Flogdegnurt no intervenía pero permanecía atento durante toda la conversación intentando con escaso éxito entender lo que hablaban. Hasta donde podía entender aquella Elowne había intentado envenenar o hechizar a los reyes con un bebedizo. Allí de donde procedía, esa confesión habría garantizado una muerta inmediata para ella y cualquier colaborador que tuviese. Y un castigo ejemplar a quienes le encubriesen.
-¿Podríaz proporcionarnoz una mueztra de ezoz polvoz?-se atrevió finalmente a preguntar el goblin-.
Ante las preguntas de Flog y Bastia Elowne, entre lagrimas, señala con la cabeza a la bolsa que ha cogido Varag.
- Hamid tiene una tienda al lado sur del Parque Central, justo al lado de los restos de la antigua muralla, en una de las casas que se apiñan contra ella.
Tirada oculta
Motivo: Lalal
Tirada: 1d2
Resultado: 2
Tirada oculta
Motivo: Lalal
Tirada: 1d20
Resultado: 2
Hay algo que no entiendo. Llevan 6 años ahi... Cuanto llevan sin conseguir tener hijos?
Evidentemente se han puesto al tema recientemente...
Varag, guarda la bolsa hasta que podamos analizarla como debe.
Y añade dirigiéndose a la sirvienta.
- No deberías tomar decisiones de este tipo por tu cuenta. Imagina que sí fueran venenosas aunque pasen los análisis. ¡Serías la primera sospechosa! ¿La reina, al menos, sabe que las toman?... Y, por cierto, ¿tú has intentado tener prole?
-Creo que tenemoz que ir a hablar con este tal Hamid de inmediato-dijo Flogdegnurt que por fín comenzaba a encontrar sentido a todo esto.
- No - dice temblando la joven - Su majestad no sabe nada. Y yo tengo 3 niños, que dependen de mi trabajo en palacio para comer - añade entre sollozos.
Próxima acción:
- Ir a ver Hamid: Flog.
Norm empatizaba con la pobre mujer. —No tomemos decisiones precipitadas. Ese mismo alquimista pudo encantar a la mujer para que echara la extraña substancia. Seguramente ella no tiene esas protecciones mágicas que disfrutan los reyes.
Norm. Ir a ver al alquimista.
Alquimista, está claro. Pero antes yo contactaría con otro alquimista y analizaría la sustancia.
“Softy” había estado en silencio todo el tiempo. Se había vuelto a colocar la capucha y se mantuvo en actitud pensativa, con la mirada perdida, solo siguiendo al grupo pero sin prestar atención… su mente sopesaba varias cosas de peso mientras decidía si aquel sería un nuevo momento clave en su vida.
Finalmente lo tuvo decidido.
— Compañeros. — Llamó la atención de todos — Parece que Frank tenía razón — Dijo esbozando una fugaz sonrisa torcida que hizo visible su inmaculadamente blanco colmillo. — No tengo madera para los Exploradores grises de Grayson… ni para “los trabajos de Frank”. Para ustedes… soy inútil. Lo único que tengo para ofrecer es lucir bien y hablar varias lenguas, y miren como me veo… y miren para lo que ha servido saber idiomas. No soy fuerte, no tengo más que fina tela como armadura y tampoco me veo usando algo más; si al menos supiese tratar heridas... pero apenas logré mantener vivo por el tiempo suficiente a aquel niño. — Se dio cuenta de que se estaba dilatando demasiado en su aviso, por lo que procedió a quitarse la capa de Explorador la cual dobló con una magnifica prolijidad, “Softy” había estado usando la capa para abrochar a esta los harapos de su vestido y así mantener su torso cubierto, pero una vez se la quitó estos cayeron hasta quedar colgando de la cintura gracias a un cinturón. Bastia entonces notó algo extraño. Entonces “Softy” se acercó al pequeño “Flog” para entregársela. — Flog, tu, fuiste quien mejor se portó conmigo, siempre recordaré con cariño la forma en como me llamabas “gatita”, y como pronuncias tanto la “z”… es muy simpático, aunque denote tu falta del dominio del Galean, sin ofender. — Entonces se apartó de nuevo y se volvió a dirigir al resto del grupo — He decidido encargarme de un asunto que deje pendiente, aunque me tome el resto de mi vida debo romper mis cadenas. Hay una ciudad, llamada Barrinor, a ocho o diez días a pie siguiendo el río Vital desde Mara hacia el norte. Quizás, con algo de suerte, alguno de ustedes pueda pasar un buen día por allí, dentro de un par de años, y me encuentre trabajando como aprendiz… traduciendo papeles. De ser así, yo invito la cena. Desearía que ese día llegase y todos nos reunamos, estando todos aun vivos. — Dijo, menteniendose un momento con gesto pensativo y algo apesadumbrado. Entonces, al menos Bastia, notó que ni siquiera una de esas versiones pigmeas de su raza podría tener tan poco busto, ahora al descubierto se podía ver claramente la falta de este, y pese a su delicado cuerpo y voz… supo que se trataba de un Brinchie macho.
