Partida Rol por web

Los Cinco Soles

1.1 - El pedido de Vadrian

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28/07/2010, 04:25
Habib

Cuando acampamos, Habib cura completamente a Willem con más hechizos de curar. Luego descansa, pues ha derrochado mucha energía mágica.

Notas de juego

Siento mi post escueto, pero estoy muy liado. xD

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28/07/2010, 19:22
Willem Rottemberg

El resto de la jornada se me hizo eterna. Nada tenía que ver el hecho de estar atravesando el desierto, ni las heridas sufridas por la batalla. A lo primero ya estaba acostumbrado, y las heridas apenas dolían ya gracias a la asistencia de Habib.

Lo que hizo que el viaje pareciera eterno era la sensación de que a cada paso otra bestia saltara sobre mi e intense llevarme. Sabía que tenía que apartar esos pensamientos, pues eran precisamente esos pensamientos los que me harían caer otra vez presa de una emboscada. Pero el haber estado tan cerca de la muerte me hacía imposible apartarlos.

Cuando por fin paramos en las montañas, fue como si me hubiesen quitado un enorme peso de encima. Aunque aun no estábamos del todo a salvo, aquella sensación de que cualquier paso que diera pudiera ser el último había desaparecido. Volví a recuperar mi humor habitual, ya que durante el viaje había estado muy irascible, y cuando toco dormir volví a soñar con las joyas de Eremy y con lo que haría una vez las tuviera en mi poder.

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28/07/2010, 21:47
Habib

Compañeros, será necesario hacer guardias. Yo me ofrezco al primer turno.

Rápidamente instruyo a mi cuervo como ya hemos hecho muchas veces.

Crik otras veces hemos hecho esto ya. Sólo has de vigilar y avisarme con un picotazo si notas algo extraño o un peligro. Aquí hay muchos monstruos, así que estate atento, precioso. Y le acaricio cuidadosa y efectuosamente.

Notas de juego

Yo haría 3 turnos de guardia. En el primero podemos estar martrirna y yo. Y en el segundo y tercero como queráis.

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28/07/2010, 23:42
Rhaztamel Rapidfinger

Notas de juego

Ala pues yo me apunto el segundo turno si no hay inconveniente.

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29/07/2010, 10:34
Eremy

En el descanso os quitais las armaduras de cuero, no hay quien aguante por el día con ella puesta, un motivo más para no viajar de día, y es que, aunque sean prácticamente inexistentes los monstruos que tocan la superficie de la arena durante el día, basta que uno solo aparezca para que sea el heraldo de la muerte

El atardecer llega, el ciempiés no ha sido desatado del carro en todo el día, y Eremy sube al carro haciendo sonar una fusta de manera implacable a la voz de - Venga, aprovechemos el descenso de  calor durante el ocaso

Rodeando la falda de las montañas, la arena mezclada con tierra es mucho más dura, y avanzais mucho más deprisa, habeis demostrado ser valientes y aguerridos pero no eficientes, a todos os embriaga este pensamiento de pesadez al haber sido burlados por una estúpida ave carroñera

 

Una noche larga y sin descanso, os duelen los pies y las piernas, teneis hambre y sed, pero las raciones están contadas y teneis la misma necesidad y prisa de Eremy de llegar al susodicho castillo antes del amanecer del día siguiente. La luna está menguando y ahora el graznido de buitres por los riscos de las cercanas montañas se os hace más familiar.

Aún no ha llegado el alba, el cielo apenas está clareando, y frente a vosotros, incrustado en una montaña, se alza el susodicho castillo de Raivah, alto, de paredes lisas y ventanas largas y estrechas, no parece haber nadie en las almenas y una puente levadizo cierra el portón principal, a su alrededor, un foso que prácticamente ha sido devorado por las arenas del desierto pretende hacer más dificil el acceso a las paredes del castillo.

