Partida Rol por web

La plaga española

Capítulo III: El antígeno.

Cargando editor
04/01/2017, 00:05
Director

El arma en la parte posterior del pantalón pesaba, vaya si pesaba pues parecía sentir que estaba bajándole los pantalones, sin embargo ese era el menor de sus problemas en comparación con la mole que suponía la escopeta para el hispanojaponés, de complexión más delgada.

La primera puerta que intentó era una salida de emergencias, sin embargo sólo estaba permitida la salida desde el interior, lo que eliminaba el 90% de las salidas. La situación pintaban bastos hasta que por cosa del destino recordó una salida posterior que tras un pequeño vestíbulo daba también al hall por el que había salido.

Todo permanecía inmutable, eterno y silencioso... Hasta que un estruendo demasiado familiar cortó el silencio con la sutileza de un hacha. La puerta, el invento del decano que casi les condenó a muerte. Recordó mientras por un instinto morboso, tal vez suicida se dirigió a ver aquel acontecimiento. Tal vez necesitaba ver el peligro cara a cara para convencerse de que era real... Tal vez albergaba una tímida esperanza de que el autor del disparo que sonó antes estaba vivo y con el más gente.

Cargando editor
04/01/2017, 20:29
Director

La puerta de la parte superior de las escaleras se abrió de golpe y el contorno de una figura humana se dibujó en el umbral. Un piso por debajo yacían sobre el los cuerpos fatigados de un minúsculo grupo de supervivientes: los doctores Martín y Miguel, Luisra, Marcos y Sara... Y de una treintena de estudiantes sólo Jimmy y Marcos. Ni rastro del resto.

La imagen que daban era desoladora, cuerpos cubiertos de lo que parecía la sangre de otros, Sara con un arma en la mano sin saber qué hacer con él y Luis Ramón aferrándose a otro arma como si no hubiera un mañana mientras temblaba mirando al vacío. El resto observaban mudos a éste último.

El gran portón metálico repiqueteaba a cada embestida que se producía desde el otro lado.

Notas de juego

Ya está, podéis postear y subiros la XP

Cargando editor
07/01/2017, 18:24
Luis Ramón Navarro

-Luisrra vamos, antes de que venza la pizarra, ¡vamos!

...

-Luisrra vamos, antes de que venza la pizarra, ¡vamos!

...

Tardó un par de segundos más antes de reaccionar, sin decir nada.

Aún estaba temblando y con los ojos demasiado fijos en el fondo cuando corría, y como era de esperar corría con el arma en el gatillo, algo que cualquier tipo que hubiera empuñado un arma en su vida podía decirle que era peligrosísimo... y sin embargo aún retuvo como para poner el seguro, manoteando, antes de salir. El mero hecho de que cayera en eso ya podía despertar cierta preocupación.

-...

Los golpes tuvieron la virtud de despertarlo un poco. Tenía la mano blanca de apretar la pistola; la relajó un poco. Pero seguía temblando en los labios.

-Quéhasido. Qué ha sido eso -buscó las palabras. Un par de puñetazos más le devolvieron un poco más al sitio. Paladeó, incómodo, notando un desagradable sabor a arcada retenida en la boca- ¿Estáis todos bien? ¿Señor Dr. Martín? ¿Dr. Rodriguez? ¿Sara? ¿Santana, Jimmy, Marcos?

Aun así... no hizo asomo de salir corriendo hasta que otro no lo hizo, con lo que podía sonar entero, pero no estaba haciendo lo más cuerdo según la situación.

-Con todo el debido respeto, señor Decano, ¿¿QUÉ ESTÁ PASANDO?? -movió las manos para dar énfasis haciendo círculos sobre las muñecas, a la altura de la cabeza... y la pistola estaba sujeta en una de ellas- ¿Sabía usted algo de ESTO?

Sacudió la cabeza.

-Nnnnooo. No, no. Calma. ¡Tenemos que avisar a todo el mundo! ¡Desalojar los aularios! ¡Si algo de esto sale...!

