Partida Rol por web

Los Goonies nunca dicen "muerto"

01.PRÓLOGO. REUNIÓN FAMILIAR

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01/11/2018, 11:08
Director
Sólo para el director

RESUMEN DEL EPISODIO

Los PJ son los hijos de los Goonies originales. Viajan en coche para participar en una exposición en el Museo Local sobre "Willy el Tuerto. Un pirata local". Cuando llegan, van encontrándose después de mucho tiempo y los chicos, que se conocen entre sí, también.

La acción comienza cuando los coches de todos los goonies se detienen junto al museo y los hijos, que ya se conocen, hablan entre ellos.

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24/11/2018, 20:33
Director

La brisa marina os asaltó en cuanto bajasteis del coche. El pueblo era hermoso, tanto como lo que os habían dicho vuestros padres. ¿Por qué demonios se fueron de allí? La aventura que habían corrido cuando eran jóvenes, igual que vosotros, les marcó durante el resto de sus días, y pasasteis vuestra infancia oyéndoles una y otra vez rememorar cómo les perseguían los Fratelli, de qué forma los inventos de Data os habían salvado la vida, lo bien que la madre de Sarah había tocado aquel piano hecho de huesos humanos, o la emoción que sintieron cuando vieron por primera vez... el barco de Willy "El Tuerto".

Pero ya hacía mucho de eso. Al crecer, las historias fueron abandonadas por los típicos enfrentamientos entre los padres, las riñas por el dinero, la escuela, el poco tiempo que algunos pasaban en casa... y la mayoría de vosotros, simplemente, vivíais en otro mundo.

Por eso cuando un día abristeis la invitación para ir a la inauguración de la EXPOSICIÓN DE WILLY "EL TUERTO", ninguno os pudisteis resistir. Muchos incluso os pusisteis de acuerdo a través de las redes, haciendo que al final, ninguno de vuestros padres pudieran negarse.

Era vuestra oportunidad para revivir, una vez más, la aventura de vuestras vidas. Bueno, en realidad, no era vuestra, pero  os acompañó mientras aprendíais a hablar y a andar, cuando estabais todavía descubriendo lo que el mundo podía ofreceros, y  cuando dejaron de contárosla, todos sentisteis que os habían robado una parte de ella.

Así que allí estábáis, deseando volver a saborear aquella aventura. Era VUESTRA aventura, tanto como de vuestros padres.

Notas de juego

Bienvenidos!!!!

Cada uno tiene su propio mensaje de introducción, pero si cree que hay algo que no concuerda con la idea que tenía, que me lo diga. Otra opción era dejaros que vosotros mismos narraseis esto, así que eso también es posible.

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24/11/2018, 21:25
Director

El primer coche en llegar fue, como era de esperar, el de Brand. Brand vivía pegado al teléfono y al reloj. Cuando no estaba hablando, estaba mirando cuándo tenía la siguiente cita y nada más terminarla, consultaba su agenda para ver lo que faltaba para la siguiente.

Su trabajo le había permitido llevar una vida de lujo, muy diferente a la que habían tenido en los Muelles, pero también lo había alejado de los demás, tanto de su madre como de su familia. Pero muchas bocas dependían de su destreza como "Broker" y no podía dejarlas en la estacada. 

Durante todo el trayecto, el tema de la discusión fue: por qué tengo que ir a esta exposición cuando podría estar ganando un millón de dólares más vs. para qué quieres un millón más si todavía no hemos podido gastar lo que tenemos porque nunca estás en casa.

-Solo digo que podría estar haciendo algo más útil -dijo Brand.

-¿Más útil que pasar tiempo con tu familia, Brand? ¿Eso es lo qué estás sugiriendo? -le replicó enfadada Diane.

-No, claro que no. Me gusta pasar tiempo con vosotros, solo que tengo muchas cosas que hacer.

-Siempre tienes cosas que hacer. Nosotros somos tu última elección del día. Si hay una reunión, no vienes a comer. Si tienes que hablar con alguien, llegas tarde al partido de Patrick. Siempre nos dejas para el final.

Patrick asistía a estos pequeños "combates" sin decir nada, porque en realidad, no tenía nada que decir. Para qué. Lo mejor era permanecer alejado, fuera a ser que se acordasen de él y le dijesen que hiciese algo que no quería.

Cuando el coche se detuvo en el aparcamiento, Patrik fue el primero en salir.

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24/11/2018, 21:33
Director

El coche de Mikey y Louise puede que no fuese el mejor ni el más rápido, pero sí el más silencioso. Dentro de él, ni un ruido podía enturbiar la felicidad que llevaba dibujada Mikey en el rostro.

