Partida Rol por web

El hermoso fantasma en el que se había convertido Helena Ravenclaw, se situó al lado del grupo de profesores y alumnos que le acompañarían en su recorrido por una región específica del castillo. El ente, silencioso como la muerte, comenzó a narrar lo que esperaba de aquellas personas que se encontraban dentro de su grupo.

- Las sombras que Hogwarts oculta son tan magníficas como los miedos que cada uno alberga en su corazón... - comienza a decir el hermoso espectro femenino -...sé que muchos de vosotros ya conocéis el cobertizo, pues cuando llegáis por primera vez al castillo, es lo primero que observáis antes de entrar en el interior del puerto subterráneo... Es allí donde dirigiremos nuestros pasos.... - la dama gris va derramando ectoplasma a su paso, un fenómeno no observable cualquier otro día del año, pero en Halloween, la línea entre los vivos y los muertos se estrecha, pudiendo los vivos tomar un mayor contacto con los que cruzaron al otro lado, siendo los fantasmas más físicos de lo habitual, aunque fuera con aquella materia viscosa que cuando caía al suelo desaparecía sin dejar mancha alguna.

La doncella, normalmente silenciosa vuelve a la carga en su charla, mientras el grupo cruza el Hall de entrada, entendéis que hacia el sótano pues existen en los pasillos del lugar unas estrechas escaleras que comunican con el puerto subterráneo, el primer lugar que pisaron de Hogwarts, en la base del acantilado donde descansa el castillo.

- Sois un grupo muy particular y que tenéis bastante en común, a pesar de que sea posible que todavía no lo sepáis... ¿Alguno puede decirme el motivo por lo que pienso eso?.... - el rostro del fantasma se gira hacia ellos esperando la respuesta correcta. Siendo Ravenclaw el ente, era obvio que realizaría muchas más preguntas en su avance por las zonas más bajas de Hogwarts.

- ¿Cuántos de ustedes podría decirme que es completamente feliz?..... - pregunta casi de improviso, estaba claro que aquel fantasma tenía un alma atormentada

Por un momento pensé en responder al fantasma que estaría más feliz de no estar cerca de Alen o de Victoria, pero mejor prefería quedarme callado, después de todo Gin al parecer había decidido no unirse a la prueba y pues debía darle su espacio, al parecer el Profesor Melker y la Profesora Foxier serían nuestros chaperones y eso era algo que me agradaba confiaba mucho en el profesor de Defensa contra las Artes oscuras.

-Supongo que no podemos ser felices siempre - le respondí al fantasma, pero en lo particular no sabía que tenía en común con el resto de los chicos, quizás mi descontento por Ryder de ser el prometido de Gin o que por su culpa ahora estaba solo en esto, en todo caso ya me había anotado y no daría marchar atrás

Antes de ir a la prueba Victoria me hizo una pregunta realmente difícil de responder ya que sabía que no le iba a gustar lo que tenía que decir.

- Bueno, a ver eso es complicado... evidentemente no siente nada por mi pero hay un problema ella quiere agradar a su madre por lo que le interesa cumplir el compromiso pero a la vez no quiere ser una molestia entre tu y yo de hecho cuando estuvimos hablando esto me propuso que no nos viera nadie para que no me vincularan mas con ella. Básicamente esta en un dilema entre si quiere o no hacerlo yo le he dicho que seamos amigos sin mas. Es una buena chica deberías conocerla.

Me imaginaba que lo último que querría sería ser amiga de la prometida de su novio pero realmente ninguno de nosotros tenía culpa y Gin era muy buena tanto o incluso mas que Victoria por lo que sabía que se llevarían bien si lo intentaban.

Lo primero que note fue la ausencia de Ginevra, puede que no se sintiera cómoda conmigo y Victoria al lado además sabía que para esa chica era muy fácil deprimirse por lo que me preocupaba un poco. Pero eso no me impediría disfrutar de la noche con Vic. Seguí a nuestra guía de la mano de mi chica y junto a Melker y Cyllene. A nosotros nos tocaba ir al cobertizo me preguntaba que harían para asustarnos si incluso había profes con nosotros o puede que ellos vinieran para tener una excusa con la que poder darse mimitos. Escuche las palabras y las preguntas de la fantasma las cuales me hicieron pensar ¿en común? ¿Nosotros? Lo primero que se me ocurría al ver a la pareja de profesores, a nosotros y a Dani era el amor ¿pero Francis? también le gustaba alguien.

