Partida Rol por web

La Estrella Roja

El sabor de la libertad

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21/08/2019, 11:22
Director

Muffin conoce bien todas las tabernas y antros de juego en los que suelen parar los pilotos, pues no en vano se ve obligado a contratar transportes para cada encargo. Ha ido a bordo de todo tipo de naves, en mejores o peores condiciones, y conoce a muchas clases de pilotos y tripulantes, desde los que solo buscan ganarse unos créditos fáciles hasta los que están comprometidos con el transporte de viajeros. 

Moviéndose por los conectores de los bares de virus y entre las luces parpadeantes de los antros sucios, las luces blancas de los hoteles y la basura de los oscuros suelos de las barras de strippers holográficas, Muffin habla con todos los pilotos que conoce y algunos que no. Consigue enterarse de muchas noticias (la más repetida, la del ataque de Iglaor Kuz al Culo de Joe). Se entera de que ha habido una fuga de unos prisioneros en una estación espacial llamada Fireguard, de los Caballeros Infernales, de que una piloto destruyó ella sola a dos necroplaneadores de la Flota Cadáver, e incluso de que la Diáspora está sufriendo ataques de piratas drow, contra los que el FAA está intentando luchar con sus escasos recursos. 

Y, además de todo ello, de que nadie sabe dónde ha podido meterse Vallan-7.  Su nave y su tripulación están en el hangar 221-Z, al otro lado de la estación, pero al parecer su capitana ha desaparecido. Tiene algunos antecedentes de embriaguez por virus, por lo que la Guardia no ha querido emprender una búsqueda, pero sus compañeros están preocupados. 

Si quisiera ganarme unos créditos fáciles-le ha dicho entre hipidos un borracho piloto vesk-Iría a por ellos y les ofrecería mis servicios por buscar a ese androide. Seguro que están buscando a alguien para eso... pero yo paso. Me acaban de pagar y estoy dispuesto a darle a los dados hasta que se me caigan las escamas. 

Notas de juego

No sé si stripper es con una p o con dos, pero bueh, me entiendes igual. 

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21/08/2019, 19:46
Muffin

Al ysoka le encantaba aquello. El ajetreo de la estación, las luces, los olores, la mezcolanza de razas, era un verdadero mosaico de culturas y todos con el mismo objetivo. Pasárselo bien mientras se relajaban y comentaban las noticias. Saludo a amigos, conocidos y desconocidos por igual. Hablaba de las noticias que había oído y oía noticias nuevas. Se interesó por el desenlace de lo que había pasado en el culo de Joe y les habló del rumor de que una misteriosa nave había salido huyendo.

Consiguió encontrar la nave y la tripulación pero no había ni rastro de la piloto. Iba a tener que ser el quien fuese a buscarla si quería irse de allí. Estaba a punto de levantarse de la mesa de aquel vesk cuando el borracho tuvo una brillante idea. Joder, era una idea genial. Tras darle las gracias y apurar su copa, Muffin se dirigió al puesto de la guardia para ofrecerse a buscarla a cambio de unos cuantos créditos. 

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21/08/2019, 21:37
Director

Al parecer, el desenlace de lo ocurrido en el Culo de Joe fue bastante espectacular, aunque Muffin sabe que tampoco hay que dar un cien por cien de credibilidad a lo que uno oye de boca de pilotos borrachos y fanfarrones. Por lo que le cuentan, al poco del ataque, nada más y nada menos que una nave catedral iomedana acudió a por Iglaor. No para salvar el tugurio de mala muerte de Joe, sino para dar caza de una vez al kasatha.

Por desgracia, lo que a una nave catedral le sobra de potencia le falta de velocidad, al parecer, e Iglaor Kuz escapó de nuevo.

Tras apurar su copa, Muffin se despide del vesk, que le da una afectuosa palmada en la espalda que casi le deja hecho puré de ysoki contra la barra. No le cuesta mucho encontrar un puesto de guardia, donde dos Caballeros de Golarion con armadura pesada vigilan la entrada. Ambos son humanos, como la mayoría de Caballeros de Golarion, y al verle le dan el alto.

