Partida Rol por web

Le gusta el escenario en el que estamos de eso no cabe duda y sabe desenvolverse en él. Sus palabras son suaves y precisas pero es cuando llega el final cuando realmente me sorprende. Sonrio abiertamente ante ambas preguntas sin llegar a decir nada, miro a ambos gatos alternativamente sin dejar vers pensamientos.

- En cuanto a que voy a hacer en este embrollo es investigar todo lo posible sobre esas criaturas aunque dudo que eso me lleve a ningun lado. Por otro lado reunir a todo aquel que este lo bastante loco como para querer meterse en todo este embrollo... del cual dudo que salgamos de una pieza. - Levanto una de las manos para colocarla sobre mi menton mientras mi sonrisa permanece impasible. Lo dicho era cierto... no todo pero si lo obvio dada la situacion. - En cuanto a cambiar el mundo... debo decir que te has unido algo tarde Kha'Shi. Hace ya mucho tiempo que peleo por hacerlo, mucho mas tiempo del que llevais vosotros en este mundo. - Mi sonrisa se ensancha, a veces es incluso extraño recordar que mi manera de medir el tiempo es diferente a la del resto de especies. Señalo a su compañero elfo. - Unicamente él es posible que lleve aqui lo suficiente para hacerse una idea. Aun asi... dime ¿Como esperas cambiar el mundo?
 

No puedo mirar al al elfo riéndome.

-Disculpe que me ría pero, pero algo estaréis haciendo mal todo este tiempo. Me propongo cambiarlo de verdad y la pregunta no es "¿Cómo?" sino, "¿Cómo no?".

Me guardo la ya gastada rama de Roots en uno de mis bolsillos y rápidamente saco otra nueva para empezar a mordisquearla.

-De todas las formas. Por mi parte... bueno, creo que me estoy adelantando pero bueno, debe tener clara una cosa: Nada de lo aquí dicho puede salir a la luz por el momento a menos que detestes tu...¿vida? ¿no-vida? Bueno, ya me entiendes... Por mi parte pondré la organización, la noche y mis bonitas uñas-ante esta última palabra las saco de mis zapas dejando ver su bonito brillo- Cada uno aportará su parte formando así una cadena que fortalecerá nuestra causa. ¿Estás dispuesto a participar?

Me incliné hacia adelante cruzando los dedos de mis manos en un solo puño y apoyando la cabeza en este.

Su primera respuesta casi me hace gracia... ¿hacer mal? Es ciertamente gracioso cuando un gato que practicamente acaba de venir al mundo me dice eso, pero aun asi que le reste importancia a todo lo hecho por los mios ciertamente me molesta. - Mira Kha'Shi cuando tu especie haya tenido que pelear por cada maldita migaja de sangre mientras la Inquisicion no para de lanzarse contra tu cuello y en cuanto haya la mas minima posibilidad de que estes en una ciudad es capaz de arrasarla entera sin importarle inocentes o no... entonces entenderas que tal vez seguir vivo y aun estar dando por culo a esos cabrones no es hacerlo mal. - Me vuelvo a recostar en el sillon. - Aunque claro teniendo en cuenta que a los tuyos os consideran domesticables... la cosa cambia ¿no crees?

Escuchar su amenaza consigue llevar mi estado de animo hasta el puro hastio. Tener que venir a este lugar dejado de la mano de todos los dioses para recibir amenazas de un gato que necesita venir con dos de sus guardaespaldas para sentirse comodo podria resultar gracioso... pero la verdad es que no. - Ahorrate las amenazas, tienen mas bien poco sentido. Aun asi, si realmente estas pensando en atacar a la Inquisicion... entonces estoy dispuesto a escucharte.

La cara de sorpresa que puse me hizo sentir extrañamente raro. "¿Es que nadie tiene un poco de humor por aquí? Y uno no puede ni respirar o se sienten amenazados, creo que debo cuidar mejor las apariencias....". Y termine con una cara de resignación.

