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La Batalla por Galdonia VI

La operación relámpago de fuego

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12/03/2013, 05:17
Director

La luz matinal del amanecer los había despertado a todos junto al retumbar de sus literas. Muchos creyeron que estaba temblando pero pronto cayeron en la cuenta de que eso era imposible, algo había sucedido. Más aun, todos se preguntaban que había sido aquel resplandor que muchos habían percibido. Las alarmas de la Sirius Beta resonaron en toda su magnitud apenas un minuto después de que la mayoría de los infantes despertaran. Al parecer, los bichos se les habían adelantado.
Mientras los infantes se apresuraban a ir a sus puestos asignados para equiparse y prepararse para lo que parecía estar ocurriendo fueron notando como la incertidumbre y cierto miedo se acrecentaba tanto en infantes como en miembros de la flota. Sin embargo, pronto fueron parados en seco por las noticias de lo que había sucedido en realidad, aunque lejos no estaban de la verdad en sus suposiciones iniciales.
Al parecer los bichos sabían lo que estaba por ocurrir o al menos lo sospechaban pues habían iniciado un fuerte ataque de artillería contra las fuerzas de la flota. Según se rumoraba, tres naves habían caído llevándose con ello a más de 1000 infantes que no había sabido siquiera que les había pegado.
La Sirius Beta había corrido suerte, un proyectil de plasma había rozado la nave desgarrando gran parte de su casco protector y causando serios daños. Los cuales sin embargo no la imposibilitaban para las operaciones de desembarco que al parecer no se retrasarían.
El caos y los gritos ya reinaban en todos los pasillos de la nave mientras los infantes del segundo pelotón de infantería pesada se habrían paso para tomar un rápido desayuno antes de ir a la sala general de conferencias.
Mientras degustaban aquel rápido pero abundante desayuno, algunas noticias llegaban a sus oídos acerca de lo que ahora acontecía y de lo que estaba por acontecer. Algunos rumores apuntaban a que tras el desembarco general la flota se retiraría abandonándolos a su suerte a fin de reducir daños propios; pero aunque esto no sería de extrañar, era poco probable que ocurriera pues ya muchos sabían que sin el apoyo de la flota poca cosa se podía hacer. Se decía también que la flota se estaba preparando para un bombardeo general a gran escala previo al desembarco con el fin de barrer a todos los bichos en la superficie y así facilitar las operaciones conjuntas posteriores. Había quienes afirmaban que lo operación se centraría en recuperar la colonia perdida antes del inicio de la campaña para desde allí llevar todo el ataque contra el imperio arácnido. Incluso había quienes afirmaban que en un movimiento táctico a nivel quirúrgico, algunos miembros de la infantería móvil habrían de encargarse de todos los bichos pensantes que hubiera en Galdonia VI antes siquiera de desembarcar el grueso de las tropas, esto al parecer con el fin de reducir su poder operativo al mínimo en un instante.
Lo cierto era que la conferencia sobre la misión estaba por iniciar y ya todos tenían que dirigiéndose a la misma. De todo lo anterior lo único que sabían con seguridad que era cierto, era el nombre mismo de la operación conjunta entre la flota y las fuerzas de la infantería móvil: “Relámpago de fuego”.

Notas de juego

Todos: Iniciamos con la escena donde se presentan los detalles de la partida. Les pido a todos pongan mucha atención pues al final acabaran llenos de dudas, quizá crean que no ahora pero cuando se presenten los problemas les aseguro que me asaltaran con dudas.
Lideres de escuadrón: Hagan notas y sean astutos, ustedes llevan el peso de cada misión en sus manos.
Todos: Por ahora iniciamos con los momentos previos a la conferencia y con su andar a la sala de juntas. Todo el desarrollo de la trama debe llevarse en esta escena pues por ahora no tienen por que estar en otro lugar y no asistir puede ser fuertemente castigado.

