Partida Rol por web

Mientras hablais y deliverais, buena parte de los guardias heimin vuelven a sus puestos de rutina, mientras el samurai escorpión parece impaciente porque os decidáis a dejar las inmediaciones de la puerta hacia un lado u otro.

Si pretendéis algo en ese agujero, no os recomiendo que vayais como si fuérais magistrados. Sobretodo si no lo sois. Asustaréis a quienes busquéis, enfadareis al yoriki de la zona y llamareis la atención de cuantos criminales pudiera haber(si es que los hay de verdad) Bajo la máscara era dificil decir si sonreía o algo similar pero su tono de voz era bastante sarcástico y no se esforzaba por ocultarlo. Os diré algo por si no lo sabeis, el distrito pescador, y las cuevas cangrejo no es excepción, los incendios no son raros. Y los oficiales antincendios son muy apreciados y respetados-Aunque su tono hace más entrever temido que respetado-Estar de buenas con ellos es una buena idea y la gente de allí lo sabe, y se esfuerza porque estén cerca cuando hay problemas. Lo que quiero deciros es que procureis ser discretos, y si vais a serlo puedo hablaros de alguien que suele enterarse de algunas cosas de su barrio. Aunque no estaría bien juzgarle, no tiene la entereza de un samurai.

-"Entonces esta decidido-comente de golpe- pediremos su colaboración a los oficiales anti incendios, no se negaran con tal de ayudarnos y es mas, hasta de seguro estarán agradecidos, de esa forma podremos ir los 6 sin llamar mucho la atención, les parece bien? Pues espero que si porque deberíamos de ir despejando la puerta..."- 

A ver a ver a ver que aquí una se quera mirando un rato las hermosas flores y ya la quieren mezclar con gente de la peor calaña. Jamás me he encontrado entre gente de ese estilo y no me hace gracia la idea de ir. Pongo los ojos en blanco, trago saliva y asiento.

Mi papel es observar todo lo que sucede y así lo hago.

Obviamente no me parece bien lo que dice Bayushi Kyo pero me limito a mirar a Haku y comprobar una vez más que está por aquí cerca.

También podríamos convencer a alguien que lo hiciera por nosotros.. y que llamara menos la atención sugiero mirando a los presentes. En mi mente suceden escenas horripilantes en el distrito pescador y definitivamente no quiero ir a un lugar donde pueden reunirse aquellos que con alevosía y un poco de mala mano se han llevado a nuestra magistrada.

He perdido un poco el hilo  y no sé si Haku ha escuchado lo que le he dicho. Carraspeo y saco mi abanico para darme un poco de aire. Doy un rodeo a la zona en la que estamos, observando.

Mientras me abanico aprovechando el movimiento de la mano y que están todos pendientes de qué hacemos, le susurro con la mayor de las delicadezas y el disimulo.

No sé si lo habréis intentado... incentivando con algo a este... señalo disimuladamente al misterioso Escorpión con un gesto de cabeza y continuo abanicandome, para después seguir dando la vuelta a la zona.

Okita asiente tanto a los comentarios de Kyo como a los de Midori. Tras eso, mira directamente al samurai escorpion.

-Me alegro de que al fin podamos conseguir algo por donde seguir, informare a Momiji-sama positivamente de eso. Sin embargo Midori tiene razon, en que pese a que la mayoria de nostros podemos movernos por los peores lugares sin miedo, no es un sitio adecuado para ella. Agradeceriamos cualquier ayuda que nos puedas dar con tu contacto en los anti-incendios, es mas, estaremos gustosos de ayudarte con cualquier gasto "monerario" que eso pueda suponer, al fin y al cabo, estamos pidiendote tanto a ti, como a un oficial anti-incendios que descuiden levemente sus labores por nuestra causa, y que menos que recompensarles de la forma mas rauda cualquier ayuda extra mas alla del deber que nos den.

En la mente de Midori se enciende una bombilla No me entrenaron mal en la escuela... acabo de conseguir que hagan por mi lo que yo quería... sonrío internamente.

Pero la paciencia es una virtud y lo mejor será esperar la respuesta de los demás... para ver si coinciden, si no lo mejor será trabajar en ese aspecto para mejorar...

Asiento ante el comentario de Okita y termino mi paseo para finalizar junto a Haku. Segura.

Me gusta la idea de no tener que ir a ese lugar. Miro al escorpión que nos está dando la información.

Entiendo perfectamente lo que Midori pretende señalar con esas palabras. Y me arrepiento al instante de las mías. Estaba claro que a ella no le iba a gustar ir a semejante barrio. Cuando se acerca a mi, la miro y agacho la cabeza levemente a modo de disculpa. Ha tenido la deferencia de no contradecirme y dejarme en evidencia.

- Así además podríamos aprovechar para informar a nuestros superiores. Estoy seguro de que aguardan impacientes noticias sobre el asunto.

Y seguro que Midori agradece un minuto de tranquilidad rodeada sólo de amigos.

Jin se mantiene callado, observando la escena en su lado. Los sentimientos contradictorios le abordan por todos lados. Sobre todo, se siente incómodo por la frialdad con la que le tratan los dos samuráis de su clan. Pensaba que la relación había empezado bien en el jardín, pero pronto parecía haberse enfríado hasta la temperatura a la que se forma el hielo, si es que alguna vez estuvo tibia. Por otro, se sentía alegre de no estar rodeado de Escorpiones y estar con gentes de su Clan, que fríos o no, no le traicionarían a las primeras de cambio.

