Justicia -continuó el alguacil-; pero con el tema de... -e hizo un gesto con la cabeza hacia la sacristía-, y aparte estando en ésta época instalada la Semana Santa haré las averiguaciones más adelante... Si: id y vigilad las calles, que uno nunca puede descansar... Nos vemos.

Entonces Fernando volvió a la sacristía con el Padre Alberto.

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10/12/2013, 11:38
Director

Salísteis de la parroquia a contemplar el esplendoroso día que, una vez más, hacía en Toledo. Pareciera que los vientos y lluvias de éstas épocas se hubieran ido al temor de tanta tropelía nocturna y tanto accidente en la ciudad. Ya que estábais cerca de la plaza del Zocodover, donde había mercado ese martes, fuísteis a echar un vistazo (pues era seguro un buen foco de posibles conflictos, robo, principalmente).

Varios tenderetes con sus lonas para hacer sombra cubría productos de varios tipos: desde fruta y hortalizas hasta pequeños exvotos cristianos, algunas telas y prendas. Los pequeños puestos hacían como paralelamente el irregular círculo de la plaza, aunque no lograban cerrarse, pues no había tantos como para ello. En medio de la misma, la gente iba y venía, comerciaba, chismorreaba o se saludaba.

Y efectivamente, fue en éstas que, en luciendo el bonito jubón como rosado (que algunos lo decían así entre risas), escuchásteis un grito de mujer: ¡¡AL LADROOOÓNNN!! Entonces vísteis a un chicos que salió corriendo desde uno de los tenderetes, portando unas baratijas y empujando a las gentes que tenía delante de si para hacerse hueco y escapar.

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10/12/2013, 11:47
Tristán Peñaranda

Andaba echando un vistazo a los artículos del mercado, pensando si algo merecía la pena para cuando tuviera dineros a final de la semana, cuando el grito de aquella mujer me sacó de mis pensamientos.

-Otro criajo... Menuda semanita nos van a dar los zagalillos. ¡ALTO A LA GUARDIA! -grité esto último mientras echaba a correr es pos del zagal., sin esperar a mis compañeros.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Olvidé poner la tirada oculta... n.nU

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10/12/2013, 17:54
Severo del Monte

Severo agradeció enormemente las condolencias tanto de Fernando como de sus amigos. Si bien la tristeza era una amarga compañera que con el tiempo se iba, sí era cierto que estando en la parroquia y habiendo rezado encontró algo de paz.

Una vez hubieron salido de la parroquia, paseando por el mercado el fornido mercenario caminaba por entre el gentío como una galera entre nenúfares, sacando pecho como si inflara velas. Se abría paso elegantemente, mostrando orgulloso su jubón rosado y haciendo gala y ostentación de su condición de hombre de ley, saludando a los tenderos y sonriendo a las mozas (aunque estas rara vez le devolvían la sonrisa, más bien se asustaban). Sí, Severo estaba disfrutando del día. Hasta que alguien se lo estropeó.

Viendo como el zagal corría entre los tenderetes, y viendo como Tristán corría en pos a él, Severo no pudo más que farfullar.-...y venga a correr de nuevo...- arrancando a correr tras su compañero de armas. Pero pronto se demostró lo que todo buen marinero sabe, y es que una galera enorme, como era Severo, ágil no es entre riscos estrechos, como era el mercado. Por mucho que corría, no paraba de toparse con el gentío y las cajas, causando gran revuelo entre el personal.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Bueeeeeno... tras él Tristán, que pa mi que Severo no está muy ágil esta mañana. ;-)

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11/12/2013, 11:39
Roldán "el aragonés"

- Aquesto non acaba... - Pensé en el momento justo en que inicié la carrera. Duró poco aquella intención. Después de la noche anterior el cansancio me pesaba. Y por que no decir también que me parecía de muy poca importancia el asunto de los pequeños raterillos después del lio en que nos habíamos metido con los judíos.

Aminoré la marcha, aunque sin detenerme. Había que mantener las formas pues eramos lo imagen de la autoridad. ¿Qué pensarían las gentes si cesaba en aquella carrera? Aunque ganas no me faltaban...

Por suerte Tristán no andaba tan pesado como Severo y yo. El joven daría caza a los mocosos por si sólo...

- Tiradas (1)
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12/12/2013, 12:03
Daniel Leví

El zagal echó a correr causando todo tipo de revuelos. Et tanto fue así que algunas gallinas que alguno había llevado para vender quedaron estampadas con el cuerpo de Severo, y dos cajas de frutas cayeron al suelo, rodando y echándose a perder, por el poco aceirto de Roldán... Y es que Tristán si que parecía que íba a darle caza, pero no de momento. El zagal os hizo cruzar toda la ciudad, de cabo a rabo, como suele decirse (en éste caso de éste a oeste), llegando hasta la judería. Una vez allí, Tristán se lanzó, literalmente, sobre él, haciéndole caer y trastabillar en el acto, soltando las baratijas que había agarrado fuertemente. A los pocos minutos llegaron Severo y Roldán (no sin antes ojear algunas otras callejuelas de la judería, que habían perdido a los dos en cabeza por momentos). Y en estando ya los tres allí, que el landronzuelo ni se movía, et miraba sólo al suelo, maldiciendo su suerte.