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12/03/2013, 09:05
Sargento Robert Stone

Maldita sea, anoche bebiste demasiado ...  -  pensaba, mientras miraba el espejo con la boca pastosa, mientras se lavaba la cara, ya era la segunda vez que tenia que levantarse al baño. Una fuerte sacudida hizo que se despejara, - pero que coj ... - dijo sin nadie que le pudiera escuchar, y al instante supo que es lo que estaba ocurriendo, había empezado lo que  todos esperaban, solo que antes de lo previsto. Salió corriendo hacia su taquilla, y empezar a colocarse el uniforme, gritando al resto de su escuadrón - ¡Vamos señoritas! ¡Todo el mundo en pié! ¡nos atacan no es un simulacro! - decía mientras terminaba de prepararse. 

El protocolo era claro en estas situaciones debíamos presentarnos en la sala de conferencias para escuchar la evaluación y la consiguiente respuesta que debía hacer la infantería. ¡Tenéis tres minutos para vestiros, y tomar algo antes de ir a la sala de conferencias!¡Vamos, Vamos, vamos! - gritaba anticipándose a las órdenes del sargento al cual no había visto todavía - ¡Dos minutos! - Salió por la puerta una vez preparado, en dirección a la sala cogiendo precipitadamente una taza de café que vació en un tiempo récord, no se podía perder más tiempo la flota estaba siendo atacada, y varias naves ya habían sido destruidas, no les quedaba demasiado tiempo.

 

 

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12/03/2013, 09:56
Marcus T. Haggar [GAT]

Bottler no había notado al ajetreo, después de todo la Academia no era un sitio tranquilo y antes de eso vivís en un sucucho pegado a las vías de los transportes. Pero la agitación que siguió y las sirenas de alarma si que lo despertaron ipso facto. Nervioso y asustado, saltó de la cama y se vistó revisando su equipo al mismo tiempo, se tomó una taza de café y un bollo mientras corria hacia la conferencia y se preguntaba cómo era que algunos podían desayunar tan tranquilamente.

Una vez en la sala, se restregó las manos en la penera del pantalón por enésima vez, pero seguía sudando y no podía dejar de mirar alrededor.

"Está pasando... está pasando...."

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12/03/2013, 10:05
Thomas Burnette [FOX]

Ambos sabían que aquello sólo era una noche de placer para olvidarse de todo lo que vendría después. Por eso, Thomas Burnette se escurrió de la cama como una serpiente para no despertar a Megan, queriendo evitar así un momento incómodo en la despedida. Aún era temprano, pero había dormido plácidamente acurrucado en su suave piel y no había bebido la noche anterior, por lo que se encontraba plenamente descansado.

El sonido del roce de las sábanas hizo que se girara hacia la cama, mientras aún no se había terminado de poner los pantalones. Allí estaba ella, con la melena oscura cayendo rebelde sobre sus hombros, mirándole con una mezcla de ternura y tristeza. Probablemente aquel sería el último adios, la última despedida. ¿Qué palabras se pueden decir cuando no hay nada que decir? ¿Cuando todo se puede transmitir con una caricia o una mirada cómplice?

Burnette sonrió tristemente mientras terminaba de abrocharse los pantalones. Aún tendría que volver a su barracón para ponerse el uniforme para el briefing previo a la misión. Ella se incorporó sobre la cama y se inclinó a coger un cigarrillo de la mesita de noche. Una marca cara, un producto importado de la Tierra que habría costado mucho dinero o algunos favores. No importaba. Ya ni siquiera le miraba, como si quisiera olvidar de inmediato las facciones de su rostro.

Entonces llegó el temblor, y Thomas miró a ambos lados. Inmediatamente, la alarma general resonó por toda la nave, y el soldado recogió rápidamente su uniforme de gala haciendo una bola entre sus brazos. Una última mirada entre ambos, quizás la última que se dedicarían jamás, pero ni una sola palabra. No tenían valor para decirlas.

Como una exhalación, salió de la habitación, mientras escuchaba el sonido neumático de la habitación de Megan cerrándose. Los pasillos pronto se llenaron de soldados que estaban sorprendidos por la alarma y oficiales que ordenaban ponerse en posición. En los barracones de la FOX todo era caos y algarabía, y Thomas percibió las expresiones típicas de quien ha bebido demasiado la noche anterior.

Había que ponerse en marcha.

