El grueso de compañeros se fue dispersando por la torre en busca de sus objetivos. A medida que se alejaban el murmullo de sus vovecillas se fue reduciendo hasta casi desaparecer.
Gilitrutt corría y saltaba, casi sin rumbo fijo y de forma caótica. El otro lutín le seguía, aunque no le había quedado muy claro porqué. Pero como iban a su sitio favorito de toooda la torre, no le importaba tener compañía. Si el novato se portaba mal, siempre podía hacer que una de sus Nepenthes se lo comiera, seguro que eso le alegraría el día.
- Mijiji... - se le escapa una risita, algo habitual en ella, por otro lado - ¿Te gustan las flores? Si quieres puedes comerte una, te dejo. - dice señalando un parterre de flores rojas - Y luego haremos las guirnaldas... ¿por dónde empezamos?
Ais.. Gilitruth, ya sabes lo que dice el dicho, "más vale el diablillo por viejo que por diablo" ¿no? Pues a mi me pasa lo mismo, yo podré comerme una florecilla roja primero, pero me gustaría ver como te la comes tu primero. En ese instante creó un fuego que le rodeó por completo como para dar más señal de respeto y temor. Ese truco siempre le había funcionado con otros diablillos.
¿Por cierto, para que tenemos que hacer las guirnaldas?
Charlando, los dos lutines llegan a la puerta de la torre, la cual hay que atravesar para salir al exterior. Un recuerdo vívido les llega a la mente en ese mismo momento. Goblop, subido en una silla señala a ambos y les recrimina no haber engrasado las bisagras del portón principal. A ambos lutines les parece evidente que cualquier intento de abrir la puerta se oirá por toda la torre.
- Eres un aburrido... - resopla Gilitrutt, y seguidamente le hace una pedorreta mientras saca la lengua - No me gustan los lutines serios, hacéis el contrato todavía más eterno!
Se aleja, muy digna ella, ignorando las llamas del otro lutín. Al fin y al cabo ha visto a más de uno dominar el elemento igneo en el baúl, no es ninguna novedad. Luego se pinchan con un cactus y me vienen llorando...
- Hay que preparar la fiesta sorpresa de Rudesindus, zoquete. - contesta mirando intensamente la puerta mientras se rasca la cabeza - Pero esta maldita puerta... - se empieza a estirar una de las alitas, inquieta. Pero de repente una idea se formula en su cabecita - ¿Puedes quemarla sin que haga ruido?? - pregunta de forma estridente, girándose hacia su compañero.
Seguramente podría, pero quien nos dice que el fuego no va a complicar todavía más la situación, o que el fuego llame más la atención de nuestro amo? Quizá pueda quemar una pequeña parte de la puerta.
Ehm... ¿de que material es la puerta? ¿se puede quemar? Se ve posible peligro de incendio general?
Cafres, que soys unos cafres! Es la típica puerta de madera noble y grosor impenetrable, remaches de metal yalgún poder mágico. Seguro.
Uff, esto tiene muy mala pinta. Parece complicada la salida. Tienes alguna idea ¿tú que clase de diablillo eres, aparte de un diablillo muy bromista y comedor de plantas?
Cruza los brazos y adopta una pose analítica, algo que no le pega en absoluto y sólo consigue adoptar una pose ridícula.
- ¿Eh? ¿Yo? Yo cuido el jardín del amo... ¡me salen unas patatas y unos rosales maravillosos! - exclama achinando los ojos mientras sonríe - Aunque de vez en cuando me toca alimentar al gato... ¡Brrrr! - un escalofrío le hace agitar los bracitos - ¡El gato! ¡Seguro que tiene un agujero para salir al jardín cuando quiera!
Dicho esto, se pone a pegar saltitos buscando alrededor de la puerta cualquier trampilla, gatera o similar por donde Lucifer pueda caber. Por algun motivo no imagina a Rudesindus abriendo la puerta cada vez que su gato quiera salir a confraternizar con otros felinos.
¡Sosos! :P Pues a buscar una gatera, qué remedio xD
Qué gran idea!! Eso será lo mejor!! Te ayudaré a buscar a esa gatera, o a prenderla fuego, lo que tú quieras!!
Gilitrutt y Rasputín empiezan a buscar entre los tablones de la enorme puerta una gatera para Lucifer. Tras unos minutos de inspección encuentran una parte, cercana a uno de los extermos, donde los tablones aparecen rasgados, dejando un agujero de salida al exterior. Sea producido por el gato o por las ratas, el caso es que parece un modo perfecto de salir de la torre para aquéllos cuyo tamaño sea lo suficientemente pequeño.
Efectivamente, sólo pueden pasar por el agujero las criaturas de tamaño pequeño (a la práctica todos los lutines e incluso el gato, pero por si en un futuro reutilizamos el agujero).
Bravo! Este es el tipo de ideas que me gustan! Que aquí todo el mundo se hace del dominio del fuego para quemarlo todo a la mínima. Si hubiera experiencia en este juego os daba algun PX.
Gilitrutt empieza a dar saltitos señalando el agujero.
- ¡Lo sabía! ¡Por ahí se escapa el maldito gato! - dice con voz estridente - ¡Vamos! Y cuando estemos al otro lado, ¡lo taparemos con algo para que Lucifer no nos persiga! - grita emocionada, pensando en la paz y tranquilidad que obtendrá así.
Cruza con cuidado, intentando no perder su gorro enganchado en cualquier astilla. Una vez en el jardín, busca cualquier tabla o maceta que pueda poner delante, bloqueando momentaneamente el paso.
Gracias xDD
Pero tienes que reconocer que quemar cosas es divertido! :P Y si no nos puedes dar px, siempre puedes regalarnos juguetes (léase objetos mágicos)!
Seguí a Gilitrut por la gatera, qué listo eres, como se nota que llevas más tiempo en este castillo, yo es que aún soy nuevo por aquí y nunca había salido del baúl.
Rasputín salió al jardín y ayudó a su compañero a buscar la maceta y a moverla
Traspasada la puerta el aire gélido refrescó los rostros de los lutines. En lo alto, un puñado de cuervos sobrevuela la zona. Ante los lutines el puente levadizo lleva al exterior mientras un pequeño caminito a mano izquierda lleva al jardín. Tras cruzar una pequeña puertecita de barrotes de madera sin demasiada dificultad, Gilitrutt y Rasputín llegan al jardín que hace las veces de huerto. A un lado diversas hortalizas crecen con esplendor mientras al otro diversas plantas de aspecto mágico hacen lo propio.
Entonces, no encontramos nada para tapar eso un poco? O tenemos que tirar? xD
Échale imaginación! En el huerto hay varios pedruscos y macetas... pero por el agujero cabe un gato así que lo que pilles deberá ser bastante grande (para un lutín).
Un macetero podemos empujarlo entre los dos para bloquear la entrada del gato, no?
Con un poco de esfuerzo pongamos que sí... hacedme unas tiradillas a ver si pasa algo inesperado :p Dificultad 4 y deberíais pasarla los dos.
Motivo: Empujar maceta
Tirada: 3d6
Resultado: 7
Motivo: Empujar maceta
Tirada: 3d6
Resultado: 1, 5, 6
5!! Lo conseguí!
Motivo: empujar maceta
Tirada: 3d6
Dificultad: 4+
Resultado: 4, 5, 5
Exitos: 3
Ole, ole y ole! xD