Partida Rol por web

Observo con curiosidad Mauricio cambiar de color intentando controlar a duras penas la ira que siente por la respuesta de Frida. Cuando me lanza las monedas me sorprende pero consigo controlar la bolsa sin que se caiga ninguna moneda.

Vale, entonces parece decidido que mantenemos el fondo común hasta que alguien quiera dividir su parte. Digo con tranquilidad. Después me dirigo a la anciana maga.

Señora, ha sido un placer hacer negocios con usted, hasta la próxima.

Salgo de la tienda acabando de meter las pociones entre mis pertenencias y sigo a Mauricio.

Espera hombre, yo también quiero visitar la tienda de armas, no tengas tanta prisa.

Digo sin apretar el paso para alcanzarle.

-¡Hey, no se vayan sin mí!- apurada, salí detrás de mis compañeros para ir a la herrería. -¡Adiós señora Frida! Ha sido un gusto conocerla-

 Por los dioses....ahora de nuevo hacia alli? podria haberme ido al burdel, al menos alli tendria un buen trago que dar.

Los sigue con el yelmo bajo el brazo, con paso pesado a causa de la pesada armadura, pero ligero, ya que estaba acostumbrado a ello. Los sigue ...pero se regaza un poco, quizas lo del burdel no habia sido tan mala idea.

Podria ir al burdel mientras ellos van a la herreria? jejejejeje 

Acaso a mi pj eso le interesa? XDDDDD, tranqui, dos cervezas y vuelvo a casa de nestor, quien sabe, a lo mejor soy yo quien llega antes XDDDDD. me gustaria ir un rato ^^ 

Emprendes el camino hacia el burdel ya que quieres mojar el gaznate con una fresquita y burbujeante cerveza y ya de paso deleitarte con las vistas que el burdel te ofrece.

Tardas bastante tiempo en llegar ya que está en la otra punta de la ciudad, pero al llegar allí, madame Sirula te reconoce y se ilumina su mirada. Corriendo se acerca a ti y te da la bienvenida nuevamente.

Vaya por dios! A quien tenemos aquí? Si es el más guapo, simpático y fortachón de mis clientes... ves que mira al rededor como buscando algo Y veo que viene solo, donde está el pequeñin? No importa, te sirvo algo?

 Kraull agarra la mano de Madame Sirula para besarla con agrado y guiñandole un ojo ala madame.

-Madame Sirula, dichosos mis ojos de poder volver a veros, a vos y vuesrtas acompañantes claro está. Me dije, quien mejor para dictar mi nueva armadura, que mujeres de esplendida belleza? quisiera vuestra opinion claro está, y quien sabe si me la dejo quitar.

Sonrie de forma algo perversa.

-Ponedme una cerveza bien fria Madame, mi garganta está seca, y mis compañeros ocupados. ¿El pequeño decis? Dejad de pensar en el, enano casto y puro, sacerdote de los dioses. No creoq eu le gustara estar entre tanta tentacion

Observa a la chicas con una sonrisa.

Alex, que haces a continuacion? los demás ya se han ido a la herrería y tu te has quedado rezagado...

Salís de la tienda de magia y os encamináis a la herrería. Con paso lento pero firme, Mauricio va delante y Burlat y Lalaith le siguen el paso. Veis como Kraull se va en otra dirección (Burlat sabe que esa dirección lleva al lugar que visitaron por la mañana). Alexander se queda rezagado y Lacross va directo a casa del mago. Enseguida los perdéis de vista a los tres.

El constante sonido del martillo golpeando el acero se puede oir desde bien lejos. Cuando llegais, veis al herrero afaenado en su tarea en la fragua mientras en la puerta de la tienda de armas, que está justo al lado, está el dependiente fumando una pipa e intentando hacer circulos con el humo al expulsarlo, pero no le sale ninguno. Al ver que tiene clientela, el dependiente os invita a pasar a la tienda de armas.

Dentro podeis ver una gran cantidad de armas y armaduras de todos los tipos, espadas cortas y largas, espadones, hachas, martillos de guerra, arcos y flechaa, jabalinas y lanzas, cascos, botas, escudos... y una puerta que conecta directamente con la herrería, de donde viene el martilleo del herrero y el calor del fuego de la fragua.

Buenos días amigos. Mi nombre es Ambrosio, dueño de esta tienda de armas. De fondo escuchais al herrero gritar "Ambrosio, ya está bien de hacer esa bromita". Socio del dueño de esta tienda de armas se corrige a si mismo gracias a que el herrero le recuerda que no está solo en el negocio.
Utimamente no han visitado mi tienda muchos aventureros, y eso que Frencia es un lugar de paso bastante frecuente, aunque el día de hoy estamos de suerte ya que hace un rato vino un hombre moreno y fortachón, bastante alto por cierto, y se llevó una armadura bastante buena... perdón, siempre hablo más de la cuenta, ¿en qué puedo ayudaros?

hola, mi nombre es Burlat Barkil. Estoy interesado en comprar algún tipo de cuchillo, especialmente si son arrojadizos. supongo que no tendrán ningún arma exótica, como estrellas shuriken ¿no?