-¿Te hace ilusión venir a esto, verdad? -le preguntó Louise.

-Ajá. Ya casi lo había olvidado. He pasado tanto tiempo estudiando la historia, que casi no recuerdo que yo también formé parte de ella. Además, hace mucho tiempo que no veo a los chicos -al decir esto, su rostro se ensombreció ligeramente.

Louise colocó una mano sobre la de Mikey, que sujetaba el cambio de marchas.

-Brand solo está ocupado, Mikey. No es nada personal. 

-Lo sé, lo sé, pero es que... me da rabia. Es como si se hubiese olvidado de quién es. Siempre pensé que tendría éxito, que le saldrían bien las cosas, pero no que nos dejaría a todos de lado. El otro día Diane me llamó. Está considerando divorciarse de él. Tengo que hablarle. Tengo que convencerle para que vuelva a ser el que era.

En el asiento de atrás, Lex permanecía en silencio, oyéndolo todo. Le encantaba su padre, y ver que el ambiente en casa de Patrick no era como aquel... le hacía sentir ira. Si por ella fuera, Patrick volvería con ellos y se olvidaría del tío Brand. Total, si nunca estaba en casa, seguro que no iba a notar su falta.

Por fin llegaron al aparcamiento. Mikey detuvo el coche y se giró hacia Lex.

-Ni una palabra de todo esto a Patrick, ¿me has oído? -le dijo con tono serio -. No quiero que se sienta peor de lo que está ya.

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24/11/2018, 21:43
Director

Mientras conducía, Steff hablaba por teléfono a través del manos libres del coche. Anne iba sentada delante, escuchando la conversación, no tanto porque tuviera interés real en ella, como por sus consecuencias.

-Entonces, ¿has conseguido los permisos? -le preguntó Steff al hombre con el que estaba hablando.

-Sí, sí. Los tenemos. Podemos empezar a filmar dentro de una semana si quieres -le respondió la voz del teléfono.

-¡¡Estupendo!! Va a ser genial. Esa tribu está prácticamente aislada en mitad de la selva y seremos los primeros en filmarlos y describir cómo viven. ¡Será un bombazo!

-Pues entonces, todo dispuesto. Sacaré los billetes, prepararé el equipo y dentro de una semana... en marcha.

-Bien. Gracias, Fred.

En cuanto colgó, Anne miró a su madre. Sí, era fantástica. Su madre era activa, divertida, impulsiva e inteligente... pero solo estaba en casa la mitad del año. La otra mitad, prefería pasarla conociendo sitios en los que no había estado, o hablando con gente a los que nadie había entrevistado antes.

-Va a ser estupendo -te dijo, emocionada.

Cuando el coche se detuvo en la explanada, te pareció que lo único estupendo era que podría hacer lo que quisiera mientras su madre estaba lejos, aunque hacía tiempo que ni eso le hacía sentir mejor.

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24/11/2018, 21:52
Director

Gordi iba en el coche dispuesto a comerse el mundo. Aquel viaje le permitiría reunirse con sus amigos y contarle todas las cosas que le habían ocurrido, aunque algunas de ellas no fuese como parecían. Sus padres últimamente parecían más preocupados por los negocios que otra cosa, pero no habían dudado ni un solo instante en venir a la exposición en cuanto les llegó la invitación.

-Caleb, nada de chistes de mal gusto allí dentro. Tengo una reputación que mantener y la última vez que hablaste de vómitos, la gente salió del supermercado a toda prisa.

-Déjalo ya, Larry. Lo sabe. No volverá a hacerlo más, ¿verdad, corazón?

Lo cierto es que Caleb había heredado el mal gusto de su padre por todo lo escatológico en cuanto a chistes se refería, pero él no iba a reconocerlo. Hacía mucho tiempo de aquello y en todos aquellos años, su vida había mejorado mucho. Ahora era un hombre de éxito, respetado, y estaba seguro de que su hijo también lo sería con el tiempo.

Solo necesitaba un pequeño empujón, algo que le hiciera darse cuenta de lo importante que era ser responsable.

El coche se detuvo y su padre fue el primero en salir. Se sentía incómodo por aquella reunión, y emocionado a la vez. Ojalá no fuese un desastre como la última vez.

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24/11/2018, 22:16
Director

La música de su padre resonaba por los altavoces del coche, de tal manera que hasta en Australia podrían oírla. Él ya estaba acostumbrado, casi tanto como a las latas de cerveza que su padre acumulaba tanto en la cocina como en la parte de atrás del coche.

-La verdad, no sé como me he dejado convencer por tu madre para esto. Todos son unos estirados. Brand ya lo era cuando éramos jóvenes, así que ahora que es mister-todo-lo-que-toco-se-transforma-en-oro, lo es aún más -le dijo, mientras le daba otro sorbo a su cuarta cerveza.