- ¿Amor? -dije con ciertas dudas aún en ello, en cambio con la segunda pregunta no tuve ni las mas mínima duda- Yo no, últimamente han ocurrido una serie de cosas que no dejan de atormentarme -bajo la cabeza, meto la mano en mi bolsillo derecho y apretó algo

- Vale – respondió sin más.

¿Estaba en un dilema? ¿Quería complacer a su madre? Si no le interesaba Alen, ¿por qué iba a seguir las órdenes de su madre como un corderito simplemente? No le parecía que eso fuese así como él se lo estaba contando… ¿y qué estaba haciendo con Daniel entonces? ¿Se burlaba de él? Victoria dudaba que la rubia le hubiera contado todo al gryffindor ni tampoco a Alen… Y ellos dos se habían visto a solas, a escondidas, para que nadie se enterase, ni siquiera ella misma… ¿cuándo pensaba contárselo? Realmente a ellos dos les parecía que eso no era interponerse en una relación? ¿No habría sido más lógico no ocultárselo? Se mordió el labio y miró a Alen de reojo mientras él le tomaba la mano para seguir al fantasma en la prueba y se guardó todo lo que pensaba, no era el momento ni el lugar, pero si a él le parecía que eso era ser una buena chica… estaba muy equivocado con Victoria. La buena de Carrow, que se veía a escondidas con su novio, que quería seguir las órdenes de su madre y casarse con él y que jugaba con Daniel.

“Sí, es una dulce y buena chica por supuesto… ¿quién pensaría lo contrario?”

Le hervía la sangre, estaba celosa, enfadada y se odiaba a ella misma. Miró a la Dama Gris, tan triste y no pudo evitar verse reflejada en ella en parte. Apretó la mano de Alen, un gesto que sin duda el interpretaría de afecto, pues ella no iba a mostrar un ápice de su verdadero estado anímico en ese momento. Y siguió al grupo, mientras su cabecita daba vueltas y vueltas, pensando y sacando conclusiones, por algo era una ravenclaw y por mucho que algunos lo pensaran, no era ninguna tonta.

Victoria sigue al bello fantasma de la mano de Alen, atraviesan el Gran Hall y comienzan a bajar unas estrechas escaleras en dirección a los sótanos y les hace unas preguntas.

- En respuesta a sus dos preguntas, pienso que nos siente parecidos, porque ninguno es realmente feliz, todos tenemos problemas y creo que todos relacionados con nuestros seres queridos.

Melker comenzó a andar tras la Dama Gris cuando se dió cuenta de que Ginevra Carrow finalmente no les acompañaba -¿Alguien sabe por qué la señorita Carrow no participa en la prueba? Había escuchado algo sobre un enlace matrimonial entre ella y el joven Ryder, pero parecía ser que Alen estaba saliendo con la señorita SinClair y quizá esa era la razón por la que Gin no quería participar finalmente en la prueba.

Antes de comenzar la prueba, el Profesor Westerberg había dejado sin responder una cuestión a la Profesora Foxier, y ahora que estaban andando en relativo silencio le pareció un buen momento para contestar - Lo que me comentaste antes de una escapada a Suecia para ver Granians me parece un buen plan Dijo no muy alto para que no cotillearan facilmente los alumnos - ¡Cuenta conmigo! ya verás que bonito es el lugar donde viven Melker conocía una reserva de Granians en el norte de Suecia que era sencillamente espectacular - Están en el Parque Nacional de Vadvetjåkka.

Cuando la Dama Gris comenzó a hablar, Melker se sorprendió ya que no recordaba haberla escuchado nunca. Ante su pregunta, Melker no supo que contestar, ya que apenas conocía a sus alumnos y no sabía que podía tener en común con ellos. Si se hubiera tratado sólo de Francis, Ginevra, Cyllene y él mismo, hubiera dicho la relación con Magos Oscuros, pero que él supiera, Victoria, Dani y Alen no tenían ese problema.

