Partida Rol por web

Khytya

4. El Hombre-cobra

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24/06/2021, 20:01
Director

El líder presiona un cromado pulsador en el objeto que lleva en alto.  Unas pequeñas luces verdosas comienza a palpitar en su superficie. Y es que las palabras de Joshua, a pesar del intento del ruin arquero, acababan de convencerle de que tenían que llamar a su amo, de que no hay manera de que pudiesen enfrentarse solos a tres enviados de los dioses de Khytya.

El Hombre-Cobra dará buena cuenta de vosotros —dice y baja la ladera unos cuantos metros, seguido de los suyos, hasta situarse bajo la sombra de uno de los pocos árboles que aún conservan su follaje.

Nada pasa en un buen rato, la adrenalina anterior sustituida por una tensa incertidumbre, un curioso receso entre dos bandos que han estado a punto de derramar sangre.  El arquero parece contrariado y, aunque no podéis oír lo que dice, la nueva situación no parece de su agrado.  El líder no os quita ojo, mientras que en sus manos el objeto sigue latiendo, mostrando una rítmica pulsación verde brillante.

Entonces lo oís, muchos minutos después, aún no atardece pero el sol no luce tan fiero ya.  Un tronar lejano, un rugido en el límite de la audición.  Algo en el cielo, algo tan lejano que es apenas un punto, dibuja una estela rectilínea de nubes en el cielo.  Sin duda, es el origen del sonido.   

Poco a poco, el punto va definiendo su forma, disminuyendo su velocidad y pasa por encima de la ladera, una, dos, tres veces, a más de un centenar de brazas de altura, como reconociendo el terreno.  La extraña nave, si eso es lo que era, poseía una forma vagamente animal, similar a un reptil o una serpiente y unas garras afiladas.  Hecho por completo de metal, un gigantesco carroñero desafiando la lógica y la razón.

Al igual que los carros celestiales en los que los dioses viajaban en las leyendas, la nave-cobra se detiene en el aire y comienza a descender.  De dorados tubos despierta llamas azuladas cuyo rugido levanta una espesa nube de polvo y echa a rodar pequeños guijarros colina abajo.  Aterriza pesadamente, clavando sus pesadas garras en la misma roca.  Es insultante que un amasijo de placas y tubos metálicos de casi treinta metros comparta el medio aéreo con las gráciles aves.

....QUÉ RAZON EXISTE PARA CONVOCAR A UNO DE LOS HIJOS DE ARIETIS, QUE LLAMÁIS GUERRERO-COBRA...  -Una voz atronadora, como cien personas hablando, surge de la cabeza de la nave demoníaca. ....AQUEL QUE HUBIERE OSADO CONVOCAR CON URGENCIA LA NAVE COBRA , QUE EXPONGA SUS RAZONES..   

Una rampa surge del vientre de la nave.  Parece una invitación para que el líder de ésta partida de caza de guerreros de la Ciudad bajo la Roca suba a dar explicaciones.

Notas de juego

Y lo dejo ahí, no vaya a ser que queráis intervenir. 

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25/06/2021, 13:48
Kyora

Quizás era una locura, pero las decisiones de alguna manera había que tomarlas y Kyora era así. Más pronto que tarde la situación llegaría a ser esta misma y ella solo estaba adelantando lo inevitable. Gracias a esto se mantuvo firme, incluso cuando apareció aquella nave de metal, no se mostró sorprendida ni nada al menos en apariencia. 

Pero ya cuando la voz que salió de ello, se mostró estridente sintió una impotencia inmensa ya que por culpa de todo esto, la naturaleza estaba sufriendo. Así que dió un paso hacia delante y se presentó. 

—Soy Kyora, una intérprete de Khytya. El motivo de nuestra presencia es establecer un acuerdo de convivencia, es evidente que la gente de esta muriendo de hambre y los recursos naturales con tanta explotación solo traerá muerte y hambre. 

Todo lo que dijo estaba impregnado de valor, aunque después no sirva para nada. 

