Partida Rol por web

Las bestias y la jauría.

Vivo o muerto

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21/12/2009, 19:10
Director

Amanece de nuevo. Otro día más en en una ciudad que agoniza de dolor. Has visto en las calles muchas caras sombrías y como cada vez el mundo se ha ido volviendo más oscuro a tu alrededor. La policía se comporta de forma más tiránica por momentos, y puedes percibir que aquellos que cuidan de tu seguridad y portan armas están quizás demasiado tensos como para no representar un peligro de por si.

Despiertas con un terrible dolor de cabeza que te hace pensar que te has pasado con tu "medicación". Tu mirada aún turbia obserba a traves de la ventana una llovizna que acaricia la ciudad de forma constante y suave. Tienes el cuerpo hecho una mierda y un hambre voraz, pero algo te hace pensar que la nevera estara vacia.

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21/12/2009, 21:15
Sólo para el director

Tengo una soledad tan concurrida...tan llena de nostalgias y de su propio rostro que no recuerdo...De adioses de hace tiempo y de esos "bienvenido"...tengo una soledad concurrida que puedo organizarla en procesiones, tamaños, colores, epocas y tacto...

Amanece como siempre y el llanto del altisimo no hace mas que recordarle que de cierta forma se encuentra pateticamente drogado. La "medicina" se va disipando poco a poco y en un constante tamborileo se vuelve a recuperar la compostura. Por cierto tiempo observa desde su apartamento las calles concurridas por personas invisibles, por rostros inexplicables y por una constante y patetica obsesion por un lugar en el mundo. Pronto el instinto es mucho mas voraz que su propia tristeza, el estomago ruge y el se dirige a la puerta, sabe que aquel refrigerador ha estado extinto desde hace dias.

- Joder -reclama aquel despojo de hombre mientras se cubre con su bufanda negra y su tipica gabardina gastada de marca italiana  del mismo color para bajar por las escaleras y topar con la realidad -  El frio cala hasta los huesos, y esta maldita lluvia no hace mas que empeorar el ambiente...-.

Pronto, su misma figura se confunde con las demas personas, se hunde en la soledad mientras recorre las calles lloviznadas como si aquella lluvia hubiera sido su primer baño despues de mucho tiempo. Sopla sus manos para obtener un poco de calor, y de su bolsillo saca lo que posee en su cartera.

 

1.50 dolares.

 

- Justo lo necesario - dice mientras continua la caminata hacia la tienda ams cercana y en su mente el poeta imagianrio continua divagando-.

Los nervios se me adhieren al asfalto, a las paredes, abrazan los remajes, penetran en la tierra y se esparcen por el aire hasta alcanzar el cielo.

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22/12/2009, 13:17
Director

Caminando llegas a la tipica tienda de los chinos de veinticuatro horas. Chang, chong y chung... Los chinos y sus nombres que suenan a todos por igual... Son ruidosos a más no poder, como si de porteras con un tono de voz aun más desagradable se tratasen. Entras en la tienda y ya sientes como se te perforan los timpanos .-Chin c&hin fui. /*T%....-. Y otros misteriosos vocablos. El local esta lleno de productos caducados y de embases descoloridos. Estantes pequeños contienen productos de diversa indole Ni siquiera te miran al entrar...

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09/01/2010, 21:42

- Claro, ¿Para que mirarian a un ser humano en una ciudad tan enorme como esta? -Y desde entonces el recobre de primera persona renace en mi interior.

 

Les observo, y todos aquellos seres de oriente se disponene a habalr de frivolidades, noconozco el lenguaje, peor todos son iguales, sin excepcion, hablan de cosas vanas, vacuas y tontas. Yo meintras tanto doy unos pasos ligeros hacia el congelador y tomo un poco de leche caducada.

 

Da igual, el mundo se extingue y agota. ¿Porque no someterme a el? Me acerco hacia la caja y solo dejo el billete de dolar. No creo que haya tanta importancia.

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10/01/2010, 18:55
Director

Sales a la calle despues de haber pagado y de pronto un coche se detiene de forma brusca ante ti.-¿Te acuerdas de ese tio?-. Dice uno .-¡Eh drogata!...Ese es el que daba el coñazo a mi chica-. Se abre la puerta y se aproxima el tipico quarterback de universidad con un ego que no le cabe en el cuerpo acompañado de otros dos tipos que se creen la cossa nostra por haber importado la palabra bulling a la universidad más pija de Seattle.