Eremy lo observa todo y palpa algo bajo su chaqueta antes de devolver las manos a las riendas y detener el carro frente al foso de arena. Os observa y finalmente propone al grupo en general - Que alguien llame a las puertas, sed precavidos y no perdáis vuestras armas de vista, y sobretodo, intentad no pasaros de listos, aquí una imprudencia o una grosería la pagaríamos todos

Notas de juego

No importa, no suelo jorobar a los personajes durante el descanso :p soy un buenazo

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29/07/2010, 13:58
Sutu el Desolado

El bárbaro aceptó su turno de guardia sin decir nada, dejando que los demás decidieran primero y quedándose con el turno que le tocara por inercia. Al fín y al cabo él no tenía ninguna preferencia y lo mismo le daba intentar dormir, antes, que despues, ya que de eso se iba a tratar ese día, de intentar dormir.

Despues de lo ocurrido, y hábida cuenta de donde se encontraban, el instinto para la caza y la supervivencia de Sutu, no le permitiría alcanzar un sueño tranquilo, y sus sentidos seguirían demasiado despiertos como para dejarle caer en el abrazo del sueño despues de que cerrara los ojos.

Afortunádamente para todos, el día transcurrió sin más problema que el de combatir el asfixiante calor mientras intentaban recuperar fuerzas para la siguiente jornada, y cuando Eremy decidió que era el momento de ponerse en marcha, Sutu agradeció volver a ponerse en camino. La espera y la inactividad lo estaban matando de aburrimiento y de incertidumbre ante el destino de su familia, ya que cualquier minuto desperdiciado podía ser fatal.

Finálmente, y tras otra jornada de viaje nocturno, el imponente castillo de Raivah surgió ante la vista de los viajeros. Hacha en manos, el barbaro asintió con la cabeza a Eremy.

-Yo mismo llamaré. Le dijo a este, y con una cautela felina se acercó a las puertas para pedir paso.

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29/07/2010, 21:34
Rhaztamel Rapidfinger

Rhaz, no se inmutó, simplemente se limito a poner atención y estar preparado por si las moscas, espera a que el barbaro llame a la puerta u ver que ocurre. Se cruza de brazo, mientras que con la mano diestra juega con la empuñadura de su espada. - No se porque esto me da mala espina.... - piensa este.

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29/07/2010, 22:47
Willem Rottemberg

Afortunadamente para mis nervios, la marcha del segundo día estaba siendo tranquila. Había dormido bastante bien, o al menos todo lo bien que se puede dormir a la intemperie y en estas circunstancias, y apenas sentía nada relacionado con el combate de ayer. Tan solo quedaba una parte de aquella extraña sensación de desasosiego, pero era muy pequeña.

Así que este es el castillo del que nadie vuelve con vida. Pues no parece tan aterrador… pienso una vez alcanzamos nuestro objetivo. Cuando Eremy pidió que alguien llamara, aquella extraña sensación volvió con la misma fuerza que ayer. Algo no me daba buena espina. Así que mientras aquel tipo tan musculoso se acercaba a la puerta, desenvaine mis dos espadas y me puse completamente alerta. No me pillarían dos días seguidos.

- Tiradas (2)

Notas de juego

No si de fijo que ahora no sirven para nada, pero voy a hacer las tiradas a la de porsiacaso.

Y ahora sale la tirada decente. Cagoensanpeobendito.

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30/07/2010, 01:15
Director

El cielo luce un bonito azul  nocturno mientras las estrellas comienzan a aparecer, y Sutu El Desolado desciende por un tobogán de arena al foso del castillo para trepar por el otro lado hacia el portón formado por la enorme pasarela de madera que supuestamente debe bajar para dar paso al resto.

