Partida Rol por web

Es una noche como muchas otras en Barcelona. La vida eterna y la depravación hace parte de ti desde hace mucho tiempo olvidando como alguna vez pudiste ser humano, la búsqueda del venganza y  de  acciones justas a los traidores ha hecho que te llenes de motivos para continuar con una misión de limpiar la basura del sabbat. Ciertamente la traición de un Lasombra ha hecho que no confíes mucho en ellos, pero para tu poca fortuna muchos de ellos son parte activa de las tradiciones de la secta.

Los Tzimisce no mueven los hilos del poder tan bien como los Lasombra, pero no todos son tan poderosos.

El arzobispo de Barcelona, recibió muy bien tu presencia en el rebaño, básicamente la preocupación por los traidores era pan de cada día para él. Ciertamente los clásicos castigos hacia los traidores menores como cortar miembros eran usados. Dejar a un chismoso sin lengua a un ladrón de tu propia secta sin manos era asunto común, pero  el arzobispo se preocupaba por algo más...

De Alejandría era un hombre antiguo, un hombre que tuvo que patear muchos traseros para llegar a donde está. Pero también un hombre ansioso de poder.

El control de Barcelona era un asunto de muchas preocupaciones. Barcelona es una tierra de muchos inmigrantes, tanto latinos, africanos e indios solían venir a esta ciudad. Y con tanto flujo de personal, los espías y los enemigos estaban a la orden del día. Cazadores que viajaban a la ciudad y otros seres que trataban de buscar poder.

No, no era fácil, y por eso la importancia de la celebración del  25 aniversario de gobierno del Arzobispo, asunto del que hablarían en la reunión que estaba a punto de celebrarse.

Dentro del círculo de confianza del hombre había cuatro personas y tú.

Jacinto Granados: Toreador antitribu, de apariencia de un hombre de pelo largo y de apariencia metrosexual era uno de los dirigentes de los bares de la ciudad, amariconado y algo  extraño parecía tener control de la zonas y de los jóvenes..

Pietro Santano: Lasombra, de origen italiano. Maneja el narcotráfico en la ciudad y tiene fama dentro de las pandillas locales. Mafioso con mucho dinero y respeto de la comunidad.

Eduardo Barajas: Gangrel Antitribu, un hombre salvaje que usa guantes y botas bastante  gruesas que ocultan los signos animales que tiene. Garras felinas en sus manos y pies,,, Eduardo es un experto en seguridad, básicamente un gran combatiente que organiza manadas de apoyo al Sabbat de la ciudad.

Estrella Duarte: Malkavian, secretaria del Arzobispo, una mujer poderosa, toma muchas decisiones que el arzobispo le delega. Dentro del Sabbat muchos buscan agradarle pues de lo contrario es seguro que esa mujer hará lo imposible por amargarte tu no vida.

Había  otros evidentemente, pero para esa reunión solo estaban los cinco. Llevas unos años viviendo en Barcelona y conoces a esa gente, y evidentemente no gustas de algunos, pero realmente tampoco ellos gustan mucho de tí.

Apenas estas llegando al lugar, un octavo  piso de un hotel de lujo.  Te reciben unos criados  y te indican entrar a un salón al fondo donde  se puede ver una mesa empresarial. En la habitación barajas se lima sus uñas felinas (lo cual es algo desagradable) y Jacinto parece  tener un cúmulo de papeles que revisa.

Barcelona no estaba mal. La pequeña ciudad a orillas del Mediterráneo tenía su encanto costero, y las españolas un brillo en los ojos que resultaba delicioso de contemplar mientras duraban. Aunque el objetivo principal de aquella estadía en el extranjero tenia muy poco que ver con el placer, no dejaba de resultar agradable tener con que relajarme de tanto en tanto.

La caza de aquel infeliz no había tenido frutos. Pero como el había muchos otros, sin duda. Inseguros, débiles, pervertidos… cada quien tenia su excusa. Aunque el viaje de estudios se había prolongado más de lo esperado, mientras aprendía los métodos del Arzobispo para lidiar con esa gentuza, y le ayudaba en sus prácticas. Aquellas técnicas inquisitoriales eran interesantes e incluso artísticas, por lo que no lo lamentaba. Aunque si algo encontraba incomodo era continuar siendo “el solitario”, sin una manada que considerar propia y por añadidura gringo en tierras latinas.

Arribe a la reunión vestido con un atuendo ligero pero no exento de elegancia; sudadera de color rojo, saco ligero, pantalón de vestir y mocasines. Al parecer Jacinto y Eduardo se me habían adelantado… Salude a ambos con un ligero cabeceo, pero tome asiento distante de ambos.

-Buenas noches…+ Mi acento en español todavía tenia dejes sudamericanos. Puede que necesitara un poco mas de tiempo antes de captar el local, aunque no era del todo una desventaja; a muchas españolas les gustaban los “sudacas”. Pero en vez de pensar en eso, mire a mis compañeros de reunión.