-Por lo visto no estamos acostumbrados a los mismos modales y ámbitos, eso o todos estáis muy susceptibles hoy-miré de reojo a Jo'Kar con quién había experimentado una situación parecida hacía menos de unos minutos- Respeto lo que habéis tenido que aguantar y se que que no es fácil lograr esto, ¿Por qué crees que quiero reunir a todo ser que esté conmigo? Aunque una cosa debo decirte, si prefieres ser tratado como a un animal de compañía, espero que lo disfrutes, pues prefiero la muerte y servir en el otro mundo a Azrael, quién necesita nuestra ayuda para sofocar la estúpida rebelión. Pero cada uno es libre de elegir sus preferencias.

Rápidamente pensé si se ofendería por esto último.

-Y quiero ofender a nadie...no me malinterpretéis. Siento ser tan... poco sutil a veces, no estoy acostumbrado a tener que tratar abiertamente con los demás. Mis respetos.

Y terminó con una pequeña y grácil reverencia sin levantarse.

El final de sus palabras casi me hace volver a decirle un par de cosas... llevar mas de dos cientos años con una diana en la cabeza y seguir vivo, no creo que pueda definirse como ser un animal de compañia. Levanto una mano cuando termina de hablar para relajar el ambiente, sobretodo por mi parte. - Supongo que tienes razon, la verdad estoy acostumbrado a ser mucho mas politico en casos como este, ser tan directos no suele ser habitual y la mayoria de los elfos y humanos lo necesitan para poder sentirse importantes. Aun asi es refrescante ver que no es necesario con vosotros. - Su comentario respecto a su dios me resulta interesante mas no digo nada a ese respecto.

- Tus respetos son bienvenidos pero no son necesarios. Ahora que sabemos donde esta cada uno, no es problema. - Mirare a Jo'kar el cual parece mantenerse al margen asi como los otros dos. - Como he dicho, escuchare lo que tengas que decir con respecto al enemigo que compartimos y si estoy de acuerdo, no tendre problemas en pelear conjuntamente contra ellos.

Jo'kar vio el intercambio de encontronazos entre el vampiro y el felino en silencio. Escuchaba sus palabras e intentaba ver más allá. No se le pasó por alto que el felino había evadido la pregunta de como pensaba cambiar el mundo y poco a poco iba viendo que el cambio que pretendía hacer incluía la violencia para imponerlo. Y por las palabras del vampiro parecía que había seguido e iba a seguir por ese camino.

Jo'kar no creía que la violencia fuese la solución. La violencia les había llevado a aquello y no creía que la violencia fuese buena. - No creo que un ataque directo contra la inquisición sea la solución. De hecho no creo que mediante el asesinato y la violencia se pueda llegar a un futuro prospero y con todas las razas unidas. - expuso el felino. - De la misma manera que un ataque contra las otras organizaciones racistas no es una buena idea. En una guerra hay vencedores y vencidos y los vencidos no sueles estar contentos. - dijo el joven resaltando lo obvio. - Además un ataque contra la inquisición se vería como un ataque contra toda la iglesia y eso pondría a la mayor parte de la población del continente en nuestra contra. 

Como ya sabréis y lo habréis notado, el consejo ha interferido para que las cacerías de la inquisición cesasen. - dijo el joven observando algo que todos sabían. - Incluso se ha podido ver que el consejo no aguanta la parte más cerrada de mente de la inquisición... - dijo para luego guardar silencio y ver como calaban sus palabras en sus compañeros.

-Mmm... no es eso del todo cierto Jo'Kar, no quiero enfrentar directamente a la Inquisición, ese sería el último paso dado el caso, primero hay que conseguir el apoyo de los que apoyan esta causa y luego demostrar la verdad sobre la Inquisición y todo lo malo que ello conlleva, concienzar a la gente y habremos conseguido todo eso sin violencia... y esto no solo con la Inquisición, con todo lo que va mal en este mundo.

