Partida Rol por web

Las cenizas del nuevo mundo

Escena de Darren Brennan y Komoi

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14/05/2019, 17:05
Narradora

En esta escena podéis comunicaros con vuestro nuevo compañero cada vez que queráis (cada vez que queráis hacerlo escribiréis un post único con un diálogo referido expresamente a esa persona) mientras tanto, ambos continuaréis narrando individualmente en modo "solo director" aquellas escenas que no sean diálogos y que vuestro compañero no pueda ver.

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14/05/2019, 17:07
Darren Brennan

¡¿Hola?!, percibes cierta desesperación en su voz. Soy Darren. Darren Brennan. ¿Alguien puede oírme?, dice de modo más calmado. Hace treinta y siete días que estoy encerrado. Necesito saber si es seguro salir de este lugar. ¿Alguien me oye?

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14/05/2019, 21:29
Komoi
Sólo para el director

Frío. Lo primero que siento al salir al mundo es frío, un frío que se clava en el cuerpo hasta provocar dolor. También hay luz, mucha luz, una luz cegadora que lo inunda todo. El blanco predomina abajo y el azul arriba. El cielo y la nieve. La inmensidad.

Me tomo unos minutos para aclimatarme, absorto en el paisaje. Impresionado por la vastedad del lugar, parece ser infinito. Puedo mirar hasta muy lejos, no puedo ponerle escala, no tengo ni idea de cuánto puede medir esa montaña, o ese valle, es inmenso.

Cuando reacciono miro el mapa. Mi destino es Capileira, una pequeña población a unos veinte kilómetros siguiendo la serpenteante carretera. Calculo que tardaré unas cinco horas en recorrer la distancia, pero nunca he caminado tanto. Tengo muchas dudas. Por ahora mi plan es sencillo: ir hasta allí, averiguar lo que pueda, y volver mañana. Cada minuto que paso fuera del refugio me parece una eternidad. La inmensidad me abruma; me siento muy pequeño, y solo.

Cuando apenas he dado unos pasos escucho un ruido en la mochila. - ¿Qué... - me apresuro a abrirla y saco la radio. Alguien está hablando. ¡Hay alguien ahí! Tiemblo de frío, pero también de nervios y alegría. Unas lágrimas escapan de mis ojos y me apresuro a contestar.

Notas de juego

Me invento algunas cosas como los km que me separan de Capileira o el clima... sólo por darle chicha a esto. Si ves que me sobrepaso o que algo lo tienes pensado de otra manera edita libremente o tacha.

Respuesta directora -- No te has inventado nada, todo eso te lo dije yo ;) y si te lo inventas, pues no pasa nada, te corrijo y listo. No problem

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14/05/2019, 21:38
Komoi

- Hola Darren.

- Me llamo Komoi. Puedo escucharte. ¿Me oyes? *

- Yo acabo de salir al exterior. Llevo un traje anti-radiación. No sé decirte si es seguro o no.

- Lo que sí puedo decirte es que esto es precioso, ¡mucho más bello de lo que jamás lo hubiera imaginado!

Notas de juego

* presupongo que respondes sí, por no alargar mucho esto...

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14/05/2019, 23:49
Darren Brennan

Al escuchar la voz de otra persona, y dudar por un momento si no era una alucinación creada por su mente para satisfacer su necesidad de hablar con alguien, el soldado no pudo evitar suspirar de alivio, sabiendo que, si había otra persona con vida, también existía la posibilidad de que su hermana y su madre continuaran con vida. Al menos, eso era lo que deseaba creer en esa situación, o de lo contrario no sabía muy bien lo que haría. - Sí, Komoi. Puedo oírte. - Aseguró de manera amable, notando que el tal Komoi parecía ser bastante en joven, tal vez apenas en la veintena, o incluso más joven por lo que podía notar de su voz, en especial por medio de la radio, la cual podía ser bastante engañosa con la estática. - ¿Has salido de tu refugio? - Preguntó con cierta sorpresa, reconociendo que el muchacho tenía algo de coraje como para arriesgarse de esa forma, incluso si poseía un traje anti radiación. No obstante, si el chico se había arriesgado, no había duda de que él tendría que hacer lo mismo, si es que quería encontrar a su familia. - Los tienes grandes, ¿eh? - Dijo en un tono burlón, debiendo de reprimir su risa ante semejante comentario. Era bueno poder conversar con alguien, incluso si no pensaba permanecer mucho tiempo en el búnker, no cuando se había cansado de permanecer encerrado, y mucho menos cuando Komoi había salido por su cuenta, a pesar de los riesgos.