El primero no me desagradaba del todo; sus clubes proveían del mejor ambiente donde seleccionar presas, lo cual le volvía útil. Cierto que había “jugado” con alguno de sus juguetes hasta que se rompieron y eso pudo no gustarle, pero en líneas generales podíamos entendernos. Muy distinto era con Eduardo, una bestia en todo sentido; tanto el estético como el práctico. Salvando sus obvios usos en la lucha, no tenia nada que ofrecerme ni yo a el. Así que pase de su presencia, centrándome en el Toreador.

-Jacinto… ¿Cómo van los negocios? ¿Hay alguna fiesta interesante en vista? +pregunte, mas que nada por hacer tiempo.

Buenas noches Max-dice en su usual tono bajo con una tenue sonrisa- las fiestas son mi fuerte, pero organizar una perfecta tiene un atisbo de dificultad, aunque será exquisita te aseguro- Dice de manera personal mientras saca su móvil y lo ve ligeramente, tengo tantas cosas en mente, aunque claro ya tengo un tema, sí sí…

No le adelantes detalles Jaco-man- dice el hombre poniéndose los guantes  que cubren su largas uñas afiladas- no soportaría tener que escucharte dos veces.

Dice el hombre con una mueca.

Jacinto para ti Eduardo, dice de manera drástica mientras guarda su móvil, aunque debo aceptar que me encanta cuando te comportas como un leopardo peligroso cuando ambos sabemos que eres un gatico mimado.

Su tono mordaz era típico de los toreador, y a Eduardo dicho señalamiento hizo que mostrara los dientes agresivamente…

Vamos  Eduardo, calma no sea que se caiga la madeja de lana con la que estabas jugando.

El Gangrel se levanta dispuesto a pegarle y cuando piensas que el asunto tendría un poco de acción  una voz femenina para la contienda.

ALTO – dice la mujer en tono autoritario- ya me parecía raro que no estuvieran a punto de darse de ostias ustedes dos…. Vaya insensatez..

Dice la mujer mirándolos a todos

Buenas noches, si es que quieren ser amables…- dice ella sentándose mirando el reloj- ¿y Santano?

Los Italianos llegan a la hora que les viene en gana- murmura  Jacinto- no deberíamos esperarlo.

No deberían ciertamente- dice un hombre elegante en la entrada del salón-  porque ya he llegado

Sonrie de manera fría

Buonanotte compañeros... si me permiten tomo asiento, antes de que claro quieran dar otro comentario de alta amabilidad... L'amore è nell'aria ambiente, love is in the air...

Dice acomodandose el traje y sentandose al lado tuyo.

Perdonen mi demora, el trafico en esta ciudad es tremendo...

Saludo con un suave cabeceo la llegada de ambos, incluso una ligerísima sonrisa a Estrella. Aquella mujer sin duda necesitaría de un favor algún día, para arreglar ese rostro bovino (resultaba sorprendente no se lo hubiera pedido), pero en lo demás no le caía ni bien ni mal. Max no se metía con ella ni veía motivos de discutirle ya que ambos apoyaban la tarea del Arzobispo, desde ángulos diferentes. Si solo le dejase arreglarla, podrían mejorar su relación…

Santano era una cuestión muy diferente. Podía entender sus actividades y métodos, ya que como el mismo o Jacinto, interactuaba más con los envases que muchos Sabbath en una tarea necesaria. Pero era un jodido Lasombra.  No obstante, no le desagrado que se sentara al lado; “a los enemigos mejor tenerlos cerca” rezaba el dicho, y probablemente él pensaba lo mismo.

-… Supongo que ya solo falta el Arzobispo. ¿Habrá que esperarlo mucho, Estrella? 

La pregunta fue hecha en tono suave; no llevaba prisa realmente. Era mas que nada para relajar un poco el ambiente, siempre tan amistoso como una jauria de hienas hambrientas.

Me pidio que comenzaramos sin él- dice ella- vendra en unos minutos, es de los hombres que les gusta las sorpresas y como bien sabemos, le encanta que haya asuntos que  le den motivos para disfrutar la cena luego del banquete..

Dice la mujer mientras hablaba de manera seca, profesional, realmente tranquila. No era una malkavian psicótica, su transtorno parecia poco visible aunque  si se era muy observador se podía ver que tenía ciertos objetos en su vestimenta raros, un collar de hueso que parece se lo regalo un tzimisce y ciertos bordados que si bien no eran exagerados siempre estaban con ella.

Solo deseo que no haya peleas- dice de manera radical- es un evento importante y realmente el arzobispo quiere que tanto el ganado como las entretención sea de buena calidad.

