Partida Rol por web

Ves a Arkan un poco triste, o agobiado por la fiesta y la multitud. Parece que no está de ánimo. Se marcha de la fiesta.

Níobe me sujeta de la mano y me lleva entre la gente hasta dónde está, apuro la birra del todo, es la segunda ya, vamos a por la tercera… Estoy algo mareada entre tanta gente, llevo dos días aquí y he pasado de estar sola en mi cuarto, sin ver a nadie durante semanas, a estar rodeada de gente la mayor parte del tiempo, aunque aún  no me acostumbro, y creo que no me acostumbraré nunca, todavía soy incapaz de disimular esa inseguridad evidente cuando te ves fuera de lugar. Aunque no lo estés.

Voy mirándolos a medida que Níobe me presenta, centrando mi mirada en alguien en vez de e en todo el mogollón de gente.

- M-muchas gracias, – sonrío ampliamente por la bienvenida, quiero ser útil, y pondré todo mi esfuerzo en ello, así que asiento cuando al final el hombre me sonríe – enhorabuena por el ascenso, cumpliré sus expectativas. – Suelto, toda segura de mí misma, soy insegura y muy retraída en lo que a relaciones sociales se refiere, pero soy consciente de mis aptitudes, en eso no dudo ni un instante. – S-sí, claro, cuando quiera.

¡Eh! ¡La rubia simpática! ¡Crash! Sonrío cuando habla de mí, poniéndome más roja, muchísimo más roja ¿un cumplido? ¿Para mí?

- ¡Enhorabuena vikinga! – exclamo, verbalizando el pensamiento directamente, entre que es rubia, tiene los ojos azules, la cabeza rapada, se la ve así muy fiera y llevará una Valkirya… no he podido evitar pensarlo. Asiento, con las mejillas rojas, por el calor, el alcohol, toda esta masa de gente… - gracias, cruzaré el Bifrost para ver como cuidas de Ásgarðr – la miro, sonriendo.

Luego me presentan a Starfox.

- Igualmente, Starfox – memorizo el nombre, son muchos nombres en unas pocas horas, sonrío de medio lado, mirándolos a los dos, parece que Starfox es veterano, claro, a Bencho lo han nombrado hoy.

Llega una nueva ronda, así que nada, bebo para desinhibirme un poco y bueno, porque es divertido. Atiendo a Starfox que me habla del despertar y me pregunta. Yo me toco la calvita, recuerdo el primer día que me vi frente al espejo, sin el rayo que llevo tatuado en la cara, sin pelo, sólo mi cara, limpia y pálida frente al espejo.

- B-bueno, y-yo… si me veo algo desubicada pero es que en Mátrix tampoco es que me ubicara mucho, me dedicaba a crear virus informáticos, a modificar armas de contrabando, se me da bien la informática y la mecánica, así que vivía un poco al margen del mundo, prefería estar sola, bueno con Tachikoma, salía de casa para lo justo… pasaba semanas sin ver a nadie - miro a mi alrededor – ésto para mí era impensable. Siento que se me vea tan fuera de lugar, pero voy mejorando.

¡Bieeeeeen Jyd! Has hablado sin tartamudear, vamos progresando.

Veo entre la gente algo, enarco una ceja, y murmuro.

- Disculpadme un momento, enseguida vuelvo.

Jydmis se aleja del grupo, parece que busca a alguien.

A duras penas, entre la gente, me va a dar algo, voy a empezar a hiperventilar, pero ya llevo tres birras en el cuerpo, esto sin alcohol… vamos me da un patatús. ¡Pero llego a Arkan. Que parece que se iba ya, un poco cabizbajo, o agobiado quizás… él me echó una mano ayer, así que sin pensarlo mucho, lo sujeto por la muñeca para que se dé cuenta de que lo sigo, aunque cuando se da cuenta, lo suelto de repente, hiperavergonzada y colorada in extremis.

-  ¡Eh! ¡Señor oficial! ¿Dónde va usted? – pregunto sonriendo – enhorabuena por la chapita ¿Ya te vas? vente, estoy ahí, con Crash, Bench, Starfox, Lock, Niobe y Chispas... - oh... bueno.... igual me estoy tomando muchas confianza... al fin y al cabo no lo conozco, aunque me sentí muy cómoda hablando con él... y las inseguridad empiezan a comerme terreno - oh, b-bueno... igual te querías ir ya... p-pero... hay que celebrar esa chapita ¿n-no? s-seguro que te has esforzado mucho, - igual estoy molestándolo y tiene cosas que hacer... - e-estamos allí.