Su padre no era mala persona, pero sí descuidado y algo egocéntrico. Pensaba que todo el mundo giraba alrededor de su música y de él mismo, y a veces tenía la impresión de que ni siquiera recordaba que él estaba allí.

Pero en algo si coincidía. Aquel viaje era una estupidez. Cuando quería hablar con sus primos, lo hacía, y no necesitaba ninguna reunión "guiada" como aquella.

-Hey, allí está la gente -dijo en voz alta, al ver todos los coches aparcados y al grupo hablando ya entre ellos -. No te preocupes. Intentaré no avergonzarte mucho esta vez.

La última vez, había bebido tanto que se había lanzado desnudo a la piscina de Brand. Ojalá en esta ocasión, se comportase mejor.

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25/11/2018, 09:41
Director

Sarah contemplaba el paisaje de la costa mientras se acercaban a los Muelles. Hacía tiempo que no iban por allí, tanto que ya casi no lo recordaba. Sus padres se habían alejado del resto de su grupo, los "Goonies", principalmente porque no compartían su visión de la vida, salvo su "tía" Steff, la cual era bastante rara, todo había que decirlo, y su "tío" Mikey, que sí que era guay.

Por otro lado, su madre estaba constantemente pendiente de la tienda y todas las entregas de tejido que debía recibir, además, por supuesto, de estar encima suya para que no abandonara su figura. Seguía pensando que algún día, sería modelo, tal y como a ella le hubiera gustado ser. Su padre,en cambio, era completamente diferente. En cuanto sonaba un poco de jazz, su mente parecía zambullirse y olvidarse de lo que había en el resto del universo... como en aquel momento.

-Sarah, hazme el favor de no dejarte llevar por el resto de chicos. La última vez que estuviste con ellos tardamos dos semanas en conseguir que perdieses los dos kilos que cogiste -le dijo su madre.

-Cariño, ¿y qué más da los kilos que coja? ¿De verdad te preocupaban tanto cuando eras joven? -comentó su padre. Andy lo miró, pero no le respondió.

Y es que hiciera lo que hiciese, no había manera de cambiar a ninguno de los dos, ni al espíritu libre que era su padre... ni a la estirada de su madre.

Cuando el coche se detuvo en el aparcamiento, todos estaban ya allí, así que se bajó rápidamente.

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25/11/2018, 09:51
Director

Poco a poco fuisteis llegando y bajandoos del coche, y allí estabais todos: Lex, Anne, Caleb, Trick, Sarah, Scott... y por supuesto, Emiko.

Delante vuestra estaba también el museo.

Notas de juego

Todo vuestro. A narrar el reencuentro. De eso va el prólogo ;)

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25/11/2018, 16:03
Alexandra "Lex" Walsh
Sólo para el director

Había llegado el día, las últimas noches a penas había pegado ojo por la excitación. Hablando con Patrick hasta altas horas de la madrugada. La inauguración de la exposición dedicada a Willy “el tuero” había sido la comidilla del lugar, además según le había contado su padre los Goonies tendrían un pequeño apartado. Motivo, entre otros, que le habían pedido que colaborara con ella. Pero debido al secretismo de esta, y los miles de documentos de confidencialidad que habían hecho firmar a su padre, no le pudo contar mucho. Ni tan siquiera llevarla con él para que viera un adelanto.

De camino al museo su padre había estado recordando partes de aquella maravillosa aventura y Alexandra no podía evitar acabar las frases de su padre o preguntarle que había pasado después. Se conocía la historia de memoria, aun así disfrutaba escuchándola, así como ver el rostro de su padre cuando evocaba aquellos recuerdos. Lo único que le hizo oscurecer el semblante fue cuando mencionaron el asunto del posible divorció de los padres de Patrick.

Cuando sus padres hablaban de este tipo de cosas procuraban cuando ella no estaba cerca pero en las raras ocasiones que sucedía, como esta, lo que más le molestaba era que siempre terminaban con un “Ni una palabra a Patrick de todo esto ¿entendido?”. Ella por supuesto obedecía, lo que no lo hacia nada fácil porque Patrick no veía que las cosas fueran tan mal.

Su tía Diane, era un encanto de mujer y aunque era cierto que su tío Brand vivía un tanto obsesionado con el trabajo, no vía donde estaba el problema. Le había preguntado en alguna ocasión a Jason que trabajaba en la misma compañía que su tío pero nunca se pronunciaba. “No te metas en los asuntos de los mayores” le decía. Y ella callaba. Pero aquella vez estalló, no iban a arruinarle el día.