Simplemente procedió a darse media vuelta, agitando su cola dándose un empujón de decisión pero manteniéndola baja debido al escaso orgullo que sentía de sí en ese momento, y se dispuso a marcharse.
Así es. "Softy" siempre fue un macho. Si no me creen preguntenselo a Javi a quien se lo aclaré desde un principio. Por eso, desde mi primer post incluyendo su historia yo evite en todo momento dar referencias de genero, no aceptando la creencia de que fuera hembra como daba a pensar su imagen pero tampoco negandolo. Tenia pensado que se revelase poco a poco, de otra manera, como lo de mi post anterior donde se vio que siempre había estado usando peluca (la que recogió de aquel carruaje asaltado y que siempre estuvo en ingles en su Equipo).
Fue porque al ver la imagen enseguida me dije que esa era la imagen mental que tenia de mi personaje, pero como venia con vestido y peluca... pues le dí su parte en la historia suya. Y si, Sadín era bisexual, pues.
Ahora "Softy" iría a recoperarse y prepararse para ir a enfrentar al que fue su amo. Tal y como le indicó su visión de la Diosa.
Sinceramente me habría gustado que Javi, como Master, hubiese tomado al personaje de Sadín para aunque sea una aparición pequeña en la historia... un personaje por ahí como lo fue el nigromante, con eso me bastaría.
Y Javi... no sé por que en el MP me hablas de matar a Softy cuando Yabiz abandono hace mucho tiempo antes la partida y aun esta en el aire sin que nadie lo haya matado.
~~Para ustedes… soy inútil.
Varag suspiró. Era mejor así, seguramente. Mejor que cargar el peso de la muerte de la brinchie a sus espaldas.
No todo el mundo esta hecho para ser Explorador, Brinchie. No hay ninguna verguenza o humillación en eso. Que los Poderes te guien en tu camino.
Mientras Softy habla. Elowne se pone a recoger la bandeja y los quesos aún entre sollozos.
- Si no les importa, ya que han acabado conmigo, vuelvo a la cocina, a por otros quesos - pregunta antes de marcharse.
Y Javi... no sé por que en el MP me hablas de matar a Softy cuando Yabiz abandono hace mucho tiempo antes la partida y aun esta en el aire sin que nadie lo haya matado.
Ciertamente en eso tienes razón. Pero tranquilo que a Yabiz ya le llegara la hora ;).
Os dejo algo de tiempo por si queréis reaccionar a Softy antes de seguir con el alquimista.
La despedida de Softy cogió a Flogdegnurt desconcertado, más aún que el hecho de que fuera un macho. Si alguien estaba fuera de lugar, ese era él, moviéndose entre pomposos cortesanos y praticipando en cuestiones que apenas alcanzaba a comprender. Se sentía poco más que un estorbo. Y sin embargo, no se le había pasado por la cabeza abandonar.
Recogió la capa que éste le entregó sin saber bien qué decir o qué hacer.
-No zaber bien Galean, cierto. Ni nada de Brinchiez, pero a Flogdegnurt guzta Softy. Amiga...¡amigo!. Hazta que caminoz cruzar otra vez, suerte. Uzgutal guiar en tu camino.
El pequeño goblin entregó a Softy una pequeña flecha de las que llevaba en su carcaj.
-Doz plumaz negraz y una verde. Ziempre. Tu guardar de recuerdo.
Encontrar la tienda de Hamid es bastante fácil, en poco minutos el grupo esta en ella. Es una casona grande y céntrica pero en mal estado de conservación, únicamente el piso de abajo parece estar restaurado y en condiciones habitables.
La parte de adelante de la tienda consiste en una pequeña estancia con un mostrador y tras el varias estanterías llena de jarras, viales y tarros medio llenos de los más diversos colores. Una puerta abierta y grande da a la trastienda de donde sale un hombre mayor, con una cuidad barba blanca, sonriente.
- ¿Puedo ayudarles en algo, señores?, ¿alguna poción?, ¿de curación por casualidad?. - al fijarse en las capas grises la sonrisa se le congela en la cara. - Mi nombre es Hamid, soy el dueño de este establecimiento: ¿Algún problema?.