—¿Por qué nosotros? ¿Por qué nuestras tierras?

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25/06/2021, 22:24
Director

El jefe de los perseguidores había dado un temeroso paso en dirección a la máquina voladora cuando las palabras de Kyora le hicieron detenerse.   Los ojos de los guerreros se giraron con temor hacia a la intérprete,  la cual osaba hablar de igual a igual al monstruo que se alojaba en las entrañas del reptil metálico.

Pero solo hubo silencio como respuesta. Durante unos larguísimos instantes, la mole del navío celeste, recortada sobre el sol, pareció juzgar a los presentes, un terrible demonio que parecía tener poder suficiente para hacerlos desaparecer con un gesto.

Entonces, unos pesados pasos comenzaron a bajar la rampa, deteniéndose justo donde ésta acababa.  En un instante, sin tiempo a reaccionar o maravillarse, el Hombre-Cobra se mostró ante vosotros.

Era un humanoide alto, tanto como lo era Joshua, y musculoso.  La piel que se vislumbraba bajo sus ropajes ajustados y sus cinturones repletos de artefactos luminosos era gruesa y escamosa, de un intenso color verde.  Llevaba lo que parecía un arma, un grueso objeto plateado que manejaba con ambas manos y apuntaba en vuestra dirección.   Pero lo que más llamaba la atención era su rostro.  Era una extraña mezcla entre hombre y serpiente,  pero más terrorífica de lo que uno podía imaginar.  Algunos guerreros salieron huyendo ladera abajo.

Con una voz similar, pero más débil a la que antes, atronadora, había hablado, el Hombre-Cobra respondió a Kyora.

-Quien quiere un acuerdo ha de ofrecer aquello que el otro no pueda tomar... por el momento. Había una cruel inteligencia tras sus brutales rasgos, o eso parecía.  -Desactiva la barrera, Kyora-interprete-de-Khytya.  Derrota al guardian del campo solar.  Sube a mi navío como prisionera.  Has de elegir una de entre las tres,pues eso es lo que deseo, las condiciones que expongo.  Y yo- se echó una mano al pecho, como si estuviese jurando -Haré que el agua vuelva a su cauce.

Todos notais, a pesar del horror, de lo terrible de su rostro, que el hombre cobra no puede evitar mostrarse condescendiente y falso, como si estuviese hablando a unos niños para quitarles un poco de miel. 

 

- Tiradas (3)
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25/06/2021, 22:45
Director

Lo ves durante un instante, te quedas mirando.  El hombre-cobra lleva una pulsera muy similar, si no idéntica, a la que te dejó tu madre y que fue de tu antepasado. Exactamente igual a la que llevas en la muñeca.

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25/06/2021, 23:17
Uren

Uren no pudo más que quedarse inmóvil durante toda la escena. Primero observando la aparición de aquel artefacto volador, no podía dar crédito a sus ojos de lo maravilloso y a la vez aberrante que resultaba.

Luego fue testigo del intercambio, aunque le resultó imposible permanecer tranquilo y ajeno a la aparición de aquel ser no humano que había desembarcado del monstruo metálico. Había estado convencido de que lo de hombre serpiente era un mote, como el suyo era hombre hiena, pero no, aquella criatura era antinatural y casi blasfema.

Le costó interpretar en poco tiempo sus palabras y la disyuntiva en la que ponía a Kyora, y tartamudeó unos segundos, dudando si era su lugar expresar su opinión. Quería destruir al hombre cobra, luchar contra él, rebelarse ante su supuesta superioridad, pero algo dentro suyo lo detenía. La intérprete estaba entrenada para conocer la mejor forma de tratar con estos asuntos, él debía limitarse a estar listo cuando lo necesitara. Apretó la mano que sostenía el arco, y mantuvo una flecha en la izquierda. Hizo un sonido tranquilizador a Hayt para que se quede junto a él, pero la tensión se palpaba en el aire.