-¿Qué desea?-le pregunta el de la izquierda.

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22/08/2019, 22:01
Muffin

El ysoki no tardó en encontrar a una pareja de guardias. Se acercó a ellos con sonrisa ratonil y además afable. - Buenas tardes caballeros, he oído hablar de la desaparición de la capitana Vallan-7. Su tripulación está preocupada, ya sabéis que cada día que una nave está parada pierden dinero. - dijo el ysoki planteando la jugada. - Me imagino que habrán estado pidiendoos que la busquéis. Pero también estoy seguro de que los Caballeros de Golarion tienen mejores cosas que hacer que buscar a alguien que se ha dejado llevar por los virus. - dijo antes de que se pensasen que venía a meterles prisa. - Yo sin embargo... Bueno tengo algo de tiempo libre antes de partir de la estación. ¿Hay alguien con quien pueda hablar, alguno de vuestros jefes o compañeros para llegar a un acuerdo? Yo busco a Vallan-7, os echo una mano quitandoos carga de trabajo y a cambio quizá pueda ganar unos créditos extra. - terminó esperando ver la reacción de aquellos dos humanos. Era un plan sin fisuras que beneficiaba a ambos, pero no sabía si ellos eran quienes decidían esas cosas o si estarían receptivos. 

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23/08/2019, 11:49
Director

Ambos guardias miraron hacia abajo al pequeño ysoki cuando empezó a hablar, y pusieron cara de escepticismo. Fruncieron el ceño cuando dijo lo de la nave perdiendo dinero, pero parecieron relajarlo un poco cuando se dieron cuenta de que no les estaba pidiendo que fueran a buscarla. 

Uno de ellos se adelanta y abre la puerta. 

-Busca al capitán Valdor, está dentro. No somos contratistas de mercenarios-dice con firmeza-pero a lo mejor puedes llegar a un acuerdo con él. 

Si el ysoki entra, verá un interior pequeño, que tal vez se hace más pequeño de lo que es por la gran cantidad de guardias con armadura pesada que van de un lado para otro. Al fondo, hay un despacho sin puerta ni paredes, solo delimitado por un escalón en el suelo, y sobre él un escritorio lleno de documentos y tablets. Tras él, rodeado de cuatro guardias, otro humano de pelo blanco parece impartir órdenes y reparte papeles entre los guardias. Incluso sin su insignia de capitán en el pecho, queda claro que está al mando. 

En cuanto ve al ysoki acercarse, suspira y dice, con tono de quien lo ha repetido mil veces: 

-Ya lo sé, ya lo sé. No os dejan salir de la estación porque el espacio no es seguro con ese pirata por ahí. Pero no podemos hacer nada, los capitanes son libres de admitir o no a quien quieran en sus naves. Hemos fletado una lanzadera con fondos de donaciones, dentro de una semana, más o menos, podrá evacuar a todos los akitonianos que tengan que irse de forma urgente. Embarazadas y niños primero. 

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23/08/2019, 12:44
Muffin

Como era obvio, aquellos dos guardias no eran las personas adecuadas para formalizar el trato pero eran quienes le indicaron con quien debía hablar. Pasó al interior tras darles las gracias por su atención y las indicaciones y, después de un breve vistazo a la reducida sala, se dirigió hacia quien tenía toda la pinta de ser el Capitán Valdor. Cuando el capitán le vio, Muffin sonrió afable y le saludo con un gesto de cabeza. Escuchó las palabras del Capitán atento a las noticias. 

Me alegro de que se esté trabajando en atrapar a ese terrible pirata y en ayudar a las gente de Akiton. Son buenas noticias, Capitán. - dijo intentando mejorar con su actitud positiva y alegre la actitud del capitán. - Mas no vengo a veros por eso Capitán Valdor. Permitidme presentarme, me llamo Muffin y he venido a proponeros un trato que creo que nos beneficia a ambos. - añadió presentándose. - Pero no quiero interrumpirle Capitán, si tiene a bien hacerme un hueco en su, seguro, apretada agenda esperaré a que termine con sus hombres. - dijo con intención de retirarse un poco para esperar que terminase de repartir órdenes a su gente.

