Partida Rol por web

El portal del Dr Strange se abre en una pequeña isla del Pacífico. Es una zona tropical. Strange se encuentra cansado, y comenta que abrio el portal lo mas lejano posible. Sin la ayuda del ojo de Agamoto, sus poderes son mas limitados. Este reaccionó al formarse el cubo e incluso en la localizacion de los fragmentos por el mundo. Realmente nadie sabía donde estaban, pero el mago supremo los calmó. El tenía una idea clara, dado que ya trazó el camino para llegar hasta Japón. Lo que unico que necesitaba era descansar y recuperar fuerzas para abrir otro portal.

Tras una hora de descanso, abrio otro portal y se prosiguió con el viaje. Todos los heroes aparecen encima de un edificio de considerable altura. Desde allí se podía ver el bullicio y gran cantidad de rascacielos de Tokyo. Strange nombró como lugar Edo, la antigua Tokyo, pero el lugar era el mismo centro de la antigua capital japonesa. El movimiento de gente, trafico, y cantidad de luces no era muy diferente a lo que se veía en Nueva York.

Strange se lamenta de no haber perfilado mas el salto hacia el fragmento, pero sabe que no está lejos. Nota su presencia hacia el este. A lo lejos se puede ver un antiguo castillo medieval y un templo tambien cerca de él. Volando por la ciudad se ven tres naves de SHIELD patrullando.

Señor Stark ha recibido un email de Vision. Dice lo siguiente.

"Querido señor Stark.

Debido a un despiste por mi parte, había olvidado que tenemos un Quinjet en el tejado. Lamento haberle interrumpido. Imagino que, al eliminar la programación que Ultron me hizo, debió borrar un módulo de atención y/o memoria a corto plazo. Eso fue una broma. Pase una buena tarde.
Reciba un afectuoso saludo,
Visión."

Debemos actuar con precaución, pues al parecer Shield ya está en el lugar. Lo mejor será mantenernos fuera de sus radares.

Son apenas 300 metros hasta nuestro objetivo, pero si Shield nos descubre, vamos a estar en dificultades, pues van a intentar obtener el fragmento para ellos. - digo a modo de advertencia a mis compañeros.

Muy bien en marcha hacia el castillo.

 Apreté los dientes para sujetar uno de los guantes, mordí con fuerza, con rabia, con insistencia, como un perro debe morder un hueso cuando está muerto de hambre. Mientras me colocaba la pareja en la mano sólo pude cerrar los ojos para pensar en lo que había dejado atrás. La posibilidad de participar activamente en una forma de destruir a la entidad conocida como Fénix inundaba cada célula de mi cuerpo, que se preparaba inexorablemente para concluir en su búsqueda y su destrucción. ¡Era totalmente personal! Y si estaba allí y no en Nueva York era sólo por eso. 

 Cuando los párpados ascendieron a media asta observé el gratificante espectáculo que Strange nos había conseguido. Estar allí significaba mucho más de lo que podía suponer. El fénix seguía presente en mi mente mientras un nombre, en esta ocasión sin rostro alguno, vagabundeaba por mis pensamientos y deseos de venganza... Mariko...

 - ¿Así, sin más? - se acercó al borde de la azotea mientras terminaba de colocarse los guantes. Estaba notablemente susceptible. - Si no queremos llamar la atención saltar del edificio o bajar por el ascensor no parece una gran idea. - no hablaba por la mayoría de ellos, pero algunos no parecían "gente normal". Por otro lado estaba convencido de que la chica ardilla tendría alguna idea. 

 - Supongo que lo iremos viendo sobre la marcha... - espetó en referencia a tener un plan.

 Allí había varios tipos a los que algunos habían llamado "héroes", todos eramos muy capaces, podíamos tomar decisiones, pero algo quedaba patente, no sería fácil que trabajasen en equipo. Demasiada testosterona.

 Strange tenía más información. Cabía intuir que al ser una clase de hechicero quisiera mantener la magia en el ambiente, pero aquella forma de actuar incluso le resultaba molesta. No abogaba por los planes muy elaborados que conllevaran sentarse y planificar cada punto de la estrategia, eso lo hacía terriblemente aburrido, pero si recordaba algo eran sus misiones. Había que atar un mínimo de variables para saber que debían hacer.

 - ¿Establecemos esta azotea como punto de encuentro llegado el caso? - propuso, por si llegaban a separarse. Aunque se centraba en las dos féminas esperando que alguna de las dos diese el paso hacia el liderazgo de aquella empresa, era en las dos personas en las que más confiaba.

