- Pues más vale que hagas memoria y nos digas qué lleva y qué puede preocuparte quien lo coma... o voy a hacer una pócima para restaurarte la memoria, así, como placebo, mezclando un poco de ahí y otro poco de allá - añade señalando los frascos con la pinta más infame - ... y ¡oye! No te preocupes si se te atasca en la garganta, que mi amiga tigresa te la ayudará empujando con la espada cuello abajo.
No sé si puedo intimidar de nuevo o no, como ya tiraron por mí. Pero el caso es que la cosa se le está poniendo fea, somos 5 y él está muy nervioso como para que lo dejemos escapar
Flogdegnurt se rascaba la cabeza intentando entender lo que aquel humano decía.
-¿Humano creer nozotroz tontoz?-dijo mirándolo con desconcierto-¿Como zaber que zer inocuo zi no recordar qué lleva? Mejor zerá que hagaz memoria , charlatán o te la zacaremoz con tenazaz.
Hamid pasa por todos los colores posibles de cara para un humano, incluso adquiere varios que normalmente solo son posibles en los goblinoides.
- No lo recuerdo, pero se que es inocua - tose - Pero por supuesto guardo registro de todas mis formulas - revuelve en unos cajones del mostrador y saca un libro, pasa varias hojas hasta que señala una - Aquí esta, no es necesario enfadarse - señala una lista de media docenas de hierbas y minerales varios - Totalmente inocua, como he dicho.
Alguien estaba vigilando la tienda. - dijo Bastia en ese momento. - No sé si por él o por nosotros, así que estad atentos.
Arrancad esa hoja y podremos asegurarnos que la bolsa contiene lo que él dice. En caso contrario, - mira al hombre con dureza y enseña los colmillos - yo misma le cortaré la mano como castigo.
Se colocó en un lateral de la puerta y observó la calle para comprobar si volvía a ver a la muchacha o se acercaba alguien que pudiese suponer un problema.
La calle parece tranquila bajo la atenta vigilancia de Bastia.
¿Algo más o entiendo que os vais (con la hoja y los polvos)?
En ese caso, ¿siguiente paso?.
- Comprobar que la hoja y el polvo son lo mismo (¿como?).
- Hacer algo sobre los que estaban vigilando (¿qué?).
- Ir a hablar con el sumo sacerdote.
- Revisar la alcoba.
- Otros que no se me han ocurrido.
-Zería interezante dezcubrir quién la vigilaba y zeguirle hazta donde zea que vaya al marcharze de aquí. ¿Dónde eztá ezcondido eze ezpía?
Flogdegnurt echó un vistazo al exterior, por si fuese capaz de ver al espía del que hablaba Bastia.
Flog por desgracia no es capaz de ver nada interesante en el exterior.
En ese caso, ¿siguiente paso?.
- Comprobar que la hoja y el polvo son lo mismo (¿como?).
- Hacer algo sobre los que estaban vigilando (¿qué?): 1 voto Flog.
- Ir a hablar con el sumo sacerdote.
- Revisar la alcoba.
- Otros que no se me han ocurrido.
Era una humana, Flog, y marchó rápidamente tan pronto entramos. - respondió al goblinoide. - La duda es si nos seguían a nosotros o si vigilaban la tienda. Coged la bolsa y la receta, ya conseguiremos analizar si coincide.
Regresemos y quizá nos puedan recomendar otro alquimista.
Voto por la volver a palacio a registar la alcoba y, de paso, preguntar al secretario por un alquimista que no sea éste.
De no haber más votos mañana iréis a buscar otro alquimista (preguntando al secretario).
---------------------------
- Comprobar que la hoja y el polvo son lo mismo llevándolo a otro alquimista: Bastia.
- Hacer algo sobre los que estaban vigilando (¿qué?): 1 voto Flog.
- Ir a hablar con el sumo sacerdote.
- Revisar la alcoba. Bastia.
- Otros que no se me han ocurrido.
Una vez que abandonaron la tienducha del alquimista Abot reafirmó los planes de Bastia
A mí también me parece bien contactar con otro alquimista mediante el secretario, aunque me gustaría plantearle la existencia de la bolsa de un modo que parezca implicarlo a él, a ver cómo reacciona.