La fiesta sigue, aunque va quedando poca gente. Parece que el fin está cerca. Lleváis varias horas aquí, bastantes para algunos. Los que siguen bailando, sin cansancio, eufóricos, se arremolinan en torno al grupo que toca. Otros, los que conversan, forman grupos en distintos sitios, sobretodo cerca de donde sirven alcohol.

Estoy a mi bola, intentando apsar entre varias parejas que estan bailando cuando de pronto alguien me coge de la mano, y acto seguido me suelta. Esto no es muy normal, no conozco a nadie tanto... me doy la vuelta para ver la cabeza rapada y pelirroja de Jydmis. Le sonrio mientras intento volver al mundo de los vivos y recordar que ha dicho. Por el tono se que esta de broma, asi que le sonrio antes de contestar. - Hazme un favor, Arkan... nada de señores u oficial. - Mi cara es un poema, solo faltaba eso que alguien se dirigiera a mi por mi titulo, ni que lo hubiera hecho por eso. - O sino tendre que ponerte el peor peinado posible en cuanto tengamos el simulador. - Le guiño un ojo para que sepa que estoy de broma. - Pues estaba a punto de irme.

Mis palabras se pierden en el raudal de las suyas, dejandome claro que tengo que ir con ella y el resto del grupo. Abro la boca sin tener muy claro que contestar, hasta simplemente encogerme de hombros y asentir, sin perder mi sonrisa en ningun momento. - Si, supongo que tienes razon. - Todo el mal estado de animo desaparece durante un momento, habia creido que volvia a estar solo pero con su sola presencia esta chica ha conseguido devolverme algo de alegria. En cuanto a lo de esforzarme... si la verdad es que si que lo he hecho. - No te preocupes ya te tocara a ti currar de lo lindo. Venga vamos, te sigo... eso si te tienes que tomar una ultima conmigo al menos. - No suelo beber pero ya que vamos a estar aqui hasta el final, mejor que sea con algo bueno en la mano.

Al ver como se aleja la recluta, esbozo una sonrisa y me dirijo al resto de capitanes,

-Aún le queda mucho camino por recorrer, pero no parece una mala chica, y noto una fuerte voluntad en ella, eso es lo que más falta le hará en este mundo...

Apuro mi copa y digo a nadie en particular.

-Vivimos tiempos difíciles...

Y tras esto me quedo pensativo, mirando mi vaso.

- Vaale, vaaaale, Arkan, veo que no se te ha subido el mando a la cabeza – bromeo de nuevo.

Me sonríe y yo, sorprendida, aparto la mirada un momento, vale, una cosa es que esté cómoda hablando de frikadas y otra diferente es que cuando el modelo de Levis jeans me sonría, no me dé un algo. Cuando vuelvo a mirarlo, rezando a algún dios en el que no creo para que no esté sonriendo, me guiña un ojo, y odio ponerme roja otra vez. Río a carcajadas ante la idea.

- No puedo imaginarme que maquiavélicos planes saldrían de tu mente. – Me toco la horrible calvita.

Al final se encoje de hombros, parece que lo he convencido, o que quizás quería irse y lo he obligado a quedarse, yo no entiendo de normas sociales, así que lo importante es que se viene y que ha cambiado esa cara de uva pasa, por una más alegre, mal que les pese a mis mejillas.

- Ya tengo nave asignada ¿sabes? – murmuro ilusionada, mientras avanzo entre el gentío, ehmmm, estooo, vaaaale, para llegar a Arkan tenía prisa, he ido un poco al tropello, ahora es un poco más difícil - ¿La última? Claro ¿Por qué te marchabas ya?

Camino hacia el grupo, para reengancharme, que los he dejado ahí un poco colgados ¿Habré hecho mal? Yo no sé cómo van estas cosas de socializar, me siento insegura por todo, maldita sea.   

Me rio con ganas ante lo del "mando", pero si no llevo ni veinticuatro horas siendo oficial, como se me va a subir nada a la cabeza. Ademas si ya de por si se me da mal entablar relaciones, usar cualquier tipo de rango ya supondria un verdadero reto de categoria epica. Se pone roja cuando le sonrio y no entiendo muy bien porque, pero no le doy demasiada importancia... tener a alguien con quien hablar ya es suficiente como para darle demasiadas vueltas a la cabeza. Recuedo que hizo algun comentario sobre su calva, se que a muchos les resulta dificil al principio. - En cuanto al pelo, no le des demasiada importancia... nadie aqui lo hace. Ademas te queda bien... - Me quedo a cuadros por haber dicho eso, porque eso es un piropo ¿verdad?... no lo tengo claro, pero tengo que buscar una salida. - Yo mismo me lo rapo muchas veces, asi que en nada volveras a estar igual que antes. - Ha ido por los pelos, espero no haber metido la pata.

