Partida Rol por web

Live Without Limits

Día 1 - Bienvenidos a Westworld - Sweetwater

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19/03/2017, 11:34
Narradora

Sus pies se encuentran sobre el polvoriento tablado de madera que supone la estación de Sweetwater. A su lado los compañeros con los que parece que comenzaron aquella loca aventura, a sus espaldas el tren aún humeante y ante ellos una ciudad entera llena de vida. Las gentes van de acá para allá, en sus quehaceres y tareas, ajenos a los recién llegados. O no tanto, pues un hombre que carga un saco de harina saluda a las señoritas tocando el ala de su sombrero y con media sonrisa pícara.

En la estación hay cofres y cofres de equipaje que debieron ser bajados del tren y esperan a ser transportados. Frente al apeadero se extiende lo que parece la calle principal del lugar.

La ambientación va más allá de una vestimenta de un parque de atracciones, solo con estar en ese escenario podían sentir y respirar el salvaje oeste. El polvo que levantaban los caballos al pasar les recordaba lo seco del lugar y las montañas a lo lejos que debían encontrarse en mitad de una planicie.

Las casas son de madera, de madera de verdad. Aquello está muy alejado de ser construcciones de hormigón de pega, con maderos pegados para intentar aparentar. Todo estaba construido como entonces. Como ahora. Están en el salvaje oeste y de eso no puede haber ninguna duda. Subir a aquel tren debía haber sido como un viaje en el puñetero delórean, pero con un trayecto más suave.

Aquello era como ser figurante en una película del oeste, solo que aquí no se veía trampa ni cartón detrás. No había cámaras. No había gente vestida con cosas que desentonasen. Ni fijándose en los detalles podían ver algo fuera de sitio o posterior al siglo XIX. Ellos mismos habían dejado todas sus pertenencias modernas atrás. 

Aquí y allá hay algún soldado, vestidos con el uniforme del ejército de la Unión. Parecían dan propaganda para unirse a la causa, allá por la calle mayor de Sweetwater. Mientras delante de ellos cruzaba gente montada a caballo con prisa y alguna diligencia.

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19/03/2017, 11:39
Teddy Flood

El nuevo sheriff, acostumbrado a los ires y venires de lugares como ese, da un par de pasos para entrar en la calle mayor. Antes de seguir su camino se detiene y se gira, esbozando media sonrisa de galán. Era el típico héroe de sombrero blanco.

-Ya saben, si quieren echar una mano, pueden seguirme. Nunca está de más tener a un par de hombres justos del lado de la ley- dice solemne. Invitando, tras lo hablado en el tren, a ser seguido y quizás ir a atrapar a algún forajido. -Señoritas- toca el ala del sombrero, como despedida cortés a las damas y sigue sus pasos, en busca de la garita del sheriff.

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28/03/2017, 08:12
John Smith (Vicente Navarro)

Y por fin puse pie en destino. Me tomé unos segundos para admirar el lugar, los detalles. Y cómo no, insconscientemente tomar referencias para orientarme, tal y como solía hacer de normal al llegar a un sitio nuevo.

Abrumaba un poco el sitio, y el ambiente era bullicioso para tratarse de un pueblo o pequeña ciudad, pero claro, no habían televisores, aquí la gente debía de hacer vida social en la calle.

Aquí a pie de calle pude ver de nuevo a algunos con los que llegué, pensaba que ya no los volvería a ver y en todo caso me preguntaba por cuanto tiempo, supongo que algunos no tardarían en dispersarse.

Anoté mentalmente las costumbres de levantar o tocarse el sombrero ante el paso de las damas, como primer objetivo tenía el de “donde fueres haz lo que vieres”.

Como ya había hablado con el nuevo Sheriff y lucía una esas estrella en el pecho, ya tenía algo que hacer – Vamos pues – Y me puse a caminar al lado de Teddy Flood.

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28/03/2017, 11:18
Sophie Madison

Había estado intentando que alguien que no fuera el hombre que estaba tras la barra me proporcionara algo de información, pero la verdad era que ya me lo había contado todo él y el resto se limitaba a decirle lo mismo pero de otra manera.