Cargando editor
09/01/2017, 12:47
Miguel Rodríguez

La idea de la pizarra no había salido tan mal - pensó Miguel al verse a salvo por fin. Miró a sus compañeros y volvió a ser consciente de lo que acababa de pasar con Luis Carlos. Parecía como si su cerebro intentase bloquear partes de la realidad que les acompañaba. 

- Si... si. Estoy bien. ¿Cómo estás tu Luisrra? - le tocó el hombro. De repente parecía empezar a perder los nervios. 

-Nnnnooo. No, no. Calma. ¡Tenemos que avisar a todo el mundo! ¡Desalojar los aularios! ¡Si algo de esto sale...!

- Luisrra, sí  Pero tómate un momento para respirar. Lo que acabas de hacer... ¿estás bien?. Le has ahorrado el volverse rabioso y puede que eso sea lo que nos ha salvado.... gracias.

Fue entonces cuando se dió cuenta de que no estaban solos. Sonrió al ver que la figura parecía la de Enrique. 

- ¿Enrique? ¿Estás bien? Dios, ¡pensaba que no te volveríamos a ver! ¿Has podido hablar con la policía?

Cargando editor
09/01/2017, 15:50
Enrique Yamaguchi

Tras apartar la papelera y abrir la puerta, Enrique se encuentra a un pequeño grupo de supervivientes del cual solamente quedan dos alumnos. En silencio y observando horrorizado a los supervivientes les hace un gesto para que suban hacia donde esta el con la mano en la que lleva la escopeta que cogió del coche patrulla. 

Miguel no tarda en preguntar como se encuentra y Enrique tras tragar saliva le mira y le responde. - Estoy bien... ¿Vosotros como estáis? ¿Alguien esta herido? Enrique se hecha a un lado para dejarlos pasar y una vez salen todos cierra la puerta que da a las escaleras por las que subieron.  Seguidamente se aproxima a Luis y a Miguel. Estoy bien, conseguí contactar con la policía, e incluso baje con ellos..... Pero fueron atacados. Enrique mira a Luis. Imagino que esa es la arma de uno de los agentes. Con cuidado el botánico coloca de nuevo la papelera apoyada en la puerta y después mira de nuevo a todos.

​Esta apunto de venir mas agentes, si nadie esta herido creo que será mejor que salgamos de aquí antes de que nos pillen aquí dentro. Enrique mira la puerta de reojo. Solo quedamos nosotros aquí dentro y yo tengo las llaves del edificio. La entrada principal esta cerrada yo entre por otra puerta lateral que da también al hall de entrada. Tras hablarles del lugar por el que entro, Enrique guarda silencio y mira a sus compañeros mientras da unos pasos hacia delante alejándose de la puerta con la papelera puesta a modo de alarma, para saber si se abre en algún momento.

Cargando editor
10/01/2017, 09:26
Marcos Santana

Sacudió los hombros cuando sintió unas manos en ellos - No me toques - pensó pero esta vez no dijo nada aún pendiente del cuerpo de Luis Carlos. Pensó en llevarlo consigo pero estaba seguro que no le dejarían por lo que tras dejar el roedor entre las ropas del ex alumno se dirigió al laboratorio. Volvió a salir a los pocos segundos.

– Mi escoba. No puedo limpiar sin mi escoba – y se la mostró al grupo.

Cuando apareció Enrique no le dio ninguna importancia como si en todo momento hubiese estado con ellos y lo siguió cruzando la puerta. Escuchó como Juan Ramón gritaba al anciano –Eso está mal, a los mayores hay que respetarlos – aunque nada de eso le importaba realmente .

–¿Puedo irme ya a casa? Mi madre estará preocupada.

Avanzó por el pasillo cantando en voz baja.

El final del verano llego, 
y tu partiras, 
Yo no sé hasta cuando, 
este amor recordaras. 

Cargando editor
10/01/2017, 21:35
Sara Gómez Gutierrez

Aún estaba tratando de asimilar lo que acababa de ocurrir tras aquella puerta. Los golpes tras la misma no me hacían sentir nada bien, pero me ví segura al otro lado de aquella puerta.

