Partida Rol por web

Mijail asintió mirando hacia el infinito.

- Si... me gustan las frutas silvestres.

El buey en ese instante emitió un largo mugido.

- Si... a el tambien.

-Jijiji- se rió la pequeña.-En cuanto me haya instalado en bosque os traeré bayas y moras, aunque a él mejor algarrobas. A los animales grandes a veces no les sienta bien el dulce, les da muchas flatulencias jijiji.-tras haber descansado un poco se apoyó sobre el buey sin hacerle daño, desparasitándolo poco a poco mientras seguía hablando con Mijail.

Saggitarius confirmó la historia que relató Sylvanna, a lo que añadió.

- Nos encontramos con muchos fae en la zona. Todos hostiles, incluso a pesar de la herencia de nuestra sangre – refiriéndose a Sylvanna y su propia ascendencia faerica – Quizás deberíamos plantearnos más adelante tratar de entablar algún tipo de comunicación con ellos, para evitar problemas a largo plazo.

Bien sodales, dijo a Silvanna y Sagittarius, al enterarse de su maravilloso descubrimiento, pues vayamos la próxima estación.  Entre los tres de sangre feérica creo que podremos entablar un acuerdo de sana convivencia con la buena gente.   Más aún cuando mi parens, la bendecida Titania, se encargó de iniciarme en los Misterios Merinitas, y de que me aprendiera los hechizos de círculos de protección contra las hadas, cuando estas se pusieran pucs. 

Mucho conocimiento del mundo faérico quiso que tuviera, y me creo que me quedé con la mitad dello.  Aún así creo saber lo suficiente para intentar moverme entre pixies y cortes seelies.

Les pidió a ellos y a Anderlius y Mijail que salieran porque les enseñaría una sorpresa, en la que había estado trabajando en las últimas tres estaciones:

Les presento al...¡Laboratorio Móvil Merinita!, jajja.  

Era, en efecto, un laboratorio completo, con todo lo que debe tener, aunque compactado de maneras creativas al espacio mínimo que un par de carromatos pueden llevar.  

Muy prestable es para ustedes, si hiciera necesidad.  Aunque usar el laboratorio de otro mago creo que tiene sus limitaciones y riesgos, creo.

Mi idea es llevarlo al laboratorio a alguno de los campos que encontraron ustedes, buscando alguno que tuviera un aura feérica positiva.  Ahí sería protegerlo con mis hechizos ya aprendidos para lograr tolerancia, y poco a poco durante la estación, conocer a las hadas del sitio y granjearnos quizá su bienvenida. 

Aprovecharía para allá inventarme un hechizo nuevo.  Y quizá, con mi nueva ayudante, pasar a texto alguno de los de Círculo de Protección, de tal forma que añadiera a nuestra biblioteca en Atholl y que ustedes se lo pudieran aprender más adelante. 

No se imaginaba cómo un águila aprendería, pero supondría que sí lo hacía, ¿pasando las páginas con su pico, perchada en un atril?   Quizá...

Mijail se acercó a la velocidad que sus piernas le permitian hasta donde Caledonia quería mostrarles. Sin duda aquello podía resultar impresionante. Hasta donde sabía los laboratorios no eran moviles, lo cual podía ser toda una ventaja, suponía.

Por otro lado parecían decididos a hablar con aquellos fae, la situación le recordaba un poco a los animales que defendían su territorio de posibles amenazas. Suspiró para si mismo con pesadez, no estaba seguro de querer participar en aquello. Hasta donde sabía no había nada de interes para ellos mas alla de las fronteras de los fae. No quería molestarlos.

- No... se si es buena idea molestar a los fae. "No perturbaré a las hadas, no sea que su venganza afecte a mis sodales"

Termina citando el Juramento.

No Miajil, no, no me malentiendas.  Lo que buscaría es que sean nuestras amigas, o al menos nos toleren.  Nunca buscaría dañarlas, y aún en defensa propia, buscaría todas las otras alternativas posibles.   Mira que Merinita soy, ¡hecha y derecha!  -le sonrió.   

Pero me cae muy bien que lo hayas dicho, por código y actitud;  -le dijo, dándole un rápido abrazo- de algo sirvió la confusión. 

Por eso, si muevo el carromato-laboratorio, sería sólo a un lugar donde ellas lo permitiesen, previa ceremonia de aceptación, como les gusta, me imagino.     