- Pues vaya...

Me había intrigado aquello que se suponía que había lejos de la civilización y que se suponía que era tan peligroso, pero para ser sinceros, no me creía tan valiente como para ir a ver qué había. Además, ¿con qué dinero íbamos a contratar hombres como había dicho el tabernero si nos habían dado cien pavos? Claro que en la época eso sería mucho dinero ¿no? No lo tenía nada claro.

Al bajar del tres y observar a mi alrededor me quedé con la boca abierta. Aquello estaba demasiado logrado.

- Al menos estamos en el bando molón. - Dije observando las ropas de los soldados.

Un hombre habló y lo observé tranquilamente.

- ¿El Sheriff era el tipo al que no había querido hablar por si no era... por si era...? - Bueno, aún no tenía claras las cosas en mi cabeza. - Por si lo habían diseñado y no era una persona como yo.

Fruncí el momentos después, pero más para mí misma que para otra cosa.

- ¿Estoy siendo "racista" con lo que sean esas cosas que no son iguales que yo? Me parecía que lo había sido y eso me hizo tener algo de remordimientos. No creía que hubiera aún una palabra para los que odiaban lo que no fuera humano, pero yo no quería formar parte de aquel grupo. Intentaría no volver a hacer algo así.

- Eso es.

Tras mi bronca mental conmigo misma, observé entre las maletas a ver si nos habían dejado alguna.

- Una mujer necesita... ¿enaguas limpias? - Negué con la cabeza. - Esto es ridículo.

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28/03/2017, 13:44
Narrador

- ¿con qué dinero íbamos a contratar hombres como había dicho el tabernero si nos habían dado cien pavos? Claro que en la época eso sería mucho dinero ¿no? No lo tenía nada claro.

Notas de juego

Mira la sala Extras Varios para orientarte respecto a los precios. Cualquier duda estamos por aquí.

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28/03/2017, 15:51
Rick Hyung Adams

Bien, por fin había acabado el viaje en tren y habían llegado a su destino. En efecto, era un pueblo ambientado en el Lejano Oeste, un parque temático en el que todo estaba muy bien recreado. Había gente laboriosa por todas partes, haciendo lo que se suponía que debían hacer: asegurar una experiencia inmersiva al visitante; dar verosimilitud al entorno; convertir el atrezo en algo vivo.

Rick se caló el sombrero al salir del tren para evitar el sol e hizo un movimiento automático para activar su holorreloj y revisar su agenda para mañana. La costumbre. Por un instante había olvidado que no lo llevaba, y era una lástima.

¿Y ahora qué? –preguntó.

Reconoció a algunos de los invitados, todos disfrazados para la fiesta temática del Salvaje Oeste. Y alguien que se decía sheriff se alejó con una oferta de trabajo. Rick imaginó que «ayudante del sheriff» debía de ser una de las atracciones o actuaciones del parque. Muy divertido, seguro, pero en ese momento Rick empezaba a desear que de una maldita vez se acercara alguien de Delos a explicar de qué narices iba toda aquella parafernalia.

Bajó del andén y se puso a caminar lentamente hacia la calle mayor, observando el movimiento. En algún sitio habría una oficina de información para el turista, o algo de eso.

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28/03/2017, 16:54
Narrador
Sólo para el director

Notas de juego

Atenta Rifuru.

Recomiendo dejar al Chino en medio del duelo de vaqueros.

Que silben las balas a su alrededor (hazle tirar FRIALDAD vs Dif 15 - debe tirar 1d10 sumar su valor de FRIALDAD y si NO supera la tirada de dado estará JODIDAMENTE ASUSTADO).

Puedes amenizar el asunto haciendo que se salpique con la sangre del vaquero que muera en el duelo.

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28/03/2017, 22:20
Douglas Merry

Luciendo su flamante estrella de ayudante del Sheriff sonrío a mis compañeros de viajes.

- Mirad, sí que es cierto lo de que es la tierra de las oportunidades.

Miro a mi alrededor. Es simplemente deslumbrante. Bueno, quizás deslumbrante no sea la palabra adecuada. Espectacular, abrumador, magnífico. Y lleno de polvo. Tan auténtico como podría ser el verdadero salvaje Oeste.

