Partida Rol por web

COMPAÑIA NEGRA: CAMPAMENTO PRINCIPAL:

Se había quedado dormida. La mezcla de dolor por las heridas y el letargo que, con el fin del combate, se había apoderado de ella, le habían hecho caer en un sueño sólo a medias reparador. Sus heridas habían traspasado el velo de sus sueños para convertirlos en pesadillas que le habían hecho removerse. Pero finalmente despertó sin tener muy claro, en un primer momento, ni donde estaba, ni lo que había pasado

COMPAÑÍA NEGRA: ESTADO FISICO:

- Capitán: Herido grave. Envenenado. Paralizado.

- Sedoso: INTACTO.

- Tragasapos: INTACTO.

HOSTIGADORES:

1. Campaña: INTACTO.
2. Caracabra: INTACTO.
3. Dedos: HERIDA GRAVE.
4. Guepardo: INCONSCIENTE. FUERA DE PELIGRO.
5. Ikharus: INTACTO.
6. Khadesa: INTACTA.
7. Loor: HERIDA MUY GRAVE.
8. Matagatos: HERIDO CRITICO. FUERA DE PELIGRO. CONSCIENTE.
9. Ojopocho: INTACTO.
10. Pelagatos: HERIDO MODERADO.
11. Peregrino: HERIDO MODERADO.
12. Ponzoña: HERIDO GRAVE.
13. Rastrojo: HERIDO GRAVE. RECUPERA LA CONSCIENCIA POR LA MAÑANA.
14. Serpiente: HERIDO GRAVE. FATIGA MAGICA.
15. Sicofante: HERIDO MODERADO.
16. Uro: INTACTO.

CAMPAMENTEROS:

1. Asesina: HERIDA MUY GRAVE.
2. Belleza: INTACTA.
3. Chamán Rojo: INTACTO.
4. Derviche: HERIDA MUY GRAVE. RECUPERA LA CONSCIENCIA POR LA MAÑANA.
5. Keropis: INTACTO.
6. Lengua Negra: HERIDO GRAVE.
7. León Anciano: INTACTO.
8. Lombriz: INTACTO.
9. Manta: INACTO.
10. Michou: AGONIZANTE, TERMINA FALLECIENDO DE MADRUGADA.
11. Niña de Oro: HERIDA LEVE.
12. Odio: HERIDO LEVE.
13. Perdida: HERIDA MUY GRAVE.
14. Piojillo: HERIDO GRAVE.
15. Plumilla: HERIDA MODERADA.
16. Reyezuelo: HERIDO GRAVE.
17. Sabandija: HERIDO CRITICO. FUERA DE PELIGRO. RECUPERA LA CONSCIENCIA.
18. Tarado: HERIDO GRAVE.

EXPLORADORES:

1. Sargento Falce: HERIDA MODERADA.
2. Astado: HERIDO LEVE.
3. Correcta: INTACTA.
4. Escudo: INTACTO.
5. Frontera: INTACTO.
6. Niño Guerrero: INTACTO.
7. Pipo: HERIDO CRITICO. FUERA DE PELIGRO. RECUPERA LA CONSCIENCIA.
8. Ridvan: HERIDO GRAVE.
9. Tristeza: HERIDA GRAVE.
10. Ballestero: INTACTO.

INFANTERIA:

1. Sargento Vientos: HERIDA GRAVE.
2. Cabo Lemur: HERIDO GRAVE.
3. Dagotán: HERIDO GRAVE.
4. Sombrío: HERIDO GRAVE.
5. Centinela: HERIDA MODERADA.
6. Muerte del Cansado: HERIDO GRAVE.
7. Punzante: HERIDO GRAVE.
8. Mato: HERIDA GRAVE.
9. Condenado: HERIDO GRAVE.
10. Enviado: HERIDO GRAVE.
11. Flores: HERIDO MODERADO.
12. Ganancia: HERIDO MODERADO.
13. Machete: HERIDO MODERADO.
14. Vieja Guardia: HERIDO MODERADO.
15. Tibal: HERIDO CRITICO. INCONSCIENTE.
16. Drama: HERIDO GRAVE.
17. Garzung: HERIDO GRAVE.
18. Cabo Barril: HERIDO GRAVE.
19. Desastre: HERIDO MODERADO.
20. Matador: HERIDO GRAVE.
21. Grito: HERIDO GRAVE.
22. Lagrimita: INCONSCIENTE, ESTABLE. ENVENENADO. PARALIZADO.
23. Indómito: HERIDO GRAVE.
24. Romo: HERIDO MODERADO.
25. Preocupado: INTACTO.
26. Cielo: HERIDO LEVE.