- Podemos contra él -expresó el explorador. Tal vez había más deseo que certeza en sus palabras, pero también mucha determinación.

Esperó a ver lo que decidiera Kyora.

 

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27/06/2021, 22:19
Kyora

Al fin dio la cara aquel hombre y ante las opciones que le ofreció, ella estuvo un instante en silencio meditando al respecto. El hecho de arreglar una tregua era muy beneficioso, pero las condiciones eran extremas. Kyora no tenía problema alguno en ser la esclava de aquella criatura si la naturaleza, si la gente misma podía lograr estar bien. Sin dudas sería un sacrificio bien pagado para alguien que ha entregado su vida a interpretar las señales del entorno mismo. 

Sólo que había descartado la opción viable de desactivar la barrera porque pondría en peligro a lo que queda aún con vida y la opción de permitir que la sangre corra, era una más que viable. Incluso Uren se lo ha dicho, así que suspiró en silencio, aún pensando en la respuesta hasta que la soltó. 

Espero sea un hombre de palabra. ¿Derrota o derroten? 

Hizo aquella pregunta, básicamente porque si debía pelear sola estaría difícil. No le dio una respuesta aún, quería aclarar ese punto primero. 

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28/06/2021, 09:41
Joshua

Con ese tamaño, y hecho puramente de metal... ¿qué oportunidad tenían? Ninguna flecha iba a atravesarlo, pero incluso si lo hacían era poco probable que fuera a causar ningún daño real. Joshua sintió cómo la boca se le secaba un poco, y repentinamente se sintió infinitamente más pequeño, pero como de costumbre no dejó que eso afectara más de la cuenta a su postura. Tendría que actuar confiando en que habían tomado el curso de acción adecuado, incluso si en realidad lo dudaba.

Empezó a sentir algo de esperanza cuando escuchó los pasos descender por la rampa. Si era humano, significaba que era mortal, y que por lo tanto podían darle muerte. Sin la protección de su temible armadura voladora no era más que un ser vivo más. Esa esperanza no sobrevivió a ver su forma. Se había equivocado: Si algún día el hombre-cobra había sido humano, desde luego ya no lo era.

¿Estás seguro? —preguntó a Uren entre dientes, mirando de arriba abajo al hombre y frunciendo el ceño. Se miró momentaneamente la muñeca.

De las tres opciones que la serpiente había planteado, derrotar al guardián del campo solar le parecía la única aceptable, y aun así, si él quería acabar con ese guardián tampoco podía ser algo bueno. Esperó a su respuesta, en silencio, mientras aprovechaba para examinar más detenidamente su equipo.

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28/06/2021, 15:46
Director

El Hombre-cobra rio con crueldad.  Era  perturbador que hablara perfectamente pese a no disponer de una boca propiamente humana.  -Una muestra de la debilidad que se nutre del respeto al todo, el paradigma en el que crees, kyora-intérprete-de-Khytya. La raza, la variante, de la que provienes se derrotó a sí misma cuando empezó a preocuparse más de si sus pasos mataban la hierba bajo sus pies que de expandirse por la galaxia. Pero el cosmos no tiene clemencia, moral o principios.  Es esa la causa última de que vuestro imperio cayese.  Aislados, vuestros mundos se descomponen y vuelven a la barbarie y la superstición y nosotros caeremos sobre ellos, uno a uno, sin temor a los milenios entre estrellas para, finalmente, reclamarlos.  

Apunta su artefacto hacia Kyora y a Joshua olvidándose de los demás salvajes y de Uren.  Sus ojos se abren, codiciosos.-Vuestros genética superior servirá para crear nuevos y mejorados Hombr...Pero sus palabras se interrumpen cuando el arquero de aspecto traicionero dispara su arco contra el monstruo.  

La flecha golpea el metal junto a la cabeza de Hombre-cobra, que se gira como una víbora había el lugar del que proviene la saeta. ¿Sobresaltado?¿Sorprendido?  Joshua ve como el aire empieza a rielar alrededor de la criatura y como la siguiente flecha del arquero se desvía varios metros hacia un lado, empujada por alguna fuerza invisible.