-¿¡como que no diga nada a...? - comenzó a protestar con energía antes de callar apretando los labios con fuerza, en un mohín de enfado – no diré nada...pero la próxima no decir nada delante de mí, sabéis que me cuesta horrores mentir a Patrick

Dicho lo cuál se quito el cinturón de seguridad y salió airada del coche. Por suerte, para su estado de animo, el golpe del aire fresco y salado de la bahía de Astoria junto a la visión del museo restauro su buen humor.

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25/11/2018, 16:03
Alexandra "Lex" Walsh

En el aparcamiento Alexandra salió airada del coche familiar, dando un sonoro portazo tras posar los pies en el suelo. Alzando el rostro hacía el cielo tomo profunda respiración, aspirando el aroma salado de la bahía de Astoria. Al volver a abrirlos una sonrisa radiante y cargada de excitación se dibujo en su rostro.

Pese a que su madre había insistido en que se pusiera algo un poco más elegante, aunque fuera unos pantalones sin agujeros, se había decantado por una cazadora de cuero marrón bajo la que llevaba una chaqueta azul con capucha para protegerse del frío del otoño, bajo las que llevaba una camiseta diseño de la madre de Sarah1. Su look lo completaban la prenda que tanta controversia había levantado aquella mañana, unos vaqueros claros con agujeros por todas partes y unas vans de print de colores.

Sin mucho tardar sus padres le siguieron fueran del vehículo, la joven se alejo de ellos buscando a su primo por los alrededores, habían estado enviándose mensajes de texto toda la mañana y sabía que llegarían más o menos a la misma hora. Nerviosa comenzó a mordisquearse la uña del pulgar mientras que con la mirada barría todo el aparcamiento.

Tenía motivos para estar nerviosa; no solo por la exposición, que no la había dejado casi dormir en los dos últimos días, también porque finalmente Patrick iba a conocer a Scott en persona. No es que fueran los mejores amigos pero los tres se llevaban bien en las redes, y para ser honestos lo que recordaba del Scott de hacía dos años no era mucho, así que sentía algo de curiosidad por el chico.

Mientras localizaba a su primo puedo ver rostros conocidos y otros no tanto, allí estaban todos.

 
 
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25/11/2018, 19:10
Emiko

Emiko salió del coche de sus padres contenta, pero también algo temerosa. Nunca se había relacioando mucho con los demás porque tenía la sensación de que pensaban que era "rara". Y no sabía por qué. Después de todo, solo intentaba que la gente usara menos las tecnologías y abrazara más la naturaleza. ¡Qué podía ser más hermoso que un bosque en pleno invierno o el amanecer junto al mar! Pues eso, na-da.

Y cada vez que decía cosas así, ¿qué era lo que hacía la gente? Pues mirar sus móviles. Emiko se sentía incomprendida.

Su padre se bajó del coche y antes de saludar a nadie, se acercó a ella.

-No te pongas pesada, Emiko. Deja que los demás usen los móviles, sus "nintendo" o lo que quiera que tengan.

-Está bien, papá -le dijo un poco apesadumbrada, por no poder ser más ella misma. 

Emiko se fue cabizbaja hacia donde estaban los demás y no tardó en ver a Lex.

-Hola, Lex. ¿Cómo estás? Pareces nerviosa.

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25/11/2018, 19:46
Alexandra "Lex" Walsh

Por fin había localizado el coche de su primo entrando en el aparcamiento, cuando la dulce y suave voz de Emiko llamo su atención. Como acto reflejo ante la mención de su nerviosismo dejó de morderse la uña, metiendo ambas manos en los bolsillos de su cazadora.

-¡ey! ¡Hola Emiko! - saludo al girarse para encararla con una sonrisa – esto...bien, bien, estoy bien jeje Emocionada por ver la expo ¿y tu que tal estas? - los padre de Emiko saludaron a la hija de Mikey a lo lejos. Ella respondió sacando la mano y saludando brevemente, antes poner su atención de vuelta en Emiko.

Notas de juego

Suelo esperar a que posteen todos pero ya que hiciste el esfuerzo de postear con Emiko lo mínimo es contestar ^^

jajaja vale, gracias. Lo he hecho para ir animando. ;)

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25/11/2018, 23:43
Patrick Walsh

Durante el viaje, quedé inmerso en el pequeño mundo virtual que contenía mi móvil, de fondo escuchaba a mi padre hablar con mi madre, o más bien, diría discutir, aunque ya desde hace mucho tiempo era una manere tan recurrente de comunicación que había conseguido aislarme de tal manera que conseguía aislarme de la conversación de manera extraordinaria. Rezaba por llegar al final del trayecto, aunque los auricular me aislaban del ruido, era plan de mantener los ojos cerrados, conseguí dormir un trecho, pero intentar disimularlo se me daba como el culo. Me moría de ganas por llegar y ver a Lex, la echaba tanto de menos...hacía bastante que no la veía y aunque manteníamos el contacto casi diario no era lo mismo.