BAJAS:

- Teniente, Attar, Avestruz, Michou, Misteriosa, Cabo Berrinche, Enmascarado, Hermana, Lejana, Masutsu, Sino, Divisora, Testudo, Cresta.

UN DIA DESPUES DE LA BATALLA:

- Al morir Chugrat, los pocos Fantasmas supervivientes tiraron las armas y se rindieron. Les aguarda un destino aciago. La Compañía no suele ser agradable con sus prisioneros.

- El interior del Fuerte estaba sembrado de cadáveres. Habían muerto diez combatientes del Triplete por cada uno de la Compañía caído. Una verdadera carnicería. La antigua teoría de los Oscuros sobre fortificaciones afirma que "un hombre sobre la muralla vale por diez hombres bajo ella intentando asaltarla". De ser eso cierto, ¿por cuántos hombres del Triplete vale cada Soldado de la Compañía?

- Lengua Negra envió a Ponzoña al frente Sur, en busca de sanadores, pero el Hiena enseguida supo que allí estaban todos muy heridos, incluido el propio Capitán, que había resultado envenenado por la noble del Triplete, Chuda. Los dos magos, Sedoso y Tragasapos, estaban ayudando al Capitán y a los heridos de la Infantería, pese a que ninguno de los dos destacaba como sanador.

- En el frente Norte, Pelagatos fue a buscar a Plumilla, y Peregrino a Khadesa y a Dedos. Pronto estaban reunidos los heridos más graves y recibiendo la mejor atención médica posible en ese momento.

- Niño Guerrero se ocupó de sacar al inconsciente Rastrojo del foso de estacas donde había caído.

- Sicofante tomó al caballo de guerra del caballero noble del Triplete muerto por Matagatos, descubriendo que había en el campamento otros dos excelentes caballos de guerra, sin duda las cabalgaduras de Chugrat y Chuda. Cabalgó raudo hacia el Norte, hacia el campamento donde aguardaba Analista con los Reservas y los seguidores de campamento. Era imperativo que se reunieran en el Fuerte Chuda (que, en el futuro, sería conocido como el nuevo Campamento Principal de la Compañía) con el resto de la Compañía para que las pitonisas con habilidad de curación, como Zina, pudieran atender a los heridos.

- Entretanto, los que se encontraban mejor fueron amontonando en un enorme montón los cadáveres de los enemigos caídos. Los prisioneros fueron atados, y los heridos de la Compañía trasladados a los pavellones de acampada de los Fantasmas Irredentos.

- Los heridos más graves eran: El Capitán, Lagrimita, Guepardo, Matagatos, Rastrojo, Derviche, Michou, Sabandija, Pipo, Tibal y Asesina.

- Michou murió durante la madrugada y nada se pudo hacer por salvarle. Los demás salieron fuera de peligro gracias a los cuidados recibidos, aunque el Capitán y Lagrimita no mostraron signos de mejora (ambos habían sido envenenados por Chuda).

- Por la noche llegaron Analista, los Reservas y los seguidores de campamento. Las Pitonisas se pusieron de inmediato a trabajar con los heridos, incluyendo a la propia Madame Yamila, que dictaminó que el veneno que afligía al Capitán y a Lagrimita era de origen mágico y muy potente.

- Los seguidores de campamento hicieron lo posible por arreglar las puertas y los destrozos en el campamento.

- Tras saquear los cuerpos de los enemigos muertos, fueron incinerados fuera del Fuerte en una colosal pira.

- Los muertos de la Compañía: Teniente, Attar, Avestruz, Michou, Misteriosa, Cabo Berrinche, Enmascarado, Hermana, Lejana, Masutsu, Sino, Divisora, Testudo, y Cresta; recibirían digna sepultura al día siguiente, en un funeral solemne que se celebraría la noche siguiente a la victoria: la Noche de Difuntos, siendo reservada la posterior a esa para la celebración de la victoria.

- Durante la noche, Analista organizó la recogida de todo el botín del Fuerte, lo contabilizó y lo repartió entre los diversos jefes de Pelotón.

¡Plumillaaaa...! ¡Dedoooos...! Me estoy muriendo, que alguien venga a cuidarme. Tengo la vista nublada. ¿No habréis apretado los vendajes demasiado? La sangre no me llega a los ojos...

A todo el mundo le dan una jarra de Grog gratis cuando es herido en batalla. ¿Han repartido ya el Grog gratis? Quiero el Grog gratis. Me lo he ganado. Soy un moribundo en su lecho de muerte, mi última voluntad es que me traigáis mi jarra de Grog gratis a la tienda de heridos.