Tirada oculta
Motivo: Lalal
Tirada: 1d20
Resultado: 12
~~ la sonrisa se le congela en la cara.
Varag no tenía claro si el hombre habia perdido la sonrisa porque eran Exploradores o por ser un grupo tan variopinto. Lo que estaba claro es que escondía algo. Varag lanzó la bolsita con los polvos a la mesa.
Habla - dijo simplemente.
Tirada de Protagonista
Motivo: PNJ Abot Intimidar
Dado principal (1d8): 4 = 4
Dado salvaje (1d6): 3 = 3
Total: 4 = 4
Dificultad: 4
Resultado: Exito
Tiro Intimidar con los dados de Rorro, que esta AFK
El alquimista se queda en blanco mirando el saquito y el polvo que se escurre de el. Intenta abrir la boca varias veces, hasta que finalmente lo logra.
- Son inocuos no hacen nada. - contesta - De verdad, se puede comprobar, esos polvos solo son un placebo. - reflexiona unos segundos - No es quisiera engañar a la joven es que pedía imposibles. Algo efectivo no pasaría tantos filtros mágicos.
Poco a poco parece recobrar la compostura.
- Por supuesto le devolveré todo el dinero - añade ya con aire de dominar la conversación.
Norm miró con cara de poquísimos amigos al Alquimista —¿Nada de nada? ¿Filtros mágicos? ¿Cómo sabía que tendría que pasar filtros mágicos? —la mujer les había dicho que no había informado al alquimista de para quién iban los polvos.
—Puede que no sea mágico, pero algo era. Cualquier cosa extraña en esa comida es un delito.
¿Vendía Homeopatía? MATEMOSLE
¿Nada de nada? ¿Filtros mágicos? ¿Cómo sabía que tendría que pasar filtros mágicos?
- Lo comento la cliente, comento todos los filtros, mágicos o no por los que tendrían que pasar los polvos. Era imposible venderle nada que los superara. - el tono es profesional y recupera aún más el control - Como profesional, dado el interés de la joven, decidí que darle un placebo era mejor que no darle nada. Un placebo es una sustancia que no hace nada, pero que la persona que la toma piensa que si. - añade como explicación - Muchas veces es muy útil en la medicina alquímica.
—Puede que no sea mágico, pero algo era. Cualquier cosa extraña en esa comida es un delito.
- ¿En la comida de quien? - La pregunta rompe la apariencia de profesionalidad y el alquimista no puede evitar sudar y que el tono de voz sea más agudo que antes.
Flogdegnurt escuchaba las palabras del viejo con atención. Después de todo, el reputado alquimista no parecía ser más que un vulgar timador.
-Nozotroz no rezponder tuz preguntaz,. Tu rezponde laz de nozotroz ¿Porqué mejor placebo que nada? Dinero. Placebo no: Eztafa ¿Tú conocer comprador?
Bastia tenía la intención de empezar pidiendo un producto para una supuesta mujer de Norm, ya que de esa forma hubiesen tenido una muestra con la que comparar.
Pero esperó a entrar la última, para asegurarse que nadie les siguiese, y para cuando accedió a la tienda ya habían mostrado la bolsa que llevaban y habían dejado caer que era para alguien importante.
A lo hecho, pecho.
¿Qué es lo que lleva exactamente? - preguntó Bastia sin apartar las manos de los pomos de sus espadas.
Tirada oculta
Tirada de Protagonista
Motivo: Percepción
Dado principal (1d4): 4+(1) = 5
Dado salvaje (1d6): 3 = 3
Total: 5 = 5
Dificultad: 4
Resultado: Exito
Javi, dejo tirada para comprobar si alguien nos seguía al ir a la tienda.
Nozotroz no rezponder tuz preguntaz,. Tu rezponde laz de nozotroz ¿Porqué mejor placebo que nada? Dinero. Placebo no: Eztafa ¿Tú conocer comprador?
- A veces el placebo cura. No, no conozco de nada a la muchacha, solo lo que me contó cuando vino a buscar el producto.
¿Qué es lo que lleva exactamente?
La pregunta parece sorprender a Hamid que se queda callado durante unos segundos bastantes largos, como pensando que responder, el sudor le corre por la cara más abundantemente.
- No me acuerdo exactamente. - contesta finalmente. - Pero es inocuo. Eso seguro.
En la casa de enfrente había una mujer apoyada en la pared, que se fija en vosotros. En cuanto entráis en la tienda se va apresuradamente.