Partida Rol por web

A Barret le aburre el piano al igual que el violin. Se queda atento a las personas y sus reacciones mientras escuchan la musica tal vez analizando a cuantos de ellos de verdad les apasiona y cuantos de ellos tan solo se recrean en su esnobismo. Pensar en ello le irrita bastante, pero educadamente mantiene el tipo reflejandolo solo en su rostro hasta que llega de nuevo el señor Honoré.

Saluda a Quasimodo y a Francois con fria cortesia para luego añadir con desconcertante sinceridad para su actitud .-Me encantaria charlar con alguien de su distinción. Espero que la velada lo permita-. Añade para no comprometer demasiado a ninguna de las partes ya que el mismo no sabe hasta que punto le ha caido en simpatia a Alexandra a la cual esta acompañando ni si uno de los dos estara ocupado más tarde.

Tras el comentario de Christopher, empieza a reir y añade divertido;

- Por suerte no¡ , él terminó muerto en uno de los castillos de la familia y no de forma muy deseada, y yo a pesar de recientemente mudarme a uno de los antiguos castillos de la familia no tengo el honor de ostentar el título de Barón. Y lamento que el Quasimodo que usted se refiere es de una obra del señor Hugo. Quizá si es de su interés algún día podría concertar una entrevista con Victor para que hablen de su última obra, o puede sonsacarle si realmente se llegó inspirar en nuestro amigo o no. 

Zelda, sera un placer tener un momento de plática con usted, el mundo cambia, y creo que la información en el futuro será la llave de todo, quien consiga saber las cosas antes que nadie...

François, me alegro que no fuera usted, lamento la perdida de su familiar, pero me alegro en demasia, el tenerle esta noche aquí como anfitrión nuestro.

Me sorprendo al oir a Zelda decir mi nombre, hasta ahi el misterio de las máscaras en mi caso. Aunque es de esperar que los recién llegados no sepan quién soy ni sabiendo mi nombre y que los locatarios no necesitaran saberlo para identificar quien iba debajo de la máscara. De todas me irrita ser dejado en falso.

-- Me resultan en extremo interesantes, aunque en mas de un arcaico edificio de siglos pasados se conservan latentes las maldades de siglos aún mas pretéritos, fraülein Heiloff. Quienes se aventuren en tales lugares bien harían en cuidar donde posan sus pies y sus ojos. -- pronuncio su nombre como al pasar, pero la miro al hacerlo. Quizás lo demás no lo noten pero espero que ella entienda el mensaje. Aquellos que esperan caminar juntos no deberían andarse pisando los pies.

-- Señor de Fumel, señor Quasimodo, un placer ser recibidos en este extraordinario lugar. Saint Pierre es un perfecto prólogo de lo que auguro será una visita memorable a París.

Observo por un momento a Christopher y hago un gesto afirmativo. -- Aunque sin duda siempre quedará el aspecto mas importante de la información, más allá de quien la reciba primero. Ese aspecto tan fundamental que marca desde tiempos inmemoriales la vida o la muerte. ¿No está de acuerdo conmigo, caballero, en que ese aspecto es más importante que la velocidad?  

Vayamos conociendo a quienes han llegado recientemente, eso puede ser fundamental a la hora de dar el siguiente paso -- Piensa Drake mientras espera la respuesta de Christopher y la reacción de Zelda.

Abrí muchísimo los ojos y me llevé la mano a la boca

Muy bien chica, así vamos a llegar muy lejos por aquí... -pensé, empezábamos con buen pie

Tras este fallo decidí no hablar más, aun debía de estar desconectada después de tantos días de viaje, asique me abracé al brazo de Drake, apoyé la cabeza en el hombro y me quedé así, algo taciturna, intentando seguir con las conversaciones pero sin llegar a participar en ellas.

arrugo la cara dentro de la máscara, al escuchar la insinuación de Bennet sobre el apellido de su acompañante.

Señor Bennet, considero una descortesía ya que estamos en una conversación cerrada el conocer su identidad y usted no la mía, me llamo Christopher Godspeed, un placer el conocerle, digo extendiéndole la mano...

Aunque se haya medio levantado el telón, si no le importa y creo que lo compartirá nuestra compañera, el que no desvelemos aún nuestros rostros, por lo menos así, nuestras palabras tendrán nombre más no rostro dejo un silencio....aún...

Dirigiendome hacia la acompañante de Bennet

Señorita, seguirá usted con el juego, o nos dara el placer de conocer su nombre y quedarnos asi con la miel en los labios de desvelar su rostro.

Admito la corrección de Christopher, ya que Drake y Zelda si que conocían sus respectivos nombres ... 

Prosiga la fiesta.

-- Señor Godspeed, Drake Bennet, el placer es mio -- Le estrecho la mano, haciendo un ligero toque con el índice en su muñeca. Si es de los nuestros reconocerá el saludo, sino sólo será un apretón de manos más.