Fuese lo que fuese, se mantendría callado y escucharía. Pese a su habitual caracter dicharachero, los acontecimientos de las últimas horas le habían oscurecido el carácter. No tenía mucho que añadir, por lo que esperaría. Si tenía que volver a informar, lo haría. Si tenía que ir a otro lugar, lo haría. Pero no tenía intención de volver a quedar sólo con los Escorpiones maquinadores que, pese a su aparente colaboración e, incluso, simpatía, no hacían que Jin levantase sus sospechas sobre ellos. Sabía demasiado sobre cómo se las ingeniaban éstos para liar las cosas.

El escorpión se os acerca un poco más y baja varios tono el tibre de su voz haciendo que casi sea audible sólo a vosotros.

No es exactamente entre esos grupos, pero ese conocido mío suele tenerlos cerca; ese hombre es un desastre en todos los sentidos pero es una compañía agradable en ocasiones y su casa siempre está abierta para lo que gusten de distraerse. Con fortunas y vientos. En su casa seimpre hay gente y las lenguan se desatan en esa familiaridad.

Si, efectivamente no era una propuesta demasiado limpia. Parecía una casa de juesgos clandestina por lo que dejaba entrever. Aunque su tono afortunadamente daba la confianza de no ser un lugar deasiado problemático; seguramente ese hombre pagaba a alguien para no ser molestado por las autoridades.

Después El escorpión habló con voz normal y agradecida. Desde luego si son tan piadosos para desprenderse de algo como donación para que puedan restaurarse algunas zonas dañadas de la ciudad, no tengo el ánimo contrario a indicarles rutas y lugares en la ciudad dónde satisfagan su curiosidad. Es lo menos que mi gratitud me impone.

Pensaba que los grullas maquineros se dedicaban a esquivar con piruetas las reglas del honor, para que sean otros las que as infrinjan y así no perder honor (si se plantea bien)

Pero si me dices no, que manipular/instigar a alguien que lo haga, sin decírselo explícitamente también conlleva pérdidas de honor, pues nada, retiro lo dicho.

y por lo que tenía entendido que se me habia dicho en la tirada de percepcíón xD igual he leído mal, al escorpión le iban los sobornos xD vamos que no me lo he sacado de la manga xD

Con esto quiero decir, que yo creía que un grulla así se podría llevar, nada más xD pero vamos que no quiero perder honor gratuítamente xD

En cuanto escucho al escorpión doy un paso hacia Okita y le tomo cariñosa y delicadamente del brazo.

- Creo que podemos encontrar nosotros un lugar... adecuado para depositar todo nuestro buen interés miro a Okita y luego miro al escorpión extrañada, muy extrañada.

Muerdo mi lengua, bajo la mirada, espero unos segundos y vuelvo junto a Haku meditando seriamente lo que acaba de pasar. Luego carraspeo pensando en la falta de decoro del escorpión al hablar tan abiertamente de sus contactos de dudosa honorabilidad y en qué pasaría si dicha información llegara a oídos de sus superiores.

Aparto todos esos pensamientos y maldigo el malentendido... ¿pero como ha podido confundir incentivo con soborno?

Miro a Jin que ha permanecido callado todo el rato. ¿Qué estará pasando por su cabeza?

Un brillo extraño recorrio los ojos de Okita.

-No veras ni una sola pieza de metal, y nos contaras ahora mismo todo lo que sabes. Acabas de despejar mis dudas, delante de 5 testigos, de que has ocultado deliberadamente informacion a samurais a las ordenes directas de Momiji-sama, hasta que se te ha ofrecido un incentivo economico. De igual forma, has insinuado tu relacion con actividades ilegales que nos has denunciado a las autoridades, y lo que es peor, has retrasado una investigacion en la que hay una vida en juego. Todas estas acciones son mas que suficientes para degradarte de este puesto. Danos ahora mismo toda informacion que puedas darnos y vuelve a tu puesto, o yo mismo te arrastrare a la oficina del magistrado mas cercana para que den cuenta de ti y de tus vergonzosas acciones.

Observo sorprendido la reacción de Okita. No sé si los agasajos de Midori le han hecho crecerse, pero no me esperaba una actitud tan agresiva. Y menos que un escorpión se alterase de tal manera. Y menos por referirse a negocios turbios, cuando todos sabemos que los escorpiones están metidos hasta el cuello en esa clase de asuntos. En cualquier caso, me encojo de hombros y doy un paso al frente para interponerme entre Midori y los samurai. Que lo mismo no se toman muy bien las amenazas del Soshuro.

La situación se había vuelto realmente tensa y seria, las palabras de Okita no eran para tomarlas a broma y el escorpión reaccionó instintivamente llevando su mano a la saya presto para sacar su alma de su vaina.

Los guardias heimin responden a la situación acercándose con precaución al samurai escorpión con intenciones de cubrirle, excepto uno que se adentra en el edificio de la guardia.

Okita no hace un signo visible de cojer su arma, pero mira friamente y sin pestañear al escorpion.

-No cometas una estupided, acepta tu error y sus consecuencias, no me obligues a verte morir sin honor. Dile a tus hombres que depongan cualquier actitud agresiva... y colabora antes de que sea demasiado tarde para ti.

La actitud de Okita era glacial, aunque sus ojos reflejaban una ira interna.