-¡AL FIN LLEGAMOS!-exclamé de forma repentina cuando se detuvo el coche delante del museo, cortando a mis padres y dejándolos clavados en sus asientos. Sin esperar a que replicasen me bajé del coche abriendo la puerta en un suspiro.-Ahhh, esto si que es aire puro...-suspiré, exhalando a continuación el oxígeno que había recorrido mis pulmones, puro y fresco, no como la guarrería que tragaba todos los días en la ciudad. Lo primero que ví fué la fachada del museo, la noticia me había parecido fantástica, reunir todos los objetos de Willy el Tuerto en aquel lugar era excitante, una cosa era lo que me contaban mi padre y mi tío, otra muy diferente sería verlo en persona.

Miré a mi al rededor buscando a mi prima y allí estaba, una amplia sonrisa apareció en mi rostro y los ojos brillaron felices-¡Lex!-dije cruzando mis ojos con los suyos y andé hacia ella con paso ligero-Hola Emiko-miré a la chica de ojos rasgados pero no pude evitarlo y abracé a Lex antes que nada-¡Que tal prima!-le planté dos sonoros besos en las mejillas, parecía que no la había visto hace una eternidad aunque no habían pasado más que unas pocas semanas-¡Te he echado de menos! ¿has preparado tu reto? porque yo el mío si-le guiñe un ojo cómplice, ella sabía a qué me refería-¿nerviosa por ver el museo? ¡yo me muero de ganas!-dije con alegría, ambos compartíamos la misma pasión y ver todos esos objetos antiguos nos tenían muertos de la intriga.

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26/11/2018, 00:18
Scott Devereaux

Sí, estaba en lo cierto desde un primer momento. Ya se lo dijo a su madre antes de partir, aquel viaje con su padre era un error. Si bien su madre le había convencido de que podía llegar a pasarlo bien a medida que iban restando kilómetros hacia los muelles de Goon, más evidente era que ni su padre quería estar allí, ni el mismo tampoco. Tan solo la idea de volver a ver a Lex tras tanto tiempo y de conocer en persona a Patrick, aminoraban el fastidio que sentía en esos momentos.

En otra época hubiera estado encantado de hacer ese viaje. Conocer el escenario de las aventuras de la niñez de su padre y poder descubrir en primera persona las localizaciones donde habían tenido lugar, hubiera sido emocionante. Pero no ahora. Scott y su padre estuvieron muy unidos. La fama, la cerveza, las otras mujeres y el divorcio los habían distanciado. El Bocazas de las historias había pasado de ser su héroe a ser una egocéntrica y alcoholizada estrella de rock, que poco pensaba en su hijo.

Para colmo, aquella música infernal que sonaba a todas horas en su coche era un incordio. Le había pedido a papá que la bajara sin mucho éxito. Tan poco que en vez de bajarla se mosqueo y le lanzó una mirada de reproche. Scott se encogió de hombros y se reclino en su asiento tratando de descansar la vista y con suerte echar una cabezadita hasta llegar a su destino, pero con aquel volumen no fue posible.

Para cuando llegaron al museo el aparcamiento estaba bastante lleno. Scott se puso algo nervioso y empezó a buscar a través de la ventanilla del coche a Lex. Era a la única persona que ya conocía de todas con las que iba a pasar esas vacaciones. A Patrick también le conocía pero nunca había estado a su lado, tan solo se conocían de Internet. La verdad es que esa parte del viaje si le hacia ganas vivirla.

Al principio le costó localizar a Lex. Cuando su padre aparcó cerca de un grupo de personas junto con los que parecían sus hijos, Scott se puso inmediatamente a buscar caras conocidas entre ellos. Creyó reconocer a Patrick, pero no podía estar seguro. La pantalla del ordenador siempre distorsionada un poco. No era lo mismo ver a alguien en foto o por videoconferencia, que en persona. Instantes después se fijo en la chica que estaba junto al sospechoso de ser Patrick.

¿Era ella...Lex? ¡Que alta! ¡Que cambio más grande había dado desde la última vez que se vieron! Sin duda era ya toda una mujer y él... bueno el seguía siendo un niñito. ¡Pero que guapa estaba! Sin saber muy bien porque empezó a ponerse nervioso y el corazón empezó a bombear con fuerza. Lex hablaba con unos y otros, parecía el centro de atención.