Escuchó cómo los alumnos se aventuraban a responder, y le pareció curiosa la respuesta de Victoria. No sabía cómo la joven SinClair sabría de sus problemas con su familia, pero había acertado de pleno, y ¿Qué problemas con sus familias tendrían el resto?

-Se ha sentido algo incomoda- respondí ante la pregunta del profesor Melker pero no le dí mayor información de lo que le ocurría a la chica - supongo que no ha querido estar cerca de algunas personas- quizás mi respuesta fue algo dura, pero es que si Alen y Victoria no estuvieran ahí, podría haber pasado un bonito rato en compañía de Ginevra, pero no ahora estaba con ellos.

Me acerqué a Francis de entre todo el grupo era el mas neutral y con quien me sentía algo mejor, hubiera preferido ir con los profesores pero ellos ya estaba planeando algo, que no entendí - ¿Te parece si somos compañeros?- le pregunte al Ravenclaw.

En parte la respuesta de Victoria la sentía ambigua, no tenía problemas con mi familia, salvo que ahora desobedecía a mi madre por seguir intentando salir con Gin, pese a su prohibición de acercarme a ella, ¿Pero como se había enterado la Fantasma, era un misterio?.

Cyllene avanzaba detrás de la dama gris pensando fríamente sus palabras, hablaba de oscuridades en Hogwarts, de miedos, y cuyo punto de origen en aquella aventura iba a ser la zona del cobertizo, un lugar al que la mujer no solía ir. Permanecía atenta a los detalles para demostrarle a Melker de que iba ser superior que él en los retos que se propusieran, algo que ya sabía, era complicado sabiendo el nivel que el hombre tenía en magia si es que usaban la varita, hecho probablemente no descartable.

- La idea de que vayamos juntos al Parque a ver los Granians me encanta..., quizás mañana podamos comenzar a elaborar el viaje... juntos..., seguro que podrás enseñarme muchas cosas de ese sitio que tanto te fascina... - indica ella sonriendo, manteniendo el tono de voz bajo, al igual que él, pensaba que los alumnos no debían inmiscuirse en aquella parte privada de la conversación....

El profesor pregunta a los alumnos el motivo por el que Carrow decide no acompañarles en aquel trayecto de aventuras..., o de terror, a saber la magia lo que encontrarían, y como respuesta Anderson explicó que evitaba a determinadas personas de allí. Cyllene escuchaba pero no emitió juicio, era normal que entre los alumnos surgieran roces, y hasta puede que se sintiese la niña incómoda por la presencia de los profesores. A decir verdad, no sabía el porqué, pero tampoco le quitaba mucho el sueño.

Cuando la dama gris comentó que eran un grupo particular y que tenían en común algunas cosas Foxier se calló y escuchó las opiniones de los demás, las cuales hacían referencia a la felicidad, o mejor dicho, la ausencia de ésta.

Cyllene por su parte estaba comenzando a ver algo de luz en su propia vida, las sensaciones dormidas durante años comenzaban a despertar de nuevo. No había tenido muchas parejas, de hecho siempre había sido en extremo selectiva, pero aquel día en Cabeza de Puerco sintió por fin que no estaba sola y que quizás su vida pudiera llegar a cambiar..., con un poco de suerte y mucha habilidad mágica...

- La felicidad absoluta no existe... - dijo de manera tajante -... en nuestro día a día siempre existen pruebas y circunstancias que no salen como deseamos..., el caso es saber afrontar los hechos y no sumirse en la desesperanza nunca... - dijo la mujer, más para los alumnos que para el fantasma. No deseaba que la dama gris sumiera en la tristeza o la duda, con su negra forma de ver la vida, a los niños que hoy de cierta manera, estaban bajo su cuidado.

Cuando apareció la dama de gris pensé que nos intentaría asustar directamente en ves de es nos planteó varias preguntas aunque quizás nuestras respuestas no eran las deseadas -¿Talves lo que todos tenemos en común es que tenemos problemas pero intentamos solucionarlos? quedé mirando a los demás a mí alrededor ya que había sido una pregunta bastante vaga a una respuesta -nadie puede ser feliz completamente pero hay momentos donde todos olvidan sus problemas... sí bien lo pensaba parecía que estaba dando muchos rodeos y evitaba dar una respuesta directa.