 Luego estaba el Capitán, que la había llevado a una guerra, pero estaba diferente.

Doreen levantó ambas manos en el aire.

“Esperad un momento. Tengo una idea.”

Miró a sus compañeros a un lado y a otro, mordiéndose el labio inferior, con un gesto de entusiasmo apenas contenido.

“Quizás sepáis que en Tokyo está uno de los lugares más maravillosos de todo el universo. Su nombre es Machida Risuen o más conocido en el mundo como… hizo una pausa dramática y se llevó ambas manos al pecho con los puños cerrados, con una expresión de éxtasis, hasta que no pudo contener el grito, lanzando los puños por encima de la cabeza… ¡¡¡EL JARDÍN DE LAS ARDILLAS DE MACHIDA!!!”

Chasqueó los dedos.

“Tippy, ¿cómo está tu japonés?”

Desde los pelos de su cola se asomó la cabecilla de la ardilla y lanzó unos chillidos.

 Doreen puso cara de duda.

“Está bien, el mandarín servirá. La mayoría de las ardillas del Jardín fueron traídas de Taiwán.”

Levantó un puño en el aire, con el otro a la altura de la cadera y se paró en un pie, en una postura reminiscente del anime.

“¡¡¡IKINASAI!!!”

Tippy saltó desde su cola y echó a correr, perdiéndose entre los matorrales.

Doreen miró a sus amigos.

“En unos minutos tendremos información de todo lo que nos espera más adelante. Guardias, trampas, lo que sea.”

Doreen pareció estar contenta al aparecer en Tokyo. Con su dinanismo empezó en marcar enfasis sobre el parque que una vez visito en una estancia en Japón. El parque Machida donde era conocido donde habian muchas ardillas estaba situado al este de Tokyo, bastante lejos de la posicion donde se encontraban.

Sin tener conocimientos de donde estaban, y ni ser consciente de donde habian aparecido al teleportarse, mandó a Tippy a que fuera a ese parque para pedir ayuda a otras ardillas. Al parecer desde lo alto de la azotea ni previo a la altura que estaban. Tippy hizo caso a su ama, y salio corriendo por un lateral del edificio hasta precipitarse por él. La ardilla empezó a caer desde lo alto sin saber si sobreviviría al impacto.

Ir de techo en techo me parece bien, pues nos va a dar cobertura contra los helicarriers y demás unidades de Shield, siempre que no causemos ningún alboroto, todo debería ir bien. - comento con total seguridad.

La distancia que nos separaba del castillo eran tan mínima que, de no ser por Shield, llegaríamos allí en un parpadeo, pero lo más prudente era mantener los enfrentamientos al mínimo para evitar un desgaste innecesario.

Al llegar a Edo junto con el resto de sus compañeros, el Dios del Trueno, atendió a lo que todos decían.

- Volar no será un problema, la distancia es corta - dijo convencido.

Entonces vio a la ardilla de Squirrel Girl saltar por uno de los bordes del edificio.

- ¿Tippy estará bien? - preguntó extrañado, no recordaba que las ardillas tuvieran alas, menos aún que conocieran algún artilugio con el que volar - ¿No es demasiada altura?

Entonces se preparó para la acción.

- ¿Quien viene conmigo? - dijo preparando su martillo para salir volando hacia el edificio donde se encontraba el fragmento que había localizado el Dr Strange - ¿Entraremos como ataque directo? En cuanto acabemos este será el punto de encuentro - dijo asintiendo a las palabras de X-23.

Todos ven como Tippy desaparece por un lateral. La duda era si estaría cayendo o quizas se habría cogido a algo. La ardilla salio disparada para cumplir la orde de Doreen. Contagiada de su énfasis tampoco calculó el lugar donde se estaba realmente.

En puntas de pie y Doreen se esforzó por mirar por encima de la cornisa de la terraza con un gesto de inquietud y el dedo índice sobre el labio inferior.

“Mmm… Creo recordar que el tío abuelo por parte de madre de Tippy  era una ardilla voladora, pero…”

Se asomó para mirar hacia abajo.

“Nop… nop…, no está volando, sólo se está cayendo.”

Se volteó hacia los demás y comenzó a agitar los brazos con desesperación.

“¡¡¡AYUDADLA, POR FAVOR!!! ¡¡¡TASUKETE KUDASAI!!”