Comienzo a caminar detrás de mi nuevo jefe:

- Yo ya me he apuntado a una atracción. - informo a mis compañeros - Pero supongo que hay sitio para algunos más. ¿No os apetece jugar en el bando de los buenos?

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29/03/2017, 00:40
Sophie Madison

Parecía que había quien ya se había animado a formar parte de aquello.

- ¿Ayudante del Sheriff? - Se me escapó la risa.

No sabía yo si le veía mucha pinta de hacer frente a un tío que viniera apuntándole con un arma a lo Billy El Niño, pero oye... al menos no se iba a aburrir.

- Yo iría, pero estamos en el Far West y soy mujer. - Puta mierda. - El próximo viajecito a ver si puede ser en un lugar donde no haga falta tener nada colgando para tener voz y voto.

Entre que no iba a haber un baño decente y que iba a tener que pelearme con los cerebros de ameba de todos los hombres del lugar, me estaba apeteciendo como que una mierda continuar con aquello.

- Bueno, ¿nos han dejado maletas o estamos con lo puesto? - Igual alguien sabía responderme.

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29/03/2017, 04:35
Sarah Winters

Aquello era como un sueño. Al bajar del tren lo hice mirándolo todo alucinada. Todo era... Bueno, mucho más de lo que esperaba, y eso que con toda la expectación que habían generado esperaba mucho. No era sólo que el decorado fuese bueno, que también, sino que todo el mundo de verdad parecía estar haciendo su vida. Era increíble. Probablemente y por muy bien que nos hubiéramos disfrazado nosotros seríamos los que más llamásemos la atención, aunque sólo fuera por cómo lo mirábamos todo. En mi caso, seguro con un poco de cara de boba.

Me había costado, pero al final había elegido un vestido azul y negro y de un largo que arrastraba ligeramente. Si me paraba a pensarlo me daba un poco de pena que se manchase, pero en aquella situación eso era lo último de lo que me daba cuenta. Dejaba mis brazos y hombros al aire, tenía ribetes en el escote, y la verdad es que con el corsé que llevaba debajo se marcaba un poco más mi escasa figura. No es que me creyese una belleza y es verdad que me gustaba arreglarme, pero aquella vez había sido distinto. Había sido una pasada. Llevaba también unos mitones finos y de color oscuro y un pequeño bolso a juego. La verdad es que en cuanto bajé del tren una de las cosas que quería ver era cómo iban los demás, en especial ellas, pero con todo lo que teníamos alrededor era imposible centrarme.

Al ver la sonrisa del hombre de la harina puse los ojos en blanco inevitablemente. La verdad ,aquello empezaba a preocuparme. Fue distinto, eso sí, al ver al hombre del tren. Entonces fue mi sonrisa la que hizo una escueta aparición y tras escuchas sus palabras le dediqué un saludo. Pensándolo bien, me daba un poco de pena que sólo los hombres estuvieran invitados... Pero era lo que se podía esperar de esta época, claro.

Estaba pensando justo en eso cuando Sophie lo puso en voz alta, y de una forma que hizo que mi sonrisa se ampliase. Me acerqué un poco a ella, buscando con los ojos a Ethan entre los demás. No sabía qué diría al verme así, y quizá prefería no averiguarlo. Pero bueno, si íbamos a vivir sin límites, empezar con ese tipo de pensamientos no era lo adecuado. ¿Qué habría dicho Jon?

—No... No lo sé —respondí, insegura—. Supongo que podemos preguntar. —Me quedé entonces en silencio, pero ese silencio se convirtió en sólo una pausa al recordar las últimas conversaciones que había tenido—. Esto es como un juego de rol, ¿no?

Notas de juego

Algo como esto.