Willen se mantiene con el cuello estirado, observando el castillo con atención esperando ver algun movimiento sospechoso en él, pero nada, las rendijas superiores se encuentran a oscuras, ni el tenue reflejo de un candil ni una tea sobre el muro señalando a un posible vigía, nada, pero un ruido sí llama su atención, el de arena rozándose

En el foso hay algo que se ha movido, estás casi seguro, pero debido a la penumbra existente no has podido verlo, se ha movido rápido, por unos momentos cerca de Sutu para volver a quedar inmóvil, y ahora, tal vez sea el hecho de no-oírlo, lo que pueda causar mayor temor..... es grande

 

Sutu por su parte, sale del foso creando enormes avalanchas de arena en su ascenso, aferrándose a un borde de la puerta, pudiendo escudriñar tan solo oscuridad a través de una rendija entre muro y madera, una cadena superior mantiene cerrada la puerta, aunque Sutu podría aflojarla por pura fuerza y trepar un poco para poder entrar

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30/07/2010, 22:34
Habib

Cuando llegamos al castillo no puedo más que sonreir. Llegué a pensar que moriríamos si nos atacaban más monstruos, pero hemos tenido mucha fortuna esta vez.

Cuanto me alegro de ver estas murallas. Pero ahora tenemos otro reto por delante, salir de ellas vivos cuando nos den el paso.

Dejo salir a Crik de mi mochila para que contemple el panorama. Sé que no lo apreciará como yo, pero compartimos las emociones, así que sabrá que para mí es importante.

Mira Crik, este es el misterioro castillo. Tu amo tiene mucha curiosidad por lo que encierran sus murallas.

Eremy, con su practicidad habitual, pide un voluntario para llamar a la puerta. Sutu, el fuerte, se lanza sin dudarlo. Cruza el foso de arena, pero apreciamos un movimiento en la oscuridad, bajo la superficie. Estoy tentado de gritarle por si acaso no se ha dado cuenta, pero recuerdo las palabras de Eremy y prefiero ser discreto.

Crik, vuela hasta Sutu y dile: "Cuidado, algo grande en el foso". Regresa inmediatamente. Lanzo a Crik al vuelo.

Eremy, nos acercamos por si acaso?

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02/08/2010, 10:00
Willem Rottemberg

¿Qué ha sido eso? ¡Algo se ha movido ahí abajo, estoy seguro! Pero parece demasiado grande para moverse a tanta velocidad. Mejor estar alerta por lo que pueda pasar. Tengo todos mis músculos y pongo los sentidos alerta. Si las historias que contaban que nadie regresaba del castillo con vida eran ciertas, toda precaución puede ser poca.

Mejor será que no bajemos todos respondo a la sugerencia de Habib. Así si algo ataca podremos rodearlo y tener ventaja táctica.

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02/08/2010, 17:11
Sutu el Desolado

El bárbaro medio gateo para trepar por el otro lado tras caminar por el interior del foso en dirección a la puerta.

Una vez llegó arriba, lanzó una mirada a sus compañeros, al otro lado, y les hizo un gesto con la mano para que estuvieran alertas a lo que pudiera pasar en cuanto golpeará la puerta para que alguien les abriera desde dentro. Volvió la vista hacia la misma, con todos los sentidos alarmados por el lugar.

Este lugar no aparenta gran cosa, pero se palpa un peligro en el aire difícil de explicar. Pensó. Por si acaso, será mejor no bajar la guardia, tal y como ha dicho Eremy.

El enrome bárbaro, golpeó la puerta con el pomo de su hacha, utilizando todas sus fuerzas pata ello, con la intención de que quedará bien claro a quién estuviera dentro del castillo, que tenía invitados esperando en la entrada.

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02/08/2010, 22:54
Director

Una sombra se asoma por una ventana, al alzar la vista desaparece en la sombra de la fina ventana, desde muy arriba, su atronadora y profunda voz os llega a todos perfectamente

- ¿¡QUIEN VA!?

¿Qué loco llama a las puertas de este castillo, en el que solo la muerte se encuentra?

¿Un viajero al que la sed le castiga con visiones y demencia y le hace buscar desesperadamente una manera más rápida de morir?

Tras el puente, Sutu puede escuchar un abrir de puerta, y una sombra grande se mueve tras la rendija entre el muro y el puente, estudiando de igual manera al no menos imponente Sutu, un filo metálico en sus manos no deja lugar a dudas de que aquí las visitas no son bien recibidas.