Mientras los demás a pesar de haber venido en grupo aún así todos se mantenían en pareja por un lado los profesores y Alen con Victoria ya que parecía que había un problema entre todos haciendo que Ginevra se sintiera lo suficientemente incómoda para venir -Si por supuesto- acenti para mí nuevo compañero de Gryffindor.

Cuando Flora se dio cuenta que su amiga se estaba yendo, la detuvo y cruzó unas cuantas palabras más con ella, le dijo que debería participar en el evento y que lo haría bien, aunque no le gustaba que estuviera con Daniel tan cerca, así que la chica, sin ánimos de contradecir a su amiga, cambió sus pasos y se fue detrás del grupo, esperando poder participar, aunque si debía hacer la prueba sola, tampoco era algo que le preocupara del todo. 

-Gracias- le respondí al chico - Prefiero ir contigo que con esos dos- le confesé con honestidad - aunque realmente hubiera preferido venir con Gin , ella es especial, pero la entiendo es incomodo estar cerca de ellos-le comenté al chico sin darme cuenta de la presencia de la semi Veela - No me lo tomes a mal tu eres un gran compañero, solo es qué... - miré con cierta decepción al suelo y preferí mejor no decir mas comentarios para no sonar como un idiota, pero de verdad extrañaba mucho la presencia de Gin.

Mire a Daniel algo extrañado no entendía bien que había sucedido pero parece que para Ginevra y el la situación no era tan fácil -No crees que deberías decirle eso allá y no a mi- le dije dando unas palmadas a su espalda con una sonrisa y ralentizando el paso un poco.

La dama gris flotaba con aquel halo de misterio mientras los alumnos y profesores iban respondiendo a sus preguntas, las cuáles obtenían una respuesta del todo directa, pero ella se abstiene inicialmente a decir cualquier cosa, solo los deja hablar fluir en comentarios, mientras su silencio, aquel tan conocido en el castillo, volvía a albergar al ente.

El camino hacia el cobertizo era bien conocido por todos. Desde el Gran Hall unas escaleras descendían hacia el sótano, justo donde la casa Hufflepuff hallaba su morada, pero este no era su destino, sino que tras caminar por varios pasillos, una puerta les da acceso hacia otras escaleras, éstas empinadas, húmedas e inseguras, largas como las noches de invierno, oscuras como el alma de los desdichados cuando no albergan alegría en su corazón.

Tras el paso del primero del grupo, unas antorchas comienzan mágicamente a iluminar el camino, de lo contrario, cualquiera podría precipitarse hacia el fondo donde debían llegar, un descenso abrupto y profundo que les llevaba a una cabaña de madera, el primer lugar de recepción de los alumnos de primer año, donde dejaban sus baúles y se reunían con la profesora McGonagall para ir juntos al Gran Comedor.

- Desdichados en cualquier caso..., por amar y no ser correspondido... - mira a Daniel la Dama Gris -... desdichada aquella que tiene cadenas invisibles de las que no se puede librar... -observa a Gin, la cual se pensó mejor lo de seguir al grupo y ahora tendría que sufrir los comentarios de aquel triste fantasma -....desdichado al estar entre dos aguas y no saber hacía dónde te lleva la marea... - sonríe levemente a Alen -.... o desdichada al pensar que eres única en su vida o peor..., saber que no lo eres.... - los ojos se posan en Victoria -.... desdichado al no tener claro cuál es tu posición en el castillo o en la vida... - le tocaba el turno a Francis -....desdichada porque no ha dado el paso que esperabas y sabes que la oportunidad se escapa de tu mano...., ¿serás como el barón sanguinario?.... - mira a Cyllene -....desdichado, porque algo te retiene a dar el paso.... y eso tendrá consecuencias dolorosas....- definitivamente hacía referencia a Melker

Tras hacer sus comentarios sin empatía de naturaleza alguna termina finalizando su frase con un comentario:

- Estáis destinados a ser infelices, y hagáis lo que hagáis, no lo superaréis..., la infelicidad ya rodea vuestra alma..., si murieseis hoy, no seríais algo distinto a mí....

La dama gris sigue su caminar hacia la puerta del cobertizo, la abre y sale al exterior de la estancia. Un puerto donde varios botes están amarrados, mecidos por el viento  sobre las aguas.

