Partida Rol por web

Oh hablais de Masu ,si os llevare hasta ella samas -os dice la heimnin ,mientras cruzais multiples pasillos hasta un pequeño salon donde encontrais en el centro una geisha practicando una ceremonia del te.Esta al veros se levanta y saluda.

Mi nombre es Masu,samas.¿Deseabais alguna cosa?-os pregunta solicita la geisha

Masu -san, me llamo Matsu Mitsa, y no  quisieramos interrumpir su ceremonia del té, por favor termine, Luego  mis compañeros de viaje querrán  hablar con usted en un lugar más discreto de ciertos asuntos, que aquí no he de mencionar.

Y me quedo mirando, por si veo ojos indiscretos y gente rara en el lugar mientras mis compañeros preguntan e indagan a la Geisha.  

No hara falta cambiar de lugar .Lo que querais hablar lo podemos hacer aqui samas.

En ese momento veis que su mirada pasa por Siba Ito y se ruboriza.

"Interesante" Es la palabra que se me cruzo por la mente, cuando vi como sus mofletes tomaban vida, al centrar su atencion en mi yojimbo. Aunque en su momento dije que confiaria mi yojimbo para usar su espada, no pense que su otra "espada" nos seria de utilidad, deducido esto, me puso la mano en la nuca, como precaucion para cierto "dolor" recurrente.

-Lo cierto, es que queriamos que usaras vuestras "atenciones" con nuestro querido compañero, el señor Shiba.- Explique mientras me sacaba el abanico. Si iba hablar de cosas sucias, lo mas apropiado seria taparme la boca, como minimo.- Ha tenido una semana muy dura, y tanto su cuerpo y espiritu, necesitan descargar las malas energias, y por lo que hemos oido, usted es experta en tratar aquellos del clan Fenix.

Y mientras la geisha, analizaba las ventajas y desventajas de servir a mi yojimbo, me incline sobre este, con el abanico ocultando mis labios, para susurrarle algo al oido.

-Nos sera mas facil sacar la informacion, si somos solo uno de nosotros, y aun mas, si creamos un vinculo de confianza. Solo recuerda, detras de todo honor y rango, se encuentra una mujer o un hombre.- Dandole a entender, que eso incluia las geishas, aunque muchos dijeran que no eran, ni serian nunca, personas.

Mi paciencia se agora y la sangre del clan león me se sale por las venas por todos los dioses se hace tarde y no hemos comido ni descansado desde esta mañana así pues con esta idea en la mente y pensando una treta para intentar sacar información lo más sutil posible y no poner en peligro el honor de nadie me acerco al oido de la geisha   la saludo y le comento en susurro,  "Masu-san   busco a un familiar lejano se llama  Asako Kondou un joven bibliotecario. y le digo que Paso por aquí para descansar en su viaje hace poco. Portaba un importante documento para mi familia sobre unas tierras y titulos  El documento tiene el sello del mon isawa y una firma reciente .Es facil de reconocer. Mi familia estaría eternamente agradecida si decidiera colaborar ya que esas tierras eran esperadas de hace tiempo" También pongo un sello de complicidad entre ambos.

"Le estoy confiando un secreto familiar y desearía ser correspondida con su confianza también dándome la información que pueda tener"

La geisha os mira con cara de no saber que hacer peus cada una le comentais una cosa.Una le habla sobre su familia y otra sobre el shiba ,parece algo nerviosa desde hace poco eso si.
-¿Pero samas que quereis?

En contra de toda etiqueta, honor o porte, me llevo una mano a la cara, agachandola, incapaz de sostener la mirada con quien sea. Esto no iba funcionar, no, me importara poco si era de vital importancia unir los clanes en una meta comun, esto. No. Iba. A. Funcionar.

-Abuelo, dame fuerzas.- Suspire hondo, alzando la cabeza, intentando mira a la Geisha sin enrojecer mis mejillas de la verguenza.- Si, se me olvido comentaros, aqui mi compañera leon, viene por motivos distintos. Disculpad mi incompetencia, por no deciros esto antes, señora Masu.- Me disculpe como pude, esperando que la joven se calmara y procesara lo que ocurria.- Si sois tan amables ¿Podriais primero, responder a su pregunta?