Mientras le reteníais (pues hizo intento de nuevo de escapar), os dísteis cuenta que estábais en la misma calle del día anterior, la de la casa-negocio de Daniel Leví. Y curiosamente vieron allí al mismo Leví hablando con otro hebreo, cerca de la casa del primero. Éstos no prestaron atención a vuestra llegada. Y poco a poco su conversación, aparentemente normal, fue subiendo de tono. No hizo falta mucho para escuchar, de casualidad como decimos, lo siguiente:

Leví: ¿Y quién dice que eso no son calumnias?

Judío: Te digo, Daniel, que mi hijo Moshe los vio anoche, a ella y al cristiano, y no sólo él, sino otros tantos de los nuestros a los que atacaron y dieron muerte... Querido amigo, tu no te percatas, pero ambos se ven en esta misma calle, en la noche, mientras tu te ausentas o duermes.

Leví: Con que mi Sarah, mi orgullo..., ¿pretende arrebatármela un cristiano? ¿Y pensáis que lo hará? ¿Crees tú que si mi hija tiene un amante infiel que la seduzca dejará que le arrebaten su tesoro más preciado? ¿Crees que no me vengaría?

Judío: Pero ... ¿acaso sabes...?

Leví: ¡¡¡SE MÁS QUE TÚ!!! Ahora vete, y avisa a los demás, y que se reúnan... ¡Adiós!

Uno de los otros tipos se marchó por el otro extremo de la calle, y Leví por una callejuela de la judería. Ambos se perdieron por la zona.

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12/12/2013, 16:54
Severo del Monte

Todavía resoplando, falto de aire y con la cara roja, agarró fuertemente al pobre ladronzuelo, tumbándolo en el suelo y sentándose encima para que no huyera. Estando así, apoyó espalda y cabeza en la pared, cerrando los ojos para recuperar el resuello. Segundos después, todavía con la conversación de los judíos en mente, tomó decisión salomónica. Sujetando el zagal por el pescuezo, quitole los pantalones y le propinó hasta veinte zurriagazos en las posaderas, hasta el punto en que las nalgas semejaban dos hermosos tomates. Después, aún sin pantalones lo miró fijamente a la cara con su único ojo bueno.- Hoy veinte. Mañana cuarenta. Si vuelvo a verte dando ágil uso a tu mano, puede que suba a sesenta. Ahora corre a casa y le cuentas la mentira que quieras del porqué de tu culo rojo. ¡CORRE!.- Le espetó, espantando al crío que arrancó a correr como alma que lleva el diablo, con el trasero en carne viva y sin calzones.

Había podido escuchar la conversación, y sabía que había prioridades. No le hacía gracia alguna el que Sara se casase sin permiso alguno de su padre. Si, por lo que parecía, Daniel era judío respetado, la deshonra de su hija podría causar revuelta en la judería.- Amigos. Debiéramos hablar con el buen Fernando.- Dijo mientras recogía del suelo los enseres robados por el pícaro.- No sé vosotros, pero me da a mi que este cuento nada bueno traerá.-

Notas de juego

Ui ui ui uiiii... pintan bastos... ¬¬

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12/12/2013, 22:37
Tristán Peñaranda

La conversación de los judíos no me sorprendió en demasía tras la trifulca de la noche anterior. No pude reconocer al hebreo como uno de los asaltantes, pero le miré con recelo.

-Estoy contigo, Severo, sin duda debiéremos al menos prevenirle de lo que puede venírsele encima. Non quisiera que nada malo pasárale al bueno de Fernando.

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13/12/2013, 10:14
Roldán "el aragonés"

Aquello no era nada bueno. La judería pronto bulliría en odio, odio y rencor acumulado. La llama que propiciaría todo aquello era ese maldito viejo de nombre Leví. En cierta medida podía entender su disgusto, pero lo que no entendía era su mezquindad.

- Hermanos, yo iría aún más alla. Debiéremos dar aviso a Fernando, si. Más debiéremos también montar vigilancia sobre aqueste buitre de Daniel. Estar al tanto de sus movimientos et de los de los suyos. Témome que tomará venganza para con Fernando. -

Me preocupaba en sobremanera el asunto, y aunque Fernando, como hombre de la guardia, por lo general estaba siempre bien acompañado y además sabía defenderse bien por si solo, toda precaución podía ser poca cuando hablábamos de los asesinos de Cristo.

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13/12/2013, 14:37
Director

Y en estas fue que, tras propinarle la "justiciosa latigada" de zurriagazos a ladrón, que escarmentar pudiera y debiera el ladrón, bien poco necesario y en vano sería traer desde la capital azteca (centurias despues) las plantas de la tomtera; pues crecieran en el su trasero de ahora en adelante. Y en justicia haciando una vez más, fuísteis con la sospecha y cautela a Avisar a Fernando, que hallábase ahora en el cuartel.

Éste sospechó tanto o más que vosotros, pero no podía tampoco discernir qué tramaría la comunidad judía, que no era cosa de una sóla persona o tan sólo el Leví (que ya sufrísteis el ataque de unos pocos en grupo). Fernando os profirió entonces cautela, aunque os animó a seguir con la vigilancia en época Santa.

Notas de juego

Vamos a acelerar la acción (no por gusto, así viene en el módulo).