- Los dos profesores irán juntos en este bote de aquí... - ordena el fantasma -....Anderson y Sinclair irán juntos en el segundo bote.... - observa a los tres alumnos restantes -...Lestrange irá con Carrow.... en el tercer bote..., y Ryder irá solo en el cuarto.... - la mirada sombría se posa en los humanos -....los botes os llevarán mágicamente hacia donde debemos ir..., si quisierais variar el rumbo, podéis usar los remos....., pero cuidaos..., el lago a estas horas es traicionero, y puede que os lleve bastante más lejos de lo que inicialmente, querríais....

- Yo ahora he de marcharme, os espero en el sitio donde vuestro destino espera.... - indica el fantasma -.... deberíais hablar y dejaros llevar por la música..., ella puede tener muchas claves escondidas para vosotros... - indica antes de desvanecerse como si de niebla se tratase. No se escuchaba música alguna, tan solo el agua al chocar contra el puerto de madera.

Tras un rato caminando y la llegada de Ginevra, de lo cual no me percate en un principio llegamos hasta el borde del lago donde varias barcas nos esperan. Entonces la Dama Gris empieza a hablar sobre cada uno de nosotros como si nos conociera y supiera por lo que pasamos cada uno... ¿quién se creía? Ella no sabía nada de mi e intentaba sonar profunda aunque no tenía ni idea de lo que hablaba. Apreté la mano de Victoria tal y como ella hizo antes mientras miraba serio a la fantasma, estaba muy equivocada conmigo. Lo siguiente que dijo si que fue una decepción, tendríamos que ir botes separados y no solo eso si no que además estaría solo en el mió... maldita sea esta fantasma amargada...

- De eso nada, Victoria y yo vamos en el mismo bote ¿que mas da quien vaya en cada uno? Esta noche no nos vamos a separar pase lo que pase... así que o vamos juntos o no pienso subirme a ningún bote -decidido y sin un ápice de duda me planté frente a la fantasma, me había prometido a mi mismo cumplir lo que ella quería y eso iba a hacer

Hasta que no lo mencionó, Melker no se había percatado de que la joven Carrow se les había unido finalmente a la "excursión" liderada por la Dama Gris. Había pasado poco más de un mes desde que habían tenido un encontronazo, y desde entonces notaba que su relación con la joven era bastante tensa. De todas formas, Melker no le dió mucha importancia al tema por esa noche, ya que estaban en una fiesta y quería disfrutar de la prueba.

Lentamente, iluminados por antorchas mágicas, fueron descendiendo hasta llegar al cobertizo donde les esperaban unas barcas. Al terminar el camino, la Dama Gris les habló fríamente etiquetándolos de desdichados y explicando los motivos. Las palabras que más impactaron fueron las que lanzó contra la Profesora Foxier y contra él mismo ¿A qué paso se refería? Imaginaba cuál podría ser, pero ¿Por qué decía traería consecuencias dolorosas y que Cyllene podría ser como el Barón Sanguinario?

Sin decir nada, con las palabras de la Dama Gris resonando aún en su cabeza, el Profesor Westerberg ayudó a la Profesora Foxier a subir a la barca - Con cuidado Quiso añadir una broma, pero su buen humor había desaparecido por culpa del fantasma de la casa Ravenclaw. Una vez que los dos profesores se subieron a la barca, Melker cogió los remos y miró a Cyllene - ¿Nos dejamos llevar o recorremos nuestro propio camino?

Antes de marcharse el joven Alen se enfrenta al fantasma y el ente lo mira con un rictus de seriedad.

- No tengo forma corpórea no puedo impedírtelo, pero serás el culpable de las consecuencias, suerte si eliges tu camino joven Ryder, desde otra barca obtendrías una visión que dentro de ésta... - señala la de Sinclair -... no podrás tener... Ahora, no digas que no te lo advertí....

Y dicho esto, dejó de prestarle atención

Las palabras de la dama gris dolían en exceso. Cyllene inicialmente estuvo seria, observando en qué consistía la prueba. Para ella la prueba de valor ya había comenzado pues la mención del fantasma decía abiertamente mucho de lo que bullía en su interior, había intentado varias veces que pasara pero él no daba el paso y dudaba en parte de sus posibilidades, pero compararle con el barón sanguinario fue un claro insulto hacia su persona. Se sintió dolida, quizás nadie se percatara de ello, o quizás solo una persona la conociera bastante como para darse cuenta de sus propias reacciones...

