Partida Rol por web

Vuestro sueño os hace ir a la Isla de Naxos, que está bajo la protección de la diosa Atenea. En ella, se había construido un templo, semejante al Partenon, con su misma estructura.

Llegáis al Templo. El interior del recinto posee, en el centro, una estatua de la diosa

Poco a poco, vosotros, los dioses convocados por Atenea vais llegando

Selene se materializó en el templo de Atenea como bien se lo había pedido. Primero un viento helado congeló las columnas del templo y después todo se llenó de polvo de nieve para después dejar paso a estalactitas y charcos helados. De entre aquel semejante despliegue de elementos del frío el cuerpo de una mujer semidesnuda se materializaba. Quizá su frialdad le hacía dudar sobre su estancia en aquel lugar. De poco le importaba ya la humanidad. Siempre había hecho lo que le daba la gana y apenas merecían su protección. Pero algo le decía que quizá Helios había sido llamado como ella.

Al fin y al cabo aquel sueño parecía muy real, y la sensación de calidez que le aportó el Dios del Sol fue demasiado.... ¡verdadera!

Selene comenzo a mirar cada rincón del templo, pero parecía que todavía estaba sola. Nadie había llegado. ¿Acaso tan solo la habrían convocado a ella? 

- Oh! Amado Helios, si verdaderamente Atenea te ha llamado, ven conmigo, quizá tengamos la oportunidad de volver a reunirnos.

Selene tan solo ansiaba el cuerpo caliente de su amado.

Un temblor sacudió todo el templo, haciendolo vibrar hasta los cimientos. Las antorchas y lámparas de aceite que había repartidas por todo el templo, con su fuego ondulante, quedaron apagadas al unísono, y una gelidez que no tenía nada que ver con el hielo de Selene se apoderó del templo. Era una gelidez que presagiaba muerte y vacío, y la estancia se quedó sumida en la penumbra, a pesar de la luz del sol que debía filtrarse a través de las columnas del templo.

El temblor ascendió en fuerza, haciendo temblar peligrosamente el templo. El suelo se resquebrajó y una amplia grieta se extendió por el suelo de mármol del templo

Una neblina negra invadió el templo, filtrandose a través de la grieta, serpenteando por todo el recinto. La neblina se aracimó en un mismo punto, formando un bulto informe. Cuando la neblina se retiró, reveló la figura de Perséfone, vestida con una vaporosa túnica negra. Llevaba unos sencillos brazals de oro en las muñecas y brazos para sujetarse la túnica, formando una especie de alas de seda. En una mano llevaba una granada, la fruta del Inframundo, como símbolo de su esclavitud.

Deja de gritar tanto, Selene. - le reprochó con sarcasmo la reina del Inframundo. Me parece que tendrás que conformarte conmigo

Ahora era el tiempo del calor.... Un fuerte rayo de sol penetró en la sala... el ambiente se hizó cálido y agradable... tras un destello aparecí tras Selene...

Mis brazos rodeaban su cintura y mis labios jugaban con su pelo...

Aqui estoy Selene... Atenea nos conboca y nosotros venimos a su llamada...

Miro a Perséfone y le digo mientras mis manos recuerdan la silueta de Selene: Encantado de volver a verte... Perséfone... veo que has vuelto a escapar de las tierras de tu padre... ¿Qué pensará el viejo Hares cuando se entere?

Tras el rayo de sol de Helios llegaron las nubes negras, una gran tormenta se creó en e templo de Atenea....al instante llegaron las truenos y con ellos los rayos......un rayo impactó en el lateral derecho del templo derrumbando la columna lateral del templo, por allí fue por donde entro en el templo la diosa Hécate, su belleza era comparable a la de Afrodita, el largo pelo azabache ondeaba con la ventisca....

Vaya vaya....que sorpresa, menuda compañía tan reconfortante, solo falta Zeus. Helios reduce tu intensidad sino quieres que Selene se consuma...vayamos al grano por favor....

Un carro tirados por seis ciervos entra al templo  y se detiene a los pocos metros Recuérdenme que nunca los cite en mis templos a ninguno de ustedes! les digo en tono de sorna mientras me bajo. Acaricio el morro de los ciervos y les susurro una despedida al oído, tras lo cual dejan el templo.

Falta que alguien mas haga su aparición y destroce una parte del templo o podemos empezar? es increíble que lo guarra que pueden ser algunas diosas.

Hecate ignoro por completo el comentario de la hermana de Atenea y se dirigió a Persefone con pasos magestuosos 

Persefone querida sigues tan bella y juvenil como siempre

tras decir eso se acerco a su cara y le dio en beso en los labios

Descuida, Artemisa, nadie en su sano juicio quiere entrar en uno de tus templos- respondió, sarcástica.

Juguetona, respondió al beso de Hécate, y después de un beso más corto, le dijo: y tú sigues tan impulsiva y sugerente como siempre, Hécate.