Hago un gesto con la mano como restandole importancia al adjetivo que le pone a mis planes.- ¿Maquiavelicos? No, no... solo malvados y retorcidos, sin palabras dificiles. No te preocupes. - Me rio ante la broma y el juego de palabras... y de paso, miro a ver como se lo toma. Entonces comenta que tiene nave asignada ya... y sin poder evitarlo espero que sea la misma que la mia, no me es facil hablar con la gente ni relacionarme y parece que con ella se me da bastante bien, igual es por las cosas de ordenadores que tenemos en comun... a saber. - ¿Nave? ¿A cual vas a ir destinada? - Intento no parecer demasiado curioso al respecto, pero mis ojos escudriñan los suyos con mas intensidad de la que me gustaria admitir.

Tras escuchar su respuesta es ella la que me comenta lo de tomar la ultima. - Si, me marchaba... pero bueno, en vista de la nueva compañia que tengo, me tomare una y es mas que probable que alguna mas. - Muestro una gran sonrisa, si, estoy contento... nunca me acostumbro a lo divertido e interesante que puede ser hablar con alguien que no te mira como si fueras un bicho raro.

El alcohol y el tiempo trasncurrido de pié castigan mi cuerpo con dureza. Los años no perdonan a nadie y necesito retirarme a descansar. La joven recluta abandona el grupo en busca de algo o alguien. Me dirijo al resto.  - Capitanes, con gran pesar debo retirarme. Soy con mucho el más longevo de los que quedan en el Templo. Ya he dejado el listón alto. Enhorabuena de nuevo. Disfrutad de lo que queda de la celebración -

Mis pasos me van alejando poco a poco del sonido de la fiesta, convirtiéndose en un lejano eco conforme la distancia aumenta. La pasarela que lleva a los elevadores parece eterna cuando el cuerpo acucia cansancio. Ha sido una buena noche. Nos la hemos merecido. Pulso el botón de llamada del elevador y me giro mientras espero su llegada para ver en la lejanía las sombras recortadas de algunos sionitas en actitud cariñosa. Juventud...

El Capitán Starfox se retira de la fiesta. Como ha dicho, ha dejado el listón bastante alto para su edad. alrededor sólo hay jóvenes que se sienten vivos aquí abajo.

- Nosotros nos vamos también. -Digo, sujetando a Niobe a mi lado. Se nos ve acaramelados.- Pasadlo bien.

Nos retiramos siguiendo los pasos de Starfox, aunque a una distancia prudencial.

Antes de irme te guiño un ojo furtivamente.

Os acercáis al grupo de... ¡sólo quedan Crash y Mark!

Jydmis regresa a vuestro lado, viene con Arkan.

Muchos se han ido ya de la fiesta a sus casas. Muchas parejas deben estar ya abrazadas en sus camas. Más de la mitad del Templo puede verse despoblado. Empieza a ser un lugar frío. Quedan pocas horas para que los más madrugadores comiencen el nuevo día. Algunos grupos de amigos y compañeros resisten, brindando, con la ropa descolocada. La celebración de los ascensos y la fundación de nuevas tripulaciones ha sido grande, por todo lo alto.

- Nadie lo hace porque todos tiene pelo… y no parece que lleven tratamiento diario de quimio. – Pero de repente dice algo que me detiene en seco. Me paro, mirándolo increíblemente sorprendida, es la primera vez en mi vida que alguien dice algo bueno sobre mi aspecto, de normal me habría dado algo, y estaría que no sabría dónde esconderme, porque evidentemente no sabe lo que está diciendo, pero voy algo bebida - ¿B-Bien? ¿S-si? – vale, ya tartamudeo otra vez - ¿Te burlas de mí? – Pregunto dubitativa, mirándolo, arrugando un momento la nariz en un gesto de intriga, por mucho que escrutara su expresión creo que no la entendería, evidentemente el lenguaje no verbal no lo entiendo, ni el verbal tampoco, ya puestos – tú eres un chico guapo, todo estará bien, yo tengo el pelo corto, pero puedo taparme la cara con él, entre el pelo y el rayo, todo queda bien tapado – sonrío ampliamente, impaciente por que me crezca.

Entre que ríe a cada rato, entiende mis gracias y las sigue, cuando por lo general me miran raro, y ahora, al preguntar por mi nave me observa, con curiosidad… me arde la cara, lo noto. Suspiro, sonriendo, y retomo el camino.