La bonita docente cogió la mano de Melker para asegurarse no caer antes de subir al bote. Tuvo mucho cuidado en el proceso, algo que comprendería el hombre cuando le hace una confesión:

- No sé nadar, más me vale asegurarme... - era algo esperable, una señorita elegante de buena familia que jamás había probado sus habilidades en el bello arte de la natación -...¿tú sabes?.... - mira el agua con cierta desconfianza, y es que no le daba miedo navegar, pero que la barca se volcara podría ser un problema

Llegaba el mejor momento de la noche, decidir si dejaban que el influjo mágico de la barca les guiase a su destino o, hicieran su propio camino. La mirada verde de Foxier miran a su compañero con una picardía original, recobrando su buen ánimo, no permitiendo que el insulto del fantasma arruinase la noche, la cual podría ser bastante mágica si jugaba bien sus cartas.

- Es una prueba de valor..., yo me atrevo... ¿te atreves tú?.... - comenzaba el reto personal entre ambos docentes, y es que en ocasiones, los adultos podían llegar a ser peores que los niños.

La bonita mujer saca la mano de la barcaza para rozar con sus dedos el agua del lago, estaba fría al tacto. Miró a Westerberg y rió, salpicándole unas gotitas cerca del rostro

 Desdichados en cualquier caso..., por amar y no ser correspondido... - mira a Daniel la Dama Gris -... desdichada aquella que tiene cadenas invisibles de las que no se puede librar... -observa a Gin, la cual se pensó mejor lo de seguir al grupo y ahora tendría que sufrir los comentarios de aquel triste fantasma -....desdichado al estar entre dos aguas y no saber hacía dónde te lleva la marea... - sonríe levemente a Alen -.... o desdichada al pensar que eres única en su vida o peor..., saber que no lo eres.... - los ojos se posan en Victoria -.... desdichado al no tener claro cuál es tu posición en el castillo o en la vida... - le tocaba el turno a Francis -....desdichada porque no ha dado el paso que esperabas y sabes que la oportunidad se escapa de tu mano...., ¿serás como el barón sanguinario?.... - mira a Cyllene -....desdichado, porque algo te retiene a dar el paso.... y eso tendrá consecuencias dolorosas....- definitivamente hacía referencia a Melker

Escuche con atención lo que el fantasma decía, en parte tenia razón pero cuando se dirigió hacia Gin fue cuando pude notarla, estaba siendo algo ruda, pero preferí no emitir palabras sobre ella después de todo era un fantasma triste, además las cosas siempre pueden cambiar, el destino no esta escrito en piedra o eso decía papá,

El fantasma dio una nueva indicación pero esta vez abrí los ojos, no podía creer que es lo que estaba diciendo pero no me parecía divertido, para nada 

.Anderson y Sinclair irán juntos en el segundo bote.... - observa a los tres alumnos restantes -...Lestrange irá con Carrow.... en el tercer bote..., y Ryder irá solo en el cuarto....

-Lo siento prefiero ir con Gin que con Victoria, no desobedezco las reglas pero no me parece justo- le dije a la fantasma, podía soportar que me dijera desdichado en el amor pero no que quisiera separarme de ella.

Pero no había terminado de manifestar mi idea cuando Alen también expresó lo que pensaba:

- De eso nada, Victoria y yo vamos en el mismo bote ¿que mas da quien vaya en cada uno? Esta noche no nos vamos a separar pase lo que pase... así que o vamos juntos o no pienso subirme a ningún bote -decidido y sin un ápice de duda me planté frente a la fantasma, me había prometido a mi mismo cumplir lo que ella quería y eso iba a hacer

Opinaba lo mismo pero fue  la respuesta del fantasma lo que me intimido, que tal si por mi decisión le pasaba algo mal a Gin, no podría perdonármelo así que me arme de valor, encaré al chico de Ravenclaw y lo mire desafiante, quizás era lo mas tonto que se me ocurría hacer.

- No tengo forma corpórea no puedo impedírtelo, pero serás el culpable de las consecuencias, suerte si eliges tu camino joven Ryder, desde otra barca obtendrías una visión que dentro de ésta... - señala la de Sinclair -... no podrás tener... Ahora, no digas que no te lo advertí....