El cazador de aspecto malvado no llega a disparar ninguna flecha más.  Una esfera de luz proveniente del arma del Hombre-Cobra explota bajo sus pies, lanzándolo una docena de metros hacia atrás.  El Arma del demonio dispara otra vez, hacia otro de los guerreros vestidos de cobra, aniquilandole instantáneamente. 

El demonio comienza a retroceder, disparando hacia todos loa presentes, sin apuntar demasiado.  Ansioso por volver al interior de su nave.  Y furioso, muy furioso.

- Tiradas (2)

Notas de juego

El Hombre-cobra dispara a todo lo que se mueve. Una prueba exitosa os evita ser alcanzados.

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28/06/2021, 15:56
Uren

Uren escuchó sin comprender del todo las palabras del hombre cobra. Luego, si sobrevivía, tendría tiempo para pensar en lo que había dicho. Había tensado los músculos de inmediato cuando la criatura apuntaba hacia sus compañeros, dispuesto a interponerse para defender a Kyora, a quien consideraba mucho más importante que él, pero no hizo falta. Uno de aquellos salvajes parecía compartir la animosidad contra el ser, y rápidamente pagó el precio de su audacia. Había que reconocerle el coraje.

No hubo mucho tiempo para pensar en nada más ya que también les disparaba a ellos mientras se retiraba. Silvó a Hayt para que lo acompañe y se lanzó en carrera zigzagueante hacia la nave. No sabía bien que haría una vez que llegase, pero no había tiempo para pensar, sólo para reaccionar por instinto.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Uso el mismo rasgo para las 2 tiradas, si la segunda no vale la descartamos, la hice por las dudas para agilizar.

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28/06/2021, 19:06
Kyora

Y todo se desmadró en cuestión de segundos, Kyora estaba llevando aquello de una forma más pacífica—o al menos eso creyó—mientras conversaba con aquel hombre-serpiente. Pero todo tenía que irse muy lejos y cuando los disparos comenzaron lo único que intentó hacer era ponerse a cubierto. Aunque tenía la esperanza de que una vez el fuego cese, el ojo de halcón que tenía podía darle un buen disparo con su arco. 

- Tiradas (2)

Notas de juego

XD Usé el punto de destino y que sufrimiento! jajja

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28/06/2021, 20:00
Joshua

Con cada palabra del Hombre-Cobra Joshua tenía más preguntas. Normalmente habría pensado que su lengua de serpiente simplemente mentía para confundirlos, pero después de lo que había visto en aquella ocasión y de los crípticos mensajes que habían recibido... ya hacía tiempo que sospechaba que la realidad era muy diferente a la que él siempre había entendido, incluso si era incapaz de entender o siquiera discernir su verdadera forma.

Pero no hubo tiempo para preguntas. Las cosas, como suele ocurrir, se torcieron de forma súbita e irreversible. Se deslizó por el suelo, llenando de polvo su traje amarillo, justo a tiempo para evitar que una de esas esferas lo impactara directamente.

¿¡En qué demonios estaba pensando ese idiota!? ¿¡Quería matar al hombre cobra y llevarse la nave!? —se apretó más contra la roca, alcanzando una de sus flechas y tirando de la cuerda del arco después de colocarla, pero solo hasta la mitad, sin llegar a tensarla. Solo después se asomó, alzando las cejas—. Uren... hay que apoyarlo.

Había visto perfectamente las magia del Hombre-Cobra. Sabía que la flecha no alcanzaría su objetivo. No, al menos, si se daba cuenta de que caía. Así que tendría que intentar que no se diera cuenta para dar algo de apoyo a su amigo. Calculó la distancia con la mirada y volvió a cubrirse con la roca, pero en esta ocasión, pegó la espalda contra el suelo y apuntó hacia el cielo. Tensó la cuerda lo justo... y disparó.

