Partida Rol por web

Maullando a Nemo

Capítulo 2: La tienda de Nemo

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24/07/2015, 03:26
Rey de los gatos

Los cinco gaticos empezaron a caminar, dejando atrás el callejón del Barril con Piper lanzando miradas asesinas a Resaca a sus espaldas. No tardaron en llegar, la cárcel de Nemo estaba cerca. Allí, pudieron ver el escenario tal y como lo había descrito el gatico pendenciero. 

Junto a la tienda estaba el jardín de la señora Potts, separados por una valla bastante alta. Dentro de la casa se veía luz, así que probablemente la señora Potts estaría en casa. Sería sencillo colarse en el jardín de la señora por debajo de la puerta del jardín, las dificultades vendrían para pasar de su jardín al patio trasero de la cárcel.

Entre barrote y barrote los dos más pequeños podrían intentar colarse sin mucha dificultad, pero a simple vista podían ver los gaticos que los tres más mayores no cabrían por esos huecos. Quizá Misi podría intentarlo con algún esfuerzo pero probablemente Resaca y Lin tendrían que hacerlo de otra manera. 

Sin embargo, había un árbol junto a la valla y una de sus ramas se extendía sobre ella, llegando al patio de la cárcel de Nemo. Trepando por él los gaticos podrían llegar a saltar por encima de la valla.

 

Notas de juego

Para pasar por los huecos de la valla, 1d6:

- dificultad 4 para gaticos de cuerpo 1, 2, 3.

- dificultad 7 para gaticos de cuerpo 4.

- dificultad 9 para gaticos de cuerpo 5.

 

Para trepar al árbol, 1d6:

- dificultad 4 para gaticos de cuerpo 1, 2, 3, 4.

- dificultad 5 para gaticos de cuerpo 5.

- +1 de dificultad para gaticos sin uñas.

Las dos tiradas van con agilidad y reserva física. Si tenéis dudas sobre las tiradas, los esfuerzos o cómo usar las reservas, avisadme ^^.

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24/07/2015, 16:11
Marí

La advertencia de Misi sobre el lugar había asustado un poco a la joven Marí. Siguió al resto de la gatería con pasos prudentes, sin poder imitar vigilar su espalda cada pocos pasos.

Una vez ahí, observando sus posibilidades, es la primera en pronunciarse. - Como soy pequeñita, voy a intentar colarme... - Anuncia un poco insegura mientras se acerca con prudentes movimientos a los barrotes. Empieza tratando de meter su cabeza, y luego una patita delantera, la otra... Y así hasta que consiga cruzar airosa.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Gasto 2 de Reserva Física.

N. de M. Los gastos de la Reserva se declaran después de hacer la tirada, sólo si es necesario para llegar a la dificultad. Se supone que lo que se declara antes de tirar son los esfuerzos, pero en esta partida por simplificar también os permito declararlos después. Así que... No es necesario que gastes nada, con la tirada ya pasas la dificultad ;).

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25/07/2015, 03:18
Rubik

Rubik caminó, resuelto, en dirección a aquella cárcel de animales. Así, moviendo las patas al ritmo que su cabecita le marcaba, se sentía fiero y temerario, como un héroe o un libertador. Sus pupilas buscaban continuamente a Lin tratando de imitarle, pues sabía que no debía descuidar ningún detalle si quería llegar a ser tan aguerrido como él. Y podía decirse que estaba contento.

Al llegar al jardín de aquella señora Rubik pasó por debajo de la puerta junto a los demás, y sus ojos se dividieron entre el árbol y la valla. Bien era cierto que un gato como él, tan fiero y capaz, debería poder subir a ese árbol sin problemas. Pero también era cierto que le habían cortado las uñas hacía poco tiempo, y que aquello parecía mucho más complicado que colarse por alguno de esos agujeros sin más. Las pupilas del gatico pasaron del árbol a la valla y de la valla al árbol, indecisas, mientras evaluaba por dónde sería mejor subir para demostrar a todos lo mucho que valía. Si hubiera estado a solas y, sobre todo, si no estuviera Lin, sin duda tiraría por el otro camino, pero así...