Y asegurándose que nadie fuera del grupo escuchaba, añadió
Por otro lado, creo que nosotros también deberíamos poner bajo vigilancia la tienda y a Hamid; para controlar si vuelve la humana que vio Bastia u otra persona y también para ver qué hace a continuación nuestro amigo el homeópata.
—Creo que Abot habla con sabiduría, deberíamos vigilar al alquimista este mientras comprobamos lo de los polvos. Creo que si ha dicho la verdad, nuestras únicas pistas son los espías que estaban ahí.
El alquimista parecía haber sido un callejón sin salida. Salvo por ello.
¿Y como vais a articular la vigilancia?. ¿Quien se va a quedar?. ¿Vais a contratar a alguien?.
-Yo me puedo encargar de la vigilancia-digo Flogdegnurt con resolución-No ze mucho de coztumbrez humanaz, pero zi puedo observarlos sin zer vizto y zeguirloz a donde zea necesario. Poziblemente oz zea maz útil hacienzo ezto.
Bastia asintió ante la propuesta de Flog.
Ante cualquier cosa, nos encontraremos en la sala que nos han proporcionado.
Yo presentaría el preparado al secretario, a ver cómo reacciona y a ver si él nos puede decir a quien llevarla a analizar
Flog se queda vigilando la tienda del alquimista mientras el resto del grupo regresa al castillo. El secretario les atiende tras unos pocos minutos de espera y escucha su historia.
- Puedo llamar al mago de palacio, a ver que puede contarnos - propone.
Pues nada, presente usted la bolsa de forma incriminatoria.
Flog se esconde en un portal cerca de la tienda, preparándose para pasar la mayor parte del día en una postura totalmente incomoda.
Toco tiradita de sigilo, y una descripción más o menos genérica de que piensas hacer.
Flogdegnurt se acomodó como malamente pudo detrás de un barril situado en un portal cercano a la tienda del alquimista, embozado en su capa gris. Cuando alguien se acercaba, se echaba hacia atrás de modo que su silueta se camuflaba entre las sombras. Pero la paciencia no era la mayor virtud del pequeño goblin. Luego de un par de horas, estaba inquieto, impaciente e incómodo. A pesar de ello, intentó permanecer alerta a lo que pasaba en la tienda del alquimista. Y en especial, si veía movimientos sospechosos a su alrededor, como si alguien más lo estuviese espiando. En caso de que así fuera, cambiaría su objetivo por el del espía. Le interesaba saber de dónde venía y para quién trabajaba y la mejor manera que se le ocurrió de hacerlo, era seguirlo una vez se retirase. Si nadie se presentaba, seguiría al alquimista hasta su casa, una vez hubiere cerrado la tienda. Que lo mismo residía en el mismo edificio o no, pero no estaba de más saberlo. Además, podría ser en ese momento cuando el posible espía se delatase.
-Yo me puedo encargar de la vigilancia-digo Flogdegnurt con resolución-No ze mucho de coztumbrez humanaz, pero zi puedo observarlos sin zer vizto y zeguirloz a donde zea necesario. Poziblemente oz zea maz útil hacienzo ezto.
—Yo puedo también quedarme... —dijo Norm— Se me da bien quedarme ahí en un rincón sin hacer nada y sin capa, nadie se dará cuenta que estoy, seré un vago cualquiera en un rincón. La gente dice que soy lo más normal del mundo y que nunca se fijan en mí. Como las mujeres de mi pueblo.
—Y en todo caso, si me ven a mí, no te verán a tí —dije refiriéndome a Flog. Nadie prestaría atención a dos intentos de seguir a alguien.
Perdón por el retraso, cosas de estar en Francia con la churri (en realidad cosas del viaje, que no deja postear). Norm mejor se queda de vigilancia, no se le da bien lo de interrogar y sí seguir (tiene algo de sigilo).
Pues nada, presente usted la bolsa de forma incriminatoria.
¿Cómo se presenta una bolsa de forma incriminatorio?