Espero a que le dijese que entrase al despacho antes de seguir. - He hablado con varios capitanes sobre la desaparición de Vallan-7, muchos están seguros de que se ha dejado llevar por los Virus pero hay cierta preocupación. Se que los Caballeros de Golarion no son contratistas de mercenarios pero también veo que tenéis mucho trabajo y vais justos de personal. Yo sin embargo tengo algo de tiempo libre antes de mi siguiente vuelo, estamos esperando a una persona antes de partir así que he pensado que podría echaros una mano buscando a Vallan-7 discretamente. Seguramente sea una tontería y este tirada por ahí llevada por los Virus pero corren tiempos extraños y no está de más echar un vistazo. Os ahorraría algo de trabajo, os daría cualquier información que encontrase y a cambio, bueno, podríamos llegar a algún tipo de acuerdo. - expuso Muffin con una sonrisa. 

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23/08/2019, 14:18
Director

El capitán Valdor parece tan ocupado que Muffin tiene que esperar un cuarto de hora hasta que su despacho se despeja lo suficiente como para acercarse. Finalmente, el Caballero de Golarion le hace una seña para que se acerque y se quita el guantelete para masajearse el puente de la nariz con dos dedos.

-Así que era por eso-dice-No me esperaba que nadie viniera por aquí por ese tema, tuvimos que rechazar su petición de ayuda por sus antecedentes de embriaguez. Como bien dices, andamos justos de personal. La estación es demasiado grande, mucho más de lo que parece, y tiene huecos y recovecos por todas partes. Un maldito laberinto, eso es lo que es. 

El capitán suspira, resignado. Es la situación de cualquier cuerpo de seguridad en Absalom: no hay planos fiables y completos de la estación, por lo que sus entrañas son un misterio casi en su totalidad.

-Estamos teniendo problemas con una infestación de goblins en los niveles inferiores y estamos desbordados. Ni siquiera hemos tenido tiempo de colgar esto, pero ahora que estás aquí, supongo que ya no hace falta. Ten.

Valdor tiende a Muffin un cartel electrónico, un cuadrado de bioplástico que puede configurarse para reproducir varios mensajes. En este en concreto aparece la imagen de una androide, con el nomnre Vallan-7 escrito debajo. A su lado, aparece el número del hangar en el que atraca su nave, y su tripulación ofrece una recompensa de quinientos créditos para quien logre llevarla de vuelta. 

-Supongo que eso te servirá. Nosotros no podemos pagarte, pero podrás cobrar esa recompensa. 

Sin más, vuelve a sus informes, y pronto el despacho vuelve a llenarse de Caballeros. 

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24/08/2019, 11:15
Muffin

Cobrar a sus compañeros de nave por encontrar al piloto que le iba a llevar suponía un problema moral para Muffin. Necesitaba los créditos, siempre necesitaba los créditos, pero no le parecía la mejor forma de empezar una relación comercial. Así pues pospuso la decisión de si les cobraría o no para cuando hubiese encontrado a Vallan-7. Se despidió del capitán Valdor y se dirigió a la zona de hangares donde estaba estacionada la nave que le sacaría de allí. Una vez allí, comenzó a moverse preguntando a conocidos primero y desconocidos después si alguien sabía algo de la androide. Si con eso no encontraba un hilo del que tirar, pasaría a ver a sus futuros compañeros a ver que podían contarle ellos. 

- Tiradas (1)
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24/08/2019, 19:01
Director

La zona de hangares a la que va Muffin no se diferencia mucho de las demás, solo por el gran número pintado en el suelo y las paredes. Varias naves de tamaños y formas muy diversas, desde el estilo industrial de colores apagados de la estación Absalom hasta los vibrantes rojos y naranjas de los rozasoles del Archipiélago Ardiente, pasando por las agresivas y provocadoras naves vesk, de verde y negro. 

