Partida Rol por web

Cuando la chica llega al lugar se encuentra con una sorpresa, el lugar estaba perfectamente cerrado y seguro, incluso podia ver el libro, pero, el pequeño panel donde tenia que poner el codigo no encendia, era como si no le llegara electricidad, lo cual teniendo en cuenta lo que habia visto del castillo tenia logica ya que el unico lugar donde habia visto electricidad era en la camara frigorifica de Himiko

-Me cago en todo -dijo mientras miraba esa falta de electricidad y maldecía por todos lados.

Nya, no hay electricidad, por lo que no puedo entrar en la cámara donde guardé el libro, ¿sabes donde puede estar Himiko o alguna forma de abrir esta puerta?

¿Himiko? Ni idea, pero como estaban dando gritos en los pasillos de las habitaciones seguro que está en algún otro sitio... dame un momento que pregunto opiniones.

-Y ahora, qué narices... tanto flowerpower de la amistad de puta mierda y tenemos un muerto y a una panda de payasos sueltos- iba rezongando por el pasillo, quizá apretaba la mano de Kurt con más fuerza de la que pretendía pero solo así creía poder tener el control del temblor que la recorría. Miedo por las inclemencias del tiempo, rabia por lo sucedido. Ella no conocía a TJ, no conocía casi a ninguno de los que estaban ahí y desde luego ahora habían conseguido que desapareciese las escasas ganas de conseguirlo.

Se detuvo antes de llegar a la puerta de la biblioteca y miró al alemán.

-Kurt, yo...- miró a otra parte como si buscase las palabras adecuadas- siento lo ocurrido- ¿y ahora qué haría con Lia?Quizá ahora tenía menos simpatías que el apuñalador asesino ese. Cualquiera podría perder los estribos si...

¿Lia y TJ eran amigos?

Quizá, no lo sabía. No quería saberlo. Si algo así le pasase a Lia o a Chris no habría Europa suficiente para que corriesen ni celda donde pudiesen esconder a ese bastardo, si eso le pasase a Kurt él se defendería solo pero también tendría sus consecuencias y si la apuñalada fuese Kya...

-Tengo miedo por Lia- dijo en voz baja mordiéndose el labio.-Kyara está dentro, te sigo en un momento ¿vale? Tengo que reorganizar mi mente antes de explicarle qué ha pasado.

Me dejé arrastrar por Nya mientras la escuchaba murmurar, en parte me parecía gracioso pero tampoco era momento de reírse. Y al final nos detuvimos antes de entrar a la biblioteca.

Parecía confundida, aunque bueno, ¿Quién no lo estaba? y preocupada tal vez. Más de lo mismo.

-¿Sientes lo ocurrido?-Lo miré extrañado-¿A caso algo de esto es culpa tuya?

¿A que había venido eso?

-¿Miedo por Lia? ¿Por que se haya descontrolado? La verdad, me sorprende que se haya puesto así, pero tal vez solo quería darle una lección a Erik, yo también lo hubiese hecho, pero no se si soy capaz de controlar mi poder bien-Pensé unos segundos como explicarlo-Imagina que hubiese sido yo quien le hubiese empezado a dar una paliza con ostias a distancia y sin querer se hubiese desbordado mi poder o algo y lo hubiese aplastado-Me encogí de hombros-Creo que algo así le ha pasado a ella.

Entonces le puse mi mano sobre la cabeza como si fuese un cachorrito y la empujé hacia dentro mientras abría la puerta.

-No te preocupes, si no sabes como, ya se lo digo yo.-Sonreí y le guié un ojo cómplice.

Se abre la puerta y entro empujando "suavemente" a Nya de la cabeza con mi mano.

Al ver donde se encontraba Kyara levanté la otra mano saludándola.

-Sentimos el retraso. Ha habido un muerto, un huracán, fuego, hombres por las paredes, gente clavándose cristales y alguien hablando con un dragón.

Torcí la cabeza hacia Nya.

-¿Así te parece bien?

-Vaya, y yo aquí buscando el libro de los libros -dijo sonriente a Kurt- la verdad es que lo del muerto ya lo sabía, pero todo lo demás. Menuda fiesta, ¿eh? -negó con la cabeza y guió a Kurt y Nya hacia el sitio.

Cuando la chica llega al lugar se encuentra con una sorpresa, el lugar estaba perfectamente cerrado y seguro, incluso podia ver el libro, pero, el pequeño panel donde tenia que poner el codigo no encendia, era como si no le llegara electricidad, lo cual teniendo en cuenta lo que habia visto del castillo tenia logica ya que el unico lugar donde habia visto electricidad era en la camara frigorifica de Himiko

-¿Véis? El panel es inútil pues no hay electricidad, ¿y véis ahí? ¿ese libro? Ese es el que necesito más que nada, ¿vale? -miró a Kurt un momento- dime que puedes hacerlo o, Nya, dime que puedes reventar la cerradura y la puerta con hielo.

-¿Algo que ver?- bufó- no les quiero muertos, les quiero lejos de mí, Kurt-dijo mientras entraba en la cocina- pero tú sí has tenido trato con ellos y quizá te afectaba- miró a su hermana y puso morritos acompañándolos con una mirada de resignación.

-Es un buen resumen, no me puedo quejar- se encogió de hombros  e hizo un gesto con la mano uniendo el índice con la punta del pulgar dejando el corazón, anular y meñique estirados.

-Yo puedo intentarlo-intercambió una mirada con Kurt- pero no puedo asegurar ni que funcione ni que Himiko no nos use de desayuno... empezará por ti, manzanito, tienes pinta de tener más nutrientes- añadió inclinando la cabeza hacia él.

Sonreí por sonreír, sin realmente sentirlo.