Y entonces habló Marí. Rubik asintió mientras seguía mirando al árbol, ya con las dos patas delanteras apoyadas en su tronco y a punto de flexionarse para saltar, cuando un par de segundos más tarde se dio cuenta de que la gatica le había puesto en bandeja la mejor manera de salir airoso de la situación.

- Iré con ella. - Enunció, apartándose del árbol, hablando con la seriedad del protector que no alcanzaba a ser. - Como es pequeña podría pasarle algo. - Dijo después, ya caminando en dirección a Marí. - Daos prisa por si está ese maldito perrete. - Añadió al final, ya trotando animado. Con toda aquella gravedad en la voz y todo lo demás, seguro que los había impresionado. - ¿Por Marí, eh? - Aclaró cuando ya estaba al lado de los huecos, por si acaso se confundían. - Yo no tengo ningún miedo ni de uno ni de cien chuchos. - Expuso de manera muy poco convincente, y para darle aún más fuerza a aquella afirmación asintió una, dos, y tres veces. - Yo... ¡Yo me río en la cara del peligro! - Exclamó antes de emitir una carcajada un poco forzada. Ahora sí estarían convencidos.. Pero por si acaso alguno de ellos dudaba y le hacía alguna pregunta se apresuró en cruzar al otro lado.

- Tiradas (1)
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25/07/2015, 13:00
Misi

Cuando llegó a la zona Misi observó con cuidado sus opciones. Pasar por debajo era tentador, no había riesgo de caerse, pero podía quedarse atrapado debido a su tamaño y no quería arriesgarse. Quedaría fatal y sería la comidilla de todos los gaticos y no podía arriesgarse a eso. Ahora bien, caerse del árbol tampoco iba a quedar demasiado bien y últimamente trepaba bastante mal.

Al final se decantó por el árbol. Nos vemos al otro lado. Tened cuidado. Maulló, antes de centrarse en la tarea.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Gasto 1 punto de reserva para superar la dif, si puedo ^^

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25/07/2015, 13:53
Resaca

Resaca contempló la valla con perspicacia, y vio cómo saltaban primero Rubik, Misi y Marí, los tres gaticos más jóvenes. 

Miró hacia atrás, desconfiada, y de nuevo hacia adelante. Los huecos de la valla eran demasiado pequeños para que su cuerpo, que había medrado gracias a las opíparas comidas que rapiñaba de su humano a base de maullidos malintencionados, cupiese sin problemas.

Observó el árbol que se elevaba sobre la misma, y se dijo que aquello no debía ser difícil. Contrajo entonces su lomo, para adquirir impulso en las patas traseras y saltar. Ejecutó aquel movimiento, y un instante después, se vio a si misma sobre la valla, desde la que observó los alrededores, triunfante, emitiendo un leve ronroneo complacido. 

- Tiradas (1)
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26/07/2015, 00:43
Lin
Sólo para el director

La ventaja de uñas afiladas sirve para tener algún bonus a trepar?

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26/07/2015, 00:50
Rey de los gatos

Notas de juego

Sip, -1 en la dif ^^.

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26/07/2015, 02:13
Lin

Tras ver que los demás habían logrado pasar, Lin miró al árbol y dió un brinco impulsado por sus cuadros traseros. Sus uñas se anclaron en el tronco como garfios permitiéndole subir con comodidad. Siguió los pasos de Resaca y observó si los más jóvenes se encontraban juntos y bien. -Veamos a ese perro...- Dijo con seriedad, dirigiéndose a la gata.

- Tiradas (1)
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26/07/2015, 03:15
Perrete patada

Los dos gaticos más pequeños se habían colado entre los huecos de la verja sin dificultad, llegando a un patio de cemento en el que había un coche aparcado y lo que parecía ser un cobertizo de madera.