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03/08/2010, 00:35
Sutu el Desolado

-¡Como escolta de Eremy, empleado a Vadrian con quién se tiene tratos en este castillo, pido permiso para entrar! Gritó el bárbaro a la figura que les había preguntado desde el interior. ¡Venimos de la ciudad de Zalas transportando una mercancía que se solicita en este lugar, abrid a mi superior para que pueda cerrar los negocios que se han de llevar a buen termino!

Sin aflojar la presa en la empuñadura de su arma, Sutu se quedó a la espera de una respuesta, haciendo rechinar los dientes a causa de la tensión que estaba viviendo en aquel momento.

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03/08/2010, 01:03
Odros

Unas cadenas muy gruesas y oxidadas por el tiempo chirrían mientras que el puente se despeja ligero bajando sobre el foso y abriendo el camino de entrada al castillo de Raivah, un ogro cuya piel ha desaparecido a golpe de látigo maneja las cadenas y manivelas y tan pronto como el puente ha bajado echa mano de una gigantesca clava llena de pinchos quedando en el umbral de la puerta.

Unos pasos más adelantado, sobre el puente, un orco lleno de tatuajes y con una gran hacha entre las manos se pone en una posición defensiva tal vez un poco precipitada, y ante él, quien toma la palabra, es la voz que antes ha solicitado vuestra identidad, un semigigante embutido en una armadura negra, ocultando su rostro, con una desproporcionada espada y un pavés en su diestra, al avanzar sobre el puente de cara a la comitiva se gira hacia Sutu

Soy Odros, vasallo de Milaszor. Entrad, el Sr del Castillo os está esperando, envainad vuestras armas

Es comprensible que no pida dejar las armas, nadie deja las armas en Has'sara, es una impensable locura desprenderse del arma a la que se está ligada, pero os pide el detalle de guardarlas ante la morada ajena, al cumplir esto, podeis pasar al famoso e infame castillo de Raivah.

Tras el paso del carromato, el ogro vuelve a izar el puente. Al pasar por debajo del enorme arco de piedra y tras una sala cuyos muros interiores han caído hace ya muchos años, dais a un claustro interior donde Eremy baja del carro.

~Soy Eremy, vasallo de Vadrian, debo hablar con vuestro señor~

El gigantón asiente y os lleva por una puerta de un lado, subís las escaleras dos pisos del castillo, a juzgar por la altura, la enorme estructura aún debe tener un par más. Odros pica a una puerta única y gruesa y tras un sibilante : Pasad, abre la puerta dejando que tan solo Eremy entre en la sala, dejandoos unos minutos de incómodos murmullos a solas con los 3 intimidantes guardias.

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03/08/2010, 10:37
Habib

Temiendo por Sutu por si lo que se mueve bajo la arena le ataca, escucho:

 

- ¿¡QUIEN VA!?

 

 

Por fin nos escuchan.

Sutu habla, aunque no alcanzo a oirle con claridad, pero parece sereno en la lejanía.

Las puertas se abren y el grupo, Eremy y el carro avanzamos despacio. El aspecto del lugar es horroroso yel ogro enmascarado y gordo de la puerta está en sintonía con todo lo demás. Guardo mis armas, aunque por su tamaño se dejan ver perfectamente. Recorremos el patio hasta una puerta donde sólo dejan entrar a Eremy. Rápidamente observo las murallas, el patio, las ventanas, en busca de soldados y guardias, así como cualquier posible peligro. No ha dejado de pasárseme por la cabeza que el señor de este castillo no esté muy acostumbrado a pagar. Quizá nos felicite por los servicios prestados con cientos de flechas desde lo alto.

Crik, alerta.

Mi cuervo se asoma más de la mochila e inspecciona conmigo. Mueve las alas con intención de volar, pero considero que puede ser tomado como algo hostil y no se lo permito.