Escuchar a los dos gatos era como escuchar a dos niños que quieren cenar tortillas pero no tienen lo necesario para romper los huevos. - ¿Enseñarle al mundo lo malos que son? El mundo lo sabe... en cuanto a no hacerlo mediante el camino de la violencia Jo'kar permiteme disentir, mi especie ha sido llevada casi a la extincion por esa panda de fanaticos y el Consejo. - Señalo en direccion a la puerta por la que he salido hace poco. - unicamente detuvo el extermino cuando a la Inquisicion se le fue la mano y empezo a matar a otras razas para poder cazarnos a nosotros, a otras razas... no fue por matar a vampiros inocentes. - Mi mirada se ha vuelto mas dura, la facilidad con que estos dos habland e las penurias de mi especie me esta llevando cerca de mi limite de paciencia. -. Asi que permiteme dudar de las buenas palabras y la unificacion de las razas, la Inquisicion unicamente aceptara cuando los vampiros y los vohnias no seamos mas que un recuerdo. Ademas debo recordarte que la Iglesia patrocina al Consejo en sus expansiones, dinero y soldados, y la Inquisicion forma parte de ella. Asi que si el camino que habeis elegido para "cambiar" el mundo es la de sentaros a hablar con esos fanaticos, dudo que llegueis muy lejos...

La ingenuidad de estos dos es simplemente pasmosa, en serio... unificacion de razas... uno pertenece al dios de la muerte y el asesinato y quiere hacer las cosas por las "buenas". Jo'kar acaba de unirse a esa hermandad mientras sus ideas son completamente contrarias a las mismas... no quiere violencia y se une a una hermandad de asesinos. Entre inocencia, ingenuidad y estupidez esta la mesa servida...

Jo'kar escuchó las palabras del vampiro con pena por el odio que trasmitían. Aquel hombre vivía anclado en rencillas pasadas y se movía por la venganza. Jo'kar dudaba que pudiesen llegar a ningún acuerdo en ese aspecto así que cambió de tercio antes de que sus posturas se alejasen demasiado y no pudiesen negociar un acuerdo para la guerra que tenían delante. 

Lamento oír eso Drakken, - comenzó el felino. - de cualquier manera quiero aprovechar que estás aquí para proponerte el mismo trato que me ha propuesto Kha'shi a mi. Se avecina una guerra y me gustaría poder colaborar con todos sin importar cual sea su hermandad o su raza. Eso te incluye tanto como persona como lider. - dijo el felino con una sonrisa amable. - Me gustaría poder llamarme amigo de la Legión y que os sintáis libres de pedirme ayuda si llegáis a necesitarla del mismo modo que soy amigo de la Hermandad de sangre Purpura. - dijo el felino sin saber muy bien que iba a decir el vampiro. 

Miro a Jo'kar a raiz de su comentario, quiere un mundo de paz y amor, me encantaria saber donde ha estado viviendo todos estos años porque dudo que sea en el mismo mundo que yo. Tal vez en la jungla, eso daria mas sentido a lo que dice, los humanos no siguen las reglas de la naturaleza, si algo no les gusta lo erradican, no intentan hablar... la espada y el fuego es su solucion. Asi pues hago un gesto como que no es relevante nuestra diferencia de opiniones, esta ahi y seguira estandolo... mas es su propuesta lo mas extraño de todo.