Mientras tanto, los otros tres habían trepado al árbol que pasaba por encima de la verja uniendo el jardín de la señora Potts con el patio trasero de la tienda de Nemo y tenían una buena vista de ambos lugares. Tal vez por eso Resaca y Lin fueron los primeros en percibir aquel movimiento cerca de la puerta de la casa. Misi estaba terminando de subir a la rama con esfuerzos, sin comprender por qué desde hacía un tiempo sus garras ya no funcionaban como antes.

Lo que había empezado como un discreto movimiento en el porche se convirtió en un trote y aquel en un correteo. Cuando los gaticos quisieron darse cuenta un perrete de poco tamaño, feo como un dolor y con los ojos inyectados en sangre, estaba ladrando bajo el árbol como un condenado. Con las dos patas delanteras arañaba el árbol, olfateando a los tres gaticos que estaban sobre la rama y sus aullidos agudos y estridentes amenazaban con despertar a todos los humanos del barrio.

Sus ojillos birojos de repente abandonaron el árbol y su nariz se movió, percibiendo el olor de los dos gaticos pequeños. Sin dejar de ladrar ni un instante empezó a dirigirse hacia la valla, con claras intenciones de colarse por los huecos como habían hecho Marí y Rubik. Algunas luces nuevas comenzaron a encenderse en el interior de la casa de la señora Potts.

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26/07/2015, 12:17
Marí

Tras haberse colado triunfante por la valla Marí comprobó si la seguía alguien. Al ver a Rubik no pudo evitar sentirse más segura, despejando un poco miedos anteriores. Sin embargo no se esperaba el ataque del perrete feucho contra su banda de gaticos. Su cabeza se elevó como un periscopio durante un segundo hasta tener la imagen del chucho arañando el árbol y luego colándose por el agujero que ellos mismos habían utilizado. Ve también las luces en la casa. Los nervios se la empiezan a comer, y su escasa experiencia le dica buscar un lugar elevado al que subirse, el cual no sea tan difícil como el árbol.

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26/07/2015, 16:11
Rubik

Desde su posición al otro lado de la verja Rubik observó a través de los agujerillos, en un silencio totalmente mudo por pura seguridad, cómo aquel perrete demoníaco ladraba a los que estaban sobre el árbol. En aquel momento agradeció el momento en que había tomado la decisión de no trepar y respiró aliviado. Sin embargo aquella sensación duró poco, pues aquellos ojos rojos se encontraron con los de Rubik en la oscuridad, y el bicho feo empezó a correr en aquella dirección.

Entre confundido y asustado Rubik miró a Marí, miró al perrete y miró a Lin. Y por último se miró a sí mismo, temeroso de que aquella pudiera ser la última vez que se viera. Y aún así se armó de valor y dejó que su voz saliese con la atronadora potencia de un gatillo asustado. - ¡Sube al carro de metal! - Exclamó mientras él se cuadraba con las cuatro patas en el suelo, a unos pasos de la valla. Sentía su pelaje erizarse y su rabo hincharse para intentar asustar a aquel monstruo loco que venía a toda prisa. Pero por encima de todo, sentía miedo. - ¡Corre! - Exclamó con las pupilas fijas en el bicho peludo, tentado de cerrar los ojos y esperar a que todo acabase de una forma o de otra, y dejando que sus cuerdas vocales dieran forma al mayor bufido del que fueran capaces, recurriendo al instinto para hacer entender al animal que aquello no era buena idea.

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26/07/2015, 20:00
Marí

Marí sabe que ella no es tan dura como Lin o Resaca, y por ello no dudó en correr al escuchar los ladridos del perrete. Dejó de estar perdida gracias a la sugerencia de Rubik. ¡El carro de metal! Con sus patitas cortitas empieza a acelerar todo lo rápido que puede y busca la parte más accesible para subirse encima del cacharro. Quizás el perro no llegue hasta ahí, así que podría estar a salvo. Su pequeño corazón late y late a medida que hace un sprint hasta su objetivo.