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12/03/2013, 10:09
Mia García (GAT)

Björn se despertó con el traqueteo inusual de la nave. Un movimiento más brusco terminó de desperezarle, mientras alguien gritaba la señal de alarma. Estámos bajo ataque... Rápidamente se levantó de la cama, dormía sólo con los pantalónes, sin camiseta, dejando ver un escultural cuerpo athlético digno de un culturista, tapado por una enorme cicatriz que le recorría desde la clavícula derecha hasta algo más abajo del abdomen. Repasó el reccorido de su cicatriz, cómo si fuera un acto reflejo, una cotumbre, una tradición. Tan rápido cómo su cuerpo le permitió se puso tu traje de combate.

Ha llegado la hora de la fiesta señoritas!!!!!! gritó para que los rezagados y perezosos, o los que todavía andaban en el sèptimo sueño se levantaran.

Con las botas puestas, y un pedazo de carne seca en la boca, Bjrön estaba preparado para ir a la sala de misiónes.

Esos bichos de mierda han elegido un día magnífico para morir...y lo harán bajo los guardianes!!!!!!!

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12/03/2013, 12:06
Sargento Corbec [HEAT]

El sargento de la Heat , habia permanecido ausente hasta el momento , noches encerrado en su camarote y hablando con algun alto mando le habia dejado inquieto he intranquilo, no queria que ninguno de sus hombres lo notara y pagarlo con el, hubiera sido un error y un posible conflicto con otros sargentos, aparte de un mal ejemplo.

Las sirenas le habian despertado, se levanto con una petaca de whisky vacia alado de la cama, sentia un ligero dolor de cabeza y se afeito una barba de dias, una ducha y se arreglo

Lo mas seguro es que les dieran una charla sobre lo que estaba pasando y probablemente seria para meterlos en faena al dia siguiente, seria su primer contacto humano en dias , asi que se adecento lo mas posible para dar una buena imagen, en silencio, camino en busca de instrucciones

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12/03/2013, 12:18
Sargento Sonia Ramírez

Con apenas los pantalones del uniforme puestos, sin estar abrochados del todo, y la camisa sólo con dos botones sujetos, llevando el resto de la ropa como podía en las manos, Sonia salió como una exhalación de la zona de dormitorios hasta las taquillas, abriendo la suya y empezando a cambiarse como si la vida le fuera en ello, dando órdenes a diestro y siniestro. No se había preocupado de si el indio le había seguido, estaba en modo "soldado".

- ¡Moveos, vamos, malditas nenazas! - gritaba - ¡Le pegaré un tiro en el culo al que no esté listo en dos minutos!

Alguno podría pensar que se había levantado con el pie izquierdo, pero la verdad es que era siempre así de activa. Y tanto era así que en un momento ya se había puesto el traje de combate y recogido el equipo. Menos mal que se la frenó al decir que fueran a desayunar, que les iban a informar de la misión y que no estaban en un peligro tan serio como creían. Sí, los bichos estaban atacando y habían alcanzado la nave de refilón. ¿Habían descubierto que iban a hacer algo? A saber, pero desde luego dudaba que estuvieran desplegando su artillería de plasma sólo para divertirse.

Como siempre, había infinidad de rumores a los que Ramírez no quiso hacer caso para no tener impresiones equivocadas. Aguardaría hasta que les informaran en condiciones de qué iban a hacer, entonces se formaría sus impresiones o pensaría lo que fuera. Ahora mismo, lo mejor era centrarse en desayunar en condiciones, cosa que hacía, con rapidez, ya que era un desayuno muy completo.

Y cuando acabó, directa a la sala de conferencias.

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12/03/2013, 14:20
Amanda Campo Guerra [GAT]

Todo el mundo corría de un lado a otro ajetreándose para estar listos tras el resplandor y el impacto que había azotado la nave, la artillería de los bichos era muy destructiva y certera, por lo que nadie allí tenía razón para correr. El tiempo de respuesta de las naves de desembarco era de cuatro minutos y treinta segundos, daba igual que estuvieses allí con tu armadura y equipo preparados en medio de un bombardeo, probablemente palmases mucho antes junto a toda la nave.

Así que él en vez de correr o meter prisa a sus chicos lo que hizo tras desayunar copiosamente fue caminar por los pasillos con su taza de café hasta la sala de conferencias, ni siquiera ordenó a nadie de Gatling que se presentasen allí, ya todos sabían que debían estar en ese lugar preparados para la lucha.