Me duele... ¿Plumilla? No hagas como si no me hubieses escuchado. Te he visto. No me dejéis morir como a Michou. Soy un activo valioso de la Compañíaaaat... atchús. Necesito otra manta. Me está cogiendo el frío.

¿Tengo fiebre? Me noto la cabeza caliente. Eso es que tengo fiebre. Habéis hecho mal las curas, y las heridas se me han infectado. Seguro. Si me dejáis morir de fiebre, mi espíritu os perseguirá toda la vida, y os hará crecer pelo en el bigote. ¿Hola? ¿Hay alguien?

Si no hay nadie no importa. Después de todo, solo soy yo, vuestro amigo Rastrojo. No tiene importancia si masticáis mi amistad y luego la escupís al suelo. Seguro que vosotras tenéis cientos de amigos. Yo una vez tuve un amigo. Se llamaba Enmascarado. Escuché decir a unos seguidores de campamento que pasaron por delante de la tienda que Enmascarado había muerto. ¿Es verdad que murió? ¿Es verdad que estoy solo en este mundo, y ni siquiera las curanderas me prestan ya atención?

Dedos... Quiero mear. Es que estoy muy mal para levantarme y me da vergüenza pedírselo a Plumilla. Otra vez. ¿Si la orina saliese de color raro significaría que me voy a morir pronto?

Se había quedado dormida. La mezcla de dolor por las heridas y el letargo que, con el fin del combate, se había apoderado de ella, le habían hecho caer en un sueño sólo a medias reparador. Sus heridas habían traspasado el velo de sus sueños para convertirlos en pesadillas que le habían hecho removerse. Pero finalmente despertó sin tener muy claro, en un primer momento, ni donde estaba, ni lo que había pasado

En ese momento escuchó los gritos, los alaridos victimistas, de Rastrojo. Sí, para bien o para mal, estaba viva

- "Toma tu jarra de Grog, Rastrojo. Esta noche habrá otra para todos, cuando hables por los muertos en la batalla." -

Gordo Wem le pasa una jarra de Grog a Rastrojo.

- "Hola, aprendiz de Chamán. Me han contado lo que hiciste. Fue muy, eh..., valiente." -

Zina cubre con una vieja manta a Michou y niega con la cabeza. El pobre infeliz murió durante la noche.

Analista ha asumido el control de la Compañía, ahora que el Capitán está incapacitado, el Teniente muerto y Portaestandarte está lejos.

Ha ordenado reforzar las defensas de este lugar, el Fuerte Chuda, al que ha renombrado como el nuevo Campamento Principal.

También ha ordenado establecer centinelas hacia el Sur, los Reservas del Cabo Cortaplumas, Ballestero y unos cuantos civiles, incluyendo algunos de los sajagargantas de Usurero. Sin duda Usurero se cobrará el favor, bien caro.

Como es tradición en la Compañía, esta será Noche de Difuntos, y mañana Noche de Victoria.

Las bajas y la situación del Capitán han agriado un tanto la victoria. Pese a ello, sigue siendo una victoria aplastante en la que la Compañía ha causado diez bajas por cada uno de los suyos que ha caído.

El propio Lancero, el legendario y supuestamente invencible campeón del Triplete, tuvo que huir con el rabo entre las piernas, perdiendo a casi todos los refuerzos con los que atacó a la Infantería.

Ya se ha repartido el botín, la parte de la Compañía y la parte de los diferentes Pelotones: Infantería, Exploradores, Hostigadores y Campamenteros.

Ansia de Dominio llega a mediodía conduciendo un carruaje lujoso tirado por dos magníficos caballos.

Le acompaña un centenar de Comunes de Cho'n Delor, los soldados regulares de vuestro patrón.

Analista toma de inmediato el control de esas tropas y las divide en dos grupos de cincuenta. Envía uno al sudeste y otro al sudoeste. Dos campamentos que vigilarán los flancos de la Fortaleza de la Puerta de Galdan, que junto con el nuevo Campamento Principal y su vigilancia, impedirán que más tropas del Triplete puedan entrar en el territorio de Cho'n Delor.

Eso aisla a los grupos de Fantasmas Irredentos todavía presentes en el país de cualquier posibilidad ordinaria de recibir refuerzos desde su tierra natal.

Ansia de Dominio sonríe con su odiosa sonrisa torcida y abre un cofre metálico lleno de monedas de plata.

- "Traigo una gratificación. Directamente de las arcas de la tesorería del Señor del Dolor. Entregaré diez piezas de plata a todo combatiente de la Compañía que haya participado en la reciente batalla y me lo solicite personalmente." -

El combate ha terminado completamente y ahora viene el momento de sanar las heridas. Nuestros heridos se recuperan, a pesar de uno murió después por sus heridas y unos pocos, Capitán incluido, no han mostrado mejoría alguna.