Miro a Kha'Shi y despues de nuevo a Jo'Kar... no se nada sobre este ser, ni el sobre mi aparte de que disentimos en la parte mas fundamental de su pensamiento y aun asi quiere la amistad de la Legion. Un sinsentido... a todos los niveles pero bueno nunca se para que me puede ser util un idealista ingenuo. - Seria inteligente por tu parte tener cuidado a quien le dices que eres amigo de La Legion, la Iglesia y los suyos tienen ojos y oidos en todas partes, y dependiendo de por donde vayas puedes verte en mas problemas que otra cosa. - Tiene gracia la cosa... si lo dice por ahi sin mas es probable que acabe en manos de un inquisidor y no para acariciarle la piel justamente. Le miro y evaluo sin ser justamente sutil . - Digamoslo de la siguiente manera, la Legion estara abierta a colaborar contigo en busca del beneficio mutuo y no intentara mal alguno sobre tu persona... pero debo decir, que no seria inteligente interponerte entre nuestro objetivo y nosotros. - No es una amenaza y mis ojos y lenguaje corporal asi lo indican, simplemente es un hecho, nada mas. Esperare a que tenga en cuenta las advertencias que le doy, unas para dejar clara mi postura y las otras para que no se busque un fin prematuro, y adelantare mi mano para darnos un apreton de manos... una manera antigua de cerrar tratos, cuando el honor significaba mas que el oro.

Jo'kar guardó silencio y no dijo nada a pesar de ver que volvían a tratarle como un niño. Los consejos del vampiro era algo obvio pero aún así los agradeció con una inclinación de cabeza. - Bueno, supongo que mientras dure la guerra nuestro objetivo será común. - dijo el felino. - De cualquier manera eso es justo lo que te proponía, colaborar mientras dure esta guerra para salir de ella de la mejor forma posible. - añadió Jo'kar antes de recostarse de nuevo. 

Ellos tienen el respaldo de toda una organización pero Jo'kar tendría que valerse por si mismo. Así que necesitaría apoyarse en todos lo que pudiese. Eso tenía ventajas y desventajas, solo el tiempo diría cuales eran más abundantes. 

Se abre la puerta de donde Noah había salido y es él mismo quien lidera un grupo de una veintena de personas, todas con mal aspecto, maltratados y algunos al borde de la inanición.

El Consejero Sirvus termina su reunión con el orco Amúr, quien se encamina hacia la salida, observando a la caravana de prisioneros que se movilizaba, pero haciéndoles caso omiso.

Sirvus habla a uno de sus sirvientes y este acata una orden, la de llamar a Kha´shi.

- Disculpe señor, pero el Consejero Sirvus desea hablar con usted - las palabras hacían alusión a que era turno del Syrolutha de comenzar su reunión -

Jo'Kar parece complacido con mi respuesta, puede llegar a entender que estar solo en este mundo y con todo lo que se nos viene encima, saber que no todos ahi fuera van a por ti debe ser algo bueno. En ese momento la puerta del calabozo se abre y aparece Noah con un variopinto grupo de lo que a primera vista parecen vagabundos famelicos... eso si a cada cual mas raro que el anterior, llegando incluso a haber un oso entre ellos. Un vampiro, varios gatos, un orco, un elfo, una elfa, un oso... esto mas bien parece un circo que una reunion del Consejo. El ser capaz de reirme de mi mismo en situaciones asi es posiblemente lo mejor que hay... sino la eternidad puede hacerse realmente tediosa y aburrida.

Un sirviente llama a Kha'Shi para que vaya a hablar con el Consejo. - Seguire aqui si despues quieres seguir hablando. - Le despido con un gesto de la cabeza yen cuanto se va, miro en direccion a Noah. - Capitan - Al mismo tiempo que alzo mi voz me levanto de la silla. - Seria tan amable usted y los suyos de acompañarme, me gustaria hablar con usted. - Miro el banquete y a el, a sabiendas de que mas de uno querra llenarse el estomago e indicandole al capitan que no tengo problema en esperar a que hayan comido. Acto seguido me siento de nuevo mirando al felino.

