Partida Rol por web

La Semilla de Azathoth

4.1. El Rancho Englund

Cargando editor
24/09/2013, 17:56
Director

Siguiendo a Dimitri el grupo camina en silencio ojo avizor por lo que pueda pasar durante aproximadamente unos 3,5 -4 Km desde la bifurcación del camino a las afueras del observatorio. El camino asciende hasta las cercanas montañas en cuyas estribaciones a primera hora de la tarde, llegáis al rancho que os relató Dimitri como Rancho Englund.

Durante todo el camino, no habéis escuchado ningún ruido fuera de lo normal.  Lo cual en otras circunstancias os podría hacer pensar que quizás Dimitri se había pasado con el vodka... pero el olor dulzón que había mencionado sí flotaba en el ambiente desde por lo menos un kilómetro antes de llegar al Rancho.

Se trataba de una construcción principal, un granero y dos casitas más pequeñas. Os metéis dentro del perímetro del Rancho, Dimitri se detiene como dudando de si es conveniente entrar a echar un vistazo o continuar camino hacia la Torre de Incendios.

Cargando editor
25/09/2013, 12:21
Michael Hall

La caminata resultó monótona, sin contratiempo alguno,  y desagradable por aquel olor que enturbiaba el ambiente. ¿Cuál sería su origen?

Al llegar al rancho tuvo la esperanza de que allí encontrarían alguna respuesta:

-Debemos avisar a la gente del rancho. – Comentó el inspector al ver que los pasos de su guía se volvían dudosos.

-Incluso puede que ya estén al corriente de lo sucedido y puedan ayudarnos. – Compartió sus pensamientos en voz alta.

Cargando editor
25/09/2013, 12:40
Konrad Summers

Konrad arrugó la nariz ante aquel olor dulzón que le recordaba a la basura en descomposición. Echó un trago de licor para asentar el estómago y desenfundó el revólver, por si había problemas.

- Bueno, según dijo el señor Passelov, no había nadie en el rancho en el momento que él pasó por allí, pero no pasa nada por echar un vistazo

Cargando editor
25/09/2013, 12:47
Dimitri Passelov

- Estoy de acuerdo. Podemos comprobar si Silvia ha vuelto ya de sus compras- dice mientras mira fijamente el cañón de su escopeta.

Cargando editor
25/09/2013, 13:20
Harper Welles

- Bueno, si conoce a Silvia no está de más que entremos por si hubiera pasado algo.

No me acababa de hacer mucha gracia entrar en una propiedad privada en un rancho alejado de la civilización, quien sabe si la tal Silvia nos iba a recibir con un par de disparos en las posaderas.

Cargando editor
25/09/2013, 23:17
Harper Welles

- Profesor, quizá sea mejor que vaya usted primero... si la señorita Englund ve a desconocidos puede asustarse.

Le doy paso con ademán confiado pero no puedo evitar notar algo raro en las tripas. Teniendo en cuenta que acabo de desayunar, hambre no puede ser. Prefiero pensar que no es miedo y avanzo tras el profesor con paso firme y resuelto.

Cargando editor
25/09/2013, 23:29
Konrad Summers

- Eso, la carne de cañón primero. Buena idea, Harper -pensó Konrad con una mueca sarcástica. Apretó la mano sobre la culata del revolver, dispuesto a dispararlo al menor indicio de peligro

Cargando editor
26/09/2013, 11:09
Director

En verdad que Harper fue muy inteligente, pues apenas habían dado una docena de pasos hacia la cabaña principal cuando la puerta se entreabrió y asomó el cañón de un rifle muy lentamente que apuntaba directamente a Dimitri. Entonces la puerta se abrió más y finalmente se abrió del todo con una mujer en el dintel que bajó el arma al ver a Dimitri.

Cargando editor
26/09/2013, 11:11
Silvia Englund

- ¡Señor Passelov! Apunto he estado de dispararle. He oído voces y me he asustado. ¿ HA OÍDO ESOS RUIDO? ¡ME ESTÁN ASUSTANDO DE VERDAD!

La mujer está muy, muy, muy nerviosa.

Notas de juego

Podéis tirar Psico-logía  - análisis.

Cargando editor
26/09/2013, 11:12
Dimitri Passelov

Levanta la mano izquierda pero sin soltar la escopeta ni dejarla en el suelo ni nada

- Tranquilícese Silvia -para parecer más cercano llamándola por su nombre de pila -sí, he oído hará unas horas un enorme ruido y luego "esos " ruidos. Estos hombres llegaron ayer, son como yo, amantes de las estrellas y van a pasar unos días. Pero además de ser amantes de las estrellas saben manejar un arma y vienen a ayudarme a investigar qué es lo que está pasando. ¿Se encuentra usted bien? Hace unas horas pasé por aquí y no la encontré. ¿Ha vuelto del Pueblo hace mucho?