Sin embargo, la exclamación por parte del muchacho, hizo que Darren se sorprendiera por un instante, sin saber muy bien a qué se refería. Después de todo... ¿cuánto habría cambiado el mundo en lo que sería un mes de encierro. - ¿En serio? No debería ser tan diferente de cómo lo era antes. - Afirmó con cierta duda en su voz. Si había cambiado de esa manera, sólo podría significar que una gran parte de la población había muerto, por lo que era posible que la naturaleza se abriera camino, si bien... en tan sólo un mes... parecía difícil de creer. También era posible que el chico tan sólo estuviera apreciando la belleza del exterior, luego de estar, probablemente, el mismo tiempo encerrado en su refugio. - Creo que haré lo mismo que tú. Estoy en Cabo de Gata, Almeria... en un antiguo búnker. No sé si estás cerca pero... en el caso de que no sea así, te deseo suerte. - Se expresó con un tono que dejaba en claro lo decidido que estaba a abandonar su refugio, mientras comenzaba a meter todos los suministros que podían caber en una mochila militar. Se había hartado de esperar, no cuando su familia podía necesitarle, cuando debía de asegurarse de que estuvieran bien. - Ten cuidado. No sabes lo que puede haber fuera. Es posible que haya soldados enemigos. - Advirtió, sabiendo que aquello debería haber sido el ataque de alguna nación en particular, o al menos eso imaginaba. Desconocía por completo lo que había sucedido, excepto por algunos de los rumores que había oído antes de la catástrofe. - Voy a salir. Deséame suerte. Mantente en ésta estación. - Indicó de manera seria, ya que al menos podría darle algunos consejos al chico, si necesitaba su ayuda para algo. De momento, era hora de salir. Por un instante, guió su mano a su arma reglamentaria, no sabiendo muy bien si tendría que usarla, si bien no dudaría en hacerlo.

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15/05/2019, 08:31
Komoi
Sólo para el director

Al otro lado Darren parece alguien autoritario, habla firmemente, me recuerda a mis padres. Incluso intenta hacer alguna broma para "suavizar" la situación. ¿Qué hay que suavizar? Me da algo de desconfianza. Me dice dónde está, ¿acaso quiere que nos encontremos? ¿Por qué? Nos separarían unos doscientos kilómetros o más, y atravesando montañas. Cuando habla de soldados enemigos me asusta mucho. ¿Esto es una guerra? ¿Mis padres han muerto? Tengo miedo, mucho miedo.

Me quedo quieto. Inmóvil. Dudo si seguir adelante con mi pequeña gran aventura. No sé si volver a mi hogar. Noto que empiezo a respirar aceleradamente. Me hinco de rodillas en el suelo y apoyo las manos, me cuesta respirar. Y este frío... El exterior es peligroso; muy hermoso, pero también muy peligroso. Finalmente me tranquilizo y resuelvo continuar.

Anoto la emisora por la que me comunico con Darren, y pruebo con otras buscando a alguien más*. Luego vuelvo a la de Darren, pero no digo nada.

Camino durante una hora y paro a descansar. Me siento sobre una piedra al borde de la carretera. Hasta ahora el paisaje sigue siendo vastísimo, bello, y desolador. No hay nadie. Siempre pensé que el exterior sería más concurrido. Tengo miedo. Decido hablar con Darren.

Notas de juego

*¿hay alguien más?

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15/05/2019, 08:43
Komoi

/ una hora y pico después /

- Aquí Komoi.

- He salido porque los relojes decían que el exterior era habitable. Aún así llevo el traje. De todas formas pronto volveré a mi hogar.

- Creo que estamos bastante lejos, Darren.

- No he visto soldados enemigos, no sabría ni reconocerlos. No he visto a nadie todavía. Nadie...

- ¿Tú has salido? ¿Va todo bien por Almería?

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16/05/2019, 10:47
Narradora

No logras establecer conexión con nadie más aparte de Darren. Comienza a hacer viento, éste impacta sobre tu cuerpo, balanceándolo levemente. Cada paso que das te resulta costoso, caminar por la nieve en pleno Marzo no se te antoja demasiada buena idea, pero es lo que hay. A primera vista no observas que la zona en la que te encontrabas haya sido violentada. Avanzas, paso a paso, hacia lo que parece ser un camino, lamentas no estar en verano, pues la nieve ha cubierto las piedras que lo conforman y solo puedes guiarte por unos postes de madera que descienden colina abajo. 