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30/03/2017, 02:30
Ethan Bullock

Cuando salí del vagón y miré alrededor mis cejas se alzaron en un gesto impresionado. Y es que joder, a esas alturas ya me había quedado claro que esta gente cuidaba los detalles, pero me esperaba un parque temático, con sus atracciones y sus restaurantes, todo muy de cartón piedra y hormigón disimulado. Y no. Aquellas casas eran de madera y el polvo que había por todas partes era real, muy real. Quizás en eso se habían pasado un poco. En otras circunstancias no me habría gustado en absoluto moverme por un lugar tan sucio, más en contraste con el lugar blanco y limpio del que venía, pero en ese momento estaba tan encantado con lo real que parecía todo que decidí pasar por alto el detalle del polvo.

Así que mis labios se curvaron en una sonrisa encantada con lo que veía y no tardé en empezar a caminar por la estación hacia las personas que había reconocido del otro tren con paso seguro, molándome a mí mismo.

Y es que me sentía cojonudamente bien con el disfraz que había escogido. Llevaba un traje marrón de pantalón, chaqueta y chaleco grueso a juego, con camisa blanca debajo. En la cabeza un sombrero marrón y en los pies unas botas de vaquero, de esas que llevan unas espuelas detrás. También me había puesto en el cuello un pañuelo a juego con el sombrero y en el bolsillo del chaleco llevaba un reloj de esos antiguos que van engarzados a una cadenita. Y para rematar, de mis caderas colgaba la funda de una pistola. La notaba golpear mi pierna con cada paso y me sentía un puto pistolero de película vieja. 

Vi al tipo que había conocido en el vagón alejándose, pero ni se me pasó por la cabeza seguirlo después de esa última mirada de «Sólo ante el peligro» que me había echado antes. Ni hablar, pasando del sheriff. Yo había ido allí a «Vivir sin límites», no a lamerle las botas a un santurrón.

Al apartar la mirada de Teddy me encontré con Sarah y no me corté un pelo al observarla de arriba a abajo con una sonrisa socarrona en los labios que ya estaba allí desde antes de que la examinase, como si hubiera decidido lo que me iba a parecer su disfraz fuese cual fuese. Era una putada porque ese vestido de guarrilla le sentaba bien. Si no fuera tan poquita cosa estaría hasta guapa y todo, pero estaba claro, de donde no hay no se puede sacar. 

—Bueno, señores... —Una sonrisa encantadora acudió con algo de picardía a mis labios al incluir también a la pelirroja y a la tía esa que no había abierto la boca en el tren—... y señoritas. En este sitio tiene que haber un Saloon como en las películas. Y yo me voy a ir a buscarlo. Si alguien quiere venir, estaré encantado de tener compañía. 

Sin embargo, antes de marcharme por la avenida sin un rumbo claro pero con un objetivo, miré a Sarah otra vez y sonreí de medio lado. No podía irme sin dedicarle una pullita, era incapaz de desaprovechar esa oportunidad.

—Tú deberías venir. Con esas pintas seguro que encajas de puta madre allí. 

Emití una risa breve y le guiñé un ojo con gracia. Sin esperar respuesta por su parte me dispuse a caminar hasta encontrar un puto bar. Eso no podía faltar en un parque temático, los bares eran algo universal a través del espacio y el tiempo.

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30/03/2017, 14:10
Archer Jackson

El idiota monosílabo del tren iba a ser el nuevo Sheriff. Detendría a los malos diciendoles "malo malo" y "para". O algo. Y estaría todo el día borracho, porque ahí no ofrecían agua. 

Algunos sin embargo se apuntaron. La pelirroja estaba con cuestiones más prácticas. Y la peloblanco y el otro niñato (el niñato nº1 era siempre yo, siempre era el primero en todo, por principios) estaba insultándola. 

Me acerqué a Sophie, me quité el sombrero para saludar y me lo volví a poner, recordé otra cosa y saqué mi revolver, para abrirlo y cambiar dos cartuchos gastados —¡Hola, mami! Yo tampoco estoy por unirme a las fuerzas de la Ley. Y no hay maleta ni nada semejante. Pero... me ayudaste cuando nadie más podía —había puesto voz sufrida, pero la jaqueca ya se me había pasado— Por tanto... ¿Qué te parece acompañarme a la tienda de ropa más cercana? Una vez que tengamos ropa y maletas, podemos ir al Saloon. ¿Pillaste un revolver a la entrada? Creo que aquí importan más que tener "cosa colgando" a la hora de la autoridad. 