En el hangar hay todo tipo de criaturas, desde enormes vesk hasta ysokis como él, pero nadie parece tener información sobre la capitana. Todo el mundo parece atareado y no tienen mucho tiempo para hablar, solo le señalan el punto en el que la nave espera. 

Cuando Muffin se acerca por entre las piernas de la gente puede verla mejor: una nave esbelta de colores metálicos brillantes, como les suele gustar a los androides. A pesar de su perfil estilizado, en realidad será más o menos del mismo tamaño que la Vadomo, aunque no lo parezca debido a que esa era una nave achatada y esta es aguzada y de líneas afiladas y rectas. 

Fuera, trasladando unas cajas a la nave, hay un androide alto con el pelo, hecho de cables, colgado en tono verde brillante. Al ver acercarse a Muffin deja la caja y se vuelve, y al ver que lleva en la zarpa el cartel electrónico, las líneas de su rostro se iluminan brevemente. 

-Por fin-dice-Ya creí que nadie vendría. 

Se acerca a ti, dejando las cajas, y puedes ver que sus líneas de potencia brillan intermitentemente. Es difícil leer su expresión, pero los androides solo hacen brillar esas líneas en momentos de tensión. 

-Mira, ya sé que la capitana tiene el historial de ser una borracha de virus-aprieta los labios-Pero ellos no tienen ni idea. No saben por lo que estaba pasando en aquellos años. Hace mucho, mucho que no va, y nunca dejaría así a su nave. El Águila de acero es como su hijo, como su bebé. 

Se cruzó de brazos y frunció los labios.

-No tengo mucho para ti. Solo puedo decirte que dijo que iba a ir a un bar... no es lo que piensas. Había ido a por provisiones, agua, grog y patatas. Está un poco lejos, en el distrito del generador 217/F. El bar se llama la Serpiente Borracha. A Vallan-7 le gustaba, solía comprar allí. Siento no poder decirte más. 

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26/08/2019, 15:01
Muffin

Por más que preguntó, nadie supo darle ninguna pista así que decidió acercarse a la nave de la Capitán. Era una nave de aspecto imponente, una verdadera preciosidad. Había allí trabajando un androide y Muffin se dirigió hacia allá. El androide supuso quien era y que quería así que le facilito la información. Pudo notar la rabia del hombre máquina cuando hablaba de cómo todos creían que la Capitana Vallan-7 seguía teniendo un problema con el Virus. - No se preocupe amigo, traeré a la capitana para que podamos poner rumbo. Soy Muffin y vosotros sois mi transporte hasta Castrovel. - dijo con una sonrisa tendiendo una mano al androide. - No te preocupes por no poder decirme más, iré a la serpiente borracha y echaré un vistazo a ver si hay alguna pista de su paradero. - dijo el ysoki intentando quitarle hierro al asunto. 

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26/08/2019, 23:28
Director

El androide sonrió ante las palabras de Muffin. 

-Tráenos de vuelta a la capitana y te llevaremos a donde quieras -prometió- gracias por ayudarnos. 

Estrechó la mano que el ysoki le tendía, o más bien media mano, ya que la suya era considerablemente más grande. 

-Buena suerte y ten cuidado. Te esperaremos aquí. 

Dicho lo cual, si el ysoki no decía nada más, volvió a sus cajas. 

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26/08/2019, 23:48
Muffin
Sólo para el director

Notas de juego

Procedemos a buscar

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27/08/2019, 14:57
Director

Muffin camina por las calles de Absalom siguiendo las indicaciones del androide, y progresivamente va dejando atrás las bulliciosas zonas comerciales, los distritos de residencia y los hangares, y se interna más en el núcleo de la gigantesca estación. Cada vez hay menos gente por las calles, y la iluminación es más tenue, aunque aún se puede ver sin dificultad. 

Mufffin sabe que está introduciéndose en una zona cada vez más problemática, territorio de bandas. El distrito del generador 217/F es básicamente un suburbio, y no es precisamente una zona bonita de la estación. Los edificios están oxidados y llenos de pintadas, y las tuberías gotean líquido que forma costras de cal en las paredes metálicas. Los negocios están iluminados con carteles de neón y muestran todo tipo de entretenimientos, desde alcohol a virus, pasando por otras clases de entretenimiento menos comunes.

