Partida Rol por web

Mamá hizo memoria -Cierto Rómulo, perdonnn, antes de las estatua hubo otro cruce sí señorrr...entoncessss, siendo así...toca DERECHA.

La sonrisa que Silvania dedicó al joven paladín fue de las pocas sonrisas sinceras que se le habían visto en mucho tiempo.

- Gracias, muchas gracias, bendita la diosa que me otorga su gracia y bendito el siervo que la trasmite.

Mientras Mosests imponía sus manos y pedía la bendición de su dios para curar sus heridas y las de su amiga los demás se encaminaron hacia la derecha, donde estaban las escaleras ascendentes.

Los peldaños de piedra estaban llenos de polvo y las antorchas siempreardientes emitían extrañas sombras en la pared. Por lo demás la escalinata remataba en un amplio pasillo unos metros más adelante. Este pasillo, a diferencia de los anteriores, contaba con algo de decoración, aunque no fuese muy amistosa. Dos filas de tres estatuas cada una flanqueaban el camino. Todas ellas tenían el mismo grotesco aspecto de cefalópodo con túnica que la que se viera en el cruce. Algunas arañas había creado una tupida tela que parecían unir las estatuas con la pared, como si quisieran mantenerlas retenidas.

Gaius se adelantó al grupo. Sus ojos escrutaban el lugar con calma, buscando cada irrelevante protuberancia del terreno que pudiera ocultar una trampa. Los otros fueron avanzando tras él, con cuidado, atentos. Las estatuas eran cuanto menos desagradables, si no amenazadoras.

De pronto se escuchó un click. Gaius giró la cabeza tan sorprendido como los demás cuando se percató de que Robin había pisado una baldosa que parecía sobresalir tan solo ligeramente por encima de los demás. Un ruido atronador hizo que todos se pusiesen en guardia esperando lo peor.

En ese momento un pesado rastrillo de metal cayó tras el grupo, cerrando el paso de regreso por las escaleras. Frente a ellos quedaba la salida del túnel un poco más adelante de donde se encontraban, que curiosamente no se había cerrado, como si una presencia invisible les invitase a continuar su camino sin posibilidad de retorno. Nada más sucedió... por el momento.

El mediano observó curioso el accionar del paladín. El sabía curar. Más de una vez la madre naturaleza había permitido que curara a algun compañero ó a su animal, pero ver como la curación era solo producto de la fe de Mosest fue una novedad.

Tras esperar que continuaran su camino subió las escaleras en último lugar. No era el camino más cómodo para Remo, pero los escalones no eran tan altos como para impedirle trepar... probablemente con cuatro patas el perro lo tenía más sencillo que el, que solo tenía dos pero más cortas.

Al final de las escaleras se concentró un momento en el lugar que habían dejado atrás, verificando que nadie los siguiera y, finalmente, vio lo mismo que sus compañeros - De vuelta esos bichos... y además telarañas... mal, mal, supongo que las tejedoras están cerca - comentó al resto mientras intentaba distinguirlas entre las telas.

En silencio desenfundó su varita mágica - Esos bichos mejor tenerlos lejos - se lo oyó murmurar mientras lo hacía

El ruido del rastrillo fue el último detalle. No había alternativas... Debían avanzar.

El mediano sonrió mirando las telarañas. A todas luces sus temores eran infundados: las telas eran escasas y débiles, probablemente producidas por la variante de Araña Ciega que infestan los túneles más profundos. Nada peligroso en principio... Y no veía trazas de telas más gruesas que indicasen la presencia de otros arácnidos más peligrosos. Aguzó sus ojos para intentar discernir si algo los acechaba a la salida del túnel - ligeramente cubierto por telarañas, aunque para nada obturado - pero no noto nada extraño... ¿Estaban solos? ¿Por qué cerrar el rastrillo detrás de ellos?

Algo más tranquilo al darse cuenta que las telarañas no encerraban peligro, Rómulo se mantuvo en retaguardia - Las arañas no serán un problema - comentó para los presentes aunque sin explicar mucho más - pero ya quisiera yo saber porque se cerró ese rastrillo -

Volviendo a enfundar su cimitarra, aferró con fuerza su rodela y se dedicó a calmar a sus mascotas - Hector - murmuró y dejó que la vívora subiera por su cuerpo - Remo - dijo mientras acariciaba a su montura.