Aquellos planificadores de "vacaciones del futuro" habían olvidado cuanto dependíamos de nuestras comodidades actuales. Baños limpios, duchas limpias de agua caliente... pasar a vivir como hacía más de dos siglos no iba a ser ningún pasatiempo para los que vinieran. Supuse que esto se lo diríamos cuando nos pidieran la opinión. Salvo para unos pocos jóvenes (varones, las mujeres eran más listas) a los que les encantara la vida en un lugar más duro que en una academia militar, el lugar sería un fracaso. 

Pero yo iba a tratar de divertirme, al menos unas horas, luego ya vería si me quedaba. 

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30/03/2017, 15:01
Ruby Rose Petterson

Una vez dejo atrás aquel tipo me quedo más relajada. Lo último que deseada es dar el pistoletazo de salida a mis malditas, y necesitadas, vacaciones, era entrar en conflicto con un matón de feria. Al salir del tren me impregno de casa sensación y de cada olor. Me tengo que maravillar por lo logrado que estaba todo, cada detalle cuidado y nada por atar. No es que fuera aficionada a este periodo histórico, pero aquí metida, con todo tan bien caracterizado, me resultaba curioso.

En el andén de madera reconozco las caras de las personas con las que viajé en el otro tren, comprendiendo así que la separación era momentánea. En lo que cada cual elegía que trapito ponerse. Miro a uno y a otros, sin prestar atención a nadie en particular, cuando veo al chulo de nuevo. En mi cara se esboza una fruncir de ceño. ¿Era el puto Sheriff? ¿Ergo trabaja para el parque? Supongo que eso me genera cierto alivio, quizá sus formas de antes sean solo un mero teatro. Aunque yo no maja del todo.

Lo que tenía claro es que no me iba a ir a ser miembro de la ley de nada. Tenía ganas de ver cosas y, ante la pregunta de "¿Y ahora qué?" que lanza uno de los compañeros, simplemente añado:

Ni puta idea, pero voy a buscar un bar - mis pasos se encaminan directamente a eso, mirando todo.

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31/03/2017, 19:47
Narradora

No había equipaje para los viajeros, porque aquel parque no estaba pensado para una larga estancia. En realidad no sabían cuánto tiempo pasarían allí, pero sin una muda limpia, no parecía demasiado. Puede que dentro de las instalaciones encontraran con qué cambiarse, quizás aquellos soldados les dieran un buen uniforme de la Unión si se unían a ellos.

La decoración sería buena, para algunos casi creíble, eso habían pensado antes de llegar pero ahora podían percatarse de que frente a sus ojos no había decoración alguna, la gente de Delos Inc había recreado REALMENTE la vida en el lejano oeste.

No todos decidieron caminar hacia la calle mayor, el nuevo sheriff había hecho una oferta para algunos de los presentes, el resto tendrían que buscarse la vida. Quizás indagar en el parque para ver qué más podía ofrecerles aquel lugar, quizás un buen Saloon donde pasar el rato o para los más atrevidos – o insensatos – como bien sabían algunos, SweetWater no era lo único para visitar en aquel inmenso sitio donde ahora estaban.

Por ello, parte del grupo tomó dirección a Sweetwater y siguiendo a Teddy Flood el Sheriff mientras otros, aún sorprendidos o indecisos, quedaban en el andén.

Fue así como, aquellos que seguían a Teddy fueron sorprendidos cuando de repente un tipo harapiento, con un sombrero negro y con un pañuelo tapándole el rostro se plantó delante de ellos.

-¡Vas a pagar por lo que le hiciste a mi hermano, Teddy!- gritó, amartilleando su revólver y bajándose el pañuelo para mostrar su rostro, su cara estaba cruzada con un par de antiguas cicatrices, que le desfiguraban de mala manera. 

El sheriff no tuvo tiempo de desenfundar y todo pasó muy deprisa. Tampoco los presentes reaccionaron a tiempo, aquello era una novedad sin duda. 

¡BAAAAM! Un sonido de bala retumbó en sus oídos.