¿Quieres venir?  Bienvenido si si. 

- Estoy con Mijail. No creo que plantar un carromato en su territorio sea una buena forma de tratar de entablar amistad con los fae de la zona. – comentó llanamente – Por otro lado, creo que sería útil averiguar hasta que punto las otras dos Alianzas del Tribunal están dispuestas a cooperar con nosotros o si preferirán… complicarnos la vida. Desde luego habréis notado que nuestra Biblioteca es bastante limitada… - planteó abiertamente.

Bien Sagittarius, estoy de acuerdo, en lo segundo.  ¿Porqué no visitamos estas dos Alianzas en Otoño?   Estaremos en cosecha, y podemos llevar para intercambiar en sus mercados mundanos, mientras nosotros buscamos intercambios en cosas de magia.   Claro, habrá que cosechar nosotros algún tractatus copiado, objeto mágico, o hechizo pasado a papiro -era de Tintagel- o, o, piel de animal. 

Claro, en el verano si o si iré para allá en el carromato.   Una cosa es tener sangre faérica y otra ser Merinita.   Estoy segura que no me pasará nada malo.   -dijo presuntuosa.

Mijail mira largamente a Caledonia de una manera un tanto inexpresiva, luego a Sagittarius y nuevamente a Caledonia. Observó al resto esperando una reacción antes de reaccionar el nuevamente.

Anderlius salió con los demás magos y asistió sorprendido a la presentación de Caledonia. ¡No había visto nunca un laboratorio móvil! Incluso dudaba de su viabilidad y sus posibilidades de crecimiento. O a la idoneidad de estar alejado de la biblioteca, por pobre que esta fuera.

En cualquier caso, si a ella le servía era una gran idea y dado que parecía que Sylvanna también había planteado la posibilidad de establecer el suyo extramuros minimizaba el problema de tener sólo dos laboratorios en la torre para cuatro (¿cinco?) magos.

Estimado Lullach, -preguntó Caledonia- ¿cuál es el nombre de las dos otras Alianzas y cuales son las magas y magos que ahí son sodales?   ¿Hay alguna Merinita entre ellos?  

Lo que quería era plantear una visita en la primavera de 1067 y quería plantearla con cuidado, es decir escribir antes, pidiendo permiso de visita, indagar si la dejarían visitar con su laboratorio con todas sus virtudes y vicios.  Elegiría la Alianza con la cual sintiera más afinidad. 

¿Sabes el nivel de aura de estas otras Alianzas? 

Y, no nos has contestado todavía, ¿porqué fundar esta donde no hubiera aura alguna? 

Sodal Silvanna, preguntó en uno de los raros momentos en que la bjornaer visitaba la construcción cerca del acantilado, ¿cómo te va en tu nuevo nido y regio?   -Le regaló un ratón que andaba robando granos en la cocina para que desayunara.   Había otros de sus sodales cerca, los saludó también.

Estaba pensando llevar mi carromato para allá el próximo verano, el de annus domini 1067,- jeje, hasta la forma de decir las fechas se nos están pegando en estas islas,- ¿te importaría?   ¿Ya exploraste los tres niveles de su regio?   Podría ayudarte, que tengo algo de entrenamiento en la segunda visión, especial para ver, los regios, esto es.  ¿Hay que despertarlos de alguna forma?  Sabía que algunos lugares eran así.    

Con su venia llevaría el carromato y lo estacionaría dentro del aura, de ser posible, para beneficiarse de ella. 

Claro, seré cuidadosa, no quiero dar el sagittariazo, jajja.  A eso se referían ya las voces en la Alianza al evento del desvelado Saggitarius* que casi lo manda a a un crepúsculo adelantado.  No lo quieran ni las hadas.  Toco madera.  -Dió tres golpes a un árbol junto a ella.  Perdón driada, si te desperté. 

En una de las preciosas ocasiones en que coincidieron en la Alianza todos, incluyendo el fundador, Caledonia planteó lo siguiente:

Lullach, se que los clanes de aquí nos respetan gracias a tu muy bonisagus sagacidad.  Se que no quieres darles más que apoyos para la prosperidad de su gente, nuestra gente, sin meterte en embrollos en los que podríamos salir peor.  Y claro, se que la mayor preocupación en el horizonte dellos es que los ambiciosos Normandos al sur tuvieran intención invadir.  