Había escuchado leyendas de Geishas muy aviles y con experiencia en tratar todo tipo de clientes y situaciones, ya que sus servicios así lo requerían muchas veces, pero esta parecía la Antitesis de las Geishas, ya que su reacción y sus sentimientos de sorpresa dejaron que se viera en su rostro y palabras eso podía ser fatal para una geisha . ( Tal vez lleve poco tiempo en este oficio, pensé soplando un mechon pelirrojo de mi frente)

le volví a insistir en la importancia del asunto.

Me acerco para que mis palabras no se escuchen más fuerte de lo necesario. 

Masu- san busco a un familiar lejano se llama  Asako Kondou un joven bibliotecario. y le digo que Paso por aquí para descansar en su viaje hace poco. Portaba un importante documento para mi familia sobre unas tierras y titulos  El documento tiene el sello del mon isawa y una firma reciente .Es facil de reconocer. Mi familia estaría eternamente agradecida si decidiera colaborar ya que esas tierras eran esperadas de hace tiempo" También pongo un sello de complicidad entre ambos.

"Le estoy confiando un secreto familiar y desearía ser correspondida con su confianza también dándome la información que pueda tener"

-Yo,yo no se nada de ningun Asaku,Matsu-sama .Hace mucho que nadie de ese clan nos visita no tengo idea-responde algo nerviosa.

Miente, o eso creo, quizas su nerviosismo se debia a la presencia de la Matsu, cualquier pareceria culpable de matar al propio emperador, ante tan imponente figura. Decido no actuar, sacando mi abanico mientra observo con detenimiento la geisha, y viendo como prosigue la interrogacion. Si, por un acaso, la leon se digna de mirarme en busca de mi ayuda u opinion, solo me encogere de hombros de manera inocente.

"Has faltado tu promesa de confiar en mis palabras y mi habilidad como mediadora, y has actuado por tu cuenta propia sin ninguna consideracion. No esperes que te ayude, a salir del entuerto que tu misma has provocado." Pense para mis adentros, dejando que la conversacion siguiera su curso.

Había visto esa reacción antes, en las luchas y batallas cuando el adversario sabía que estaba entre la espada y la pared.

Parecía esta la misma situación eso reflejaba los ojos de la Gehisa Masu.

-Masu- San, Veo que sus ojos hablan distintos a su palabras, yo no soy muy puesta en palabras ni en paciencia, y por eso alabo a las personas que lo tienen como he contemplado en Isawa Kyosoku-Sam, la admiro pues nunca podre tener ese arte en palabras y paciencia que tiene ella, pero si que soy capaz en un combate de mirar a los ojos de mi adversari@ y ver lo que estos me dicen y usted señora mía nos oculta algo más.

¿Quiere que hablemos ahora en privado, tal vez se sienta más tranquila así? - le cojo deli cada mente la barbilla y me quedo mirando sus ojos, para que entienda que leo en ellos su miedo. 

Me acerqué con tranquilidad a la mujer. Mi aspecto sosegado y tranquilo tal vez podrían ayudarla a sentirse confiada y tranquila, o tal vez mi complexión le haría sentise lo suficientemente poderosa como para doblegarme. 

No es necesario asustar a la hermosa flor, no es necesario asustarla. Sabe que cuanto diga quedará entre nosotros, y que no le tendremos en cuenta este pequeño descuido, pues es por el bien mayor del Imperio.

Ahora estaba asustada. Tal vez el contar los secretos de alcoba no fueran formas de las geishas, pues eran conocidas por su discreción, pero siempre había formas de hacer que una mujer hablase por el bien de su casa, su familia o algo que apreciase.

Veo como se acerca el compañero Kitsu y le intenta tranquilizar con dulces palabras.

"tal vez una voz masculina la tranquilice y le de más confianza y seguridad para contarnos lo que sabe, pense"

Ahora eramos dos los que le intentabamos darle seguridad a la Geisa.

-Samas,pero no se de que hablan ,yo no tengo nada que decir de eso,no se nada de ningun documento ni nada por el estilo yo...