¡Vaya!, disparar un arma no parecía como en las películas, aquello atronaba los tímpanos malamente. 

La sangre salpicó a algunos de los que seguían al Sheriff, el señor Adams, el señor Navarro y el señor Merry sintieron un líquido candente y espeso salpicar sus rostros y parte de su ropa. No solo sangre llegó a ellos, también fragmentos de tejido cerebral y alguna esquirla de hueso.

Aquello duro tan solo un parpadeo pero cuando finalmente cayeron en la cuenta de lo que acababa de pasar justo frente a sus putas narices, la cruda realidad del Lejano Oeste  les escupió en la cara mientras reía a las carcajadas. Allí, a no más de un palmo de distancia y donde antes estaba parado el Sheriff ahora había un cuerpo caído en el suelo con la cabeza destrozada.

Laxo de vida, había caído como un fardo de heno.

Kaput. Game Over.

La muerte, aprendían ahora, estaba bajo cada maldita piedra,

Al acecho.

Notas de juego

Tirada de 1d10 + FRIALDAD +  Resist. Tort y Drog (los que tengan)dif. 25 para los 3 que han sido salpicados. Dif. 20 para el resto.

Quien no la supere podría hasta vomitar el desayuno o mearse encima.

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31/03/2017, 19:51
Declan Harp

¡BAAAMMMM!

Otro disparo más resonó, haciendo que algunos de los presentes en aquella calle mayor corrieran alejándose de allí.

¡BAAAAAM! Otra bala, con destino diferente. Otro cuerpo caído. Más sangre salpicando a los presentes y tiñendo y regando aquel suelo polvoriento.

Al otro lado del nuevo cuerpo caído boca abajo hay un hombre, corpulento, de evidente sangre mestiza, con aspecto rudo y que mira a los presentes de forma intensa.

El muerto no era otro,- para suerte de los presentes -,  que aquel bandido que había acabado con la vida de Teddy.

Otro que muerde el polvo.

-Vaya, vaya... Pero mira quién ha decidido traer su culo de vuelta a Sweetwater- dijo el tipo chasqueando la lengua con decepción y escudriñando el cadáver de Teddy Flood. -¡Oh, traía ayudantes!- tocó su frente, pues no portaba un sombrero. -Declan Harp para servirles, cazarrecompensas. Creo que hace falta un nuevo sheriff en la ciudad, porque por este me deben unos cientos- indicó mientras sacaba un trozo de papel amarillento y arrugado de su bolsillo, donde se alcanzaba a leer "Wanted Dead or Alive" junto con un dibujo de la cara del bandido.

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31/03/2017, 20:08
Ethan Bullock
- Tiradas (1)

Notas de juego

Bien hecho!

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31/03/2017, 20:22
Archer Jackson

Mientras hablaba con la pelirroja, contempló de refilón como los vaqueros se desafiaban... ¡Y se disparaban! ¡Vaya, aquello estaba genial! Habían disparado al Sheriff, la sangre había salpicado a esos pazguatos y... y joder...

...algo no funcionaba bien en mi cerebro, el aroma de la sangre y la pólvora era demasiado real, la imagen de la persona muerta activó algún recuerdo que... cuando ella había muerto, los paramédicos no podían hacernadahacernada...

La sonrisa de mi rostro se borró, lo que había comido antes en el buffet del tren salió en tromba de mi boca y lo único que puedo decir en mi favor es que no impacté a Sophie.

—Bularghhhhhhhh menuda mierda era esto. Me temo que no estaba hecho para mí. Después de vomitar estuve un poco respirando y tranquilizándome. 

Con el sombrero se limpio las babas, luego, sin limpiarlo, lo tiró.—Bueno, pelirroja, pensándolo mejor, creo que me voy ¿A que hora sale ese tren de vuelta? 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Vale, con pifia creo que vomito. 

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31/03/2017, 20:38
Rick Hyung Adams
Sólo para el director
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31/03/2017, 21:39
Sarah Winters
- Tiradas (2)
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01/04/2017, 08:58
John Smith (Vicente Navarro)
Sólo para el director
- Tiradas (1)