Estoy bien... Murmuré a las preguntas incesantes que me invadían la cabeza. Luego miré al resto. El tiempo de los héroes se había acabado. Habíamos logrado salir de aquella pesadilla. Ahora estaban contenidos en aquel sótano, el edifico vacío y los refuerzos en camino. Había llegado el momento de ser lo que éramos realmente: personas. 

La adrenalina fue desapareciendo de mi cuerpo, sacando aquella parte débil de mi. Mis manos comenzaron a temblar y mis ojos se empezaron a empañar de lágrimas, mientras mi mente procesaba todo lo ocurrido y... lo que me hubiese podido pasar de no haber salido bien las cosas.

Miré al Supervisor... recordando las agallas que tuvo para volarle la cabeza así a aquel joven, el cual hubiese tratado de matarnos en cuanto aquel.... ¿virus? hubiese colapsado su cuerpo. Miré como Marcos caminaba hacia la salida, como si nada de esto le hubiese afectado. Mejor.. bastante tiene ya el pobre. Pensé mientras trataba de no derrumbarme del todo allí, delante de todos.

Lo mejor será que salgamos de aquí. Dije con la voz entrecortada por los nervios. Y dejemos que sean los cuerpos de seguridad del estado quienes se encarguen de todo esto... La mano que aún sostenía el arma, señaló hacia la puerta donde continuaban los golpes, pero mis ojos miraban hacia la salida.

Notas de juego

Lo siento. Se me ha complicado la vuelta al trabajo muchísimo. No he tenido tiempo para nada. Me pngo al día ya mismo.

Cargando editor
12/01/2017, 00:58
Dr. Martín

El Dr. Martín, con sus problemas emocionales habituales, no dijo palabra. Y no es que estuviera pensando en el pobre Luis Carlos, sino que lo que quería era irse a su casa. ¡La familia! La familia sí que no le rechazaría, no como ellos si se enteraban de la investigación que se daba en el sótano. 

Bueno, yo...

...yo no sé nada, salvo que esto no sólo les pasa a las personas. Hay tipos de hongos que parasitan el cerebro de hormigas, y les hace alimentar al hongo (clavándose en una hoja, rompiendo sus propias "mandíbulas" y esparciendo sus esporas más tarde). Es lo más parecido del mundo a lo que hemos visto hoy aquí.

Cargando editor
12/01/2017, 23:07
Luis Ramón Navarro

Como si fuera un sortilegio, las palabras de Miguel y la mano en su hombro funcionaron como el permiso para que se descuadrase y se apoyase en una pared, más allá, mientras se sacudía el pelo con la mano izquierda, sudorosa.

-Estoy... bueno, estoy -dijo- Que ya es bastante.

Ajustó la pistola para comprobar el seguro, sin recordar que lo había hecho hacía unos segundos, y se la metió en el bolsillo. En las películas podía ser algo sutil, pero allí era un trasto enorme e incómodo que se marcaba muchísimo incluso aunque sus pantalones eran de bolsillos hondos.

-...¿profesor Yamaguchi?

La voz del supervisor se animó: aquella era la primera buena noticia que había habido en horas después del horrible festival de miserias y muerte en que parecía haberse convertido su vida. Hasta arqueó una ceja chocado por el hecho de que llevase una escopeta, como si aquello fuese una situación normal y verle llevar aquello fuera un faux pas. Miró al Decano por unos segundos y este tuvo bastantes probabilidades de poder pensar una cosa: que Luis Ramón se habçia dado cuenta de que la respuesta que le había dado no es que fuera inútil, es que rodeaba la pregunta que había hecho, así a puro huevo. Sin embargo, tras este periodo, asintió.

-Hongos. Entiendo -dijo, girándose a Enrique- Bueno, me alegro de que esté bien. Si los policías fueron atacados... joder si fueron atacados -no pudo evitar apretar los dientes y decir lo siguiente con mucha, mucha rabia- Le metieron un tiro a la pobre. Estaría aquí con nosotros de no ser por ellos.

