Partida Rol por web

Apenas escuchaba murmullos apagados de los que habían bajado, luego todo era silencio. Como si se hubieran olvidado de ella, como si estuviera sola en medio de la nada, desprotegida.

-Te dejaron sola, te abandonaron aqui arriba- murmuró su mente con saña. No quería estar sola, toda la vida estuvo sola. Justo cuando pensaba que tenia amigos la dejaban atras. Alphonse a su lado parecía estar a mil años luz de distancia.

-No estoy sola- se dijo débilmente. Pero la vocecita en su interior no dejaba de insistirle que eso no era verdad, sus amigos se irían, tenía que bajar, llegar cuanto antes a ellos. Abrazar esa oscuridad que se cernía allí abajo. Dio un paso hacia el hueco, se detuvo, imagino lo que le diría Aarón si le dijera lo que le había pasado por la mente. De seguro se burlaría pero de forma tierna y buscando subirle el animo, y Karen se le acercaría para que no se sintiera sola, la abrazaria y le diria que todo estaba bien. Pero no estaba allí con ella…

Si bajaba nada la sacaría de allí, se quito el miedo de encima como quien se quita un abrigo, apretó los dientes, conteniendo unas inoportunas lagrimas.

-Solo es la tensión- se dijo aunque no estaba tan segura...

Cuando se habia producido el encuentro con las demas personas, aproveche esa distraccion de mis 3 nuevos "acompañantes" y me escabulli cuidadosamente hacia un oscuro rincon, ellos habian concentrado su atencion en las otras personas que eran tambien invitados a la fiesta. Intentando no hacer demasiado ruido abri mi cartera y saque lo que necesitaba ver, oler, gustar y sentir para relajarme y concentrarme, la situacion lo ameritaba mas que nunca. Una vez hecho eso guarde el objeto y deje su complemento en el piso. Cuando me quise dar cuenta el grupo ya se habia marchado de donde estaba reunido, me apresure y en unos minutos los alcance.

Ya me daban por muerto? dije con una sonrisa, estando a las espaldas del grupo.

Quienes son los nuevos? de que me perdi? pregunte mirando los rostros de Karen y Aaron

Miré a Eric, que había aparecido de pronto una vez más a su lado. Parecía un poco perdido ante la aparición de tanta gente desconocida para él. Le devolví una pequeña sonrisa y contesté a sus preguntas:

- Ella es Laura y el chico que se ha quedado con Lin arriba es Alphonse. Todos nos conocimos aquí, durante la cena, al comienzo de todo esto. Estamos todos metidos en el mismo lío.- luego miré a Laura, que estaba a mi lado, esperando a que abriese de una vez la puerta, pero no había más que interrupciones.- Él es Eric. Nos lo encontramos por el camino mientras os buscábamos.- después de la efímera presentación, volví a mirar hacia la puerta y la abrí.

Aarón esperó impaciente a que Karen abrira la puerta y resopló cuando esta se interrumpió para presentar a Eric. A pesar de todo no dijo nada y esperó a que la joven lo hiciera. Vamos allá, pensó en silencio

Cuando la puerta se abre un polvo os hace tose, si la zona estaba oscura eso os parecía  ya la boca de un lobo...
Un aire frío os recorío  por todo el cuerpo 

Los de arriba escuchaban ruidos podrpodría ia ser unos pasos que se acercaban y otros que se alejaban...

El tiempo parecia arrastrarse lentamente, como una cruel burla para sus nervios. Lin apretaba con fuerza la cuerda en sus manos, como si de un momento a otro alguno de sus amigos se dispusiera a subir a toda velocidad. Escuchos voces, entre ellas la de Eric, luego muchas toses y despues pasos...

-¿Lo escuchas?- murmuro a Alphonse con los pelos de punta, de repente de sintio rodeada de extraños. Tenia un terrible presentimiento.

Lin Tirarme una tirada de 1d20 a ver si puede aguantar la cuerda o se te va de las manos.

En cuanto abrí una gran nube de polvo nos envolvió. Me la tragué y no pude evitar toser mientras me tapaba la boca. Además de todo aquel polvo que para mí indicaba que aquella sala hacía años que no había sido abierta, un frío heló todo mi cuerpo. No sabía si tomármelo como buena señal de que no nos quedaríamos sin oxígeno en el hipotético caso de que nos quedásemos encerrados dentro, o, si por el contrario, era señal de que aquella sombra podría estar ahí dentro, acechando entre la inmensa oscuridad que se cernía...