Va a ser complicado estar a la altura. — Pensó. — ¿A la altura de qué, Scott? — Trató de evitar aquellos pensamientos.

Para cuando Lex alzó la mirada y reparó en él, aun no estaba preparado. Se puso aun más nervioso de lo que ya estaba, tragó saliva y decidió emprender la marcha hacia su amiga para darle dos besos y un abrazo, hacer un comentario ingenioso y pasar a ser él el centro de atención . Al fin y al cabo era un chico de la ciudad... Lex le miraría con buenos ojos y quedaría impresionada con su carisma y sus historias. Sí, ese era un buen plan sin ninguna duda. No obstante, nada de aquello pasó. Ni Scott tuvo fuerzas para intentar lo que había pasado por su mente en un fugaz segundo, ni las iba a tener de momento. En csmbio alzó la mano tímidamente y saludó en dos tiempos. Inicio el saludo cuando creyó que Lex le miraba y lo interrumpió cuándo ésta se giro un momento y prosiguió su saludo cuando volvió a mirarle.

Hola... — Dijo desde lejos, pero a menos que Lex supiera leer los labios, no le habría entendido. Por suerte su torpe gesto con la mano lo decía todo.

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26/11/2018, 01:03
Anne Steinbrenner

No pude evitar mirar a otro lado y poner los ojos en blanco al oir hablar a mi madre por el manos libres del coche.

- ¿En serio?- dije algo amargada cuando colgó -¿Vas a volver a irte?

Casi era mas una afirmación que una pregunta. Me había hecho ilusiones al oir que íbamos a ver le gran museo de Willy el Tuerto con los antiguos Goonies. Si, bueno, el museo no era un secreto. Seguramente sería como cualquier museo de cosas antiguas y tal. Era mas la ilusión de que por fin iba a poder estar con mi madre algún tiempo. Pero al parecer... no. A lo mejor ese era el motivo de por que mi padre nos abandonó. Mi madre nunca estaba en casa, los documentales fuera eran su emoción y aspiración en la vida. Mi padre siempre quiso un chico.

Y eso que me esforzaba mucho por ser la capitana, con méritos y todo, del equipo de baloncesto femenino.

- Bah.- Al menos me quedaba que Patrick iría a esa reunión. Y Lex...ummm. Me revolví algo inquieta en el asiento, puede que nerviosa, sobre todo al pensar en Lex. La prima de Patrick tenía la habilidad de ponerme nerviosa y exasperarme a partes iguales. Sobre todo cuanto hacía amiguitas como la Chearleader pija del Insti. Era maja y todo eso, pero la tontuna se contagia fácilmente y esas compañías no me gustaban para ella.

El coche paró y mi madre bajó. Ami me costó un poco mas.

Los padres empezaban a juntarse y saludarse, y sus hijos, bueno... pues hacían lo mismo. A través del cristal los veía saludarse. Era curioso que nos viéramos de vez en cuando y me diera la sensación de que era como la primera. Patrick estaba allí al fondo, con ...Lex. ¿Y esa? A vale, supongo que era la hija del chino ¿ O sería Japonés? Daba igual, sabía su nombre casi de casualidad. No había coincidido con ella tanto... ¿Y ese? Oh, no! Ha venido también el boca-chancla de Scott. ¿Que se esperaba de un chico que decía lo primero que se le venía a la cabeza? Llegó incluso a decir que su padre de joven también persiguió vampiros reales. Si claro! Y el padre de Lex era un Hoobit...

Suspiré y abrí la puerta del coche. A lo mejor esta vez era algo mas que una simple reunión. A lo mejor venia Caleb y esta vez Scott no le hacía ver cuantas patatas le cabían el la boca. Eso fue divertido, hasta que el chico empezó a toser escupiendo patatas por todos lados.

-Hey!- Salude a desde lejos acercándome a ellos.- Cuanto tiempo! - Dije dando un beso a todos.- A ti no, Patrick, que te veo todos los días!- Bromeé sacándole la lengua y dándole un puñetacito en el hombro.- Nihao?- Dije saludando a Emiko.- ¿Se dice así? La ultima vez te dije que intentaría aprender algo.. no se si lo he dicho bien- Sonreí dándola un abrazo.- Lex! Estas genial! Bonita cazadora.. espero que no te la haya prestado..tu..ejem.. amiga...- La guiñé un ojo. Esta vez no quería trifulcas. Ese dia no. A ver si había suerte y ahora nos lo pasábamos mejor que en el insti.

- Hey Scott! Vas a venir a darme un beso o te vas a quedar ahí para siempre -Animé al chico que parecía demasiado cortado. Es lo que tiene al edad del pavo...

Me faltaba alguien...