Tenemos un nuevo fuerte en el que establecernos y el campamento se ha montado en él, donde los seguidores ya se han instalado. Ayudo a lanzar los cuerpos a la pira donde se quemarán. Miro el cadáver del noble que tanto daño me hizo y que fue asesinado por Matagatos. Le miro desde arriba y solo lamento no haber sido yo quien le asesinó, pues tenía una deuda conmigo que la muerte le evitó pagar. Lo tomo solo, sin ayuda de nadie más y le lanzo a las llamas.

Me quedo mirando como se consume su carne con calma en el fuego de la pira. Saco mi recuperada katana y admiro su filo con el reflejo de las llamas que salen del cadáver de quien osó quitarme lo más importante en mi vida, que es mi alma. La espada es el alma del guerrero y aquel noble desconoció lo sagrado de la relación entre un combatiente y su instrumento de lucha, robando el arma de un guerrero aun vivo. Eso es algo repudiable para quien aprecia el honor de la guerra. Es por eso que le miro consumirse, regocijándome de su muerte, hasta que no son más que cenizas lo que queda frente a mis ojos.

Tarado decidió no irse directamente a la zona de los heridos a descansar. A pesar de sus heridas se movió por el campamento echando una mano donde pudiera… con la limpieza… retirando cadáveres, lo que fuera. No podía dejar que su mente divagara de nuevo como le había pasado en la batalla.

Desde su posición escuchaba los lamentos de Rastrojo que colmaban el campamento. La noche había sido dura y larga… Michou finalmente no había sobrevivido para ver un nuevo amanecer. Iba a ser una noche triste para la Compañía… o alegre pero con un regusto amargo.

Y todo por empeñarse en usar tanta violencia. Apoyándose en su lanza para ayudarse a sostener su propio peso, Tarado continuó todo lo que su cuerpo pudo aguantar con las labores de limpieza. Había demasiados cadáveres enemigos que quitar, de lo contrario el fuerte no sería usable como nuevo campamento para la Compañía.

Piojillo había sido remendado por manos hábiles pero apresuradas. De sus heridas, ahora tapadas con retales de tela hervidos, quedarán serias cicatrices como testigo de su presencia en la batalla, pero al K´Hlata no parecía importarle. Los dolores han remitido y tras dormir casi 12 horas se siente bastante bien, pese a la tirantéz de los puntos y a los síntomas febriles.

Lo primero que hizo fue ir a ver a Dante, quería asegurarse del buen estado del caballo de Lengua Negra, pues hasta ese momento aún se sentía responsable. Luego no supo muy bien que hacer y se dedicó a pasear convaleciente por el nuevo campamento, hasta que se encontró con el botín amontonado y lo observó con ojos profesionales.

No tocaría nada de aquello, pues como recluta no tenía derecho a botín, pero eso no evitó que realizase unos cuantos cáculos de lo que había y cuanto le podría sacar.

Tal vez deba aceptar esas diez platas que ofrecen, o pronto no tendré ni para unas sandalias nuevas. Pero no seré el primero en ir a buscarlas, eso seguro.

Finalmente deambuló de vuelta hasta la zona de los Campamenteros y busco a Manta.

Manta si en algún momento necesitáis tasar el botín de los Campamenteros o vender una parte, os puedo ayudar. Al menos haré algo que no sea mirar la lona del techo de la tienda de los heridos.

A Campaña le llamó la atención el brillo del cofre y, sobre todo, de lo que contenía. Se paró un momento, olvidando hacia dónde iba, y escuchó con atención lo que dijo aquel hombre misterioso que se hacía llamar Ansia de Dominio. Sólo tenía que acercarse y pedirle que le diera su parte, y así conseguiría el dinero que necesitaba para hacerle un regalo a una persona muy especial. Sonrió y se acercó al hombre.

- Hola, Campaña desea esa gratificación - continuó sonriendo y extendió la mano para recibir las monedas.

Al ver llegar a Ansias de Dominio me pregunto que se traerá entre manos y más llegando con tantos hombres y ese cofre.

Cuando este habla me acerco a él y le digo directamente.

- Participé en la Batalla. - digo mostrando el hacha sin terminar de limpiar. Me interesa obtener esas 10 piezas de plata.

- ¿10 piezas de Plata? - me digo a mi mismo.

En cuanto la atención a los heridos me deja un instante libre me acerco a Ansias de Dominio.

- Me gustaría conseguir esas 10 piezas de plata. - le digo. La Batalla sin duda ha sido intensa.