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12/03/2013, 14:32
Caín Rumsfeld - [ECO]

El impacto sobre nuestra nave y las alarmas que empiezan a sonar funcionan mejor que un despertador. Me levanto de un brinco, pero sin recordar donde leches me encontraba. El golpe de las tablas de la litera superior contra mi cabeza terminó de despejar los efluvios etílicos que pudiesen quedarme...... - LA MADRE QUE HA PARIDO A LAS MALDITAS LITERAS......coño.

Salgo de la litera tocándome la cabeza, donde empieza a surgir un chichón. Mientras mis compañeros empiezan a levantarse, busco a tientas las botas que en algún momento de la noche dejé debajo de la cama. - Las encontré.....​ arreo hacia mi taquilla para introducirme en el mono de combate....con esto si que se comportarme..... salgo al pasillo ante la idea de ir a buscar algo de desayunar. 

La nave anteriormente un lugar donde la formalidad y el orden se veía en cada esquina, se ha transformado en una pista de carreras donde los miembros de la flota y los infantes corren a ocupar sus puestos asignados. - Esto parece una carrera a ver quien llega antes a desayunar.

Busco una bandeja, la empiezo a cargar con comida y bebida antes de sentarme en una mesa para devorarla como si no hubiese mañana.....Y luego a la sesión informativa, que coñazo.......  Limpio los restos de migas de pan de mi uniforme y continúo mi viaje a la sala de conferencias.   

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12/03/2013, 15:08
Sargento Mayor Jhonny Frost [GAT]

Frost había dormido algo intranquilo, le había costado demasiado conciliar el sueño con la cantidad de expectativas que tenía dando vueltas en su agitada mente. El día de la misión se acercaba peligrosamente, y ahora además de ocuparse de los cacharros electrónicos tenía una fuerte responsabilidad sobre un grupo de soldados que entrarían en su primera batalla. Por momentos deseaba volver a ser simplemente un soldado raso, cumpliendo órdenes y nada más. Trataba de recordar consejos de su padre para calmarse, pero le era difícil concentrarse, las imágenes de las planicies del asteriode ocupaban su paisaje mental, los bichos visibles e invisibles aterrorizaban lo inesperado, lo oscuro, lo siniestro. No recordaba sus sueños, ultimamente los mismos pululaban más por la vigilia, haciéndolo sentirse inseguro.
Así fue como los temblores lo trajeron desde las sombras al barracón del escuadrón, al cual todavía estaba acostumbrándose. Tenía exactamente el mismo diseño que el de la Eco, pero las personas que lo habitaban le daban un aspecto y una sensación diferente. Mierda, era prácticamente como estar en una lanzadera descendiendo Pero que carajo... un fuerte sacudón lo hizo caer a un lado, se incorporó rápidamente y miró a derredor, donde prácticamente todo el Gatling de movía, algunos incluso ya estaban de pie. Estaba colocándose sus pantalones reglamentarios cuando las alarmas sonaron estruendosas, algo esperado.
Hay que apurarse... Infantes ¡De pie ya! hay que estar operativos en menos de los que digo Gatling Apurando a los novatos, Johnny se fue vistiendo y salió corriendo hacia el arsenal donde su armadura de combate y el resto de su equipamiento le esperaba. El frenesí no duró demasiado, la alarma cesó y las órdenes de desayunar llegaron desde los altos mandos. El técnico ya se encontraba algo sudado y con el corazón latiendo como tambor. Pronto vendría la adrenalina, pero decidió calmarse y caminar a paso lento hacia el comedor, dónde seguramente se encontraría con los demás listos.
Respiró profundamente varias veces y se dedicó a ingerir algo, su estómago gritaba por algo de alimento. Vamos muchachos, comamos algo... la batalla está demasiado cerca pero tenemos unos minutos.
Mientras ingería café acompañado por un revuelto abundante del cual no se podía distinguir exactamente cual era el huevo y cual la supuesta panceta, comenzó a notar que el sargento no había pronunciado palabra hasta entonces, se movía silencioso entre sus soldados. Ya se conocerían más, por ahora si así se daba la situación, Johnny seguiría tratando de animas y dar órdenes a los soldados. Llywelyn partió rápidamente mientras todos aún trataban de engullir algo y se oían rumores en todas las mesas, la inquietud era palpable.
Gatling, ya saben a dónde hay que dirigirse ahora mismo, no quiero que el sargento sea el único representante allí. Frost se apresuro para ponerse de pie terminando el último sorbo de su caliente infusión y caminó a largos trancos hasta ponerse a la par de su sargento. En la sala de conferencias sabrían más detalles de lo que seguía al ataque habían sufrido.