- Voy a la Gnosis, empiezo la instrucción con el capitán Bench – lo miro, es una pena, de toda la gente que he conocido después de despertar, creo que es con el que más he hablado, al menos sin sentirme una cosa extraña y fuera de lugar, y con el que más me sonrojo con diferencia ¡Pero es que no para de sonreír! ¡Por Crom! - ¿Y tú?

Cuando me cuenta que se marchaba me vuelvo de nuevo para mirarlo, pero justo encontramos a Crash y el capitán Bench.

- Vaya… os he dejado un poco colgados antes – farfullo al ver que se han ido muchos ya, gracias al alcohol ya no tartamudeo. Superpongo el labio inferior al superior en un gesto de fastidio y preocupación, soy un poco culo inquieto y no sé si eso es bueno o malo.

Miro el local, ¿Cuánto tiempo ha pasado? El gesto de mirar el reloj me delata, aquí abajo no sé qué hora es, ni tengo forma de orientarme temporalmente. Aun así, pillo otra birra ¿La quinta? ¿La sexta? Me mareo un poco… aunque aún no se me traba la lengua.

A parte de anoche, es la primera vez que salgo de fiesta, incluso hasta tan tarde, ha sido divertido, mejor de lo que yo esperaba.

Parece no tomarselo a mal y eso es todo un alivio porque sino no sabria donde meterme... durante un momento estoy dubitativo pero esa manera de ser seguro que le provoca mas inseguridad, tienes que aparentar tener claro lo que dices. Vamos claro lo tengo lo que intento es no parecer idiota al decirlo. - Si, te queda bien. Y no, no me burlo. - La miro extrañado por la pregunta... ¿Por que deberia burlarme? No me gusta que la gente se burle de los demas, de broma si... pero estoy mas acostumbrado a lo otro y siendo yo el objetivo asi que, no definitvamente no me gustan las burlas.

Entonces suelta una frase que me deja a cuadros y sin saber como reaccionar o a donde mirar... no estoy acostumbrado a que hablen de mi y menos a que me digan que soy guapo. Abro la boca un par de veces sin saber que decir hasta que la cierro con una escueta palabra, antes de seguir hablando - Gracias... pero no creo que debieses taparte la cara. Aunque el rayo deberia quedarte bien... - No tengo muy claro lo del rayo, ¿quiere tatuarse un rayo en la cara? - Pero no en rojo, tal vez amarillo o verde para que resalte mas. - Sonrio mientras muevo levemente la cabeza de arriba a abajo, casi autoafirmando mi propia frase... convencido de que tiene mucho sentido. - Pero bueno, como todo podemos meterlo en el simulador.

Escucho la nave en la que va y me da un ligero vuelco. Joder, para una persona con la que parece que me llevo bien y esta en otra nave. Bueno, supongo que siempre podremos quedar para hablar y para lo del simulador cuando volvamos al muelle. Tanto atravesar el gentio hasta llegar a la barra cuando nos topamos con el resto del grupo... o lo que queda del grupo. Saludo con una sonrisa y un gesto de la cabeza a mi capitana y despues miro al otro hombre, no lo conozco de nada pero creo que es el Capitan de la nave de Jyd. Me presento extendiendole la mano. - Hola, soy Arkan. - Espero por si tiene algo que añadir antes de mirar a Jydmis y ver como ya esta pillando una birra. Me acerco y pido una, en cuanto mi mano coge la jarra la choco suavemente con la de Jyd y le doy un largo trago, para despues comentar en general. - No esperaba que fuera una fiesta tan grande por la graduacion y las medallas. - No lo esperaba no, sobretodo porque en cierta manera significaba que no habia muchos peleando... renigoe lentamente antes de devolver mi sonrisa a mi cara y mirar a Jydmis. - ¿Entonces lista para salir de Sion?

-¡Ya ves! Estábamos acompañados hasta hace nada-sonrío a Jydmis y suspiro. No tengo ni la menor idea de cómo ha llegado esta hora y, sobre todo, de cuantos vasos de yo que sé qué he bebido. Toco la cara de Jydmis con los dedos, entornando los ojos para enfocarla entre la nube de alcohol de alrededor, recordando lo que dijo del tatuaje -Tiene que doler mucho...

Mi cabeza va saltando un poco de idea en idea, así que miro fijamente a Mark unos segundos y ataco -¿Y conoces al primer oficial Troy?-con el alcohol las inquietudes empiezan a salir y Arkan no parece conocer mucho mi historia... o no parece importarle, pero estoy segura de que Troy la conoce. No hay mucha gente que dé segundas oportunidades. No sé, ni siquiera, si conocería a alguien de la antigua Valkyrie. Suspiro y le miro, con el ceño fruncido y a la vez una sonrisa un tanto bobalicona que me tiene que estar haciendo parecer medio retrasada.