Se acercó a ella a darle otro beso, pero echó la cabeza atrás en el último segundo y le dijo: deberías venir a verme alguna vez. El Inframundo es tan aburrido...

Perséfone acarició el pecho de Hécate con un dedo y le sususrró al oído: quizá podría enseñarme tu... magia.

Siempre tan encantadora le respondo con una sonrisa. Me quedo viendo la escena entre las dos diosas solo falta Dionisio y listo! con este grupo Atena quiere algo? Mientras no sea una orgía no se que planea conseguir...

Atena hazte presente por favor y dinos que deseas de nosotros! No se cuanto tiempo podre soportar tan cándida compañía. 

Mientras Hécate entredeja ver sus pechos responde a Persefone

En cuantos terminemos esto, iré al inframundo a calentar aquello...esto es taaaaaannnn aburrido.....sobretodo con estas frigidas celosas.

Artemisa se ve que satisfacer tus necesidades sexuales con tus ciervos no te consuela- dijo mentalmente la diosa de la magia

Vamos Athena no tengo todo el día!

jajaja!!! no puedo evitar la carjada enérgica y sincera  de verdad que no sabes como me carcomen los celos! le contesto mentalmente a Hecate, mientras espero cruzada de brazos y con una sonrisa la aparicion de Atena. 

Selene vio llegar al resto de diosas mientras sentía el calor de Helios que le llenaba por dentro. Selene miró los gestos que hacían cada una de ellas y después miró a Artemisa. Aquella diosa había tomado parte de gloria que no la correspondía, hasta tal punto que los estúpidos de los humanos las confundían. Pero eso ahora le daba igual.

Cuando vio las insinuaciones de Hécate y Perséfone, tomó a Helios con las dos manos y le besó. Sintió su boca y su saliva inundar su cuerpo. Ese calor que sintió derritió el corazón congelado de la Diosa Luna e hizo que recordara la visión que habían tenido. Ahora todo cobraba sentido, aquella visión, los ojos de Atenea, el templo, el resto de diosas.

- Callad, Atenea se manifestará pronto. Tan solo estaba esperando a que estuviéramos todos. Y parece que ya es así. Ahora dejad de comportaros como humanas, parece que los cuerpos mortales os hacen sucumbir a sus instintos. Vergüenza os debería dar, ¿qué opinaría el mismo Zeus de vuestro comportamiento?

La calidez del corazón de Helios había devuelto su verdadera naturaleza a Selene. Ya no era la diosa fría de la que todo el mundo hablaba y otros confundían.

¿Zeus?- rió con sorna. Si el viejo estuviera aquí, ya se habría puesto hecho un toro ante semejante escena. Parece mentira que no conozcas al bala perdida de mi padre.

Juguetona, se movió serpenteante entre los brazos de Hécate. ¿Qué gracia tiene ser una diosa si no puedes hacer lo que se te antoje?

Además, Selene, no vayas de mosquita muerta. Todas sabemos que ya te lo montaste con el pez gordo unas cuantas veces.

No puedo evitar fruncir el entrecejo por el comentario despreocupado de Persefone Creo que te estas confundiendo libertad con libertinaje le respondo estoy segura que el mismo pensamiento tuvieron los Titanes y mira donde terminaron! 

Puedes ser inconciente, pero no te sorprendas cuando las Moiras te releven tu final.

Artemisa no sabes lo que dices....si Zeus estuviera aqui seria el primero en copular, y mas aun si hubiese humanas de por medio, parece mentira que no lo conozcas....

Y no te atrevas a comparar a mi Persefone con un titán...no es una amenaza, es un consejo

Hécate realmente creo que tu solo oyes lo que quieres escuchar le respondo encogiendome de hombros por mi tu, Perséfone, Zeus y todos los demás dioses  pueden tener las orgías que quieran y todas las veces que quieran! Yo he elegido otro camino, el de la castidad, pero no es eso por lo que le reproche.

Creo que el pensarnos omnipotentes sera nuestra propia destrucción, el creer que porque somos dioses podemos hacer lo que nos plazca y sin enfrentar nunca las consecuencias!

Cuando hablas así pareces un oráculo....bastante tengo yo ya con mis premoniciones

Tranquilas chicas... no os ofusqueis tan rápido... parece mentira que hayan pasado siglos por vuestro ojos....

Me acerco poco a poco a la estatua de la Imponente Atenea y la toco con mis manos mientras digo:

¿Qué es lo que pasa?... ¿Por qué faltas a la cita que tu misma convocaste?

El ulular de un búho hace que os giréis hacia la puerta. Por ella entra volando ese animal, con la grandeza de un dios

Se posa sobre la estatua de Atenea. Su cuerpo empieza a emitir destellos dorados. Mientras desciende lentamente, empieza a cambiar, para que, al llegar al suelo, se haya convertido en una mujer hermosa. La diosa Atenea

ya era hora