Bueno, si me permiten, el ganado invitado en su mayoría es  una serie variada de idiotas que han sido elegidos a dedo por la señora Estrella, mi persona y el arzobispo, familiares de cazadores, contactos humanos de nuestros enemigos y otros, y claro esta también hay invitados de otros miembros. 

Vendran sacerdotes de distintas manadas y el arzobispo de Madrid, cada uno con su comite.

Dice el hombre hablando sin ser interrumpido.

Tengo un tema maravilloso para la reunión usando  la tapadera  de una asociación cultural de teatro y artes, cosa que algunos de ustedes ya sabian, y el tema central de nuestra reunión será la divina comedia.

Oh no... otro de esos temas de libros aburridos de un tio fanático religioso- dice el gangrel- realmente siento que hay temas actuales en arte que serian más atractivos que un libro que nadie en sus cinco sentidos se atrevió a leer.... no molan esas mierdas argumentales.

El hombre se rie  y dice. Disculpe Eduardo, pero Dante es muy conocido, y  realmente  lo más interesante de su obra es el infierno, asunto que sería alegorico...- se rie- para algunos... seguro será muy divertido entrar al infierno..- hace un gesto como quien traga saliva- la mejor vitae sale de los que sufren...

Exacto- dice él- haremos un show para nuestra cena- sonrie-  todos usaremos máscaras, habrá artistas disfrazados y tendremos una forma de poder aprovechar los siete pecados capitales, obras de teatro, posiblemente se pueda jugar con el público, quiero que el arzobispo se ria un poco... sera un sitio lleno de lujuria, pereza, ira,  envidia, gula, avaricia, soberbia.... hay asuntos que no comentaré porque deseo que sea sorpresa tambien para ustedes.

Podemos hacer un concurso para saber quienes podrian ser dignos de nosotros- dice la mujer- además de demostrarle a hermanos invitados el poder de Barcelona- dice moviendo sus dedos- ¿qué le parece la idea?- dice preguntandote dado que no hablas y le interesa saber tu pensamiento.

Se aliso suavemente un parpado, quitando una imaginaria lagaña de allí.

-Dante no es un mal tema, en lo absoluto… Algo trillado si, pero plagado de simbolismos acordes con nosotros. La idea parece buena en líneas generales, siempre que...+remarco alzando índice y pulgar juntos en una O+ el juego no se prolongue demasiado. Todo lo bueno debe tener un final, para poder apreciarlo íntegramente. +cruzo los brazos, encogiendo levemente los hombros+ Además, habrá hombres importantes en escena, y aunque hallan venido a disfrutar principalmente, sin duda querrán atender sus asuntos privados, para luego de gozar del banquete en si. No debemos olvidar eso.

Finalmente, volvió la mirada a Jacinto, asintiendo con un gesto secamente aprobador.

-Si tenemos en cuenta esa cuestion, entonces, tienes mi apoyo. Tambien si necesitas algo para la puesta en escena o algún papel que cubrir, no dudes en pedírmelo. 

Al toreador no le gustó que dijeras que era una idea trillada, pero igual todos en la reunión decian las cosas como eran, con sinceridad

Precisamente en cierto momento necesitaré ayuda de todos... para el juego claro, cuando comience haremos una rifa y veremos quien se la gana.

Se rie cosa que el resto de los presentes a la reunión  se muestra curioso por la expresión. Sin embargo su risa se apaa cuando ve a un hombre entrar por la puerta.

El arzobispo era hombre viejo, realmente un antiguo que pasó por muchas épocas y que sabe mucho, su clan es ventrue antitribu que se unió al sabbat en tiempos de caos, aunque son conocidos sus dotes de nicromancia gracias al parecer por una buena cena que tuvo con un Guiovani, es muy estricto y básicamente metódico. Dentro del tiempo que le conoces  ha sido amable, aunque sientes que tiene más que decirte de lo que habla.

Pareciera que te esta  guardando para algo, pero no sabes qué. En parte es bueno llevarte bien con él, porqué es él quien mueve los hilos del resto.

El hombre vestido con un traje y  con la mirada fria entra.

Buenas noches..

Dice con tono casi melodico

Espero que hayan  hablado de  por menores ya, y podamos conversar sobre asuntos importantes.

Dice en tono un poco displicente como si la celebración no lo fuera.

¿Quiero saber como está la seguridad para el rito?, ¿han escuchado algo nuestros espias que sea de importancia?

Señor he  reforzado la seguridad como usted dijo, dos guardias en cada puerta y  tres como civiles en cada puerta. Dice. Se instaladon las cámaras de seguridad y la entrada subterranea para los nosferatu esta vigilada.

Dice con mucho profesionalismo.

Sobre rumeres un poco de lo de siempre...

Perros tratando de entrar al territorio para pasar a Francia. El rumor sobre el cazador en estas tierras no  parece creible pues desde que se ha dicho eso no ha existido presencia alguna, aunque debo comentarle que me sigue preocupando el tema del cual ya he conversado con usted por privado.