La flecha se elevaría... y caería. Disparar en un arco tan amplio siempre era complicado, pero también eran los que más aplausos conseguían en las fiestas. Esperaba que esa vez no tuviera que ser diferente.

- Tiradas (2)
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29/06/2021, 07:24
Director

Una de las esferas luminosas estalla junto a Kyora, que resulta dañada*.  Sus esfuerzos por evitar la violencia negociando parecen, por ahora, vanos.  Pero también de diminutas semillas nacen los árboles más sólidos, ¿Quién sabe como se retorcerá el destino, qué consecuencias tendrán realmente sus esfuerzos? Pocos hay que hubiesen dialogado con el arrogante demonio, hallando ese punto de odio y desprecio.

Joshua disparó hacia lo alto, intentando comprobar si el aura rielante que rodea al Hombre-cobra lo protegía por completo.  Su flecha cayó hacia la cabeza del demonio y a apenas un metro de su objetivo.. se desvió al igual que todas las flechas anteriores, menos la primera, rechazada por una fuerza invisible, sin que el monstruo haga gesto alguno, sin ni siquiera llegar a percibir el disparo que amenazaba con clavarse en su cabeza verdosa   Si no podían alcanzarle ¿Porqué se retiraba entonces, el Hombre-cobra? ¿Qué le impedía quedarse a disparar sus ardientes esferas ígneas hasta aniquilar a todos los presentes?

Por su parte, Uren, se lanzó hacia la rampa en pos del Hombre-cobra.  Rampa que ya comenzaba a ascender hacia el vientre del artefacto volador.

Con Hayt a tu lado, con el pelaje erizado, enseñando los dientes, buscaste las miradas de tus compañeros.  Joshua tras una roca, Kyora con gesto de dolor, aunque no gravemente herida.  La rampa se cerró con un sonoro CLAC.  Estabas sólo ahora en el interior de la nave.

La nave comienza a rugir.  Fuegos azules surgen de tubos y orificios y comienza a alzarse en el aire, varios centenares de metros por encima de vuestras cabezas, tras la cual comienza a avanzar hacia la dirección de la que veníais.  En dirección a la Ciudad Bajo la Roca.

Notas de juego

Kyora.  Has sufrido 1D de daño a un rasgo.  Eligeló e interpreta como te ha herido la esfera de luz.  Recuerda que un punto de destino te cura ese daño.

Joshua y Kyora.  Estáis separados de Uren, no le seleccioneis.

Uren. No selecciones a tus compis.  Descríbeme el interior de la nave y elige con cabeza tus acciones. edit: el hombre-cobra no está a la vista.

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29/06/2021, 14:11
Kyora

Todo se había ido demasiado lejos incluso para la intérprete al punto de que no pudo evitar el impacto de la esfera luminosa en medio de su vientre que la terminó por desplazar a varios metros hacia atrás. No lloró por ello, sí por la injusticia y la misma mano del hombre que interviene y empeoraba las cosas. No pudo ver más, sólo sintió la necesidad de comprobar el efecto de aquello, y en el suelo se miró el vientre donde ahora tenía un aureola más oscura en su piel mientras que la ropa en ese sector estaba completamente carbonizada. ¡Por mi milagro se había salvado!

Adolorida intentó incorporarse pero cayó nuevamente de bruces al suelo, perdiéndose así cada uno de los eventos nuevamente. Buscó entre sus cosas algo para ponerse o envolver esa parte mientras el silbido de una flecha se escuchó y Uren se lanzaba a subir en aquella nave. No pudo evitar nada de todo aquello, dolía más ese hecho que la propia quemadura. No obstante intentó ponerse de pie nuevamente con la ayuda de su lanza y miró hacia Joshua. Habían quedado solos. 

¿Perdi-mos a U-ren...?

Notas de juego

Gasto punto de destino, ya voy 2/4. 