No, Crik, aún no. Silencio.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Empleo avistar y escuchar para situarme y prevenir una posible emboscada. Mi cuervo tira también avistar y escuchar y me avisa si se entera de algo con su pico.

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03/08/2010, 13:06
Willem Rottemberg

Bueno, esta es una buena explicación de por qué los que entran no vuelven a salir con vida. Y vale que estamos en mitad del desierto, pero viviendo en un castillo, ¿es necesaria tanta seguridad? Me pregunto al ver a las tres moles que nos abren la puerta mientras envaino mis armas. No es que tuviera miedo de enfrentarme a ellos, teníamos que llevar el cargamento de Eremy al interior, y las órdenes son órdenes.

Voy fijándome en cada uno de los detalles del castillo mientras acompañamos al gigantón aquel y a Eremy hasta el señor del castillo. Trato de memorizar cada recoveco, cada sombra, cada hueco en la pared. Era más una costumbre que una precaución, pero me había salvado el culo en más de una ocasión, así que no he encontrado un por qué para dejar de hacerla.

Cuando Eremy entra a terminar con sus negocios, me apoyo en la pared que esta frente a la puerta y me quedo allí, en silencio y alerta, al fin y al cabo estaba un castillo desconocido del que las historias decían que nadie regresaba con vida. Y eso para mí era razón más que suficiente para estar alerta.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Yo también tiro por lo que pueda pasar. Que lo del pajarraco me tiene traumatizado xP

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03/08/2010, 15:07
Sutu el Desolado

Sutu se apartó ligéramente cuando la puerta comenzó a abrirse y esperó al resto del grupo antes de entrar. Mientras lo hacía, estudió de arriba a abajo al Ogro que había abierto la puerta, con actitud desafiante y semblante serio, para luego proceder a hacer lo mismo con el semigigante que se acercó a hablarle y darles el paso.

-De acuerdo. Le respondió de forma seca y tajante, mientras se llevaba el hacha a la espalda tal y como se les había pedido que actuaran con sus correspondientes armas.

Una vez se unió al resto del grupo, caminó junto al carro y sus compañeros hacía le interior de la fortaleza, tan silencioso como de costumbre y alerta a los tres guardias que los vigilaban.

Cuando Eremy desapareció y los dejó en manos de aquella gente, el bárbaro se cruzó de brazos, con la espalda apoyada en la pared y sin quitarle el ojo de encima al que se había dado a conocer como Odros. El sudor resbalaba por la piel morena de Sutu, humedecida a causa del mismo y brillante, el cuerpo del bárbaro competía en musculatura con el de aquellos tres guardias, mucho más voluminosos que Sutu, pero sin capaz de hacer frente a la firmeza y tensión de los nudosos músculos del bárbaro.

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03/08/2010, 20:56
Rhaztamel Rapidfinger

Rhaz se limitó a seguir al grupo, ese semigigante era imponente, el recibimiento obtenido era nada mas y nada menos como esperaba, tras llegar al pasillo de la sala donde entro Eremy, el pícaro se apoya con la espalda en la pared del pasillo y empieza a observar a todos y cada uno de los guardia, tantas esperas estaban empezando a ponerle nervioso, mientras tanto jugueteaba con el dedo indice de su mano derecha dando giros sobre la empuñadura de su espada.

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04/08/2010, 12:40
Eremy

Tras al menos una hora de tensión y engarrotamiento de las piernas la puerta se abre, Eremy aparece con el semblante apático que ha mantenido todo el viaje y observandoos a todos emite un intento fallido de sonrisa.

Mis tratos aquí casi han concluido, pero el día de hoy será especialmente caluroso, por lo que he aceptado la hospitalidad de Milaszor para quedarnos en el castillo el día de hoy y la noche de mañana para reponer fuerzas, la noche siguiente, volveremos a Zalas.

Ahora solicita os presenteis ante él, al parecer también tiene algo que ofreceros, pero recordad que partimos en dos noches, os esperaré aquí fuera.

Odros mantiene la puerta abierta, y entra tras vosotros a la sala del Rey Brujo de Raivah