Partida Rol por web

Sullivan vio como los alemanes escapaban corriendo e hizo señas al resto del pelotón para que avanzaran hacia... hacia donde estaba el sargento que había avanzado como un inconsciente y casi se había comido un proyectil de bazooca.

Cambió el cargador de su BAR y avanzó una vez que todos se reunieron en los setos, entre los alemanes muertos.

—Hmmm— dijo mirando los cadáveres. —El problema es que ellos nunca tienen nada rico de comer.

Sacó una chocolatina de su equipaje y se puso a comerla. A pequeños mordisquitos, tenía que durarle.

- Mi sargento, ¿está bien? ¡Menuda carnicería hemos montado! - dice Bog al alcanzar la posición de Miller.

Esta usted herido, soldado. - dice a modo de respuesta el sargento. Observa el hombro de Bog - Ha tenido suerte, es solo una herida superficial. Es usted valiente, Bogdanos, respeto eso. Pero la proxima vez que decida ignorar las ordenes quizas le maten o ponga en peligro la mision.  Si piensa hacerlo, digalo ahora y me encargare de acelerar su destino. - le espeta sin un atisbo de sonrisa

có una chocolatina de su equipaje y se puso a comerla. A pequeños mordisquitos, tenía que durarle.

Fatty venderia su herencia por un plato de lentejas - pensó Miller. Suspiró levemente. Sullivan se habia jugado el pellejo yendo al arbol y protegiendole con su fuego cruzado. Una chocolatina, al menos, se merecia.

Buen trabajo, Sullivan - le dice con una palmada al hombro.

El resto del grupo llega, y Miller se cuadra ante el teniente.

La posicion ha sido tomada, señor. Sin bajas. - dice serio

No gracias a usted

Sugiero que continuemos antes de que lleguen refuerzos , señor, - continua - y tengamos que abortar la mision. El soldado Bogdanos tiene una herida en el hombro pero es superficial. Quizas el mexicano le pueda vendar justo antes del asalto a la colina.

- Buen trabajo a la avanzadilla. Hemos acabado con dos puestos nazis sin una sola baja.

Somos muy buenos o muy afortunados.

Reuniéndose con el resto del pelotón, Hayden revisa el equipo abandonado por los alemanes por si hubiera algo de utilizad.

Aunque sean más chocolatinas...

- Señor, - no queda muy claro si se dirige al sargento o al teniente - deberíamos destruir o inutilizar estar ametralladoras. 

Miller asiente ante las palabras del viejo soldado, sin saber que se ha dedicado a pasear por el campo de batalla.

Buena idea, Johnson - le dice - Hagalo.

- Buen trabajo muchachos - asiente el teniente contento - Ahora deberíamos tener vía libre hasta St Lo. Y de ahí a la colina - parece que algo de esperanza ha enraizado en el teniente.

-Algun herido?-
Pregunte algo avergonzado por no haber participado en el ataque.
y me acerque a un soldado que habia recibido una herida del reciente combate.
-Ala, y con este parche ya estas listo para el combate- dije mientras se desinfectaba la zona herida

- Esperemos unos minutos para recuperar fuerzas antes de avanzar - ordena el teniente mientras mira como Alberto parchea a Bogdanos - Sargento, encargase de mantener la posición segura.

Fatty, mientras el médico hispano curaba al pesado de Bogdanos se dedicó a registrar a los Nazis, quitándoles todas sus medallas y objetos de valor. Y mirando si tenían algunas órdenes escritas.

—Tomad chicos. ¡Medallas Krauts traídas de Rusia! No pudieron parar buenas balas americanas. Aquí no somos como esos comunistas ateos. Aquí disparamos con la fuerza de la libertad.

Buena idea, Johnson - le dice - Hagalo.

- Si señor, no será complicado

Hayden inutiliza sin problemas la otra ametralladora alemana.

Bog aprieta los dientes mientras Martínez le parchea. Parece que la bala salió limpiamente por el otro lado.
- Eh, gracias, hijo de puta*.
Martínez** primero abrió los ojos de par en par sorprendido, y luego meneó la cabeza atónito ante la aparente infinita capacidad de estupidez de los americanos.

Sargento, encargase de mantener la posición segura.

 Si, señor. - responde Miller y se pone a repartir ordenes - Underwood, Henry. Quiero una ametralladora en esa esquina. Dodson, muevase a aquel punto y avise si hay movimiento enemigo en nuestra direccion. Walker... - el sargento continua minuciosamente, para evitar ninguna sorpresa.

Los alemanes no tenían ninguna medalla bonita, aún así, John les quitó las insignias de rango, seguro que podía venderlas o exponerlas luego en casa, los cigarrillos los dejó encima de uno de los cuerpos, por si sus compañeros querían. 

Bah... ¿Quién querría fumar... meterse humo por la nariz? Es una mierda, sabe a ceniza... ¡Y encima luego la comida sabe peor! El gordo tenía claro que eso era el peor de los crímenes, había empezado a fumar pero lo había dejado hacía tiempo por esa razón. Curiosamente aunque estaba bastante gordo, aguantaba lo mismo que sus compañeros, que tosían seguro por asqueroso tabaco.

Tiene todo tipo de beneficios, dicen, contra las miasmas, no se si creérmelo, pero si quita el sabor a la comida... prefiero morir joven después de haber saboreado todo tipo de cosas. 

Atendió las indicaciones del sargento, ese si que era un cafre que lideraba a sus hombres con el ejemplo. Se aseguro que su arma estaba totalmente cargada y preparada. No quería cagarla. 

- Ya hemos perdido bastante tiempo, en marcha - ordena el teniente mientras se levanta en cuanto ve que Alberto ha acabado de remendar a Bog.

Ante las palabras del teniente, John se guardo el resto de la chocolatina y se preparó a ver como el sargento les ordenaba avanzar.

El teniente decía que era lo que tenían que hacer, pero era el Sargento el que les decía el cómo.

Vamos, vamos, vamos! - el sargento empuja a los mas remolones - Bogdanos, frente. Johnsson y Underwood, retaguardia, Albertou. No. Ruido. Sullivan... - Miller coloca a sus hombres en formacion para continuar la mision