Acabábamos de llegar y ya estaba todo patas arriba, S.H.I.E.L.D. Estaba ya buscando los fragmentos, y por si fuera poco, las ardillas de Dolores eran unas locas suicidas. No la recordaba así, pero todo ha cambiado, la verdad. Con un bufido de resignación, me lanzo a coger la ardilla antes de que se estampe contra el suelo. Lo hago mientras activo en PEM incorporado en el traje para evitar salir en los radares de S.H.I.E.L.D. Y de ninguno. En vez de soltarlo a modo de explosión, bajo la cantidad de energía necesaria para que se genere una leve corriente eléctrica que recorra el traje, convirtiéndolo en una campaña de gauss*.

Me lanzo a por la ardilla sin perder un segundo, pero en vez de subirla de nuevo a la azotea, la bajaré a la calle directamente, por que algo me dice que esto va a ir repitiéndose todo el rato hasta que muera o cumpla su cometido. Una vez esté abajo, a salvo. Volveré a subir, a ver si organizamos esto un poco antes de que qué cada uno haga la guerra por su cuenta. Subo y desactivo el campo de sigilo.

-Chicos, vamos a organizarnos un poco. Ya habrá tiempo de improvisar, no tengáis prisa. -Señaló con el dedo índice a las naves de S.H.I.E.L.D. -Es Strange el que sabe dónde está el fragmento, seguiremos sus indicaciones. -Miro a Doctor y asiento con la cabeza. -La idea de Laura es muy buena, si alguien se pierde, se queda atrás o no sabe qué hacer, que venga aquí. Será nuestro punto de reunión. -Miro a X-23 y asiento con la cabeza. -Nos dividiremos en los grupos que ya hemos hecho, Strange vendrá con nosotros y Thor irá con ellos. Uno de los grupos buscará una entrada por esta parte, y el otro por la opuesta. -Miro a los presentes, paseando la mirada entre todos. -No tratéis de ir a ciegas, ni de forma directa. Busquemos la forma de colarnos, primero en su sistema y después en el interior. Vamos, que ya lo hemos hecho antes... ¿Estamos todos de acuerdo?

Les indico que mantendremos el contacto por los comunicadores, pues es importante, por sí un equipo necesita del apoyo del otro. O lo que sea, la comunicación es esencial.

Muy bien, si no hay más ardillas suicidas que nos distraigan, creo que es momento de ponernos en marcha - digo con expresión unn tanto seia.

Dicho esto, me concentro para crear una ilusión alrededor mio de tal forma que quien viera hacia mi posición sólo pudiera ver un pequeño banco de de niebla.

Mirando hacia la calle, Doreen suspiró con alivio al ver que Tony había rescatado a Tippy.

“Fiuuuu!!! Eso estuvo cerca.”

Miró de reojo a Thor y se llevó el dorso de la mano de manera dramática a la frente.

“¡Oh! Esto ha sido tan estresante. Creo que no me sostienen las piernas.”

Fingió caerse y se colgó del cuello del dios del trueno, apoyándole la cabeza sobre el pecho.

El Doctor dijo que era hora de ponerse en marcha, si no había más ardillas suicidas que los distrajeran.

Doreen le miró por encima del hombro.

“Monkey Joe está aquí también, pero no es tan arriesgado como Tippy”

La cabecilla de una ardilla se asomó desde su cola y emitió una serie de chillidos.

“Tippy quiso hacer Bungee Jumping sin soga," Le explicó Squirrel Girl "pero todo salió bien al final.” .

Volvió a descansar la cabeza sobre el pecho de Thor y cerró los ojos.

“Creo que voy a necesitar que alguien me cargue hasta abajo.”

Tony salio volando y rescató a la ardilla que se había quedado colgando del borde de una ventana en la octava planta. Tras dejarla en el suelo, espero a sus compañeros para emprender la marcha. Strange se elevo y se convirtio en humo para vision de todos y del resto a traves de una ilusion. Wanda junto con Thor le acompañaron por el aire. El resto bajaron por las escaleras los 10 pisos hasta llegar a la calle. Al ser un edificio de viviendas nadie los vio ni se alertó de su presencia, tampoco estaba el conserge en esos momentos.

Mientras se aproximaban hacia el castillo, a medio camino, tres calles arriba se escuchan explosiones y el humo emerge de entre los edificios. Desde el aire, Thor, con mejor vista e Iron Man a traves de sus escáneres divisan como varios robots rojizos parecen atacar el interior de un edificio. Para los terrestres los edificios les tapan la vista. Las naves vigía de SHIELD aun no se habian percatado del asalto.

Al ser de noche, la ciudad está mas tranquila y tampoco parece ser un barrio de mucho movimiento, aunque no deja de haber trafico por las calles principales.