Para ello, se me ocurre que podría inventar un objeto mágico que ayudara al espionaje que mantuviera seguras las fronteras contra invasiones, incursiones normandas, vikingas o de otro tipo.  -Sus ojos y manos se movían ensoñadas, mirando a todos.-   Podría tomar una vara del tartán del clan local, de los Murray de Atholl por ejemplo, e imbuirlo de tal forma que fuera un fantástico camuflaje para cualquier espía-vigía, mágico o mundano.  Con alguien naturalmente habilidoso en espiar y camuflarse, ¡ésto sólo los haría aún mejores!  La ventaja que veo es que los colores de los tartanes son todos colores verdes, lo que prestaría esconderse en la vegetación de la costa o del bosque.  

Sería usando las Artes de Intellego y Muto, ¿cierto?  -dijo al Criamon y Miscellanea.  ¿Dos peones gastaría?   

Tardaría yo una o dos estaciones, máximo, experimentando, pues creo que habría... algo de sintonía arcana del objeto, ¿no? de vestimenta a disfraz, ¿cierto?  Dijo a sus sodales con más conocimiento de teoría mágica. 

Les enseñó a sus sodales.  Miren:

Podría ser un regalo al jefe del clan que nos hiciera ver favorables sin ser bélicos.  Y quizá de intercambio nos regalase algo, no se, ¿una parvada de ocas o un rebaño de borregos?   -Lo decía dudosa, le dejaría la política al consenso de sus sodales y a la sabiduría del bonisagus. 

¿Qué opinan? 

"El Camuflado Tartán del Vigía", sería un buen nombre.

Sylvanna miró al ratón, pero que se pensaba aquella Merinita ¿qué ella no era capaz de cazar su propia comida?.Menudo insulto para un Bjornaer, además con eso no tenía ni para empezar, en forma de águila necesitaba una buena cantidad de comida para saciarse. Dejó escapar el ratón y la miró entrecerrando los ojos, aquello no le había gustado nada, pero bueno tanto daba ¿quien era ella para juzgar a nadie por su ignorancia?. Lo dejo estar sin más.-Puedes venir siempre que quieras, empezaré a construir un refugio para tener allí un laboratorio. De todas maneras puedes traer el carro y meterlo en la regio, así tú también podrá estudiar, dejaremos una distancia de seguridad y listo. La regio es muy tranquila, solo tiene un nivel, en las cercanías en aura es débil y en el interior asciende a unas tres magnitudes dependiendo del lugar. No creo que haya nada que despertar, pero compruébalo al llegar, tal vez a mi se me haya pasado por alto.

De todos modos repito lo que han dicho Mijail y Sagittarius con la Buena Gente hay que ser prudente. Puedes venir cuando quieras, meter el carro dentro de la regio y estudiar; pero no quiero que pongas defensa alguna. Tú con tú carro puedes ir y venir, yo vivo allí, con el tiempo y paciencia me haré una con el bosque. Entonces os contaré como se comportan las hadas del bosque y os iré presentando uno a uno poco a poco a los que esteis interesados, pero "en el verano si o si iré para allá en el carromato". No eso no va a ser así, y no me ha gustado nada, sin mi no encontrarías ese lugar, incluso podría haberlo reclamado como mi sanctum si quisiera; sin embargo he preferido compartirlo con todos, tan solo espero que valores eso y procedas con sabiduría sodales.

Como bien ha dicho Sagittarius si te adentras en un aura feerica sola y con el carro te verán como una invasora, no como una amiga. Si mantienes esa actitud prefiero que no vengas por mi zona, no quiero que me crees problemas que yo no me he buscado.-otra cosa no, pero estaba claro que la Bjornaer hablaba muy claro. No había malas palabras, ni un mal tomo, sin embargo decía muy claro lo que pensaba. Sylvanna no había tenido remilgo alguno en pararle los pies a la presuntuosa Meritina delante de todos.

- Para no ser visto te sería más útil un Velo de Invisibilidad con Perdo y una capa tendría mayor simpatía por forma que un tartán. - comentó con su habitual tono llano y siguió a lo suyo.

Durante el invierno el Bonisagus te invita varias veces a su torre, tiene buen aspecto pero su tez está pálida. Parece disfrutar de tu compañia, notas que tiene una actituda más tranquila y poco a poco va hablando más sobre temas concretos.