Sin duda su decisión de no vender a los gapranes se ve reforzada al pasar junto a no menos de nueve fosos de pelea, con los desagradables sonidos de los animales luchando y matándose mientras multitudes gritan y vitorean a su alrededor en varios idiomas. Al pasar por las calles, grupos de humanos vestidos con la ropa identificativa de diversas bandas y sus símbolos (una serpiente, una copa rota, un perro gruñendo, y otros muchos). Las porras, los bastones eléctricos y el resplandor de la culata de alguna pistola es evidente mientras pasa a su lado. 

Finalmente encuentra el local, un lugar sorprendentemente limpio en aquel suburbio, y más grande que los demás. Casi parece no pertenecer del todo a ese sitio, como si lo hubieran transportado. Una gran serpiente un poco desconchada corona la puerta, mostrando que es el lugar correcto. Cuando Muffin entra, se encuentra con poca clientela, tan solo unos cuantos humanos en dos mesas y dos vesk en otra, inclinados sobre sus bebidas y sus platos de comida, una comida inidentificable, cosa que casi es mejor. 

El camarero es un androide, pero resulta evidente que aquel no es un bar de virus, ya que que carece de la instalación necesaria para ello. El bar tiene sillas adecuadas para los ysokis y otras razas pequeñas, que pueden elevarse para llegar a la barra sin dificultad. 

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27/08/2019, 16:12
Muffin

El ysoki había oído hablar de los barrios marginales, lugares donde podías encontrar de casi de todo. No era un asiduo a esos lugares pero tampoco le eran ajenos, siempre estaba bien tener conocidos hasta en el infierno. Se alejó de las zonas residenciales y se adentro en el distrito 217/F con las debidas precauciones, andar ligero pero sin prisa, estar atento a lo que te rodea pero sin mirar demasiado a nadie, no detenerse y no dudar. Había que caminar como si supieses donde ibas, que nadie notase que ese no era tu sitio.

Drogas, alcohol, virus y peleas de perros. Estaba seguro de que más de uno en aquel distrito tendría un cartel de se busca con su cara pintada. Pero Muffin iba concentrado en su tarea. Cuando llegó a la serpiente borracha no se lo pensó dos veces y entró al local. Un rápido vistazo le basto para sorprenderse, apenas había gente y mantenía un nivel de limpieza mejor que la media del barrio. El ysoki se dirigió a la barra y accionó la silla para colocarse a la altura correcta. 

Buenas tardes, ¿Puede echarme una mano? - Preguntó Muffin llamando la atención del androide. - Estoy buscando a una de los tuyos, sus amigos están preocupados por ella. Se llama Vallan-7, es la capitana del Águila de acero y me han dicho que se había dirigido hacia aquí para comprar provisiones, creo que es una habitual pero tengo una foto por si no le suena el nombre. - dijo el ysoki con sinceridad. 

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28/08/2019, 15:09
Director

El androide asiente en cuanto Muffin menciona a Vallan-7. 

-Sí, viene mucho por aquí. Vino ayer mismo, por la tarde. ¿Ocurre algo con ella? No la he visto desde ayer, se fue con todo lo que había comprado por la puerta que da al callejón-dice señalándola-Al parecer, ahí tenía aparcado su vehículo. 

Los clientes del bar echan alguna que otra mirada al ysoki, probablemente por curiosidad. 

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28/08/2019, 15:28
Muffin

Ha desaparecido. - dijo Muffin en voz baja para que su voz no fuese más allá de ellos dos. - Puede darme algún dato más sobre el vehículo, la hora de los hechos, si le comentó algo o noto algo sospechoso? Tal vez haya alguna cámara cercana... - añadió a ver si había suerte y el androide podía darle más información. 

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28/08/2019, 22:33
Director

Es difícil descifrar las emociones de un androide, pero a Muffin le parece que se pone serio al oír que ha desaparecido. 