Miras hacia atrás y esto es lo que ves.

 

Notas:

- Puedes comunicarte con Darren cuando quieras.
- Puedes elegir adónde ir, o bien buscar a tus padres o encontrarte con Darren en un punto intermedio.
- Tus padres se encuentran en Capileira (5 horas andando).
- Punto intermedio con Darren: Adra (Almería), a 3 horas en coche o 1 día andando.

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16/05/2019, 11:08
Narradora

Decides salir, contigo llevas tu arma reglamentaria y una mochila que te encargaste de llenar con provisiones. Cuando sales, a primera vista todo permanece igual, te extrañas pues el sonido de las bombas se te antojó desastroso. Al principio contienes brevemente la respiración, queriendo evitar el contacto del aire con tus pulmones, pero poco a poco, vas respirando de nuevo, tras 37 días allí encerrado, aire fresco y puro. Al menos es lo que alcanzas a saber. De momento no experimentas ningún tipo de reacción adversa.

 

Miras hacia la costa y éstas son las vistas. 

 

Notas:

- Te encuentras en Cabo de Gata (Almería).
- Aún no sabes dónde está Komoi.
- Tu familia se encuentra en el hotel Blanca Brisa de Cabo de Gata a 15 minutos andando.
- Debes decidir qué hacer. Ir hacia el hotel o buscar un medio de transporte antes.

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16/05/2019, 13:38
Darren Brennan
Sólo para el director

Armándose de valor, tras haber preparado su mochila con las provisiones que pudo guardar en la misma, decidió abandonar su refugio, con la mano sobre su pistolera, atento a cualquier soldado enemigo con el cual pudiera encontrarse en ese momento. No estaba seguro si continuaría con vida al salir, o si moriría por radiación o cualquier otra cosa que las bombas podrían haber liberado. Sin embargo, al salir y ver con claridad, disfrutando del aire fresco, notó que nada parecía haber cambiado en realidad, a pesar del ruido que las bombas habían causado. ¿Qué había ocurrido? ¿No se suponía que tendría que haber destrucción a su alrededor? – Al menos no me estoy muriendo… - Supuso que aquello era algo bueno, en especial porque no poseía un traje anti-radiación como Komoi, por lo que habría muerto si realmente lo necesitaba, una vez allí fuera. De momento, tan sólo permaneció allí parado, en la entrada del búnker, apreciando la vista, mientras ponía en orden su mente. No parecía haber nadie a su alrededor, ni tampoco señal alguna de actividad humana, si bien aquello era algo de esperar, teniendo en cuenta el sitio en el que se encontraba. Sí deseaba saber lo que había sucedido, tendría que moverse de allí. El hotel donde se había alojado su familia no estaba muy lejos de allí, si bien no sería una mala idea obtener un medio de transporte, en el caso de que fuera necesario. Sin pensarlo por mucho tiempo, no tardó en comenzar a caminar, con la intención de encontrar un medio de transporte. En lo posible, le gustaría encontrar su camioneta con la cual se había movilizado hasta ese momento, aunque no estaba seguro si estaría en buenas condiciones de uso.

Notas de juego

Post corto que me han cortado la luz por un desperfecto técnico y estoy desde el móvil xP 

Respuesta de la directora --> No hay problema! 

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16/05/2019, 13:40
Darren Brennan

Al escuchar la voz de Komoi, no tardó mucho en sostener su radio frente a él.

- ¿Relojes? ¿Qué relojes? – Preguntó sin poder comprender muy bien a qué se refería con ello.

- Bueno, si estás lejos, al menos ten cuidado, Komoi. No sabes con lo que puedes encontrarte. Sí estás armado, no dudes en usar el arma si te ves en peligro. – Aconsejó de buena manera, en especial luego de que el muchacho le dijera que no sabría reconocer a un soldado enemigo. ¿Cómo era posible algo así?

- No lo sé. Recién acabo de salir. Voy a buscar mi camioneta, y luego a mi familia. Espero no encontrarme con problemas en el camino. Aquí nada  parece haber cambiado. – Aseguró extrañado, ya que había esperado que las bombas hubieran hecho algo.

 

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16/05/2019, 14:36
Narradora

 

 Caminas por la playa, a primera vista parece   una ciudad maldita, desierta, pero   preciosa.   No hay coches, camionetas ni motos.   Solamente  barcas varadas en la   orilla. A   primera vista no ves a nadie.. ¿quizás estén   todos en sus casas?..