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12/03/2013, 15:55
Dereck Mackeyn [FOX]

Solo los gritos de Sonia lograron despertar a Dereck, que se encontraba en un placentero sueño que se vio interrumpido en un instante. Eso, y la sacudida de la nave con el impacto recibido.

Empezamos bien- aún somnoliento, se levantó de su litera y fue directamente a su taquilla a recoger su ropa. Sus compañeros iban levantándose -algunos ya estaban incluso preparados-, y Dereck bostezó ostensiblemente mientras comenzaba a vestirse. Al poco rato ya estaba con su traje de combate listo y predispuesto. Ahora solo le quedaba ir primero a desayunar y luego a la conferencia.

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12/03/2013, 15:56
Allistaire "Brocheta" McAllen [ECO]

Un estruendo hace que McAllen casi se caiga de la cama, y de pronto se levanta como si fuera el fin del mundo mientras gritaba aún medio en sueños- ¡SAM! ¡TE LLEVE AL CABALLITO! ¡¿PORQUÉ VIENEN LAS CHINCHES?! ¡SOLO TE TOQUÉ EL CULO COMO PEAJE!

Entonces parece despertarse del todo, con la mirada muy ida aún y se ve que intenta hablar algo, pero con la boca como una zapatilla, se baja de la litera de arriba y coge la primera botella de agua que pilla, la cual se la bebe por completo sin parar.

Tras esto, y al darse cuenta de que todo el mundo está corriendo comienza a ponerse todos los bartulos. Daba gusto ponerse esas armaduras pesadas después de saber lo que es llevar un traje polar de porquería y una armadura muy ligera. Si había sobrevivido con ese equipo, con este podría sobrevivir algo más, de eso estaba seguro.

-¡¿ALGUIEN SABE QUE COJONES PASA?! -pregunta a voz en grito mientras ve como todos sus compañeros están tan perdidos como él.

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12/03/2013, 16:01
Andrei Popov

Ayer entrar en situación de combate me parecí distante, como la historia de alguien que nunca iba a llegar. Ahora ese momento se ha adelantado, todo son gritos y carreras por los pasillos. La adrenalina me quita la resaca. Me visto y desayuno en automático. Siempre muy atento a los movimientos y órdenes de mi Cabo que ya nos amenazó tres veces con tiros en el culo. Es bueno que nos trate así de esta manera uno siente la continuidad de la Academia. Estoy listo antes que varios de los otros pero espero a seguir a la cabo Ramírez a la sala de conferencias, es mi primera misión en la Fox y no quiero cometer errores estúpidos de formas. Estoy muy tenso y por primera vez deseo que se acabe la charla, mi cuerpo me pide acción, mi mente está asustada.

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12/03/2013, 16:07
Samantha"Ojoloco" García [ECO]

Sam, que había dado una patada en la litera de Brocheta para que se moviera prácticamente según la nave de estremeció, se tapó los oídos con los nudillos de una mano ligeramente amoratados como si hubiera golpeado algo o a alguien.
-Si quieres me cobro los intereses-dijo calándose la ropa de forma un tanto desastrosa y apresurada, tras eso se colocó en la armadura y embistiendo a aquellos que iban por los pasillos como histéricas en rebajas en vez de hacer su maldito trabajo y organizarse.
esos bichos hijos de puta...pensó mientras avanzaba con rapidez con uno de los hombros prácticamente pegados a la pared en dirección al comedor.
-¡A llenarse las tripas como una puta ardilla recoge nueces para el invierno!-dijo como "buenos días" en el comedor mientras llenaba una bandeja y se sentaba de malas maneras en el banco para dar cuenta (es decir, engullir como si no hubiera un mañana) el desayuno.