-¿Desaparecido?-El androide se inclina sobre la barra-No es por hablar mal de nadie, de verdad, pero ¿Sabes que tuvo problemas con los virus hace un tiempo? ¿Has intentado buscarla por las barras de virus? 

La verdad es que no recuerdo nada sospechoso. Simplemente salió por la puerta del callejón con las bolsas, me temo que ahí no hay cámaras. Puedo abrirte la puerta si quieres echar un vistazo, eso sí. 

El androide pulsa un botón tras la barra y se oye el chasquido metálico del cierre al abrirse. 

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29/08/2019, 20:22
Director

Naga no tarda mucho en alcanzar la estación y contactar con los servicios de seguridad, que le asignan un hangar en uno de los gigantescos brazos de Absalom. 

Según se acerca, va viendo la increíble dimensión de la estación espacial: su nave parece empequeñecerse, y llega un punto en el que todo lo que ve es metal, mire a donde mire, como si todo a su alrededor se hubiera convertido en acero. Finalmente entra en el hangar y la estación la recibe con su bulliciosa actividad, que le resulta hasta agobiante tras tanto tiempo en el vacío de la Diáspora. 

La estación estaba rodeada de cientos de miles de naves, una agrupación conocida como la Flotilla, que en realidad estaba formada por naves en ruinas, abandonadas, estáticas o de comercio que conformaban un anillo como los que tenían algunos gigantes gaseosos. Naga se incorporó al congestinado tráfico aéreo de la estación con habilidad, y por fin entró en la propia Absalom. Tras desembarcar en uno de los miles de hangares, Naga se encontró con la bulliciosa estación, en la que había estado alguna vez, pero que nunca dejaba de impresionarle: un crisol de razas, culturas y todo tipo de formas de vida, un lugar poblado por millones de criaturas que se apiñaban en aquella estación. Por todas partes, aprovechando hasta el último espacio disponible, había alojamientos, tiendas, establecimientos, edificios de gobierno y todo lo que alguien pudiera desear. Si había que buscar algo, lo que sea, sin duda podría encontrarse en la estación Absalom. 

Caminar por Absalom se parece más a nadar o bucear que a caminar, y orientarse más a navegar o astronavegar. Hay tanta gente que uno debe guiarse por las luces del techo, los dibujos del suelo o los carteles luminosos para saber dónde está y hacia dónde va. El distrito del generador 217/F queda algo lejos, hacia las entrañas de la estación. 

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30/08/2019, 09:30
Muffin

Sus compañeros insisten en que esta limpia así que prefiero investigar su desaparición desde otro enfoque. - dijo el ysoki. - Si no le importa voy a echar un vistazo atrás. ¿Sabe algo del vehículo en el que cargo las bolsas? - preguntó el ysoki esperando un par de segundos a que respondiese antes de salir por la puerta trasera a investigar. 

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30/08/2019, 11:22
Director

El androide le hace un gesto indicándole que puede salir cuando quiera por la puerta que acaba de abrir. 

-Nada especial-responde a su pregunta-Poco más que cuatro ruedas, una cabina y una zona de carga. Pequeño y bueno para llevar las cargas por Absalom. Era blanco, aunque siempre estaba bastante sucio, por lo que parecía casi siempre gris. 

Muffin sale al callejón. En circunstancias normales no sería un sitio en el que quisiera estar mucho tiempo: es un lugar estrecho, con las paredes manchadas de aceite y donde las luces de la estación apenas llegan, formando largas sombras. Parece el lugar perfecto para que te roben, o te apuñalen. 

Tras mirar con detenimiento la zona, Muffin puede ver dos cosas que le llaman la atención. La primera y más obvia son las rodadas del vehículo, que han quedado marcadas en la calle por las manchas de grasa y aceite de las ruedas. Se dirigen saliendo del callejón hacia la zona por la que Muffin ha venido, torciendo hacia la derecha. 

Al mirar con más atención también ve otro rastro: son marcas irregulares en el suelo metálico, como si alguien hubiera arrastrado algo pesado y duro que ha dejado rozaduras en el suelo. Estas marcas van en dirección contraria a las rodadas del coche, internándose en el callejón. 

Notas de juego

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