 

 

 

 

 Puedes volver por donde has venido o   continuar  avanzando por la playa, hasta   llegar  al hotel en el que estaba residiendo tu   familia.

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16/05/2019, 21:08
Darren Brennan
Sólo para el director

La visión de la ciudad desierta le cogió por sorpresa, ya que no había esperado no poder ver algo de actividad humana en la misma. No había nadie, una escena sin duda aterradora ya que hacía que imaginara lo peor para su familia. Sin embargo, también era posible que estuvieran dentro de sus hogares, incluso si había algo extraño en el hecho de no poder siquiera notar si había soldados enemigos en la ciudad. No había nada, ni tampoco podía escuchar alguna clase de sonido que le permitiera detectar la presencia de vida en su entorno. Lo peor de todo, yacía en la cuestión de que no había logrado encontrar su vehículo, lo que significaba que algún cabronazo le había robado la camioneta durante el caos por las bombas. – Hijo de puta.. – Murmuró cabreado mientras notaba que tampoco había otros coches o motos. Era como si todos hubieran optado por largarse de allí con sus medios de transporte, y los de otros, para escapar de las bombas. Aquello habría sido algo razonable, si no fuera que Darren se encontraba demasiado cabreado con el hecho de que le hubieran robado su camioneta. Si llegaba a descubrir al bastardo… se aseguraría de darle una buena golpiza que le enviará directo al hospital. De cualquier modo, suspirando, decidió que no había sentido en continuar pensando en ello, no cuando debía de preocuparse por su familia. Sin perder más tiempo, continuó su camino al hotel, decidido a buscar a su madre y a su querida hermanita. Tan sólo esperaba poder hallarlas con vida, o de lo contrario… estaba seguro que algo en él cambiaría. Su familia era lo único que le importaba. Con una mirada afilada en su rostro, desenfundó su pistola reglamentaria, dispuesto a usarla ante cualquier posible soldado enemigo, o alguien que deseara atacarle en el camino.

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16/05/2019, 21:36
Komoi
Sólo para el director

Continúo mi marcha descendiendo la montaña, siguiendo lo que creo que es una carretera cubierta por la nieve. Tengo frío, tengo miedo, la respiración dentro del traje es fatigante, pero no me lo pienso quitar. No veo señales de vida humana por ninguna parte. Por un momento me vuelvo y veo la montaña que se alza ante mí, por ahí debe quedar mi refugio. Es inmensa, es hermosa. El cielo se mantiene claro, y eso me tranquiliza: - al menos hace buen tiempo - pienso irónicamente, intentanto obviar el frío. - ¿Qué encontraré en Capileira? ¿Estarán allí mis padres? ¿Estará todo como siempre? ¿Habrá sido arrasado por esos soldados enemigos?... - tengo muchas preguntas, y me cansa pensar en todas ellas... debo centrarme en caminar.

Darren responde. Me habla de armas - ¿acaso estamos en guerra? ¿esto es una guerra? - parece tener miedo. Dice que va a buscar a su familia, igual que yo. Supongo que todos añoramos a nuestros seres queridos. Noto como si no nos comunicásemos bien, no nos entendemos, como con mucha gente de los foros de internet. A decir verdad nunca he comunicado bien con nadie...

Notas de juego

El objetivo de Komoi es llegar hasta Capileira, averiguar lo que ha pasado, y volver cuanto antes a su refugio.

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16/05/2019, 21:43
Komoi

- Los relojes junto a la puerta del refugio. ¿No había en tu refugio?

- No tengo arma. No creo que la necesite donde voy. Tampoco sabría utilizarla.

- Tengo mucho frío. El traje no abriga demasiado. ¿tú también tienes frío? Nunca he sentido frío, es raro.

- Aquí no sé si ha cambiado algo o si siempre ha sido así. Es hermoso. ¡La montaña es enorme!

- Yo también voy a buscar a mi familia. Pero voy caminando. Creo que hay una carretera bajo la nieve.

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16/05/2019, 22:59
Narradora

Apenas has avanzado unos metros más y divisas un cuerpo tendido en el suelo. Desde la distancia a la que te encuentras sólo atisbas a ver que se trata de una persona anciana, dada la ropa que lleva y lo que puedes ver de su cabello plateado, pues está de espaldas a ti. Te encuentras parado en la orilla, a expensas de reaccionar. ¿Deberías ir en su ayuda?.