-Chicos si no os importa, me voy a adelantar y me voy a casa de Nestor, no tengo nada que comprar en la herrería y me vendría bien un rato en solitario y tranquilo-Mientras les hablo, sigo mirando al suelo como de costumbre. Tras decir éstas palabras me separo del grupo y junto a mi fiel amigo Nobu, parto hacia la casa de Nestor.

Oooh! armas arrojadizas... mis favoritas! le contesta Ambrosio a Burlat Tengo una buena selección de dagas y cuchillos arrojadizos, asi como de shuriken... ésta última es un arma bastante exótica, los ninjas y los monjes las suelen usar mucho. ¿Te interesa también algún tipo de guante de lucha? te dice y sin darte tiempo a que puedas contestarle te empieza a enseñar las armas.

 Mauricio espera a que el hombre le exponga sus artigulos a Burlat, y luego le dice al herrero -Estoy buscando algun hacha o una maza, para usarla a dos manos, que tienes para ofrecerme- pregunta el enano con habitual gruñido, y rapidamente añade - Y tambien me gustaria una armadura- al pasar unos segundos agrega - Puedes decirme Mauricio.

El enano por un momento se olvido de todo lo que sucedia a su alrededor, y contemplo maravillado la cantidad de armas y armaduras, esto sera interesante - penso para si - y continuo observando los objetos en cuanto el Herrero no lo atendia.

Observo con interes los objetos que me muestra el tendero mientras sopeso en mi mano la bolsa donde guardo mis monedas y me decido por no gastar mucho dinero en la herrería.

- Me llevaré los guanteletes de cuero, un shuriken y 2 cuchillos arrojadizos. 90 monedas aquí tiene usted.

Digo mientras le pongo las monedas en el mostrador.

Excelente elección, señor. Aquí tiene. Le dice Ambrosio a Burlat. Bueeeno, Mauricio, ahora vamos contigo! Armadura y arma a dos manos, verdad? Mira por aquí. Le dice a Mauricio, mostrándole el arsenal y los distintos tipos de armaduras que tiene en la tienda.

Llegas a casa de Nestor enseguida. La zona parece calmada, totalmente distinta a como estaba esta mañana. Ahora no hay ni guardias, ni vecinos fisgones, a pesar de que todavía es de día.

La puerta está cerrada pero como tienes la llave no tienes problemas para entrar. La casa de Nestor por dentro es un auténtico caos! La estancia principal consta de una mesa grande y un candil, varias sillas bolcadas a su alrededor, hojas y libros tirados por el suelo y cubriendo la mesa, tres estanterías desordenadas y repletas de más libros y algun que otro frasco de cristal con líquido dentro. Conforme entras, al fondo también hay una chimenea y a ambos lados de esta una puerta. Una da al exterior, a lo que parece ser un pequeño patio. La otra da a otra estancia que desde tu posición no puedes ver exactamente lo que hay porque la puerta está casi entornada.

¿Qué haces a continuación?

Madre mía, que desorden, ya podrían los guardias haber dejado esto un poco mejor. -Mientras un sinfín de pensamientos contradictorios pasaban por mi cabeza, me puse a mirar los libros y documentos varios que yacían por la estancia, a observar los experimentos de mi viejo amigo y a explorar un poco entre el caos que había en la casa.

Cuando terminé de mirar el salón me percaté de las dos estancias que había a ambos lados de la chimenea, una de las puertas estaba entornada, la curiosidad me impulsaba a abrirla, aunque la racionalidad me decía que debía ser prudente, por lo que me acerqué con cuidado, hice un gesto a mi amigo para que se mantuviese quieto a mi lado y abriendo lentamente la puerta, me asomé a ver que se escondía tras dicha puerta.

Al ver los precios se quedo realmente apenado, le gustaba muchisimo la armadura completa, pero por problemas economicos tuvo que decidirse finalmente por la armadura de placas, y al momento de elegir el arma, la espada era visiblemente la mejor, pero no le gustaban ese tipo de armas, le quedaban demasiado largas, por lo tanto eligio el martillo de guerra, luego de comunicarselo al herrero puso las 680 monedas en la mesa, pero no se las entrego al herrero hasta que este no le diese sus pertenencias.

Tras quedarme mirando algunas curiosidades en la tienda de magia, me doy cuenta de que se fueron todos, salgo algo apurado hacia la herreria, espero encontrar algo de mi agrado..

Ambrosio y Mauricio terminan de hacer la transacción cuando en ese momento entra Alexander por la puerta de la tienda.

Vaya por dios, otro cliente más! grita con excitación Ambrosio al ver pasar a Alexander. Su cara se ilumina al saber que las ventas del día de hoy seguirian creciendo con el elfo que acababa de llegar. Bienvendio! Me llamo Ambrosio. ¿En qué puedo ayudarte? Como verás aquí tenemos un gran surtido de armas y armaduras.