Miro a mi acompañante y le hago una ligera inclinación de cabeza -- Sin duda que mi acompañante esté acostumbrada a determinar ella las reglas de juego. Y será un gusto participar en sus condiciones, Mein Fraü.

-- Aun no me ha contestado mi interrogante sobre el aspecto mas importante de la información, Señor Godspeed... 

Al ver como el hombre de la triple cara me echa un cable no puedo evitar mirarle y dedicarle una sonrisa radiante. Tras eso veo que Drake se presenta también y no pedo evitar relajarme... pero poco, esos fallos pueden ser muy graves más adelante.

-Mi nombre es Zelda Heiloff -dije acercándole la mano a Christopher- un placer conocerle, herr Godspeed -aun con la sonrisa puesta- y, bueno, las cosas se tienen que desvelar poco a poco... el rostro será otro día -dice en tono juguetón- y creo que el señor Bennet tiene razón, la información es valiosa; pero vale más cuanto antes se sepa, es como si alguien supiera que en Francia se habla francés... sería una información sin valor. 

Giré un momento el rostro para ver que andaban haciendo los otros tres enmascarados mientras me colocaba un par de mechones detrás de la oreja.

- Yo me dedico a ver cómo algunos de los presentes se dedican a desvelarse, sea por inocente desliz o por gentil modal. Veo como se intercambian educadas palabras mientras de tanto en tanto miro a mi acompañante por si dice algo o asiente a a alguna parte de esa conversación, pero sin desvelarme ni desvelarle, pues el juego de máscaras era por algún motivo que nos explicarían a posteriori, y no me gustaría que jugasen con ventaja sobre mi... O todos velados o todos desvelados, y los ajenos a esta conversación no estarán por la labor de lo segundo... - Querida mía, la información que se corre como la pólvora solo tiene valor cuando se prende, después deja de ser tan secreta y pasa a ser dominio del vox populi... Un secreto bien guardado y descubierto en su momento adecuado puede poner en jaque al más pintado... Y saber que en Francia se habla francés es una obviedad, no un secreto, pues sin un idioma común pocos secretos podríais llegar a obtener

Sonreí ampliamente ante lo dicho por la otra mujer- Exacto, eso es lo que quería decir, pero no debí de expresarme bien -dije mientras la dedicaba una ligera inclinación de cabeza hacia la mujer como gesto de agradecimiento

- Hago también una inclinación hacia la mujer que me acababa de responder

Quasimodo y Francois después de unos minutos charlando con vosotros se despiden temporalmente para seguir atendiendo al resto de invitados. Quasimodo apenas participa en las conversaciones sin embargo Francois os sigue la conversación e incluso bromea algo acerca del juego de máscaras, y como apenas consigue a acostumbrarse a este tipo de fiestas. 

La fiesta sigue amenizada por música clásica, incluso alguna pequeña escena teatral cantada os deleita durante unos minuto, los minutos dan paso a las horas ...

Honore os busca y finalmente consigue juntar.

- Bueno, ¿y qué os parece este tipo de eventos? - digo a mi acompañante - Espero que no me tengáis a mala interpretación respecto a mi modo de actuar o a mis palabras

despues de que Bennett me estreche la mano formalmente, seguimos con la conversación....

Ciertamente cada punto de vista relata mas cosas sobre la importancia del tiempo y la relevancia de la información, en verdad me alegro el haber venido esta noche aquí, estoy conociendo personas de lo más interesantes.

Sin embargo, debo pediros disculpas, la conversación me ha dado sed, y creo que nuestros anfitriones tendrán seguro de la mejor "reserva" que se pueda conseguir por esta ciudad.

dicho esto me despido cortesmente de los intervinientes, y me acerco a algún sitio más reservado para "beber" algo...

Después me paseo por la estancia, escucho música, admiro las obras de arte Interesante sitio... extraña mezcla de sobriedad y colorido... y entro en algunas conversaciones intrascendentes...

.-Ni mucho menos-. le dice a Alexandra .-Ante la duda teneis garantizada que presuponga siempre mi mejor interpretación. Esa ventaja tenemos con los que nos conocemos de otro modo. Que sabemos, al menos en parte que esperar los unos de los otros-. Tras un ligero silencio echa una ojeada a su alrededor .- Si os soy sincero en estas reuniones tanto dulce tiende a causarme empacho-.

- Sois muy ingenioso, la verdad, pero no deja de ser cierto que todo es perfecto en su justa mesura

Estaba un poco más animada, pero aun así... agité un poco la cabeza para centrarme y me mordí ligeramente el labio inferior. Entonces escuchando la música se me ocurrió una idea, me encaré con Bennet y le pregunté.

-¿Sabe bailar? -mientras iba poniéndole una mano en el hombro y le cogía la otra, disponiéndome para dejarme llevar si es que sabía... tenía esperanzas de que sí.