Tragó aire y lo expelió, lento y agresivo.

-Tiene razón. Hay que llamar a los GEOS, o al ejército, o a lo que sea: que desalojen la Universidad y nosotros nos vamos de aquí. Pero para ayer.

Dirigió una mirada a uno de los estudiantes: no hacía ni dos días le había dicho que como no empezase a cambiar las pautas de evaluación iba a tener que reportarlo y ahora estaba ahí detrás de la puerta, restregando los dedos contra ella y pegando la boca y las mejillas contra ella. Como una mosca contra un maldito cristal.

 

Cargando editor
15/01/2017, 20:30
Director

No tardaron en ponerse al día, apenas unas breves palabras que infundieron normalidad a aquel día. Algo que les recordaba que aún estaban vivos y que aún eran animales racionales y sociales no como las bestias que se encontraban al otro lado. Santana fue de los primeros en subir, casi a la par que Enrique. El resto se lo tomaba con mucha calma ignorando el ruido metálico que producía la puerta al tambalearse. 

De repente parte de la puerta se abolló, la situación distaba mucho de la normalidad en la que creían encontrarse.

Notas de juego

Vale chicos, ya estoy de vuelta, para el que no lo supiera estuve malo. Puse un mensaje en el foro. Ahora sí que sí me tenéis que gastar todos los puntos antes de que yo avance porque a esto le queda poco. ¡Avisadme porfa!

Otra cosa, tirada de percepción con un malus de -2 para ver si sabéis lo que se avecina.

Cargando editor
15/01/2017, 20:51
Luis Ramón Navarro
- Tiradas (1)

Notas de juego

Con el -2, 9.

Cargando editor
16/01/2017, 22:49
Miguel Rodríguez

Los golpes en la puerta impedían que se relajase del todo, pero al menos el ritmo cardiaco de Miguel parecía recuperarse. Además, Yamaguchi parecía estar bien lo cual le tranquilizó más. 

BUM - un fuerte golpe les volvió a sobresaltar

- Si van a venir más agentes salgamos de aquí echando leches, ¡por Dios! - gritó Miguel asustado de nuevo al ver cómo la puerta comenzaba a ceder - ¡Que parece que estemos esperando más jarana! Parece una película en la que todas somos rubias...

- Tiradas (1)
Cargando editor
18/01/2017, 22:46
Sara Gómez Gutierrez

Aquel ruido me hizo girarme. Mis ojos se abrieron como platos al ver como aquel porton de "seguridad" había quedado abollado de aquel golpe.

Aquello no me gustaba nada. Miré la hora... no.. no había pasado la hora de mi medicación aún quedaba tiempo para mi próxima toma, todo era real... ¿Qué cojon...? pregunté en voz alta. Pronto sentí como si todo el mundo se parase a mi alrededor, el silencio invadió mi cabeza durante a penas un segundo...

- Tiradas (1)

Notas de juego

¡Que parece que estemos esperando más jarana! Parece una película en la que todas somos rubias...
 

No. Si fuesemos todas rubias, el master se habría vuelto loco explicándonos cada escena unas 20 veces y creo que aún estaríamos esperando la llegada del Samur... xD

Cargando editor
19/01/2017, 18:43
Marcos Santana

Santana escuchó los golpes y dejó de cantar. Se dio la vuelta ladeando la cabeza - Será Luis Carlos para devolverme mi ratoncito. Voy a abrir.

A pequeños pasos se fue acercando a la puerta con la intención de abrirla cuando llegara. Se paró en seco con el comentario de Miguel -¿Qué es una jarana? Yo no soy rubio - se le quedó mirando a la espera de una respuesta.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Puntos gastados

Cargando editor
19/01/2017, 21:13
Luis Ramón Navarro

...jesús. Aquella puerta iba a durar nada. ¿y aquella era la puerta de seguridad que había puesto la Universidad? ¡Menuda chapuza! ¡Chapuza y ZOMBIS!

-¡Santana, no se acerque a la puerta! -ordenó, volviendo en sí- Venga con nosotros, todavía queda un rato para que termine su turno.