-Estoy intentando mantener la mente fría...no se ni por que.

Me llevé una mano a la barbilla examinando la cerradura.

Bueno, se me ocurre una idea mejor. ¿Por que no la congelas y luego la golpeo? Creo que el frío lo debilitará, o al menos eso he visto en algunas películas. Lo que creo que no se si será lo suficientemente frío. Y no.-dije negando con un dedo poniendo cara seria-Cualquier responsabilidad sobre esto es vuestra, a mi me habéis torturado psicologicamente para hacerlo.

-Oh, acabas de estropear la sorpresa de mañana- amagó un puchero y se acercó a la puerta de la cámara. Dio un par de toques en el panel estropeado en plena apoteosis del razonamiento "si algo no funciona golpéalo".

Si funcionaba con el mando a distancia del dvd no veía por qué no iba a funcionar con un panel de cámara acorazada.

A veces me avergüenzo de mi propia metodología.

-Sería un buen momento para decir "eh, no os preocupéis, también puedo manejar la electricidad"- miró sobre su hombro a Kyara y a Kurt-Si Himiko se vuelve loca siempre podemos alegar enajenación mental.

Estiró la mano sobre la puerta, a la altura de su "mecanismo" de cierre, completamente anulado por la falta de electricidad e inspiró hondo. Solo la puerta, solo la puerta. Desde la punta de sus dedos se extendió una fina capa de hielo que ganó en grosor a medida que se extendía por la puerta.

-Tachan- retrocedió varios pasos- sin electricidad no hay método de alarma ni de autodestrucción, ¿verdad?- se metió las manos en los bolsillos del pantalón de uno de los finados.

Puse los ojos en blanco por su comentario y esperé a que congelase la cerradura.

-Bueno, bien, me toca supongo...

Me puse en linea recta y extendí el brazo dejándolo a medio metro de la puerta con la palma abierta. Cerré los ojos concentrándome y los volví a abrir.

-Que sea lo que tenga que ser...

Retiré la mano hacia atrás y luego rápidamente hacia delante como si le diese un golpe seco al aire y que este se expandiese hacia donde estaba la cerradura congelada.

La chica coloca su mano y siente como el panel y la cerradura se congelan, por su parte justo después Kurt mira hacia el lugar y tratando de controlarse usa su poder, en ese instante se escucha un golpe seco y la cerradura cae destrozada ante el fuerte golpe.

En el interior pueden ver como hay varios libros en varios idiomas que no entienden y uno que destaca, es el que las hermanas estaban buscando, sin embargo, al abrirlo se da cuenta que está en blanco

Kyara contuvo la respiración hasta que Kurt y Nya abrieron la cerradura, y entonces se adelantó mirando ese libro y, aunque estuviera en blanco, suspiró y lo abrazó- Vale, este libro es una joya, y ahora necesito a Chris -dijo a los dos presentes- y muchas gracias, solo espero que Himiko no se cabrée demasiado -frunció los labios, pues por su obsesión de recoger el libro que había escondido. no había pensado en las posibles consecuencias.

Al ver como la cerradura cede al golpe, exhalé una bocanada de aire.

Pero luego, al ver los libros y como el que parecía interesarle a Kyara era uno que estaba en blanco, no sabía que pensar. Pero lo primero que hice fue reírme.

-Debo admitir que la broma ha sido graciosa. Vale, ahora enserio ¿debo suponer que es un libro mágico o algo así y que no se puede ver lo que está escrito? Aun no he pedido explicación de todo esto, pero, lo admito, tengo curiosidad a como habéis llegado hasta aquí e interesaros por el.-Esperé una respuesta y luego señalé los otros libros que había dentro.-¿Y de esos sudáis?

-A mí no me mires, esos libros no son nuestros-se encogió de hombros. Kyara había dado mucho por saco con el temita del libro y Nyara no había terminado de captar para qué lo necesitaba si Kyara no era maga-ése-señaló el volumen que Kyara mantenía  entre las manos-se lo dio Janet y ella decidió esconderlo aquí-miró a su hermana con aire severo y sacudió la cabeza como si diese un caso por perdido-Chris estaba con Lia en una de las habitaciones. Abrígate, una de las ventanas está rota y entra frío.

Echó un vistazo a la cámara y decidió crear una nueva puerta de hielo que salvaguardase el contenido de manos ajenas.

-No me esperéis, esto necesita su tiempo-buscó la mirada de Kurt y guiñó un ojo-no querrás perderte qué demonios es el librito ¿eh? Gracias por ayudar a Kya- se acuclilló en el suelo y al tocar éste con las yemas de los dedos se centró en la creación de un nuevo portón.

Lentamene el hielo fue tomando la forma que deseaba, se notaba que estaba hecho de hielo pero era practicamente igual al que habia antes

Miré a una y a otra sin decir una sola palabra más. esperando que alguna dijese o hiciese algo. Ahora mismo me sentía un poco perdido en todo esto.

Entonces se abrió la puerta y entró Makoto, con no muy buena cara.

-Eh...hola.

Solo había entrado en la Biblioteca antes en una única ocasión, para despedirme del profesor Yamamoto.

Me fui del comedor hastiado, intentando no pensar en lo sucedido y tratando de borrar aquella imagen de mi cabeza. Me fui rápido y sin hablar con nadie, cómo si eso fuera a evitar que mi mente siguiera bombardeando con aquella imagen... el suelo manchado de rojo.

Por eso voy a la Biblioteca. Espero poder despejar mi mente en ese lugar, voy a tratar de averiguar algo sobre mi naturaleza y así mantenerme ocupado.

Recuerdo el lugar dónde estaba sentado el profesor Yamamoto y recuerdo que leía unos tomos antiguos, escritos en japonés, así que ahí es donde me dirijo.