22: 05 PM
Es ya noche cerrada cuando enfiláis la carretera que desde casi la puerta del cementerio, asciende hasta una colina en la que se alzan media docena de casa parciamente aisladas del resto, entre las cuales está la casa de Silas
La cual queda tenuemente iluminada por las luces del coche. La casa está rodeada de árboles y desde donde estáis podéis ver que no hay luces encendidas, Silas no está en casa.
Apagó el motor, pero no lo hizo con las luces de su vehículo, permitiendo así que sus movimientos se vieran menos interrumpidos por la oscuridad y sus percepciones no se anularan por completo.
-Cuidado... – susurró.
A pesar de la aparente tranquilidad no se confió en ningún momento. Si sus conjeturas resultasen ciertas, Silas podía tratarse de un tipo atroz y peligroso, de reacciones difícilmente predecibles. Se aseguró de que su revolver se encontraba en orden antes de salir.
Encendió la que lamentablemente era su única linterna de bolsillo y se dispuso a abrir la puerta de aquella vivienda, mucho más tenebrosa a esas altas horas que en su anterior visita.
Comprobó si era posible acceder al interior aunque no dudó de hacer uso de su estuche de ganzúas.
Motivo: abrir cerraduras
Tirada: 1d100
Dificultad: 41-
Resultado: 59 (Fracaso)
Por supuesto, no había llegado hasta aquí sin ir bien asegurado. Así, llevaba bajo mi chaqueta mis dos pistolas. Aunque no era un tirador experto, nunca se sabía.
—Señorres, rrecuérrdenme que les diga mi teorría de todo esto cuando terrminemos la "visita" —comento a Harper y Michael. Sería mejor luego, no quería importunarles ahora.
Tras esto, les digo como colofón—. Venga, es horra de verr si hay alguien en casa...
Una vez ante la casa en medio de la oscuridad, ya no me parece tan buena idea el visitarla a estas horas. No sé porqué hemos tenido tanta prisa para hacer esta entrevista. Bien se puede que no hay luces y que Silas no está en casa... o eso parece.
Mi corazón comienza a latir rápido cuando veo a Hall con sus ganzúas intentando abrir la cerradura, no era eso para lo que estaba preparado cuando me monté en el coche, aún así me agazapo e intento escuchar cualquier ruido para que nadie nos pille por sorpresa.
Cuando veo que Hall tiene dificultades con la cerradura me pongo más nervioso aún y susurro...
- ¿Y ahora qué?
Motivo: Escuchar
Tirada: 1d100
Dificultad: 25-
Resultado: 40 (Fracaso)
Pese a que Michael tiene dificultades con la cerradura, ésta es de muy mala calidad y tras un par de intentos, se escucha un ¡clack! y la puerta se abre hacia dentro dejando ver un recibidor totalmente oscuro.
Tampoco se escucha nada del interior y del exterior sólo los típicos sonidos nocturnos: Grillos, búhos, etc.
Era una mierda de Cerradura y había Bonus a la tirada.
Alguien tiene que dar el paso, así que de perdidos al río. Avanzo un paso hacia la penumbra del interior.
- Rápido, cuanto antes investiguemos la casa, antes nos iremos.
Espero que entren mis compañeros para entornar la puerta y que nadie note nuestra presencia desde el exterior.
No digo nada, pero sí que llevo las manos preparadas para llevarlas a las fundas de mis pistolas bajo mi chaqueta. No quiero tener sorpresas.
—¿Por qué un hombre así tendría una cerradura tan mala? Esto es muy extraño... —Pienso mientras avanzo tras el umbral de la puerta.
Mi primer paso es ir a la cocina, a ver si es cierto que se dedica a comer hombres, monos, o cualquier aberración similar.
Entráis y entrecerráis la puerta, todo está oscuro y no se escucha nada.
Entro siguiendo los pasos de mis compañeros, con la escasa seguridad que me aportaba el haber estado antes en aquel lugar.
Lo primero sería llevar a cabo un reconocimiento rápido de toda la casa, sin entrar en detalles, simplemente con el fin de comprobar si había alguien escondido en la oscuridad. Tras el cual podríamos actuar con la certeza de que nadie pudiera abordarnos por sorpresa, al menos desde dentro.
Yo tengo linterna.
Si es necesario busco la instalación electrica y acciono los interruptores.
Michael enciende la linterna y prueba a presionar uno de los interruptores, descubriendo que sí hay luz eléctrica, así que apaga la linterna y entre los tres registráis la casa.
Planta baja: Salón, Cocina, Cuarto de baño
Sótano: Diáfano y sala de estar
Planta Superior: Dos habitaciones y un estudio
Para encontrar algo de valor, habría que buscar exhaustivamente al menos una hora los tres a la vez.
Tiradas de Descubrir.
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 25-
Resultado: 52 (Fracaso)
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 80-
Resultado: 74 (Exito)
Nervioso me pongo a buscar lo más rápido que puedo entre todo aquel material, echando un vistazo a la puerta de vez en cuando temiendo la llegada del caníbal.
Motivo: Descubrir
Tirada: 1d100
Dificultad: 60-
Resultado: 42 (Exito)
En el estudio de Silas encontráis:
- Un contrato de alquiler de una granja (contiene la dirección) de las afueras de Providence a nombre del propio Silas.
- Un fajo de papeles de notas manuscritas que formarán su próximo libro.
En el cuarto de baño encontráis:
- Una botella de tinte para el pelo.
Pese a que estáis ya más de media hora larga, no aparece Silas ni hay movimiento alguno en la calle.
Tas compartir la información que cada uno había sido capaz de conseguir en aquel breve periodo de estancia en la casa, había algunas posibilidades evidentes que me sobrevinieron sin demasiado esfuerzo y que necesité comentar con ellos.
El color del tinte era algo contradictorio y confuso. Sin duda era del mismo color que tenía cuando tuve oportunidad de conocerle, entonces: ¿se teñía para aparentar canas? ¿Por qué razón haría eso? – pensé en alto.
-Parece que ésta no es más que una de las propiedades secundarias de Silas. ¿Será esta granja su principal residencia? – Pregunté a todos y a nadie en concreto mientras señalaba el contrato con su rúbrica. -Si queremos dar con él, la única opción que tenemos es ir hasta allí...
Antes de ponernos en marcha ojeé rápidamente el contenido de aquellos manuscritos buscando conocer la temática general de su próximo libro y si por algún casual pudiese estar nuevamente relacionada con el asunto que nos ocupaba...
Hay que invertir un rato en leer las notas.
...Aunque tras comprobar detenidamente el volumen de las mismas, decidí que no podíamos permitirnos perder tanto tiempo.
-¿Podríais echarle un vistazo a sus notas de camino a la granja? – propuse afable, lo hubiera hecho yo mismo, pero alguien tendría que conducir.
- De acuerdo, aprovecharé para leerlas en el coche... digo alcanzando con la mano las notas que me tiende Hall. A su vez le doy la mitad al profesor.
- Esta casa está muy desangelada para ser su residencia habitual, no hay duda de que en esa granja hallaremos más respuestas... quizá más de las que nos gustaría.
Tras decir todo esto me enfrasco en la lectura de las notas de Silas, intentando obviar el hecho de que nos dirigimos en medio de la noche a la madriguera de un caníbal.