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12/03/2013, 16:18
Sargento Steve Miller [ECO]

Miller debía estar en algún paraiso trocpical, aunque no sabría decir donde. Podía escuchar las olas rompiendo contra la playa, sentir la arena caliente bajo su espalda y oler el salitre en el aire. Una rubia de veintipocos estaba sobre él, a horcajadas, sonreía como deben sonreir los ángeles y su pelo dorado estaba enmarcado en un cielo azul, limpio y claro. Steve alargó una mano para tocar uno de esos perfectos senos, cuando la boca de la veinteañera se abrió y comenzó a emitir un quejumbroso alarido, más propio de una bocina que de una persona.

El zapador despertó en un caos de gente corriendo en calzoncillos, alarmas, gritos y resaca. La cabeza le dolía como si alguien le hubiera metido un cortafríos entre los ojos a martillazos. El Cabo se levantó paladeando su boca reseca, en ese momento mataría por estar muerto, o al menos por un café y dos aspirinas.

Una vez en pie bostezó, y tras rascarse de forma indecorosa todo lo que cuelga dijo:

¡Vamos micos, daros prisa! La misión más importante en vuestra vida es hacer que esa maldita alarma se calle, así que vestiros, desayunad, presentaros donde haya que presentarse o conquistad Galdonia de una puta vez, pero haced que se calle, ¡por el amor de Cristo!

Él mismo se aplicó el cuento enfundándose en el uniforme de faena y metiendo prisa a los soldados dormilones.

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12/03/2013, 16:42
Philippe Durand [HEAT]

¡Ay dios mío! ¡Ay dios mío!  Las voz del cabo le despertó de su sueño, y eso solo podía significar una cosa...   Se levantó corriendo y se preparó en el menor tiempo posible para salir detrás de su cabo en busca de algo para comer. Estaba de los nervios y tenía resaca, pero por suerte no se olvidó nada en la taquilla. Después se dirigió a la sala de conferencias... solo esperaba no llegar tarde, aunque sabía que no había sido el último en salir de su escuadrón.

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12/03/2013, 16:57
Dante Maynard-[ECO]

A Dante lo despertó el estruendo, sabía que eso era algo malo, por lo que empezó a vestirse segundos antes de que sonara la alarma.

Sin necesidad de soltar ningún comentarioa  sus compañeros se dirigió rápidamente hacia el comedor, ayudándo por el camino a algún despistado, incluso a un solado que había caido al suelo debido a la avalancha de camaradas.

Gracias a su abuelo estaba acostumbrado a comer poco y que le cundiese mucho, de modo que no se apuró mucho para llenar el estómago antes de dirigirse a la sala donde le darian las órdenes.

Ahora si que vamos a demostrar de lo que somos capaces... pensó para si mientras repasaba mentalmente sus pasadas experiéncias de ocmbate

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12/03/2013, 17:48
Bill "Desperado" Hutchinson [Eco]

Me había dormido pensando en una belleza de pelos rubios, y las cosas... y las cosas cambiaron de pronto.
El sacudón que dio la nave casi me tira de la litera, luego las alarmas. Las malditas alarmas.
Comienzo a vestirme rápidamente mientras escucho las palabras de mi cabo arengándonos.
Cuando este termina el "ajuste de actitud", yo ya estoy a medio vestir, termino de abotonar mi camisa y comienzo a seguirlo.
No solo por ser mi cabo, también es un zapador. Si algo tengo que hacer es aprender de él, después de todo, él es veterano, yo no.
Me trago mis pensamientos y me quedo conforme a las ordenes del cabo Miller, listo para seguirlo.

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12/03/2013, 18:00
Kurt Gawain [FOX].

Varias veces en mi vida me he alegrado de no ser de mucho beber, una de esas es precisamente hoy.

Anoche apenas bebí dos vasos de whisky, y lo hice muy lentamente, por lo que hoy me levanto sin resaca.

Antes de que la Cabo Ramírez acuda a levantarnos, yo ya estaba en pie. Me ha dado tiempo a asearme, afeitarme y ponerme mi uniforme.