- ¿Y Caleb y Sarah?-

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26/11/2018, 09:18
Emiko

esto...bien, bien, estoy bien jeje Emocionada por ver la expo ¿y tu que tal estas?

No tuve tiempo de responder, porque enseguida empezaron a llegar los demás. Patrick me saludó... pero casi de pasada, porque se fue directa hacia Lex. Era siempre así. Cuando estaba su prima presente, parecía que no existía nadie más.

-Hola, Patrick -dije al final, en voz baja, sabiendo que no me oiría. Entonces llegaron Scott y Anne, que siempre era agradable conmigo.

-Hola, Scott -le dije a éste.

Nihao? ¿Se dice así? La ultima vez te dije que intentaría aprender algo.. no se si lo he dicho bien.

-Síiii -le respondí emocionada -. Es así. Nihao, Anna.

Me acerqué y le di un beso como saludo.

-¿Cómo creéis que será la exposición? -pregunté al grupo.

 

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26/11/2018, 13:13
Caleb Cohen

Mi padre me decía que no debía hacer chistes de mal gusto delante de sus amigos porque tenía una reputación que mantener, pero si todo lo que me había contado de sus aventuras cuando era niño era real, ¿a qué reputación se refería? ¿A cuando había vomitado encima de unas personas asomándose por una barandilla?

-Claro, mamá -le respondí a mi madre, en tono de niño bueno-. Nunca máz volveré a hacer lo de aquella vez...

Bajé del coche después que mis padres, comiéndome un sabroso Fozkito. Estaba muy bueno.

Me sorprendió que, para cuando llegamos, allí ya estábamos casi todos. La única que faltaba en esos momentos era Sarah.

-¡Hola, chicoz! -les saludé, con un gesto de mano y la boca llena de chocolate, nata y crema-. ¡Cuanto tiempo! ¿Qué tal eztáiz? ¿Zabéiz lo que me pasó la zemana pazada? -Me percaté entonces de que mi padre me dirigía una mirada severa y decidí que era mejor no contar aquella anécdota. Al menos, mientras hubiera adultos delante. No quería llevarme una reprimenda tan pronto-. Tranquiloz, tranquiloz, luego oz lo cuento...

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26/11/2018, 15:38
Alexandra "Lex" Walsh

La aparición de Patrick no se hizo esperar, a penas había formulado la pregunta de cortesía a Emiko cuando le vio salir del coche. Un instante después ya la había visto y avanzaba gritando vivazmente su nombre.

-¡Patrick! - respondió a su vez, devolviendo el abrazo con la misma efusividad con la que él se lo había dado. Un suspiro de satisfacción se escapo entre sus labios al encontrarse en los brazos de su persona favorita – y yo a ti Tricky Trick– al separarse su sonrisa era aún más radiante - esta vez te espera un verdadero reto - dijo con tono burlón arrugando ligeramente la nariz y sacando la punta de la lengua a su primo – pues claro que tengo ganas ¡¡¡llevamos una semana fantaseando con esto!!! ¿¡crees que tendrán expuestos los restos de Willy!?...se que quieren que la expo sea family friendly pero sería tope poder ver a Willy ¿no crees? - en ese momento volvió a reparar en Emiko, dándose cuenta que su entusiasmo por los restos de un pirata muerto no podía ser compartida por todos – emh...oh lo siento Emiko – se disculpo por si acaso rascándose distraída la nuca sin dejar de sonreír

Mientras intercambiaban saludos y la emoción por el museo más coches iban llegando, entre ellos pudo ver asomar una cabellera de rizos rubios, creyó ver que la saludaba tímidamente con la mano. Pero cuando iba a avanzar para ver mejor la aparición de Anne la distrajo por completo.

-¡Hola Any!- saludo devolviendo los dos besos, sin perder el ánimo. Incluso cuando soltó aquella pequeña pulla. Que obtuvo como respuesta una rápida y significativa mirada a Patrick, para hacer rodar sus cristalinos ojos verdes al cielo y fijarla de nuevo en ella – vamos Any, sabes perfectamente de donde ha salido esta chaqueta – por algo era su favorita, un regalo de su hermano Jason – ademas dudo que la delantera de Cheryl entrara aquí

Lex se había enamorado de aquella cazadora durante una breve visita a Seatle, cuando su hermano aún estaba estudiando allí, pero sus padres no habían querido comprársela porque era de “mayores” y muy cara. En cambio su hermano la compro en secreto y la guardo durante un par de años antes de dársela como regalo de cumpleaños, aunque a penas había comenzado a usarla ese mismo año. Si de algo se sentía acomplejada la joven goonie, aunque no lo demostrara, era de su escasa altura. Y falta de relleno.