Ibamos marchando desorganizadamente por los pasillos, esta tripulacion era nueva y le faltaba algo de disciplina, pero ya la encontrarian en alta mar. Apostaba a mi suerte que los primeros dias iban a ser los mas dificiles y agotadores para mi y la tripulacion, por lo menos hasta que se acostumbraran.
A todo esto una voz me llama, mas bien a un capitan y al ver que alrededor de mi solo habia un capitan, o sea yo, me acerque hacia aquel individuo que deseaba conversar conmigo, pero antes le di la primera orden a mi nueva tripulacion, Oigan ratas, su libertad ahora depende de como se comporten. Ataquen al banquete y no se emborrachen o estaran todos vomitando cuando estemos sobre el agua. Con el hambre que tenian de seguro iban a comer de mas y terminarian vomitandome todo el navio, pero eso era obvio.
Puede hablar conmigo, los muchachos estan hambrientos y van a estar concentrados en otra cosa. Yo tambien lo estaba pero las ansias de aventura me bloqueaban el estomago, queria llegar de una vez a mi barco y recien ahi podria comer tranquilo. Soy el capitan Noah, ¿en que puedo servirle?.

Por fin me encontraba fuera de esa apestosa pocilga, la gran cantidad de nuevos seres que había por la zona era inmensa, algunos miembros del conclave, líderes de bandas, más presos nuevos, yo era completamente inconsciente de que sucedía allí y lo único que quería era largarme pero de que vi a un hombre que detenía nuestra marcha pensé de forma irónica: 

¡Genial!, podré seguir viendo más tiempo a estos malandrines del consejo, que entusiasmo... 

Después Noah dijo que podíamos comer todo lo que quisiéramos de aquel amplio banquete que podía observar a pocos metros de mí, así que no fui tonto y aproveché, a pesar de llevar grilletes, comer un poco antes de zarpar, pero sin empacharme. 

Me quedé un poco ausente, tal vez porque ya había hablado más de lo que solía hacerlo, tal vez por ser ya la segunda ramita que me tomaba y mi mente quedó un poco ida pero la cuestión es que justo antes de que entrase el pirata acompañado de los que serían los presos y el consejo me llamase, eché a reír descaradamente por la conversación.
Finalmente me llamaron y al levantarme, me acerqué lentamente a la oreja de Drakken y luego me fui hacia donde se encontraba Sirvus, seguido de mis acompañantes.

-Nos vemos Drakken,-luego mire a Jo'Kar y me despedí con un gesto de cabeza-hermano.

Al acercarme a tu oreja te susurro con una voz que deja ver que mis ideas son claras y que no tome mis planes a la ligera, pues de seguro se da cuenta que realmente no soy un santo.

-No pienses que de verdad voy a arreglar esto con amor, paz, armonía y vacías palabras. He-he.

Al separarme notaste como te guiñe un ojo y me aleje sin posibilidad de que me contestases.

Y, tan pronto como se había formado, la reunión se separó. A Kha'shi le llamó el consejero y el vampiro había ido a tratar algún tema con el pirata. Pero antes de irse, el gato susurró algo al oído del vampiro. Jo'kar intentó enterarse de que había dicho Kha'shi, sus orejas se habían puesto alerta y las orientó hacia el sonido que le interesaba. No le gustaba que susurrasen algo delante suyo y quería saber que era. 

Una vez el grupo se separó, Jo'kar miró a los presentes e intentó reconocer a alguno. Quería ver que hermandades habían acudido para intentar crear alguna relación con ellas. 

Kha´shi a Drakken:

-No pienses que de verdad voy a arreglar esto con amor, paz, armonía y vacías palabras. He-he.

Escuche las palabras de Kha´Shi y asiente levemente para que supiera que le habia entendido perfectamente, mas no me quedo claro si se habia percatado de ello pues rapidamente fue hacia la puerta por la que yo habia salido hacia poco.

El capitan Noah se aproxima a donde me encuentro sentado con Jo´Kar, le hago un gesto para que tenga a bien sentarse con nosotros. - Buenas Capitan Noah, mi nombre es Drakken y soy el lider de la Legion. -Espere para ver si sabia de que Orden hablaba antes de continuar. - Simplemente queria tener una pequeña charla con usted para ver si coincidimos en algun punto que pueda sernos provechoso a ambos.