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16/05/2019, 23:04
Narradora

Las comunicaciones por radio no funcionan (de momento) hasta nuevo aviso. 

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16/05/2019, 23:05
Narradora

Continúas tu descenso hacia Capileira. Tras un camino relativamente tranquilo y silencioso, llegas a la entrada del pueblo, donde, por suerte, se encuentra la casa de tus padres, o eso es lo que ellos te habían dicho al menos. Menudo lugar para una pareja de científicos, aunque seguramente se trate simplemente de una vivienda de paso que han estado usando para realizar las visitas a tu refugio.

La primera puerta a la derecha, ¡Debe de ser esa!, es igualita a la que ellos te enseñaron. Cuando crees que tu suerte es inaudita e insuperable, te parece ver al fondo de la calle a dos personas tumbadas sobre el suelo. Solo atisbas a ver sus cabezas, pues el resto del cuerpo lo tapa el edificio. En un vistazo rápido, jurarías que tienen la cara quemada, e incluso, con grandes flictenas, sus ojos parecen abiertos e inexpresivos.

 

 

¿Qué deberías hacer?, ¿probar suerte y abrir la puerta de tu casa o acercarte a ver qué les ha ocurrido a esas personas?

Notas de juego

Si quieres abrir la puerta de casa, debes realizar una tirada 1d10. Dificultad 1. Si superas el 3 puedes entrar sin llave, si la tirada es igual o menor a 3, deberás buscar otro sitio por el que entrar.

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17/05/2019, 00:26
Darren Brennan
Sólo para el director

Tras notar el cuerpo en el suelo, el soldado afiló la mirada, sin saber muy bien si aquello podía tratarse de alguien que necesitaba su ayuda, o una especie de trampa. Por lo que parecía, no se estaba moviendo, por lo cual, era posible que realmente necesitara de su ayuda. Además, por la apariencia, la vestimenta que llevaba, y el hecho de que su cabello era plateado, parecía que se trataba de un anciano. Habría sido muy cruel, de su parte, negarse a ayudar a alguien de esa edad, cuando era obvio que le había sucedido. Sin embargo, no podía actuar como un idiota y correr directamente a una situación de peligro, por lo que decidió acercarse lentamente. Al principio, observó a sus alrededores, esperando notar algo que pudiera advertirle sobre una posible emboscada, una trampa para atraparle desprevenido. - Ey... ¿estás bien? - Preguntó aunque sin llegar a acercarse demasiado, mientras mantenía su arma apuntando al anciano en cuestión. Nunca podía ser lo suficientemente precavido, por lo que era mejor mantener una distancia segura, de modo que no pudiera cogerle por sorpresa. Incluso si era físicamente más fuerte que el anciano, no quería decir que no pudiera estar armado o algo parecido. Después de todo, no debía de olvidarse que un cabrón le había robado su camioneta, por lo que nada le aseguraba que no hubiera otros bastardos que desearan robarle sus cosas. - ¿Puedes hablar o moverte? - Volvió a preguntar, esperando alguna señal de vida del sujeto. Si no se movía, se acercaría para ver si podía obtener algo de información para saber lo que le había sucedido. Luego, tendría que continuar su camino, ya que aún debía de preocuparse por su familia, por encima de todo. No podía darse el lujo de cuidar a todos.

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17/05/2019, 00:48
Komoi
Sólo para el director

Tras una interminable y agotadora caminata, por fin llego al maldito pueblo. Desde lo lejos no parece gran cosa; poco más que unas cuantas casas destartaladas apelotonadas en la ladera de la montaña. ¿Aquí vivían mis padres? - pienso incrédulo. ME adentro en sus calles y no veo a nadie. No encontrar a nadie por la montaña no me extrañaba tanto como esto. - Estoy en un maldito pueblo, alguien debe haber...- Darren no responde, he vuelto a hablar pero nada... tengo miedo. - ¿Estamos en guerra? No lo parece, todo parece estar bien, no hay explosiones ni tanques ni aviones bombardeando desde el cielo... - estoy pensando estas cosas, recordando violentos vídeos de youtube, cuando paso junto a una puerta que me resulta tremendamente familiar. - ¡Sí! - exclamo de alegría al reconocer la puerta de la casa que mis padres me mostraron en fotos.

Me dispongo a entrar cuando me percato de una siniestra presencia. Dos cuerpos, un poco más allá, tumbados, inertes. Me paralizo. Mi respiración se acelera. Me sudan las manos. Un par de lágrimas asoman a mis ojos. Corro hacia los cuerpos.