No me atrevía a mirar hacia atrás y menos aún a darle la espalda al hueco de la puerta. Miraba hacia el fondo, pero era tal la oscuridad que no conseguía diferenciar nada.

- Creo que deberíamos entrar. Aarón, ¿Ves en el mapa que se llegue a algún sitio si entramos por este lugar? Y otra pregunta...- me dirigí a todos mis compañeros.- ¿Nos quedan velas?

A ver Aaron Si la zona os parecía  oscura , la habitación parecía mas oscura aun , es como si no os pudierais veros , es como una habitación tan siniestra que pareciera que no os notáis que no sabéis que estáis al lado...

A eso era lo me quería referir  con lo de la boca del lobo.
 

Sentía tanto miedo, era como si supiera que no podía hacer nada para ponerse a salvo. Sentía las manos húmedas y el corazón frenético. La cuerda pareció volverse mas rugosa, mas difícil de tener. De repente sintió que sus manos ya no tenían nada entre ellas, vio como la cuerda caía en el oscuro hueco, devorada por la negrura.
-¡Nooo!- dijo con rabia y vergüenza ante su inutilidad.

Escucháis Nooooo!!!!  La cuerda Plazzzz!! La cuerda había caído detrás de vosotros 

Por cierto creo que ya no quedaba velas... 

Cuando aún estaba concentrada en la oscuridad y mentalizándome de que tenía que entrar sí o sí, escuche un fuerte grito. Lo reconocí al instante. Miré hacia arriba asustada.

- ¡Lin! ¡¿Estás bien?!

En el momento en que intentaba distinguir la cara de mi amiga, algo pesado calló delante de los tres. Se trataba de la cuerda. Me agaché y la cogí. No parecía tener signos de haberse roto o haberla cortado. Algo había provocado que Lin dejase de sostenerla con fuerza... Volví a mirar hacia arriba, deseando tener señales de Lin y Alphonse.

- ¡Lin! ¡Alphonse!

Cayó de rodillas ante el hueco oscuro, se sentía estúpida e inútil. No entendía como pudo soltar la cuerda, sus manos ardían y le costaba abrir y cerrar los dedos. La había apretado con todas sus fuerzas, pero parecía que eso no había servido de nada, en esa casa nunca se podía confiar en las fuerzas de uno mismo.
-Se me cayó la cuerda- confeso con rabia a la enorme boca negra y desdentada que tenia en frente. Tenía miedo de haber condenado a sus amigos ante su torpeza-. ¿Pueden arrojarla hasta aquí?- preguntó esperanzada.
Todo estaba muy oscuro así que comprendió que aunque la arrojaran con suficiente fuerza ellos apenas podrían verla para atraparla y volver a asegurarla. Con algo de suerte lo lograrían, tenia que tener fe.

¡Cof cof!

Aarón no pudo reprimir la tos que le invadió cuando una nube de polvo se levanta sobre ellos. De pronto, una sensación de frío recorre todo su cuerpo y de inmediato, unos gritos se sucedieron y la cuerda cayó al suelo como un peso muerto.

- ¿Qué ocurre? ¿Lin? ¿Antonio?

Todo parecía que iba a peor, no solo nos habíamos quedado encerrados en esa casa, sino que además ahora una sombra nos perseguia e ibams en busca de una salida o algo de suerte...

No hacía más que pensar en que Alphonse se habia quedado solo con Lin, despues de lo que había visto no sabía que pensar....10.. 10.. Que significado podría tener??Era una cuenta atrás...

Mi cuerpo estaba siguiendo al grupo pero mi mente parecía no estar allí, ahora mismo que la puerta se abriese o no, no era lo que más me preocupaba, al escuchar la puerta cediendo una nube de polvo invadío la estancia donde estabamos, se escuchaban toses y respiraciones entrecortadas,por un momento volví a la realidad y miré al interior de la habitación esperando encontrar algo, aunque en el fondo no sabía si queria mirar de nuevo a la oscuridad.

Estaba intentando escudriñar en la oscuridad cuando un grito ahogado y un golpe sonarón detrás de nosotros.Karen se agacho y al levantarse empezo a llamar a Lin y Alphonse...mi mente no paraba de pensar en porque no me había quedado arriba....