-Muy bien, supongo que a ti no te importa lo que le pase a tu amiga, la verdad es que yo tampoco quiero ir con ella y preferiría ir con Gin pero me preocupa mas su seguridad que lo que me pueda pasar- mire a la dama gris - Le propongo un cambio yo y el idiota de Ryder iremos en la misma barca que Victoria vaya sola, a si ella sigue la ruta establecida y nosotros nos arreglamos juntos- me molestaba la idea de compartir una barca con Ryder pero si algo malo iba a pasar que nos pasará a nosotros y no a las chicas.

Me acerque a Francis y coloque mis manos sobre sus hombres - Viejo, cuida a Ginevra con tu vida, que no le pase nada, por que si llega a pasar algo o si intentas algo raro con ella, te juró que te lanzaré de la torre de astronomía- nunca había amenazado a nadie en mi vida, pero quería que comprendiera el riesgo de dejar que le pasará algo a Gin o si el intentaba algo.

Cuando se acerca al grupo, este afortunadamente no había partido aún así que apura el paso, escuchando parte de la conversación de Daniel con Francis, su amigo culpaba a Alen y a Victoria del hecho de que ella no quisiera participar, Ginevra torció el gesto y sus ojos se entornaron un poco, no era por ellos, bueno, no completamente culpa de los chicos, sino que era realmente por Daniel, pues luego de la conversación que habían tenido, el hecho de ir juntos era extraño, doloroso y sobre todo peligroso, alguien los había delatado y casi le había costado su estadía en la escuela, así que apuró el paso e iba a corregir a Daniel cuando la dama gris los interrumpió y les dejó en claro de qué pata cojeaban.

Ginevra quedó en silencio, mordiéndose por dentro su labio inferior, sabia que lo que había dicho era muy cierto, aunque le faltó agregar que era ella la que no quería liberarse de esas cadenas. Era su familia después de todo, se dijo, y se encogió de hombros, escuchando a Melker, él era la otra gran razón para no haber querido estar presente, pues luego de aquella discusión que habían tenido, la chica realmente apenas le dirigía la palabra, iba a sus clases, ejecutaba los hechizos, pero no hacía nada más que eso, además, estudiaba por su cuenta, buscando no fallar de nuevo para no tener que volverle a hablar.

Pero el tema no sería pacifico, para nada, y aunque la forma en que se habían hecho las parejas había alegado a la joven, e iba a ponerse al lado de su amigo Francis, Alen saltó con ferocidad, lo que realmente hizo sentir mal a Ginevra y la conversación que habían tenido se hizo más que nunca patente, la niña siguió quedando atrás, mientras todos se reorganizaban y los profesores parecían más interesados en coquetearse. Fantástico, estarían solos y esperaba que no se repitieran las desafortunadas decisiones de la noche en que atacaron los dragones. Ya temía que con todo eso, su madre nuevamente tuviera razones para sacarla de la escuela. Ginevra resopló con resignación, pero su molestia no terminaría ahí, pues Daniel hizo algo que realmente molestó a Ginevra y ella no lo ocultó. 

— uy... ya basta — alza su voz, y queda al lado de Francis — no vuelvas a amenazar a Francis ni a nadie además, me puedo cuidar sola — le reclama a Daniel, con el ceño fruncido — y deja que ellos dos vayan juntos, son novios y quieren estar unidos, es obvio — molestaban esas palabras y mucho, porque ella era causa de que esos dos no estuvieran tranquilos y ella tampoco lo pudiera estar, la chica suspiró y resignada miró a Francis — esto es un juego y no deberían pelear por tonterías, quien quiere ir con quien, da igual, o con quien le tocó, no iba a venir porque estoy cansada, pero vine y lo último que quiero son peleas, Dama Gris — mira a la fantasma — ¿Daniel estará a salvo si va solo?, porque si estará bien, creo que podemos dejar a la pareja ir juntas, pero si es peligroso, prefiero que vaya con Francis, yo estaré bien — y de hecho, sola se le hacía mejor, pues, a pesar de que lo que más temía era la soledad, estaba comprendiendo a esa tierna edad, que justamente a ella estaba condenada.