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29/06/2021, 23:35
Joshua

El arquero siseó al ver el poco efecto que había tenido su intento. Eso descartaba que aquella barrera fuera un esfuerzo consciente del Hombre-Cobra, que no podría haberla visto venir: Debía protegerlo desde todas direcciones... lo cual lo volvía invulnerable. Lo único que no podía entender era qué hacía marchándose. Podría haberlos matado a todos sin esfuerzo.

Pero empezaba a acostumbrarse a tener que aceptar las cosas. Las respuestas llegarían cuando llegaran. Lo que no estaba tan bien era todo lo demás: Él había salido ileso, pero no podía decir lo mismo de Kyora, y Uren...

Creo que... creo que se ha metido en la nave, con esa serpiente. ¡Se le ha ido la cabeza! —maldijo Joshua, mirando con algo más de atención a Kyora— Habría preferido ser yo el herido y que tú fueras mi atenta enfermera, pero estos son los papeles que nos han tocado. Dime, preciosa, ¿qué puedo hacer para ayudarte? ¿Se puede curar eso? Porque si queremos que los tres enviados no se conviertan en dos, vamos a tener que darnos prisa.

Apuntó con un dedo en dirección al aire, donde todavía podía verse la nave.

—Hay que perseguirla. Ya no nos queda otra opción.

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30/06/2021, 14:32
Director

Kyora se palmea el vientre.  Excepto la ropa quemada y un escozor leve, no ha sufrido ningún daño de la bola de luz.  Quizá la distancia la protegió, estaba algo más lejos que el resto de guerrero. Puede que la luz le alcanzara de refilón, lo que explicaría aún mejor que su cuerpo todavía estuviese de una pieza.   Joshua descubre con fastidio. que el escudo del Hombre-cobra le cubre desde cualquier ángulo.  Y ambos se horrorizan cuando ven que Uren se queda dentro de la nave en movimiento, sólo frente a la criatura.

La nave avanza hacia la Ciudad bajo la Roca, mucho más lentamente que la velocidad que había alcanzado hacía unos instantes.   La veis alejarse y sobrevolar la llanura de manera ominosa.  A pesar de su velocidad reducida le llevará unos minutos llegar hasta la población, mientras que a vosotros os tomaría casi una hora corriendo.   Por eso, contempláis impotentes como desde dos protuberancias de la nave del demonio serpentino empiezan a surgir bolas ígneas, en gran número, como una tormenta de relámpagos, que golpean casas y calles, derribando muros, provocando incendios y levantando una tremenda nube de humo y polvo.  Sin duda, está muriendo gente y, aunque la distancia os ahorre imágenes terribles, la idea de una matanza indiscriminada os llena de horror.  Lejanamente oís hablar la voz aumentada del Hombre-cobra, llena de ira, pero no podéis discernir sus palabras, está demasiado lejos.

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30/06/2021, 14:41
Kyora

Está loco, realmente. Aún así confío en su instinto. 

De alguna manera Uren era una persona silenciosa pero había demostrado ser muy inteligente y astuta, lo cual si había osado dar ese paso, claramente era porque tenía un plan descabellado. No obstante mientras se revisó el vientre, comprobando que de alguna manera sí que tuvo suerte con aquellas esferas luminosas, escuchó a Joshua. Incluso frunció el ceño cuando habló de ser ella misma su enfermera. 

Como te aprovechas...—dijo y agregó al mostrar su vientre—. Sólo tengo una marca, no pasó a más y pese al dolor del impacto creo que puedo dar más de mi. 

Y antes de decir siquiera más porque ese preciosa merecía un codazo en el estómago, observó a la nave y su dirección. La idea de su compañero de salir corriendo no lo vio muy viable ya que su velocidad los superaba con creces. Pero esto en sí no era nada, el horror se hizo expresión cuando comenzó aquel hombre-cobra a incendiar todo. 

¡No!—gritó dolida. 

No lo pudo evitar, aquello era devastador y no pudieron hacer nada. Era todo muerte, desolación, caos. Un maldito caos. Aunque claro, todo esto la dejó paralizada y llena de rabia.