Sí. Era cierto que ya tenia el cuerpo de una señorita, empezando a verse sus futuras formas de mujer pero a veces no podía evitar sentir que todos a su alrededor crecían y ella no. Sobre todo con Anne al lado, que cuando se arreglaba parecía una modelo, levantando las envidias de Cheryl y las demas cheerleaders. Claro que su padre insistía en decir que ser pequeña y manejable tenía sus ventajas, tras lo cuál siempre guiñaba un ojo a su madre arrancándole una risita. Estaba segura que se perdía algo pero no sabía el que.

Salió de sus cavilaciones cuando Anne saludo a Scott, pidiendo que se acercara. Entonces pudo verlo con claridad saliendo por completo de detrás del coche, seguido por su padre.

-¡Scott! - le llamó con sorpresa abriendo mucho los ojos.

Normal que no lo reconociera, había dado un estirón desde la última vez que se había visto, según se acerco pudo ver que estaba casi tan alto como Patrick y este le sacaba una cabeza. En cuanto estuvo junto a ellos se adelanto a Anne dando un estrecho abrazo al chico y seguidamente dos besos.

-Cuanto me alegro de ver que finalmente te has animado a venir – dijo dando un paso atrás, dejando espació para que pudiera saludar a los demás – te aseguro que no te vas a arrepentir, lo pasaremos genial ya veras – dirigió una mirada a su primo junto a ella y luego volvió a mirar al recién llegado – este es Patrick

Una presentación rápida y escueta. Al mismo tiempo, mientras que Emiko se interesaba por las opiniones de los demás por la exposición, Anne lo hacía preguntando por Sarah y Caleb. Y como si de una invocación se tratara este último apareció de repente.

-Hola Caleb – saludo al pequeño del grupo, aunque en ese momento no estaba segura si lo era él o Scott; para disimular decidió contestar a las preguntas de las dos chicas- bueno solo falta Sarah. Sobre la expo ¡¡¡espero que sea asombrosa!!! No espero menos de ella

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26/11/2018, 18:35
Sarah Turner

La invitación que había llegado a casa era una gran oportunidad de volver a Astoria, ya que llevábamos bastante tiempo sin ir a la casa de los abuelos que mi madre seguía manteniendo. Lo echaba de menos y siempre que podía le daba la lata a mi madre pidiéndole ir, pero ella estaba demasiado ocupada con su maldita tienda y su empeño por controlarme, de hecho la invitación había sido un nuevo motivo de discusión en casa ya que, mientras que a mi padre y a mí nos apetecía un montón, especialmente a mí que me moría de ganas por ver todas esas cosas de las que había oído hablar toda mi vida, mi madre no estaba nada convencida. Como siempre ella tenía que ser la aguafiestas.

Pero lo había conseguido, había logrado convencerla a base de prometerle que me arreglaría más y más a menudo, por suerte para mí en la promesa no iba incluido el día que tenía que empezar a vestirme de repollo. Y ahí estábamos metidos en el coche rumbo a Astoria, con la música de mi padre creando un ambiente tranquilo sólo roto, de vez en cuando, por los pesados y mil veces repetidos consejos de mi madre: Ni se te ocurra comer esas porquerías que comen tus amigos; siéntate recta; deberías haberte puesto un vestido y no esos horribles vaqueros con las botas que, el día menos pensado acabarán en la basura;... Horrible, por suerte hacía ya tiempo que había aprendido a abstraerme para pasar de ella, y el tiempo que duró el viaje me dediqué a soñar despierta mientras observaba el paisaje por la ventanilla, sintiendo como, a medida que nos acercábamos a nuestro destino, los nervios se iban apoderando de mí.

No conocía a todos los chicos que nos reuniríamos y alos que conocía, hacía mucho tiempo que no los veía, de ahí mi ansiedad. Por eso, cuando por fin llegamos al aparcamiento, tardé un par de minutos en atreverme a bajar del coche, observando a los que ya habían llegado que eran todos porque, para no perder la costumbre, nosotros éramos los últimos. Ahí está Patrick con sus groupies. Respiré hondo mientras abría la portezuela, con tan mala suerte que mi pie quedó enredado en el cinturón de seguridad haciéndome trastabillar, cayendo de rodillas al suelo con las manos por delante. Bonita manera de hacer mi entrada.

Roja como un tomate, con el pelo revuelto y las manos enrojecidas, me puse en pie sin atreverme a mirar al grupito que se saludaba efusivamente y me tomé mi tiempo sacudiéndome los pantalones llenos de tierra. Volví a respirar hondo antes de coger el valor suficiente para enfrentarme a aquel trago.

Hola chicos, ¿qué tal? —pregunté de manera general mientras levantaba la mano a modo de saludo