"..."

Estaba actuando casi por inercia. Poner los pies y seguir actuando y concentrarse en el ahora porque el futuro era algo que no quería ni tener que oler.

-Tiene razón. Vámonos todos de aquí. ¡Que se encargue el ejército!

Total, si los militares estaban en camino, ¿qué iban a hacer ellos en comparación? Que diesen el aviso y se estableciese una cuarentena y vaciasen la uni y se fuesen ellos ya para sus casas excepto porque yo vivo en los pisos de la universidad y no se qué pelotas voy a hacer que era hora. La pesadilla había terminado.
 

Cargando editor
22/01/2017, 20:30
Director

El lugar en el que estáis es una cacofonía, sin embargo creéis oír algo en otro sitio, viene de arriba... Parecen muchas voces y... También se escucha el amortiguado ruido de las sirenas.

Notas de juego

Comentad lo que percibís y avanzo.

Cargando editor
22/01/2017, 23:02
Enrique Yamaguchi

Enrique mueve sus manos indicando a los demás que se den prisa en terminar de subir las escaleras. - Vamos, vamos.... Los fuertes golpes en las puertas hacen que un escalofrío recorra el cuerpo del botánico. Al llegar todos arriba, rápidamente cierra la puerta y pone la misma papelera en la puerta.

- Es mejor que no nos entretengamos mas. Enrique mira Luis y le hace un gesto para que se encargue de Santana. Podríamos salir por donde entre yo ahora o quizá sea mejor salir por una de las salidas de emergencia para evitar que nos vean los equipos que están de camino. Enrique comienza a caminar alejándose de esa puerta, la cual cada minuto que pasaba le recordaba mas a la mismísima puerta al infierno.

Cargando editor
23/01/2017, 13:54
Luis Ramón Navarro

Hizo un gesto de shhhht para llamar la atención. Después habló en voz baja.

-¿Oís eso?

Quizá fuera sólo él o es que se hubiera vuelto loco después de todo eso (que tampoco era muy difícil de creer) pero parecía convencido, y al menos una persona asintió a lo que estaba diciendo, así que quedó confirmado.

-Hay un jaleo enorme arriba. Y vienen las sirenas. ¿Parece que ya lo están desalojando ellos?

Reprimió un suspiro de alivio brutal: si la gente ya lo sabía no tenían por qué quedarse ni un segundo más en aquel sitio del diablo, que entrasen y arrasasen con todo que ya iría el a declarar lo que había pasado después de aquello. Iba a ser un lío, pero no es como que no hubiese cámaras de seguridad y eso y-

-COÑO.

¡Claro! ¡Cómo puñetas no se le había ocurrido antes! ¡CLARO QUE LA GENTE SABÍA YA LO QUE PASABA! ¡Hay cámaras de registro, subnormal! ¡Alguien habrá llamado hace siglos desde Prosegur o donde sea en cuanto haya visto todo eso!

-Salida de emergencia casi mejor. Vámonos ya.

Cargando editor
25/01/2017, 20:57
Director

Todos estaban apurados, desando salir al exterior por lo que las observaciones de Luisra cayeron en saco roto. Lógico si se tenía en cuenta que el peligro golpeaba a las puertas recordándoles que no había desaparecido.

Los escalones se sucedieron a toda prisa, para algunos de uno en uno, para otros de dos en dos. Casi se dieron de bruces al llegar a la planta baja la cual la abrieron a toda leche con un sonoro ruido.

-¡Bravo, oigo algo aquí! -Se escuchó de repente, una voz humana de alguien que no pertenecía a aquel grupo. Una quimera...

Cargando editor
25/01/2017, 21:38
Alpha

-¡Abajo, todos abajo, al suelo! -Gritó de repente una aparición uniformada y pertrechada de un casco que impedía verle la cara, no os fijasteis en nada, no sabíais si era uno de los cuerpos de seguridad del estado, únicamente veíais su fusil de asalto que os iba apuntando indistintamente.

-¡Tango aquí!- Gritó de repente -¡Abajo todos!