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30/06/2021, 22:41
Uren

El interior de la nave era de un color cobrizo opaco. El suelo estaba formado por tiras de metal que se entrelazaban como raíces, y unos tubos blandos recorrían las paredes y el techo. Desde distintos lugares el vientre de la bestia metálica exhalaba vapores que asustaban a Uren cuando salían de improviso desde arriba hacia abajo. El ambiente era cálido dentro, hacía más calor que afuera.

El cazador desenvainó su cuchillo y lo mantuvo listo para atacar, o defenderse. Apoyó una mano sobre el lomo de Hayt pidiendo su silencio, completando el gesto con su dedo índice sobre la boca. El animal entendía el gesto, era el gesto de cazar, y vaya que estaban cazando.

Su idea era avanzar con cautela, él de un lado, Hayt del otro. Si uno era descubierto, el otro atacaba. Siempre lo hacían así, la presa no podía prestar atención a dos frentes, sobre todo cuando no sabía que los había. Podían descubrir a uno, si eran muy perceptivos, pero nunca los habían descubierto a ambos a la vez, esa era su gran ventaja.

Uren sabía que el hombre cobra estaba protegido, lo había visto, pero tal vez si se sentía seguro bajaría sus defensas. Todo era una incógnita, de cualquier forma, estaría atento a lo que podía encontrarse y actuaría en consecuencia.

Notas de juego

perdón por el atraso, dire!

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01/07/2021, 07:53
Director

Mientras contempláis horrorizados la escena, el líder de los guerreros que os perseguían sale de detrás de unas rocas. Con su atención puesta en las acciones de la nave demoníaca, no se ha dado cuenta de que estáis ahí, a su espalda, a apenas unos cuantos metros.  En sus manos aún sostiene el artefacto con el que contactó con el Hombre-cobra.  Tres guerreros habían huido en dirección a la ciudad y ahora están paralizados en mitad de la ladera.  Los otros tres restantes yacen a vuestro alrededor, abatidos por el arma mágica de la implacable criatura.

El navío demoníaco deja de disparar.  ¿Ha saciado su ansia de venganza? ¿O acaso Uren está enfrentándose a la criatura, distrayendola de su ansia destructiva?

 

Cargando editor
01/07/2021, 07:59
Director

El calor y la humedad en el interior de la nave es asfixiante, mucho más que durante el peor día en laa tierras bajas del sur.  Avanzas por las entrañas de la nave sin saber qué peligros te esperan en su interior y te alejas de la estancia de forma irregular, llena de conductos, a través de la cual accediste.  Hayt permanece a un lado, ambos conscientes de la posición del otro, sin necesitar del sentido de la vista para ello.  

El corazón te da un vuelco cuando, tras un recodo, llegas a una sala más iluminada.  La pared más alejada es un ventanal a través del cual compruebas que te hallas a muchísima altura sobre el suelo.  Frente al ventanal, una silla similar a aquella sobre la que el Hacedor de preguntas se sentaba, vacía frente a una pared llena de palancas y esferas de vidrio en cuyo interior brillan filamentos ardientes.

Un escalofrío te recorre, Hayt te pone alerta al percibir el olor del Hombre-cobra.  Gracias al aviso, te mueves a un lado evitando por los pelos el ataque de la criatura.   El Hombre-cobra sisea y se coloca frente a tí. 

En una estancia tan pequeña, enfrentarse a la talla y la musculatura del monstruo se antoja casi imposible.  A tu favor se encuentra el hecho de que, por alguna razón, una espada dorada se halla en sus manos y no un arma mágica que escupe fuego   -Estupido humano - gruñe antes de escupir un fluido verdoso hacia tus ojos.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Combate contrato él.  Como siempre, una tirada enfrentada con un rasgo que sea adecuado. Suerte!!

Cargando editor
01/07/2021, 11:46
Director

Notas de juego

Recuerda que Hayt puede apoyarte con 1D, si atacais simultáneamente.