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26/07/2015, 23:29
Lin

Lin miró al perrete desde arriba casi divertido...¿de verdad eso es un perro?. Cuando se giró en dirección al hueco por el que habían pasado los más pequeños, alzó la orejas y miró en dirección a los cachorros. Marí corrió hacia el carro de metal y Rubik se posicionó para enfrentar al ...camaleón-perro. Lin se dejó caer de un brinco al patio. Si el perro lograba pasar por aquel agujero, antes de que se le saliesen los ojos, iría a por los cachorros. Y por como se le empezó a erizar el pelo y comenzaron a aflorar sus afiladas uñas, junto a una especie de maullido grave, que parecía más una alarma atiaérea, y el hocico arrugado mostando los colmillos, no parecía muy dispuesto a ello.

Notas de juego

¿Hay que tirar para bajar del árbol?
 

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26/07/2015, 23:47
Rey de los gatos

Notas de juego

Sólo si tuviérais agilidad 1 ó 2, que no es el caso de ninguno de los que estáis arriba. Así que... No, podéis bajar de un salto felino ;).

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26/07/2015, 23:50
Resaca

Al contemplar la escena, Resaca saltó junto a Lin, cubriéndole el flanco, manteniéndose a un lado y detrás de su posición. Y desde su lugar, emitió un bufido, algo más agudo, con muestra de afilados dientes incluida, junto a sus orejas tiesas y su terso pelaje negro erizado. 

Si aquel gatazo no bastaba para que el perro patada se retirase, seguro que dos gaticos dispuestos a pegarle un buen zarpazo en el hocico lo intimidaban un poco más. Y al fin y al cabo, asustar perretes pequeños era siempre divertido. Era casi mejor que saltarle a un humano encima cuando roncaba y babeaba. 

Y mientras se mantenía en pose amenazante y dejaba que el gatazo tomase la iniciativa anti perruna, se mantuvo atenta a los movimientos de la casa y de las luces. Si aparecía la humana de aquel bicho estúpido, tendrían más problemas. Sobre todo si tenía rulos y llevaba una escoba consigo. Sí, las señoras con rulos eran peligrosas. 

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27/07/2015, 16:23
Misi

Misi bajó tras los dos gatos más grandes. Al ver que el perrito se había metido con los de su tamaño esbozo una sonrisa macabra y siguió los pasos de Lin. Nosotros no vamos a ser tan considerados como tú, maldito perro pulgoso. Maulló con fuerza, en forma de amenaza.

El pelo se le empezó a erizar y se preparó para enfrentarse al perro. No iba a permitir que hiciera daño a los cachorritos.

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27/07/2015, 17:03
Perrete patada

Marí echó a correr en dirección al carro de metal mientras todos los demás gaticos se bajaban del árbol, dispuestos a enfrentarse al perrete, feo como él solo. 

El bicho pareció ponerse contento al ver a los otros gaticos bajando del árbol. Empezó a ladrar aún más fuerte mientras su cola se movía de un lado a otro y pegaba pequeños botecitos. Al parecer además de feo era bastante inconsciente. O quizá era uno de esos perretes que por mucho que no tengan ni media hostia se creen que son fieros doberman.

Como sea, sus ladridos agudos y molestos empezaron a mezclarse con gruñidos mientras se colaba por el hueco de la valla y se dirigía directo hacia Rubik con los ojos más o menos fijos en él, o eso parecía, ya que al ser tan bizco era difícil asegurarlo por completo. Sus intenciones, sin embargo, sí que parecían estar claras. Un hilo de baba caía por el lateral del hocico del perrete, que ya se veía a sí mismo pegándole un buen bocado a Rubik.

En aquel momento una voz salió de la casa de la señora Potts. - ¡¿Linda?! ¡¿Qué está pasando ahí fuera?! -exclamó la voz, femenina y enfadada. Sonaba como una de las cosas más temibles del mundo. Sonaba... a señora con rulos.

 

Notas de juego

Marí, 1d6 a dificultad 5 para subirte al capó del coche (si lo prefieres, subirte a la bandeja del motor desde debajo es gratis, pero te mancharías tu blanco pelaje de grasa).