- Serás cuestión de seguir. Para atrás parece que no podemos ir -

Bueno, Sera mejor que seamos precavidos, no creo que nos la haya jugado, pero siempre es mejor para la salud ser un poco desconfiado. Quizas un par de nosotros deberia adelantarse unos metros para ver si todo esta despejado

-Parece que la araña que me tragué se había alejado de sssu cassita -Dijo la maga con una medio sonrisa. -Esto no me gusta nada, se nos cerró el camino de retirada -dijo mientras agudizaba sus sentidos del oído y de la vista; de nuevo, ordenó a su murciélago revolotear la zona que quedaba delante. -Oye Bhain ¿sabrías calcular a qué profundidad estamos y qué dirección llevamos bajo la ciudad? Si vamos hacia una salida ¿dónde podríamos llegar a salir?

Mosest tomó una de las antorchas siempreardientes de la pared y se acercó a las estatuas del pasillo. De nuevo, intentó encontrar rastro de algún antiguo y oscuro mal que pudiera haber sido imbuído en aquellas degeneraciones de piedra.

Mosest no parecía alarmado ante la presencia de las estatuas, ya que no encontraba más malignidad que el aspecto temible que tenían.

"Venga, gente, avancemos", dijo reflexivamente el elfo. "Si alguien nos perseguía, ahora lo tiene más difícil, no más fácil, y nosotros estamos más cerca de salir de aquí que antes."

- Cierto... - dijo Mosest mirando a la verja de hierro. - Continuemos entonces. ¿Mismo orden de marcha?.

Sabeis que hasta ahora he confiado en mi amigo, pero y si fuese una trampa este sitio seria un lugar perfecto, ya no tenemos marcha atras. Ahora s cuando me gustaria tener un arma en mis manos, me sentiria mas tranquilo. solo se me ocurre decir que deberiamos adelantarnos un par de nosotros y echar un vistazo, si e suna trampa gritaremos para que os prepareis, no es necesario que todos caigamos en la trampa, si es que lo es

- Si. Adelante - la voz del mediano se escucha desde el fondo de la hilera - Vamos de una vez! - Pese a no querer reconocerlo se está poniendo nervioso encerrado bajo tierra - Remo se siente un poco encerrado - acota, sacándose la "presión" de encima.

Ante las palabras del enano, no puede menos que coincidir - es una buena idea, supongo que lo mejor es que no "pisemos" ninguna otra de esas piedras "baja-rastrillos". No me gustaría quedar encerrado -

Robin empezó a preocuparse: lo que debía ser una rápida retirada se estaba convirtiendo en un debate filosófico sobre la condición gnómica y su tendencia a las mentirijillas.

- Igual es que soy de naturaleza confiado, pero me da que si vuestro compañero hubiera querido traicionarnos, a estas alturas ya estaríamos muertos o perdidos: solamente debería habernos dado las indicaciones pertinentes para llevarnos a un callejón sin salida, o a una tumba poblada de espectros, que seguro que haberlas, haylas, o permitir de cualquier otra forma que nos atraparan cuando interrumpieron nuestra reunión con él. Yo digo que sigamos confiando en sus instrucciones y avancemos, ahora que aún podemos.

Gaius estaba muy enfadado consigo mismo. El miedo le había impedido realizar bien su búsqueda, esas malditas estatuas conseguían que se le helara la circulación. Un pequeño fragmento de baldosa sin investigar había sido el causante del problema. El enorme rastrillo, que ahora atascaba el túnel por donde entraron, había sido accionado por la trampa que el no había detectado.

Nadie del grupo pareció echarle en cara tal hecho, lo que no dejo de sorprenderle aunque se abstuvo de hacer comentarios para no calentar el ambiente. Sus compañeros se pusieron a discutir sobre que debían hacer, el asesino solo veía una solución: continuar.

- No podemos hacer otra cosa que andar por donde se nos obliga si queremos avanzar – espetó Gaius señalando al túnel que se habría ante ellos – Si os sirve de consuelo pienso lo mismo que Robin, si Medus hubiera querido vernos muertos yo creo que ya lo estaríamos, aunque mejor no confiarnos, muchas cosas puedes estar fuera del control del gnomo en estos túneles -