- Las dos alianzas más antiguas del Tribunal son muy diferentes, tu té sentirás más a gusto en Crun Clach, al sur. Creo que son todos Merinitas, para mi el lugar es demasiado extraño, apenas tenemos relación con ellos por tener poco en común. Tal vez tu puedas cambiar eso.

- En cuanto a tener más relaciones con los clanes me parece bien siempre que ayude a la alianza y a la gente del lugar, pero prefiero ser cauto. Un regalo de ese tipo al líder del clan te hará ganar su favor, aunque puede causar recelos y tal vez no lo use como es debido.

- Me habeis preguntado varias veces por el aura de la zona, hasta hace algo más de cinco años si había una suave aura mágica. Y de repente se perdió, la volví a notar en alguna ocasión después, igual de leve solo que pasajera.

Gracias Sagittarius.  -Le caía bien la forma en que le daba consejos su sodal miscelánea.   Hacer magia es no sólo de una maga sino de una maga apoyada por su Alianza. 

Aunque, yo diría que con esta tela se puede hacer una capa: ¡una capa de tartán!, jajja.  Tartán es la tela, no se refiere a la faldita masculina, aunque este sea uno de sus principales usos aquí en las Highlands, ¿cierto? 

Ahora bien, lo que dices de vera que es muy cierto; no sólo el material sino la forma de lo encantado puede aumentar la sintonía arcana.  Y si lo encanto ahorita como tela, por ejemplo, tiene sintonía, pero la sintonía sería mayor si lo encantara siendo ya una capa hecha de esa tela!   -Le encantaba aumentar su conocimiento mágico sobre encantamientos.   ¡Genial!    Lástima que el encantamiento ya lo hubiera hecho, pero era buena idea para la próxima.

Estaba contenta con sus sodales de Alianza.

Sus sodales vieron a Caledonia platicar varias veces con Lullach, insistente pero de buen modo la Merinita era.

¿Entonces Crun Clach es Alianza mayoritaria Merinita?  ¡Genial!   Definitivamente iré a visitarla, a presentarme y mostrarle mis respetos a mis sodales de Casa.

Sagittarius, ¿me voy en Primavera contigo?, y ahí voy haciendo mi encantamiento del "Camuflado Tartán del Vigía", ¿te parece?  El laboratorio tiene que estar móvil, si no no gana su ventaja en experimentación. -Explicó.   Y seguro les encanta mi carromato-laboratorio de magia feérica, y sus visitantes.

Claro, si crees que sería muy distractiva para tus propósitos, me voy en el verano, no pasa nada.  Creo que podremos bien cimentar alianzas con esa Alianza, jajja.  Se rio del mini-juego de palabras.   Muy de nietos de sidhe, ¿no?

Por otro lado, Lullach, te escucho cuando me dices que un regalo de objeto mágico a un clan puede ser desequilibriador, aunque sean los Mac Lean, con los que tenemos buena relación.  Tú eres nuestro guía en estas tierras donde tienes más experiencia y seguiremos tu consejo.   Lo usaremos para otra cosa, entonces.  -Sonrió, con una nueva decisión en mente.- ¿Quizá hacer una capa, como sugiere Sagittarius, y dotar con ella a un jefe de guardia allá en la frontera con los del Clan Mac Dougall, para que puedan vigilar mejor y reducir el robo de ganado?  

Claro, entrenando allá una guardia de grogs, y mantenerla, sería requisito. -dijo incluyendo a todos sus sodales en la conversa.-  Con las pérdidas evitadas de ganado seguro se paga el oro que invirtiéramos en la tarea.  Y claro, acompañarla de diplomacia al tiempo, para avisar con la jefa o jefe del clan que queremos que detengan las incursiones y devuelvan pacíficamente lo robado que aún no se hayan comido.  Para que todo esté en paz.

Podría ir en Verano en esa misión diplomática, si les parece, o sólo espiar sus movimientos para reforzar la seguridad antes de negociar. 

Aguardó por su opinión.

Asintió lentamente a la petición de Caledonia.

- Podemos ir juntos - confirmó cautamente.

Mejor ir con ella y poder tener un ojo encima de ella y sus compañeros faéricos que dejarla completamente al caos. Incluso podría ser una experiencia instructiva.