Cargando editor
26/09/2013, 11:16
Silvia Englund

- Llegué hará una hora o algo menos. Según me acercaba noté un olor extrañísimo. Llevo unos años viviendo aquí y jamás olí nada parecido, es como si algo hubiera cambiado... -pronuncia cada una de las palabras despacio.

Mira uno a uno a los investigadores escrutándoles descaradamente, como si los estuviese evaluando. Notáis algo extraño en ella.

Cargando editor
26/09/2013, 13:14
Konrad Summers
Sólo para el director
- Tiradas (1)
Cargando editor
26/09/2013, 13:12
Harper Welles

Aprovecho el momento para hacer una presentación rápida.

- Señorita Englund, mi nombre es Harper Welles, me acompañan el señor Summers, el señor Hall y el señor Kuznetsov... voy señalando a mis compañeros con un ademán... somos un equipo universitario multidisciplinar, puede confiar en nosotros.

Tras el proceso de obligada cortesía entro en materia.

- Disculpe pero ha dicho que notó que algo había cambiado, ¿puede ser más específica? Aparte del olor, ¿notó algo más?

Cargando editor
26/09/2013, 13:27
Vladimir Kuznetsov

Sin decir nada, miro a la mujer de arriba a abajo. Seguramente, nos esconda algo...

- Tiradas (2)
Cargando editor
26/09/2013, 14:28
Michael Hall

Observó y concluyó en que debía de ser algo realmente excepcional para haber sido capaz de alterar a aquellas personas forjadas en aquel recóndito lugar y acostumbradas a el. ¿Pero qué podía haber pasado?

- Tiradas (2)
Cargando editor
26/09/2013, 18:21
Director

La mujer parece estar al borde de un ataque de nervios, suda profusamente y le tiemblan las manos y llegas a notar un ligero temblor en la parte izquierda de la cara. Te preocupa que en cualquier momento pueda hacer una locura, hay que calmar a la mujer y estar atento en todo momento.

Cargando editor
26/09/2013, 18:23
Director

Hay algo físico en la mujer que te parece muy extraño, es una de esas mujeres que aunque su aspecto físico denota una determinada edad, calculas entre 60 y 70 años, sus gestos su forma de hablar su actitud y algo que no aciertas a comprender, hacen que aparente por lo menos diez años menos.

Pero es que además, por todo lo anterior, también te da la sensación de que es una persona que sufre de algún tipo de transtorno, no sabes cuál pero piensas que pueda ser algún tipo de psicosis.
 

Cargando editor
26/09/2013, 18:27
Silvia Englund

Visiblemente satisfecha con la presentación aunque aún muy tensa, os hace un gesto con la cabeza hacia el interior, entonces véis cómo asoma por la rendija de la puerta la cabeza de un perro.

- ¡JULES! ¡ESTÁTE QUIETO! -apunto está de caerse su escopeta al suelo cuando la mujer forcejea con el perro para que no salga.

- Esperen un momento por favor -la mujer os cierra la puerta en las narices y tenéis que esperar un par de minutos para que os vuelve a abrir, ahora sin perro ni escopeta.

-pasen por favor -os hace un gesto para que entréis -estaremos más cómodos dentro.

Al entrar en la casa os dáis cuenta de que la mujer ha encendido velas por toda la casa que desprenden un olor que camufla ligeramente el olor "desconocido".

Entráis en un enorme salón y la mujer os acomoda en unos sillones de oreja follados en piel (no hay un sofá, sino media docena de sillones y una mesita pequeña redonda).

Del perro no hay ni rastro pero podéis oirle respirar en el otro extremo de la casa.

- ¿Quieren tomar algo? siéntense si son tan amables. Contestando a su pregunta Señor, me refería a que ese olor nunca jamás lo había olido y llevo ya más de diez años viviendo aquí.

Notas de juego

Aclarad si entráis con las armas o las dejáis fuera.

Cargando editor
26/09/2013, 21:39
Konrad Summers

Viendo el alterado estado de la mujer, Konrad optó por guardar su revolver de nuevo en la pistolera.

- En realidad me preocupa más su estado, señora Jules. Por favor, trate de tranquilizarse antes de explicar nada. Solo estamos aquí para ayudar.

No estaba acostumbrado a tratar "diplomáticamente" a la gente, pero aquella situación necesitaba más tacto y menos fuerza bruta

Cargando editor
27/09/2013, 13:20
Harper Welles

No dejo de mirar hacia el chucho que tan mal nos ha encarado al entrar mientras voy buscando un sillón o algo que pueda aguantar mi peso con ciertas garantías. No me gusta mucho la situación, tengo un mal presentimiento. Al menos compruebo que Konrad se queda con el arma a mano, lo cual me alivia ligeramente.

Sea como sea procuro sentarme sin dar la espalda al perro y repaso la estancia disimuladamente mientras espero la explicación de la señorita Englund.

- Tiradas (1)