Tras su aviso, termino de peinarme y de colocarme bien el uniforme y acudo a la Sala de Reuniones para el Briefing de la misión.

Cuando voy por los pasillos de la nave, noto que muchos infantes se apresuran en mi misma dirección. También veo correr a muchos marineros de la Flota, nerviosos por los daños sufridos por la nave.

Finalmente, llego a la Sala de Reuniones y veo que hay ya algunos chicos de la Fox.

Me siento junto a ellos.

- "Mackeyn." - Saludo al más cercano al sentarme a su derecha.

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12/03/2013, 18:13
Cabo Mijail Stukov [GAT]

La fortuna había sonreido la noche anterior a Mijail, y necesito la ayuda de su compañero para que lo dejara tirado sobre la cama, donde durmió la mona hasta que sucedio esa sacudida. Lo que habia despertado a miles de soldados, y posiblemente hubiera tirado a mas de uno de la litera, a Mijail le hizo darse la vuelta, aun con el uniforme de gala del día anterior.

- Un poco más... que más dara... Murmura, entre sueños, resistiendose a despertarse, hasta que Frost tuvo la feliz idea de ponerse a gritar junto a él. Aquellos berridos mas similares a los de una madre furiosa por el holgazan de su hijo si lo sacaron de su letargo de una bofetada. Abré los ojos y se incorpora automaticamente, parandose a escasos milimetros de la litera superior. Y no se da cuenta de lo cerca que esta de abrirse la primera brecha de la campaña. En la mano aun tenía los cigarros que le había ganado a los "chavales" de la HEAT. Manoseado, medio rotos despues de todsa una noche con ellos en la mano, pero parte de su premio y victoria.

No era lo unico que habia heredado de la noche anterior. al abrir los ojos comenzo a darse cuenta del tremendo dolor de cabeza que le acompañaba, y lo que le llegaba a molestar los focos en la habitacion  ¿Que coño...?  Pregunta, confuso, mientras veia a varios reclutas gritar, la alarma, el nerviosismo general y las prisas de todo el mundo. Se puso en pie, echandose agua en la cara, lavandosela y se cambia de ropa, olvidandose de hacer la cama.

Se lleva uno de esos cigarros a la boca, uno de esos medio estropeados. Y se lo fuma con cierto gusto. El primero del díoa era de los mejores.

 Menuda mierda de día, ya podían ser todos como ayer.  Se queja, mientras se viste.  Las alarmas dejaron de sonar, cosa que el, sus timpanos y sobretodo, su resaca, estaban agradeciendo enormemente. Vestido, salio del barracon, y camino por el pasillo siguiendo de bastante lejos a Jhonny. Todavia no tenia ni puta idea de que había pasado, pero se para cuando escucha a dos infantes decir que los bichos han dado el primer golpe. Que habia muerto gente. Que a ellos poco les habia faltado. En ese momento, el acojone llamo a su cabeza, se le paso la resaca derepente y miro a su alrededor, sin saber que hacer o que pensar. Dió una larga calada al cigarro, sin saber siquiera que pensar, bloqueado unos segundos. Y, solo cuando el cigarro comenzaba a consumirse, y sintio el calor en los labios, reacciono. Ahora mismo, pensar estaba de mas. Su vida estaba en manos de los pilotos, que esperaba que no la cagaran. O el mismo les dispararía.

Ahora si, nervioso y algo acojonado, corrió hacia la armeria para ponerse la armadura de combate, y luego ir a la cafeteria.

Entra, y se pone firme junto a Frost y Philip  ¡Señor!  Dice, y se aleja a recoger algo de comida y bebida. Mas de lo recomendable apra una persona, posiblemente algo se guardaria para bajar alla abajo, no acababa de fiarse de la mierda ala que llamaban racion de combate. Toma el desayuno junto a sus compañeros, sin apagar el cigarro, y sin decir palabra. Le temblaba la mano, algo que podia ver cualquiera ¿Y a quien no despues de lo sucedido?

Acaba la comida, y sale a toda prisa tras sus superiores, sin decir nada. Despues de todo, no sabe donde tiene que ir, y seguro que si los sigue, llega a donde quiera que tenga que ir.