En este turno el perrete llega hasta donde está Rubik (si quieres escapar, lo tienes a distancia Muy Cerca y las persecuciones van con tiradas enfrentadas de 1d6). 

Los demás, llegar hasta donde están Rubik y el perrete no requiere tirada, pero sería vuestra acción de este turno (en cada turno se puede hacer una acción simple). En caso de que queráis entrar en pelea, sería en el siguiente turno. La iniciativa va sencillamente por orden del que declare antes. 

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27/07/2015, 19:15
Lin

Lin esprintó casi como un acto reflejo hacia el perrete. Sus uñas casi producían dentera con el roce del suelo y sus pupilas eran dos delgadas líneas que dejaban entrever al depredador que llevaba dentro. Pocas vidas debían quedarle al gato, vistas sus cicatrices, pero parecía dispuesto a gastar todas y cada una de ellas en ese momento. Ni Rubik ni Marí serían atacados por ese perro mientras una de ellas le quedase. Ya no había bufidos, ni pelo erizado. Solo la carrera de un animal diseñado por la naturaleza para ser un depredador implacable*. Sus zarpas irían a los ojos del chucho. Sin duda lo más destacable de aquel matojo de pelos con patas.

 

Notas de juego

*Sí, lo vi en un reportaje de la dos. Los gatos son un animal perfectamente diseñado para la caza.

Pues Lin va para allá como un cohete y cuando llegue, si le da tiempo le da un zarpazo del copón bendito al perro. Si no, y el perro logra llegar a Rubik, me dices, que entonces hace el ataque felino de zarpas en cuartos traseros del chucho y mordisco a la yugular (como los leones y demás felinos cuando cazan)...puto perro de los cojones. Y la potts que se ande al loro que la hostio

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28/07/2015, 19:42
Marí

Quizás hubiese sido más práctico subir desde la parte baja del coche, pero eso pondría en peligro el pelo tan blanco y tan bonito de la gatica Marí. Esprinta con sus cuatro patitas como puede, y entonces se esfuerza con gráciles movimientos para llegar a su destino limpio y que la mantendría a salvo. 

Una vez se encuentra arriba y se siente segura sus ojos van directos a Lin, el gatico más fortachón del grupo. Maúlla en gesto de ánimo. - ¡Cómete a ese perrete! - Exclama antes de escuchar a... ¡La señora con rulos! Las había visto en el celuloide, pues en su barrio no había humanos con tan poco caché, según palabras de sus dueños. Se agazapa en ese preciso momento.

- Tiradas (1)

Notas de juego

N. de M.: Te he cambiado el "ver" por "escuchar", para evitar confusiones. No veis a la señora, por ahora sólo se ha oído su voz ;)

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29/07/2015, 05:10
Rubik

Al ver aquellos ojos rojos acercándose al galope Rubik mantuvo su postura, con el pelaje erizado y las piernas pidiéndole al mismo tiempo saltar a por el perrete y echar a correr. Por un momento se preguntó si no se habría equivocado al proteger a Marí... Pero esa duda duró sólo un instante, hasta que vio que la gatica realmente iba a conseguir huir.

Y entonces llegó Lin, dispuesto a defenderle. Y Resaca. Y Misi. Por un momento, Rubik se sintió seguro... De no ser por aquel sonido incesante de ladridos amenazantes. En el interior del gatico algo le decía que debía huir, que esas babillas que soltaba por la boca no debían ser buenas... Pero no fue hasta que oyó a aquella señora gritar desde dentro de la casa que sus patas, torpes debido al miedo, comenzaron a funcionar.

Rubik trató de correr, alejándose de aquella amenaza con ojos de demonio, en la misma dirección que Marí había tomado. Sin embargo se sabía lento y nervioso, y sabía que había tardado tanto en reaccionar que nunca podría sentirse orgulloso. Aunque, si sobrevivía a aquello, se encargaría de que todos supieran de que era por dar más tiempo a Marí, claro. Pero para eso había que alejarse de ese perrete, y que hacerlo rápido.

- Tiradas (1)