Poco a poco os vais despertando. La luz de esta mañana invernal está sucia por la abundancia de nubarrones de color parduzco, que presagian tormenta. Acrolis está terminando de preparar sus conjuros del día, y os saluda con un gesto ligeramente ausente. Por su parte Briareos ha preparado un desayuno. Es una mañana bastante fría. Durante la noche ha helado y algunos habeis sentido el frío en vuestros huesos, aunque no os ha impedido descansar.
Me estiro nada más levantarme. Debo ser el que peor ha dormido de todos, dado que me tocó la guardía central, y no se si habré pasado también el que más frío, así que me importa una mierda lo mal que les pueda sentar el gesto.
Por lo menos el desayuno huele bien, aunque a estas horas y con este tiempo cualquier cosa caliente sienta de maravilla.
- Buenos días - saludo rascándome la cabeza.
Hoy teniamos que localizar los buhos si no recuerdo mal. Así que tras el desayuno habrá que ponerse en marcha.
Morzog no dice nada, permanece callado mientras se despereza con tranquilidad.
-Buen dia...+respondo desde la fogata, contemplando las llamas, mientras pruebo el desayuno. Satisfecho, continuo.
-Y si, en cuanto todos esten, vamos... Esperos que tus habilidades esten a la altura, eso si. No podemos gastar demasiado tiempo tampoco, ya lo sabes. La mision es primero.
Mira a los que aun faltan de levantarse,
-Arriba, perezozos!! Zandar!!, espero que mi esclava siga viva...
Aparto a Zorrita y me incorporo abrochandome los pantalones.
-Ahi te la dejo. Puede que le duela la mandibula hoy- me limito a decir sonriendo.
A continuación compruebo que mis cosas están donde las dejé y procedo a desayunar. Cuando vea a Xiaoyan la saludo con un guiño.
La esclava de Briareos tiene un aspecto lamentable y demacrado. Sucia por el semen de Zandar, y con tremendas ojeras. Al ser apartada por Zandar se tumba en un extremo del campamento, mientras recupera el aliento.
Morzog mira a la esclava, luego a Zandar.
No dice nada y se pone a recoger sus cosas.
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Xiaoyan se levanta y se asea con agua de su cantimplora, sin decir nada ni responder al guiño de Zandar. Después, acepta el desayuno de Briareos y lo consume en su rincón, tras poner un potecito con agua a hervir junto al fuego. Al cabo de un rato, deja caer unas hojas de té en el mismo, y una vez preparada la infusión, la bebe despacio, con la mirada perdida en la distancia pero los oídos atentos a cualquier ruido.
Yo si me quedo mirando a la esclava, me da la impresión de que Zandar aumenta en la escala de la estupidez según se aleja de la civilación.
- Zandar - le llamo mientras desayuno ¿Por que no inicias un incendio? Seguro que los animales reaccionaran de la misma manera que cuando se acerque esa mediana y encima cuesta menos.
Me limito a masticar sonriendo con la boca abierta , dejando que los jugos y restos de comida resbalen por mi barbilla.
-No seas celoso, Girac. Pasate por mi saco esta noche y te dare de lo mismo...
Me levanto dejando el desayuno a medio comer.
- Quizás lo haga, te corto los huevos y con el olor a sangre podríamos atraer algún depredador. Esto NO es la ciudad. Aquí NO puedes hacer lo que te venga en gana.
Vuelvo a donde había dormido y me pongo a recoger mis cosas, claramente molesto.
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Ya es suficiente, interrumpe Xiaoyan, sin dignarse a mirarles y sin alzar la voz. ¿Queréis que nos oiga todo el bosque?
Muevo la cabeza viendo el claro ejemplo de madurez de mis compañeros. Paseo la mirada por las dos femeninas, Zorrita y Xiaoyan...
-Increible..+mascullo, quien sabe refiriendome a que.+
Termino de comer y rapidamente me dirijo a enrrollar mi petate y guardar las cosas. Luego busco mi caballo y hago un gesto a la mediana que se aproxime.
-Zorrita ira conmigo hoy... +le digo a Zandar+ Si vamos a buscar esos buhos gigantes y los encontramos, te necesito alerta. Jugaras a la noche.
Monto con la esclava sentada delante mio, entre mis brazos. No llevo el escudo, sino que tengo mi ballesta a mano, colgada del hombro.
-Tu diras por donde Girac.
- Ya me trae sin cuidado dónde estén - gruño cerrando el petate - Si no es capaz de pensar con algo más que su rabo no encontraremos nada.
Luego monto en el caballo y lo hago trotar suavemente en dirección a los restos. Si alguien quiere venir más le vale no tardar mucho.
Xiaoyan empaqueta sus pertenencias, ensilla su caballo y monta sin perder tiempo, siguiendo a los demás.
Subo al caballo tranquilamente y me uno al grupo. Continuo en el mismo tono calmado y sin levantar la voz.
-No entiendo por que te interesa tanto lo que hago en mi saco despues de hacer la guardia ni como va a afectar eso a mi rendimiento durante la jornada, cualquiera diria que te lo tomas a lo personal. Dirigiendome a Briareos, continuo: Por supuesto que ire con Girac, si asi lo quieres. Yo no dejo que mis vicios interfieran en mi labor, todos lo sabeis.
Se supone que todos estais acostumbrados a que conejee por ahi asi que no deberiais escandalizaros tanto.
Morzog de apresura a terminar sus preparativos. Monta en el caballo e intenta apresurarse para no quedar atrás.
Luego examina los alrededores, buscando el pequeño compañero de Girac, por si se ha percatado que nos vamos.
Bueno, el hecho que acostumbres ha realizar algún acto que incomode a alguien, no quiere decir que este se vuelva inmune a ello.
Ademas, hacia sus días que no se reunía el "grupito" XD
Giro la cabeza para ver si le termina por quedar claro.
- Lo que me mosquea es que la dejes como una guarra que cualquier animal con un mínimo de olfato podrá localizar aunque se encuentre al otro lado del puñetero bosque.
¿Queda claro por qué se ha mosqueado Girac?
Y yo no me preocuparía por Zeylo, siempre anda cerca.
Puede que no afecte tu rendimiento, pero me encantaría ver como combates con los pantalones desabrochados enmedio de una emboscada nocturna. - Se coloca la mascara bien, que con las prisas le molestaba un poco.
Supongo que entre los ruiditos nocturnos y el espectáculo no tardaremos en encontrarnos en esta situación.
Luego observa a Briareos. - Aun no entiendo por que has llevado a una esclava o sirviente contigo en una operación militar. Para ser un siervo de Hextor el señor de la guerra y la masacre, obras de una forma un tanto extraña.
Como jugador no me preocupo por Zeylo, pero Morzog tiene una cierta curiosidad por el animal.
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Puede que no afecte tu rendimiento, pero me encantaría ver como combates con los pantalones desabrochados enmedio de una emboscada nocturna.
-Pues probablemente mejor que tu. Soy capaz de luchar con dos "armas" a la vez . Digo riéndome. Realmente me divierto con la actitud de estos dos. En cuanto a lo del olor, ahi te doy la razón Girac, la próxima vez la haré lavarse para que no huela demasiado a mi.
Me acerco y le doy unas palmaditas en el hombro a Morzog.
-Realmente os he echado de menos. Tenemos que juntarnos más a menudo, sois de lo más divertido. Y con esto doy por zanjado el tema. No continuare con la charla